Richy Escor: ¡Ola a todos De nuevo!, ¿Cómo están?, Se lo que dirán pero y este quién se creé, je… Lo sé, pero pues esto sólo para asegurar, espero que bien, hoy les traigo el prologo de mi nuevo proyecto, que estoy dando recién comenzando Lo Que Más Amo De Mi Trabajo… La idea me vino al ver un pequeño anime que seguro ustedes sabrán, o que al menos se darán cuenta, pero no seguiré la trama la cambiare, y le daré un nuevo rumbo, pero aun así la idea no es de mi propiedad, pues por ello les pido que me digan que le parece, bueno pasando a la segunda parte importante Diabolik Lovers Vocaloid será muy pronto actualizado, así que le doy una muy agradable saludo a todos los que me han mandado Reviews gracias a ustedes, para que sepan ustedes hacen esto posible así que pronto subiré lo siguiente estén atentos…

Denle una oportunidad a este se los aseguro, que les encantara, para darles algo de información este Fanfic, por el momento tendrá este capítulo mejor llamado prologo, solo tratara de LenXSeeU, pero tranquilos, que en el próximo debutara Rin a lo grande, enserio perdónenme, pero era necesario, para que puedan entender, el pasado de Len y lo que en el futuro le depara, así que ustedes decidirán si quieren la continuación, así que bueno que lo disfruten y hasta próxima, Antes de irme… ¿Merezco un Review?...

Disclaimer: Los Vocaloids no son de mi propiedad, solo lo uso con fines de diversión, así como para dar a conocer historias y proyectos , Vocaloid no me pertenecen si no a Yamaha Corporation, para representarlos, en este fic, que no tiene fines de lucro, sino que es un fic de un Fan para Fans. Así que sin demora El fic.


Prologo (Lo Que Más Amo De Mí Trabajo)

El olor del incienso se hizo presente en la habitación, una habitación llena de retratos y decorada de colores grises y negros, se podía sentir el ambiente melancólico y triste en el aire…

Ambos murieron en un accidente automovilístico… Muy triste, ¿Verdad?

Un chico rubio, con una coleta en el cabello era el único que se encontraba aun enfrente del altar, con fotografías de la familia en frente, la mesa llena con flores por montón, y el olor del incienso marcaba las pautas de las exhalaciones del chico…

Aun así, no ha derramado ni una lágrima… -¡Ni siquiera va al colegio!

Con la mirada perdida, el incienso se consumía -Lo sé, Era un niño infeliz, completamente inútil, completamente ignorante –Mentalmente me molestaba el ser así…


El sonido de las peleas diarias en mi casa me destruían sin piedad, esos recuerdos de mi padre borracho todas las noches, aprisionándome contra de los muebles y golpeándome, las botellas de alcohol estaban por montones regadas en las esquinas de las casa, es lo que pasaba diario con un padre alcohólico, que se ponía violento por cualquier cosa, y una madre con el rostro pálido, que sufría en silencio, siempre, como cada noche, el llegaba borracho después de una jornada dura del trabajo, arrojaba la cena y me golpeaba, era una rutina tortuosa que soportaba a diario.

Cada día antes de ir a la escuela, iba en la habitación de mi madre en su búsqueda, intentaba hablarle siempre del mismo doloroso tema, con aire pesado comentaba - ¿Porqué no te divorcias?, trabajare medio tiempo después de clases, vámonos de esta casa –Eran ideas que se me ocurrían, pero ella parecía no entender mis acciones, siempre con la misma mirada perdida - ¡No es necesario!, yo estoy bien, no tienes por que preocuparte –Era su respuesta de siempre.

Cuando era niño, pensaba que mi Mamá no se divorciaba por protegerme, un día tras la borrachera de mi padre, este me golpeo con la botella de cerveza, yo me puse de pie y lo desafíe con la mirada - ¿Porqué me miras así? –Decía con la cara roja por los efectos del alcohol - ¡¿Quién crees que trae la comida a esta casa?! –Con la rabia desbordando mi ser me di la vuelta para buscar con la mirada a mi madre, la cual se encontraba tras la puerta llorando y en el suelo, tras lograr llamar su atención, ella corrió de ahí dejándome sólo a merced de mi padre que en desquite me dejo inconsciente en el suelo con su próximo golpe.

