"Por primera vez miró dentro de sus ojos queriendo descubrir la verdad sobre su origen, a pesar de que por dentro tenía miedo de haber cometido una atrocidad, pero había llegado el momento de descubrir quien era su padre, y la razón del por qué nunca había estado con ella, tal vez era porque al final de cuentas ella era un monstruo."
Al nacer Mako, su madre Yui, no pudo sobrevivir al parto y esto porque Mako, no era una bebé cualquiera, sin embargo su abuelo Karl Heinz, se hizo cargo de ella, a pesar de que el nunca estuvo de manera física con ella por sus continuos viajes, ella siempre le ha tenido mucho aprecio por no abandonarla. Llegado el tiempo, Karl Heinz, desaparece y decide dejarla al cuidado de la familia Mukami, pero lo que Mako no sabe, es que este es sólo un paso para que descubra quién es su verdadero padre.
"-Esto no puede ser cierto, dime que no es verdad- sus ojos se inundaron de tristeza, el diario que había encontrado de su madre, en la mansión Sakamaki, no sólo había descifrado el gran secreto sobre su origen, sino que le había partido en dos el corazón.
-Esta fue la razón por la que no quería que fueras a la mansión Sakamaki- se escuchó una voz a sus espaldas, ella reconocía esa voz en donde quiera que fuese- Será mejor que regreses a la mansión Mukami, tu ya no tienes nada que hacer aquí- de pronto sintió unos brazos alrededor de su cintura, un par de labios se situaron sobre su frente, y fue entonces que ella cerró los ojos, pensó que tal vez si los cerraba lo suficientemente fuerte al abrirlo descubriría que nada de lo que estaba sintiendo es verdad, era imposible que su madre y ella se hubieran enamorado de la misma persona, pero cuando abrió los ojos se encontró con esa mirada, y se preguntó si es que acaso él ya sabía la verdad todo este tiempo, o si es que apenas él había descubierto su parentesco
