Un Día Normal

Primero que nada quiero mandar un saludo a M. C. Leto y a Alex Fox de Wilde, ya que sus historias sobre Zootopia son muy buenas y me inspiraron en elaborar este fic.

Trataré de actualizar a diario la historia, es la ventaja de que sean vacaciones, tengo pensado en hacer muy larga esta historia, así que, si tienen ideas, sugerencias y recomendaciones, no duden en mandármelas, les agradecería muchísimo eso, ya que no tengo experiencia escribiendo, solo estoy haciendo esto por diversión

Dejen sus reviews y díganme como les parece la historia.

Judy

Lunes, 29 de junio de 2016, 5:30 a.m.

Escuche el agotador ruido del despertador de mi antiguo departamento, un ruido tan molesto que hace que mis orejas tiemblen del dolor al apenas empezar a sonar el repetitivo sonido chillante que emitía aquel viejo reloj, eso hace que me levante de golpe y no quede rastro alguno de somnolencia en mi interior.

"Es la desventaja de ser conejo", pensé.

-Aveces tener un sentido del oído tan agudo es molesto en casos como este- me dije a mi misma.

Camine hacia el despertador con mis patas tapando mis enormes orejas, presione un botón negro que se ubicaba en la parte superior del despertador, acción que hizo que se callara dejando un tranquilizante silencio en la habitación.

-Música para mis oídos- dije con una sonrisa mientras suspiraba. En eso entre al baño para asearme y prepararme para el trabajo.

-Ya han pasado tres años desde que Nick entró a la ZPD, hemos resuelto una gran cantidad de casos menores y hemos sido reconocidos como los mejores oficiales de policía que Zootopia jamás ha tenido. Siendo sincera ningún criminal saldrá de nuestras manos mientras Nick y yo estemos juntos- Pensé.

Odiaba los lunes, no por ir al trabajo, el cual no representaba ningún problema para mí, ya que después de todo era mi sueño el convertirme en oficial de policía, sino que de alguna manera era molesto para mí ese día en especial, no me dejaban ir con Nick a dar el típico recorrido por la ciudad, para saber si todo estaba en orden. Hoy me tocaba hacer informes y eso me frustraba demasiado.

-Bueno, aunque le reclame y le de un buen motivo para no hacer informes, Bogo jamás me dejaría ir- me dije, - Después de todo el es el jefe - suspire

Ya había tomado un baño y tenia puesto mi uniforme de la ZPD, el mismo que tenia desde mi primer día como policía en Zootopia, me dirigí a la cocina para hacerme algo de desayunar y comenzar con entusiasmo la semana. -No por ser lunes dejare que eso me quite el buen humor- pensé mientras terminaba de almorzar y me preparaba para salir.

Salí de mi departamento y baje las escaleras rápidamente hasta llegar al lobby del edificio, instintivamente voltee a ver la recepción y vi que una pantera completamente negra, alta y con ojos color verde-aceituna me dirigía la mirada y sonreía al verme. Era el portero del edificio.

- Buenos días, Mark - le dije con una sonrisa mientras me acercaba a su escritorio y tomaba un periódico que se encontraba en la recepción.

- Buenos días, señorita Hopps - dijo respetuosamente a la coneja. - ¿Lista para su día en el trabajo? - preguntó amablemente

- Por supuesto Mark, siempre estoy lista - le conteste animadamente, mientras mis orejas se erguían y mostraba una sonrisa afectiva en mi rostro, mostrando mis dientes blancos.

- No esperaba menos de usted - dijo la pantera con una sonrisa. - Que tenga un excelente día, señorita Hopps - dijo en tono amable.

- Igual Mark, gracias - le respondí mientras me alejaba de la recepción y caminaba hacia la puerta.

Salí del edificio y me dirigí a la estación que se encontraba a un par de cuadras de mi departamento, para tomar el próximo metro al centro de la ciudad.

Tomé mi celular y noté que eran las 7:00 a.m, -llegare muy temprano a la estación de policía- pensé, casi siempre el trayecto de mi casa a las oficinas de la ZPD era de aproximadamente 30 minutos, lo que significaba que llegaría con media hora de anticipación.