Fue ahí cuando por fin comprendí, que mi madre no se quedaba por mí, encerrándome en mi propio mundo intentando refugiarme de todo mal. Porque a pesar de que yo sufría, no nos fuimos de ese ambiente hostil.

Deberían morirse…. –Pensé

En ese preciso instante, el instante en el cual cambie; mi madre llamándome tras la puerta de mi habitación la cual he sellado con la mesa y el ropero de mi alcoba –Lenny, ¿Qué te pasa?, ¡Siempre eras buen niño! –Decía entre súplicas mi madre para que abriera, - ¡Es tu culpa por malcriarlo! –Contraatacaba mi padre; encerrado entre mis sábanas me pasaba horas en vela pensando, estando en posición fetal y agarrando fuertemente mi cabeza, intentaba no escuchar las palabras de mi madre, con la poca cordura que me quedara desee en silencio…

¡Cualquiera de los dos debería morir! -Grite mientras me daba por vencido por el sueño.

El sonido del auto saliéndose de control, el sonido de la ambulancia, y el ver como doctor tras doctor ingresaban a la sala de operaciones que se veían a lo lejos, pero eso solo eran recuerdos de hace unos días, pues ahora me encuentro frente al altar de mis padres en su velorio.

-Lenny –Decía una voz algo suave y sabia, volteé mi mirada y observe con claridad - ¿Qué es abuelo? -Logré contestar con voz apagada, el me miró y con lágrimas en los ojos toco mi hombro de forma de quererme reconfortar –Sería difícil quedarte sólo aquí, ¿Por qué no te vas a vivir con una prima lejana en Tokio? –Arrugando un poco mi expresión volteé al mismo tiempo en que el incienso se apagaba.


Me están echando pensé, Todos debería morir, aún así tome la opción que me daba el abuelo, me fui para Tokio, el llegar de la estación el rostro de un niño de tres años me sorprendió, el me veía mucho, era muy similar a mí de cierta forma, me le quede mirando perdidamente, el no se inmutaba ante nada…

- ¡Espera Oliver! –Se escucho un grito que llamo mi atención, ante mi apareció una joven muchacha con un largo cabello rubio ceniza, y con unos hermosos ojos azules, era algo extraña a mi parecer, pues tenía en el cabello orejas de gato, me preguntaba si estaba haciendo algo de cosplay, ella llego con mucha rapidez hasta donde se encontraba el pequeño "Oliver", ella dejo escapar un suspiro y me miro, yo solo la ignore, y volví a mirar al pequeño…

- ¡¿Lenny?! –Pregunto asombrada la chica, levante la mirada y me sorprendí un poco, - ¡Tiempo sin verte !, me abrazo de sobremanera, logre corresponder a penas y la seguí pues me explico que iríamos a su casa, estuvimos caminando durante unos 20 minutos por calles que se me hacían desconocidas, me sorprendió verla, llevaba unos 10 años sin verla, estando en el extranjero el llegar a Japón así, se me hizo algo complicado, me puse a pensar un poco de la situación de de mi prima…

-Su pareja la abandono, y ahora vive con su hijo en Tokio, -Estaba tratando de ignorar cada palabra que decía mi prima, pues aunque intentaba ser amable, yo no quería ser así, ante la mirada del pequeño Oliver, el cual me miraba con mucha curiosidad, yo solo lo mire un poco y me sorprendí el verle tan encimado en mí que me hizo sentirme algo incomodo…

