Capitulo 1: La Biblioteca
-Vamos tu sabes hacerlo mejor-le gritó Sirius y su voz resonó por la enorme y tenebrosa habitación.
El segundo haz le acertó de lleno en el pecho.
El no había dejado de reír del todo, pero abrió mucho los ojos, sorprendido.
Harry soltó a Neville, aunque sin darse cuenta de que lo hacia. Volvió a bajar por las gradas y saco su varita mágica al tiempo que Dumbledore también se daba la vuelta hacia la tarima.
Dio la impresión de que sirius tardaba una eternidad en caer: su cuerpo se curvo describiendo un majestuoso círculo, y en su caída hacia atrás atravesó el raido velo que colgaba del arco.
Harry vio la expresión de miedo y sorpresa del deteriorado rostro de su padrino, antes apuesto, mientras caía por el viejo arco y desaparecía detrás del velo, que se agito un momento como si lo hubiera golpeado una fuerte ráfaga de viento y luego quedo como al principio.
Entonces Harry oyó el grito de triunfo de Bellatrix Lestrange, pero comprendió que no significaba nada. Sirius solo había caído a través del arco y aparcería del otro lado en cuestión de segundos…
Sin embargo Sirius no reapareció.
-¡Sirius!- grito Harry-. ¡Sirius!
Harry había llegado al fondo del foso respirando entrecortadamente. Sirius debía estar tras el velo; Harry iría y lo ayudaría a levantarse…
Pero cuando llego al suelo corrió hacia la tarima, Lupin lo rodeo con los brazos y lo retuvo.
-No puedes hacer nada, Harry…
-¡Vamos a buscarlo, tenemos que ayudarlo, solo ha caído al otro lado del arco!
-Es demasiado tarde, Harry.
-No, todavía podemos alcanzarlo…- Harry lucho con todas sus fuerzas, pero Lupin no lo soltaba.
-No puedes hacer nada, Harry, nada. Se ha ido.
-No puedes hacer nada, Harry, nada. Se ha ido
-No puedes hacer nada, Harry, nada. Se ha ido
-No puedes hacer nada, Harry, nada. Se ha ido
-¡Ahhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhh!-
Harry se despertó sudoroso había tenido nuevamente la misma pesadilla, todas las noches desde que había regresado la tenía, y siempre las mismas palabras de lupin se quedaban resonando en su cabeza: Se ha ido, Se ha ido.
Harry se levanto de su cama miro hacia su mesilla de noche y vio que el reloj marcaba las cuatro de la mañana, aun era muy temprano, Harry se sentó en el borde de la cama y comenzó a pensar en el sueño que había tenido, la muerte de sirius, de su padrino, el ultimo vestigio que le quedaba de lo que el pudo haber llamado familia, por que, se preguntaba Harry, por que a mi, por que toda la gente que amo termina muriendo, ya estaba arto, toda su vida había estado llena de sufrimiento, dolor, muerte, mentiras; estaba arto de su vida, quería morirse ahí mismo para poder estar con sus padres y con Sirius, en un mundo donde no hubiera dolor ni sufrimiento ni Voldemort ni una maldita profecía que marcara su destino, ya estaba cansado quería morir pero mas que eso quería venganza, antes de irse quería asesinar a dos personas, Voldemort y Bellatrix Lestrange, las personas, si es que se les podía llamar así, que le habían arrebatado su felicidad, si, antes de morir las mataría y luego ya podría morir en paz para ir a reunirse con padres y Sirius.
Harry se levanto de la cama y se fue al baño se desvistió abrió el grifo de la ducha y entro en ella, sentía como el agua resbalaba por su cuerpo, era algo relajante, pero ni así podía quitar sus pensamientos del maldito sueño, ni de la maldita profecía, Harry salió de la ducha y se vistió después bajo las escaleras en silencio y salió a fría calle de Privet Drive, camino durante unos veinte minutos hasta que llego al parque se sentó en una banca y comenzó a pensar como podría hacerle para comenzar a entrenarse sin que nadie de la orden se diera cuenta, no quería al estúpido de Dumbledore diciéndole que era lo que podía y no podía hacer a cada momento, así que se puso a planear una excursión al callejón Diagon para poder comprar unos cuantos libros que le ayudaran a mejorar su nivel de magia, ya que como había comprobado en l ministerio de magia la noche en que sirius murió le faltaba mucho por aprender para poder derrotar en duelo a Bellatrix y mucho mas a Voldemort, así que lo decidió al día siguiente se levantaría temprano y se pondría su capa de invisibilidad, y caminaría hasta una parada de autobús muggle y en un autobús se iría al callejón.
Harry se levanto y comenzó a caminar sin ningún rumbo en especifico, sus pies lo guiaban a través de las calles, Harry levanto la mirada del suelo y se dio cuenta que había alejado mucho de Privet Drive, ahora estaba en un pequeño parque, en frente de este había un centro comercial y al lado un edificio grande y antiguo, Harry sin saber por que, continuo caminando hasta quedar en frente de la antigua construcción, una ves enfrente Harry levanto la visto y vio que en la parte superior del edificio decía:
Biblioteca publica del condado
Harry se sintió extrañamente atraído hacia la construcción así que se decidió a entrar, una ves dentro vio que la biblioteca era muy grande comenzó a caminar entre las estanterías, había libros de todo tipo, de filosofía, de historia, de idiomas, de matemáticas, ciencias, literatura, entre otro muchos mas temas, Harry siguió avanzando, no sabia por que pero se sentía atraído hacia un lugar en concreto, sus pies se movían solos, Harry caminaba sin prestar mucha atención hasta que llego a lo que parecía ser el lugar mas alejado de la biblioteca, había una pared y en esta había una puerta pero unas bandas la bloqueaban con señalamientos de peligro, o fuera de servicio, Harry hizo caso omiso de los señalamientos y paso por debajo de ellos tomo el picaporte y lo giro, la puerta se abrió con chirrido y Harry voltio hacia atrás para ver si no había nadie cerca, después de comprobar que no había nadie abrió la puerta completamente y entro, había unas escaleras muy desgastadas que parecía que en cualquier momento se iban a caer, quería regresar pero tenia un extraño presentimiento, sabia que debía continuar bajando, y una ves mas le hizo caso a su presentimiento y comenzó a bajar las escaleras, iba bajando lentamente, ya llevaba al meno diez minutos bajando las escaleras y estas aun no llegaban a su fin, iba a dar la media vuelta e ir de regreso cuando voltio hacia abajo y vio que había una luz blanca, lo que significaba que ahí estaba el fondo, Harry dejándose guiar por su curiosidad siguió bajando y después de unos cinco minutos llego al final de las escaleras, la luz blanca que hacía unos minutos había visto estaba ahí y le impedía ver que era lo que había ya que luz era demasiado fuerte, pero pasados unos minutos la luz se apago, y todo quedo sumido en la oscuridad, de pronto Harry sintió que había alguien detrás de el, pero antes de alcanzar a voltear un mano le tapo la boca con un pañuelo mojado y ya no recordó mas, se desmayo.