- Espero que el Jefe Bogo no me deje hacer informes, al ver que soy la primera oficial en llegar a la comisaría - dije soltando una leve risita.

En eso vi que llegó el metro a la parada donde me encontraba, me reconfortaba verlo todas las mañanas, me recordaba a la primera vez que lo tome para venir a la ciudad.

Noté como las puertas del tren se abrían lentamente, como si se trataran de las puertas de algún centro comercial. Distinguí como se abrían una por una, primero la puerta para animales grandes, después la de animales de estatura media y al final la diminuta puerta para roedores y animales pequeños.

Me escabullí entre la multitud que se encontraba en la estación esperando a subir al transporte, rápidamente me encontraba entre las puertas siendo de las primeras en subir al tren. "Bueno, a veces ser conejo tiene sus ventajas", pensé con una sonrisa dibujada en mi rostro, encontré un buen lugar para sentarme y me dispuse a sacar el periódico que había tomado del lobby del edificio. Mientras leía note como el metro comenzaba a dejar la estación, miré por la ventana y pude observar como poco a poco el tren se alejaba del lugar desapareciendo de la vista de todos.

Me acomode y empece nuevamente a leer un articulo que había encontrado en la sección policíaca, y sin mas espere a que mi transporte llegara a su destino.

Llegando a la estación de policía pude ver que no había mucha gente alrededor, al entrar solo pude notar a aquel simpático leopardo come-donas que siempre nos hacia reír y que con su carisma te recibía alegremente todas las mañanas. El con una sonrisa acomodaba su escritorio y se aseguraba de que todo estuviera en orden para cuando llegaran los demás oficiales.

- ¡Hola Garraza!, ¿Cómo estas? - le dije animadamente mientras corría a su escritorio.

- ¡Hola Judy!, muy bien gracias, ¿Cómo esta la oficial mas tierna de la ZPD? - dijo en tono burlón mientras me abrazaba. No dejaba que me dijeran que era tierna, pero solo hay dos animales a quienes permitía llamarme así y uno de ellos es Garraza.

- Muy bien Garraza - le dije riendo, - Siempre me alegro de verte Benji - sonreí y nos separamos del abrazo.

- Aw, yo también me alegro en verte - le dijo tiernamente, - Bueno, nos vemos después Judy, tengo que preparar la agenda de hoy para Bogo - lo dijo agarrando rápidamente unas carpetas que se encontraban en su escritorio y empezando a caminar hacia la oficina del jefe.

- Nos vemos mas tarde Benji - le dije mientra me disponía a dirigirme a mi cubículo. Llegando, empece a encender mi ordenador, miraba la pantalla mientras se completaba el proceso de encendido, tenia mi mente en otro mundo, pero ese estado de ensueño en el que me encontraba se esfumo al sentir una presencia a mis espaldas, voltee y observe que no se encontraba nadie, inconscientemente estaba parada tratando de investigar si había alguien mas en el lugar, sin mas, me limite a regresar a mi lugar que para mi sorpresa estaba ocupada por otro animal, me asuste al verlo, era increíble que aquel animal pasara desapercibido para mi, casi nada se me escapaba.

- Hola Zanahorias - dijo la persona con una sonrisa pícara mirándome directamente a los ojos, - ¿Cómo amaneció mi conejita preferida? -

- ¡Nick! Dios que susto me acabas de meter - le dije mientras me llevaba una pata a mi pecho, sentí como mi corazón palpitaba velozmente. "Odio cuando hace eso" pensé, sonreí y le conteste - Muy bien Nick, ¿Cómo amaneció mi zorro torpe preferido? -

- De maravilla Zanahorias, ya tenia ganas de verte - me dijo con una sonrisa, aquella sonrisa me encantaba, hacia verse mas guapo de lo que normalmente era. El estiro su brazo y sacó una taza de café para mí, todos los días me preparaba café mi zorro bobo favorito, me gustaba el saber que se preocupaba por mi y procuraba que estuviera bien todo el tiempo.