Todavía hay muchos tabús en la sociedad…


-¿Qué te parece? -Me enseñaba Oliver su traje de marinero, mientras intentaba llamar mi atención - ¡Seguro que me veo bien! – Sentenciaba el niño de 8 años de edad, colocando los platos sobre la mesa revolví su cabello rebelde –De verdad… -Le sonreía a la razón de mi vida - ¿En verdad quieres ir a este lugar? -Le pregunte, mientras le mostraba los folletos de una playa - ¡Te puedo llevar a uno mejor! –Le aclare, el negó con la cabeza y me miro con una sonrisa – ¡Ese es el mejor lugar de todos!, ¡El mejor! –Respondiéndome energéticamente con una sonrisa, sonreí satisfecho, solo eso bastaba para asegurar el hermoso viaje de vacaciones de Oliver –Tienes Razón –Logre susurrar mientras veía el altar a un lado de la sala, dedicado a la mujer que alguna vez ame…


En la casa De SeeU lograba ver a diario una convivencia muy especial entre el pequeñín y su madre, a la hora de comer el reía siempre feliz en compañía de su madre, -Que se aproveche –Decía SeeU divertida, -Que se aproveche –Imitaba el pequeñín, ellos siempre comían y reían, yo estaba todo el tiempo encerrado en mi cuarto que mi prima me había dado, aun con el desorden de comida chatarra por todos lados, podía acostarme y dormir casi todo el tiempo, escuchaba como mi prima, sin falta siempre llamaba a mi puerta para avisarme que era hora de ir a comer, aunque no le contestaba siempre hacía algo para ayudarla…

-Lenny, te dejo tu comida en el microondas, tengo que ir a trabajar, no olvides comerte el desayuno, al fin, al escuchar eso salía de mi habitación para comer algo de lo ella había preparado, comía solo, ya me había acostumbrado de manera que me sentía incomodo si comiese con ellos.

El recuerdos de verlos juntos me hacía sentir raro de cierta forma, -¿Por qué? -Me preguntaba internamente, nunca comprendí la razón, hasta que un día tuve el valor para decírselo de frente, se lo pregunte cuando salía del baño, ella se sorprendió, pero fui firme, -¿Por qué no te casaste cuando quedaste embarazada? –Ella se sobresalto por la pregunta, pero bajo la mirada, y solo se limito a escucharme por lo que continúe -¿No pensaste que sería más fácil criar a un hijo dentro del matrimonio? –Por dentro me reía de su estado, pero también pensaba que una madre como ella tendría problemas…

-Él quería… -susurro débilmente –Que abortara a Oliver –El que ella me dijera eso fue lo que derrumbo, quedé en shock pues no había imaginado algo así, era algo que excedía a mis casillas…

El silencio de la noche estaba presente, algo que necesitaba, para pensar…

-Si mi madre hubiera sido como SeeU… hubiéramos huido juntos, de ese que no era nuestro hogar…


En la calma de la noche Oliver dormía plácidamente abrazando a su oso de peluche favorito, poco a poco algo llamaba su atención por lo que con sumo cuidado se deshizo del abrazo de su madre y salió con mucho cuidado de su cama…

Me encontraba llorando en una esquina de mi cama, las lágrimas no paraban, me decía a mi mismo que no debía odiar a mi madre, pero aun así la impotencia que sentía en ese momento se esfumo cuando vi llegar a Oliver estaba en piyama, y cargaba un osito de peluche consigo, con los ojos entreabiertos y frotándose los ojos con la mano libre me pregunto -¿Qué haces?, ¿Estás llorando? –Abriendo más sus ojos se sorprendió por mi condición, intente limpiar algunas lágrimas rebeldes que aun quedaban, pero era difícil, el se acercó y tomándome, por el cuello me abrazo, fue ahí cuando no lo soporte y me derrumbe, en sus hombros…

En mi depresión, fui consolado por un niño pequeño…

- ¿Oh? - ¿Cuándo se fue a dormir contigo? –Me preguntaba con una sonrisa SeeU, - ¿Eh? –Él suele ser muy tímido, ¿Qué magia usaste?, -Ante la mirada de curiosidad de Seeu le dije que no había usado nada, ella estaba sorprendida, pero el sorprendido era yo, por tener abrazado en mis piernas al pequeño Oliver que me sonreía.