- Gracias Nick - le dije con un leve sonrojo en mi rostro, es verdad que había despertado sentimientos por el, pero no me imagine que sería tan difícil controlarlos, tenia tantas ganas de abrazarlo y besarlo en este preciso momento.

- Denada Juds - dijo sonriendo mientras se dirigía a su cubículo, el cual, para mi buena suerte se encontraba frente al mío. Dejó sus cosas y se asomo por la pequeña pared que separaba nuestros lugares, - Venga Zanahorias, el jefe Bogo se molestara si no estamos en el salón, hoy entregará misiones -

- Ya voy Nick - le dije mientras saltaba de mi asiento y lo alcanzaba corriendo, me encantaba estar ahí, era un día normal en el trabajo, pero, lo que mas me gustaba, era pasar la semana al lado de Nick, eso hacía que mis días fueran perfectos.

Llegamos al salón de misiones, mientras pasábamos entre los lugares, noté como todos nos miraban y nos saludaban con respeto, después del caso de los Aulladores, todos nos miraban como héroes. Vi como Nick los saludaba con su carisma natural, el hacía que las personas rieran o se alegraran con tan solo verlo, para el, el hacer amigos era igual de fácil que comer un pay de moras, le encantaba. Nos sentamos en nuestros respectivos lugares, los cuales se encontraban hasta el frente del salón, al lado de mi se sentó Nick, quien me volteo a ver con una sonrisa mientras se ponía sus Ray-Ban estilo aviador y se acomodaba en su silla. Entró Bogo y todos se pusieron de pie y empezaron a golpear las mesas, solo Nick y yo no hacíamos eso.

- Silencio, silencio - dijo mientras se ponía sus lentes, era gracioso ver como un animal de su tamaño utilizara lentes tan pequeños como esos. - Hoy entregare sus respectivas misiones, pero primero, hay un asunto de gran importancia - dijo seriamente, con aquella voz grave e intimidante que poseía.

- Pueden pasar - dijo Bogo, en eso la puerta por la que había entrado Bogo se abrió, dejando pasar a un grupo de 5 animales al salón. Nick y yo mirábamos sonriendo a aquellos novatos que vestían el uniforme representativo de la ZPD, "Reclutas", pensé. En eso Bogo los ubica enfrente de todos y voltea a vernos. -Ellos serán los nuevos cuerpos de la ZPD, fueron los mejores de su clase y les daremos la bienvenida que se merecen - dijo en modo líder mientras se paraba en el podium donde repartía las misiones.

- Bien, ahora las misiones - dijo mientras tomaba la primera carpeta del montón que tenia enfrente.- Oficiales Wilde, Hopps - posó su mirada en nosotros, nos paramos y tanto el como yo dijimos al unísono - ¡Sí señor! - de forma respetuosa. El abrió la carpeta y volvió a mirarnos. - Tengo un trabajo especial para los dos - dijo con una sonrisa, - Quiero que les muestren las instalaciones a los nuevos oficiales, que se vayan familiarizando con el lugar, no quiero tener problemas con alguno de ellos, así que traten de explicarles como son las cosas aquí en la ZPD, si no, ustedes serán los perjudicados, son responsabilidad suya - dijo seriamente. Nosotros solamente asentimos y nos dirigimos a la puerta principal del salón, notamos que los nuevos oficiales estaban siguiéndonos.

Lo ultimó que escuche al salir del salón fue la voz de Nick, el se encontraba a tan solo un par de pasos detrás de mí, - Bueno Zanahorias, parece que nos tocara hacer de guía de turistas - dijo en tono burlón con una sonrisa, voltee a verlo y solté una risita simpática, - Eso parece - dije mientras llevaba mi atención a el y le sonreía cariñosamente, haciendo que nuestras miradas se conectaran, creado un pequeño mundo de ensueño en nuestros ojos, "sus ojos... son hermosos", pensé y me dispuse a caminar hacia la entrada de la comisaría.