Esa fue el principio del cambio, regrese a mi alcoba, con el pensamiento de que el antiguo niño triste fue sellado, porque Oliver y SeeU me mostraron un nuevo mundo exterior, siempre entre risas, y estando juntos los tres todo era alegría y diversión…

-Aquí tienes tu almuerzo –me sonreía SeeU mientras era abrazada por Oliver – Hoy tengo que trabajar hasta tarde, ¿Podrías recoger a Oliver de preescolar? –De acuerdo, es eso a las 3 ¿No? –Sí, me miro y rió –Dejare la cena lista, así que coman juntos, así que Oliver, Len ¡Que les vaya bien! -Dándole un beso en la mejilla al pequeño, yo solo miraba la escena tras de mí, yéndome para la preparatoria, me despedía de los dos, cuando estaba a punto de irme, SeeU corrió y me abrazo y con tono suave me dijo me cuidara, podía ver en su rostro esa sonrisa que la caracterizaba… -SeeU…


- ¿Qué es eso? ¡Qué Bonito! –Decían unas chicas de mi clase, riéndose por lo sobre decorado de mi almuerzo, algo que me alegraba de SeeU, y a pesar de esas burlas yo me sentía bastante bien al disfrutar de su cocina…

En el baño, ya era un hábito bañarme junto al pequeño Oliver con el cual jugábamos a guerras de agua, siempre teniendo sumo cuidado con él, le lavaba bien la espalda y queda muy limpio, siempre con juegos nos la pasábamos riendo, ante las risas que SeeU soltaba por la inmadurez de nosotros al colocarnos nuestras toallas para salir del baño…


-¿Adoptarme? –Estaba sorprendido, pero Seeu me explico que era mejor que tuviera una madre al menos ante las autoridades, para facilitar las cosas a la hora de trabajar, yo baje mi mirada y le dije que lo sentía, que eso sería un poco… -No pude terminar mi oración porque ella se dio cuenta de cómo estaba ante mí expresión, ella me dio enseguida una disculpa –Lo lamento, soy yo la que a dicho algo innecesario, después de todo tus padres están vivos, ¿No? –Intente detenerla, pues aunque ellos estaban muertos no significaba que se trataba de eso, así que para romper esa incomoda discusión ella se fue con Oliver con la excusa de irse a la cama. Antes de irse con Oliver a dormir, ella se despidió y me dijo –Buenas Noches.

Yo estaba sentando en sofá pensando sobre lo ocurrido. –No es por eso… -susurraba –Es que no me podría casa contigo… No si me adoptas…

Ya quería ser adulto, rápido –pensaba…

Pues desde ese día cambie radicalmente mi plan de vida, me puse en vela noches enteras estudiando a diario, con el fin de mejorar mis notas en la escuela…

Rápido…


Un día llegue emocionado de la escuela tenía una gran noticia que contarle a SeeU, -¡Me habían contratado en una empresa!, y lo mejor es que me dejan seguir estudiando le dije sonriente, tendré salario fijo, así que no tendrás que trabajar tan duro –Le decía a SeeU, la cual estaba descansando en su cama en compañía de un dormido Oliver, pues últimamente se sentía muy cansada, desde hace exactamente una semana –Gracias –Me agradecía con una sonrisa.

-Con esto por fin…

De pronto SeeU comenzaba a toser fuertemente, - ¿Estás bien? –Pregunte realmente preocupado, ante sus negaciones ella solo me dijo que se encontraba bien, el ver su cara llena de preocupación hizo que algo dentro de mí se rompiera, sin vacilaciones salte hacía ella abrazándola, ella estaba sorprendida por esa acción tan repentina de mi parte, pero es que mis sentimientos que tenía dentro salieron, sin que pudiera detenerlos…

- ¿Eh?, ¿Qué pasa? –SeeU estaba confundida por mi reciente acción, sin dejar de soltarla le dije mis sentimientos, todo lo que sentía dentro, -SeeU siempre te estás esforzando sola, pero de ahora en adelante, déjame ocuparme de ti –Ella se sorprendió por mi declaración las lágrimas no paraban de caer por sus mejillas, con apenas un susurro ella me respondió moviendo ligeramente su cabeza, con delicadeza me separe de ella para mirar esos ojos azules que me vuelven loco, y en un instante estaba por unir nuestros labios…

-No… -Oliver está… -Intentaba frenarme SeeU, pero con delicadeza uní sus labios a los míos en un dulce beso.

Oliver se despertó, pero no se movió de su lugar, solo se hizo de nueva cuenta el dormido, pues él no tenía nada en contra, pero no me percate de su estado.

SeeU y yo nos besamos y tras separarnos le dije las palabras que nunca he vuelto a repetir en mi vida…

¡Te Amo!...


Estábamos dirigiéndonos de paseo, en metro, pasando por un gran bosque, miraba por momentos a Oliver que veía felizmente el paisaje, el ver su sonrisa hace que se me alegre el día pensaba –Ya lo puedo ver –Entre risas Oliver me enseño por la ventana nuestro destino, el mar, algo que a los dos nos trae recuerdos….


¿Cómo me veo SeeU? –Pregunte emocionado, pues era el primer día que iba a usar traje para ir a trabajar teniendo 19 años, era algo emocionante para mí, pero desgastante, tenía que ir después a tomar la escuela para graduarme a los 23 años en enseñanza de educación para la preparatoria -¿Seguro que me veo raro? -Aun teniendo mis dudas quería saber la opinión de SeeU, ¡Te ves muy guapo! –Ver el sonrojo de SeeU me lo aclaro, ¡En verdad, impresionante! -tras unos segundos de decirme eso, las risas estallaron, SeeU se movía estrepitosamente por el sofá intentando aguantar la risa, -¡No puedo más! –Decía al borde del colapso, ¡Te ves muy raro!, ¡¿Qué?! –Pregunte indignado, ella logró controlarse y se levanto del sofá.

-¡Es que siempre te veía con el uniforme de la preparatoria!, y verte con traje es raro –El que me digan eso realmente me enfado, pero aun así solté una pequeña risa, tras componer mi compostura, me acerque pícaramente a ella, logré morder su oreja y susurre - ¿Entonces sólo me tratas como adulto por la noches? –Ella se sonrojo al instante y su mirada cambio, intento cambiar el tema de conversación, y tomo a Oliver que se encontraba jugando con unos bloques para construcción, el que Oliver tenga 4 años y medio era algo que tenía que tener presente, pues a él lo quería y mucho…

-Llegaras tarde a tu trabajo –Al instante me dio a Oliver y nos dio nuestros respectivos almuerzos, y nos tomamos de las manos, y nos despedimos de SeeU no sin antes que le diera su besito de despedida a Oliver que se enojaba a veces, ella se lo dio y tras unos instantes se dio la vuelta y comenzó a toser de nueva cuenta, ya era medio año y ella no mejoraba…

-No te ha bajado la fiebre –Intente asegurarme del estado en que se encontraba Seeu, pero ella me dijo que no era nada, que irá a ver al médico más tarde, antes de que vaya a trabajar, sin decir nada más salimos rumbo a la escuela preescolar de Oliver.

Al irnos veía a SeeU un tanto melancólica, pero nunca supe por que hasta el día de hoy…

-Nunca pensé en que encontraría a un hombre que me amara de esta manera –Susurraba al viento que llevaba algunos pétalos de sakura por la temporada, de nuevo la tos me volvió a atacar, por lo que me di prisa para ir a ver al médico, pero al ir para mi mala suerte el tiempo empero de momento así como mi análisis de salud…

Dentro del hospital, la lluvia sonaba muy fuerte aun así algo me decía que estaba mal, tenía un extraño presentimiento desde que el doctor me pregunto…

-¿Es casada?, ¿Tiene familia?, -Si claro un hijo pequeño y un primo –Dije algo preocupada, ya veo –Dijo con voz desanimada –Usted tiene un tumor maligno que ya hizo metástasis –Esa noticia me cayó como agua fría, mi mundo colapso cuando el médico me confirmo…

-Se le ha detectado cáncer de pulmón –Con tono serio –Aún con la cirugía no será posible extraerlo

Eso sí que me devastó, en mi mente solo podía pensar en Oliver y Len, que sería de su futuro, las risas que me alegran mi día, bajo el paraguas cerca de una parada de autobuses me encontraba pensando en las opciones que me daba el doctor…

-Podemos tratar con medicinas, tratamientos de quimioterapia, pero solo para ralentizar el proceso –Me quedé en la parada de autobuses dejando que el agua fría que caía del cielo me aclarara mi cabeza….


-Me dieron un bono –Grité eufórico por la sala, ¿Un bono? –Curiosa se acerco a mi amada ofreciéndome un poco de sandía, Oliver se encontraba en el patio devorando la suya, -Me lo dio el jefe, tómalo SeeU, lo dejo en tus manos -Ella tomo el sobre y se sorprendió por la cantidad que había en él –Pero si es mucho, ¿No necesitas nada para tus estudios? –Con algo de preocupación en su voz me lo intento devolver yo lo negué e insistí, -No, no te preocupes, es más mira –Le mostré boletos para un viaje a al mar de Okinawa, que en estas fechas seguro estará estupendo, ella sonrió y me dio un beso de agradecimiento, yo le correspondí y le sonreí….


En estos momentos, Oliver esta frustrado, estamos en la playa de Okinawa, pero me pongo a su altura para ver que tiene –El me grita enojado, ¡No es justo!, ¡La última vez que venimos no había tanta gente!, -Ante sus pucheros logre hacer que se calme –Recuerda que este lugar no era muy conocido Oliver, pero parece que ahora se volvió popular –El hace mala cara y decide ir nadar, el aún teniendo 8 años deberás que pareciera que aun tiene 5 años, el corre a la orilla y toma una caracola, la cual me la enseña contento, el está feliz, colocándola atrás de su oreja, me hizo recordar el pasado…


- ¡Es verdad, puedo escuchar cómo me habla! –Oliver realmente estaba emocionado, el ver como jugaba con SeeU sobre la arena escuchando las caracolas, me reconfortaba, las sonrisas que ambos me daban a lo lejos, yo corriendo tras de ellos jugando a las atrapadas, nosotros juntos disfrutando de un pequeño almuerzo en un restaurante a orillas del mar, yo ayudando a Oliver a nadar, nosotros siempre juntos viendo en la orilla a SeeU darnos ánimos…

Estábamos muy felices los tres descansando a la orilla del mar, le enseñaba al pequeño Oliver como escribir su nombre en la arena, el se ponía contento pues escribíamos el nombre de los tres sobre la arena, entre risas nos divertíamos, al volverlas a escribir cuando el mar las borraba…

No me daba cuenta que el nombre de SeeU se borraba muy seguido debí darme cuenta que algo le pasaba, el ver su sonrisa llenas de lágrimas invisibles que ella misma se negaba, realmente debí darme cuenta de esos pequeños detalles….

Realmente me alegro de que el este aquí, así Oliver siempre estará…

Nos encontrábamos caminando por un sendero cercano a la carretera mientras tomaba la mano de SeeU, juntos observamos como Oliver corría delante de nosotros…

-Oliver, no corras tanto –Intentaba llamar la atención del pequeño, mi amada se rió por mi acción y detuvo mi paso –Len… -Si –Le afirme, ella me miro con miedo en la mirada y acercándose a mí me pregunto -¿Protegerás a Oliver?... Por favor –Yo me quede sorprendido por su pregunta, sin dudarlo si quiera, la abrace con fuerza, y acercándola a mí - ¡No! –Susurre, ella me miro preocupada, yo le bese la frente y sin dudar la mire –No solo a él, hare todo lo posible que este en mis manos para protegerte –Ella soltó unas lágrimas, mientras me susurraba un débil baka, Oliver dejo su carrera y giró a vernos…

- ¡Malos!, ¡Yo también quiero una abrazo!...


Estando unidos en forma de hombre-mujer, SeeU tuvo problemas, yo tenía algo de nerviosismo, pues ella tosía y me preocupaba, ella me dijo que no tenía nada, pero eso me preocupaba…

-Si te sientes mal, mejor paramos –Intente decirle para que ella no se sintiera mal o algo, enserio me importaba como se encontraba –Lo siento, enserio… -Ella me miraba con algo de miedo –No, no digas eso, sigamos –Decía algo preocupada –No –Acercándome a ella le di un beso en la frente –Mejor descansemos, tienes que relajarte, no esforzarte tanto en el trabajo –Acariciando suavemente su cabello intentaba consolarla –Tranquila, Tranquila –Ella me abraza con algunas lágrimas en los ojos, yo pensaba que tal vez era por exceso de trabajo o algo, pero nunca me di cuenta de que le pasaba…


- ¡¿Porqué no me habías dicho?! –Intente hacer que ella me contestase, pero ella me miraba con lágrimas en los ojos estando acostada en una cama del hospital –Hablé con el doctor –Susurró débilmente su voz se oía quebrada –Con el costo del tratamiento Oliver podría vivir por tres años –Aun con lágrimas en los ojos intente hacer que reaccionara - ¡No importa el dinero!, Voy a trabajar más aun, dejare la maestría si es necesario –Intentando ser fuerte, pero las lágrimas no paraban de descender por mis ojos, ¡También soy un adulto! Me recriminaba mentalmente, ¡Soy Adulto! –Así que no tienes de que preocuparte, por lo que SeeU, mi vida, resiste por favor, ella lloraba sin dejarme decir más…


Oliver camina con algo de timidez por el largo pasillo del hospital, ¿Dónde está el cuarto de Mamá? -Oliver camina muy deprisa, el me preocupaba –Oliver no te vayas a caer –Le llame la atención pero él me sonrió haciendo que eso me tranquilizara un poco…

-Oliver –SeeU gritaba emocionada, ya era exactamente un mes desde que la internaron, me alegre al instante al ver cómo le preguntaba a Oliver como estaba, eso me ponía más que sentimental, pero me maldecía internamente porque nada había cambiado, el cabello de SeeU se ponía algo sin color y su piel estaba algo pálida…

-Aun con la medicina, ella sigue empeorando, poco a poco cada parte de su cuerpo, lentamente el cáncer la estaba matando, las estaciones pasaron y los diagnósticos de los doctores cada vez eran menos alentadores…

-El cáncer está en fase terminal, lamento decir esto, pero las probabilidades que sobreviva son mínimas, no hay nada que pueda hacer…

-Pensaba que ya era adulto, pero ni siquiera puedo proteger a la mujer que amo…

–caminando por la calle me encontraba completamente solo divagando en mis pensamientos, pero…

Aun con los desgastes que tenía y ojeras que había acumulado, daba todo por ella, pero aun así, sigo siendo débil… completamente inútil…

-Caminado para ir a buscar a Oliver en el preescolar, el se encontraba aun en el aula, la maestra me dijo que pasara porque él no quería salir, intenté llamarlo, pero no escuchaba nada, lentamente me fui acercando al salón, lo veía de espaldas estaba en un rincón –Oliver por favor no seas un niño malo –Intenté regañarlo, pero…

No me di cuenta que el intentaba doblar una grulla de papel, me sorprendí por ello…

-Caminado por la calle tomando la mano de Oliver nos dirigíamos a casa, de repente escuche una pregunta de Oliver que me sorprendió –Len, ¿Mamá se va a morir? –Al escuchar claramente la pregunta de él, me hizo reaccionar inconscientemente, me arrodille y lo abrace con fuerza, con una fuerza que me desgarraba por dentro, le dije con determinación - ¡Claro que no!, se va a curar y regresara a casa, intentaba que Oliver confiara en mí aun en contra de lo que se avecinaba…


-Tras dos meses de tratamiento, el tumor maligno, seguía creciendo…

-La nieve descendía, por la ventana, estaba en la habitación de SeeU, ella me intentaba tomar por las manos, que estaban muy pálidas y carecía de su habitual sonrisa –Len, quiero volver a casa –Con algo de preocupación me acerque nuevamente a ella –Quiero volver –Con sollozos en su voz me decía, con delicadeza abrigue sus delicadas manos con las mías –Esta bien, regresemos… Regresemos a nuestro, hogar…


-Seeu tomaba con algo de dificultad las grullas de papel que le daba el pequeño Oliver - ¡Que bonitas!, haz mejorado mucho –Con lentitud, ella acaricio la cabeza de Oliver -¿No irás al hospital? –El pequeño rubio se acercó a Madre –No, así me puedo quedar siempre contigo, Oliver –Intentando sonar dulcemente, aun con el rostro desmejorado y el pelo, blanco y demacrado, SeeU intento reconfortar al pequeño –Siempre…. -Siempre…


-Desde ese momento, todos los días Oliver se pasaba horas y horas haciendo grullas de papel…

El creía que si las hacía, su Mamá no moriría, besando delicadamente cada una de ellas, siempre con ese sentimiento de amor el pequeño Oliver no se rendía…


-Una noche Oliver colocó cerca de una semidormida SeeU una grulla roja, ella abrió pesadamente sus ojos que carecían de brillo alguno…

-Por favor… Sólo… Déjame ver a mi niño… Que vaya a 1er año de colegio –Con lágrimas en los ojos susurraba –Po favor… Dios…

Llegaba algo cansado de la maestría, y realmente me preocupe ver las luces apagadas de la casa - ¿Oliver?, ¿Oliver? –Encendí algunas de la sala y la cocina y camine con cuidado - ¿Oliver?, ¿Olive?- ¡Huh! –Grité consternado, vi muchas grullas de papel regadas por el suelo de la habitación, había tantos y de muchos colores, me asusté cuando note a Oliver con uno entre manos, él me miraba con los ojos completamente perdidos, que ya no tenían esa luz que lo caracterizaban ahora tenían un color verde…

-Se encontraba a un lado de lo que parecía una dormida SeeU, cerca de su mano estaba una nota - ¿SeeU?... –Con algo de miedo me acerqué, en la nota con palabras poco claras dejaba un mensaje…

Perdónenme…

-Las palabras que quería darles a ambos era, que me perdonarán, que me perdonarán por morir, enserio perdónenme…


Nos encontrábamos mirando el atardecer Oliver y yo en la playa de Okinawa…

- ¡Que bonito! –Oliver no se dejaba de sorprender por lo que veía ya tenía más de tres años desde la última vez que venimos a este lugar…

-Es extraño –Mirando con tristeza Oliver logró sacarme de mis pensamientos -¿Qué pasa? –Mirándolo, el solo suspira –Cuando veo el atardecer… Me dan ganas de volver a casa… -Me sorprendió que dijera eso y juro por un instante ver la figura de SeeU a su lado, pues son exactamente las mismas palabras que me dijo antes de irnos de Okinawa en la última ocasión en la que estaba viva, mostrando un semblante suave miro al atardecer con él, internamente me digo a mi mismo…

-Si alguien le hace daño a Oliver, nunca se lo perdonaré… -Sea, quién sea… No dejare que le hagan algún daño…


Mirando desde la ventana del hotel, mira la noche fresca y la luna a lo lejos, mi pelo se mueve con el viento, me levanto del marco de la ventana y observo a Oliver dormir, acomodo un mechón rebelde de su frente, y lo miro detenidamente, me doy cuenta que no está bien arropado por lo que con delicadeza le colocó bien la frazada, y regresó a mirar a la joven noche, con el pensamiento de enfrentarme a lo que me depara el destino, como maestro de preparatoria al terminar las vacaciones, y regresar al trabajo la semana que viene, haré mi mayor esfuerzo todo por…

Mí querido hijo… Te amo…


Bueno amigos los dejare con suspenso, y como dije trata este episodio sobre LenxSeeU, pero sumamente necesario, en el próximo sin duda aparecerá Rin, pero ustedes decidirán si continuara, no es por ser malo, pero espero que comenten por favor, se lo juro pondré todo mi esmero en la continuación, así que sin más ¡Nos Vemos!, un saludo…

Atte.: Richy Escor

PD: ¡Hasta La Próxima!...