.
¡Hola! Hoy les traigo algo fuera de mí imaginación….(dando alusión a la idea..u.u)
Un buen día, mi hermana escuchó una linda grabación: Los hombres y los Sapos, que quizás más de una(o) de ustedes habrá tenido la oportunidad de escuchar, (de no ser así con gusto pueden pedírmela y se las hago llegar a su correo) y pues, platicando con ella me convenció en crear un fic tomando la idea a partir de ésta grabación.
.
"Yo le dije que estaba loca, pero la mas loca salí siéndolo yo por hacerle caso"
(ya verán por que lo digo)
.
Así que comienzo con los derechos de esta producción (cuf cuf):
*La idea no es mía, es de Mafer, yo sólo adapté la idea para crear el fic a continuación.
**Así mismo, los personajes no me pertenecen, éstos fueron creados por Hiroyuki Takei, cualquier queja de estos, a él por favor. (Ejem, pero antes…ver el siguiente punto)
***Claro que lo que aquí sucede, no es cuestión de su autor, sino producto de mi intervención, (en esto tengo mucho que ver yo, quejas de sus conductas en éste fic, conmigo ^ ^U).
.
.
Comentarios respecto a la redacción de la narración:
-" Cuando una expresión aparece así, es porque el personaje está dialogando" –
-"Cuando una expresión aparece así, es porque el personaje que está dialogando inetermanete" -
"Cuando una expresión aparece de esta manera significa que alguien piensa o siente lo que se dice entre comillas"
(Generalmente se trata de la persona a la que se refirió la narración anteriormente).
La oración como la siguiente, es para resaltar una expresión cuyo significado dependerá de su contexto.
La expresión de esta manera, donde es cursiva y no mantienen las comillas al inicio y al final del mismo, significa que la narración se enfoca desde el punto de vista del personaje, es decir, a la perspectiva de sus pensamientos, (puede llegar a pasar, que la narración se dé por el mismo personaje).
- . - x - . - X - . - x - . - // cambio de escenario.
Y OJO:
& - & - & // cuando aparece estos caracteres, significa que la narración a continuación se hará, ya sea por la narradora (su servidora) o por que el personaje comenzará a narrar los sucesos. (bueno., u///u un intento de…. )
.
.
CAPITULO I.
Presente más Extraño.
.
.
.
.
El reloj me anunciaba que mi cumpleaños número diecisiete se acercaba cada vez más, solo se necesitaría que transcurrieran unos minutos para que así lo fuera. Estaba ansioso, aún más por que mi mejor amigo se tomó la molestia de invitarme a comer en éste día único en todo el año, precisamente a la hora exacta. Generalmente no festejo con nadie que no sea mi propia compañía, años anteriores habría comprado algún boleto para asistir a un evento cultural aquí en la ciudad de Tokio, en la que llevo casi dos años desde que dejé Inglaterra para estudiar en el extranjero.
Llegué al restaurante veinte minutos antes de lo acordado, pedí una mesa para dos y una encantadora joven me llevó junto a mi mesa; el lugar fue agradable y le agradecí su buena atención antes de que se marchara, enterada de que pediría cuando mi compañero se encontrara presente. Me senté mirando hacia la entrada del local, quería verlo al llegar para evitarle una serie de descripciones que tendría que darle a la encargada a fin dar a mi mesa; aún faltaban algunos minutos, así que miré hacia fuera del establecimiento a través del cristal, en la que pude apreciar a las personas que pasaban hacia un destino fijo; me encanta perderme a través de ese mundo al que casi nunca estoy conciente, raras veces me doy la oportunidad de perderme en lo que en estos momentos otras personas compartían al mundo: Todas diferentes, por ejemplo, el encontrarse con un amor en primavera, como lo puedo percibir en aquella parejita que transmiten el amor que une sus corazones.
"No sé, quizás yo nunca encuentre el mío…"
Suspiro nostálgico.
.
.
.
.
& - & -&
.
.
.
.
-"¿Tan pronto desesperanzado?"
Unas palabras burlescas perturbaron los pensamientos al dueño de unos hermosos ojos verdes, quien miró desconcertado hacia el causante de su distracción.
-"¡Ren!" – exclamó –"¡Llegaste antes de lo acordado!" – le dijo con asombro, sonado con sus palabras como si fuese un reclamo.
El joven de cabellos violetas sonrió de la misma manera sarcástica que le caracterizaba desde que le conoció, sentándose frente a Lyserg mientras colocaba su abrigo sobre el asiento de su lado.
-"Agradezco el recibimiento" – le dijo irónico.
-"Disculpa" – pidió apenado –"Esperaba que llegaras en unos diez minutos"
-"Normalmente llegaría veinte minutos antes de lo acordado, pero obviamente tuve algo qué hacer antes" – comentó mientras tomaba el menú sobre la mesa.
-"¿Necesitas hacer algo?" – cuestionó Lyserg preocupado –"Si así es, no te entretengas conmigo, ya será para otra ocasión"
Pero Ren le miró con seriedad.
-"Lo que tenía que hacer, ya lo hice" – le dijo sin importancia.
Lyserg se relajó al escucharlo, había olvidado que Ren era un joven ocupado con las actividades que le correspondían en su familia, sin embargo, todo parecía indicar que sería como lo planeado y agradeció por que así haya sido.
Pidieron, y el resto de la tarde mantuvieron una animosa charla en la que los recuerdos fue el tema de la conversación; revivieron juntos aquel día en la que se conocieron, un pequeño incidente en le que Ren había sido presidente de la escuela y que al no estar de acuerdo con la manera de regir, Lyserg organizó a su grupo, creando una fuerza que hirió el orgullo al joven de China. Las riñas que mantuvieron desaparecieron cuando ambos se dieron cuenta (tras quedarse encerrados en el almacén de la escuela) de lo personal que había sido la pelea, moviendo masas y demás por niñerías. Luego, al siguiente curso, Jeanne había sido elegida para presidenta de la escuela: una jovencita muy problemática, por lo que ambos unieron fuerzas para que la dictadura de la niña, no los sometiera.
-"¡Sí!, ¡fue lo más divertido!" – expresó el inglesito, bebiendo luego de su limonada.
-"¡Cuándo hubiera imaginado que todo aquello me traerían buenos recuerdos!" – mencionó por su parte agradablemente a su manera.
-"¡uff! ¡Pero qué rápido pasa el tiempo!" – anunció desilusionado cuando miró el reloj de su muñeca – "Ya pasan de las siete de la noche, acordamos terminar el festejo a ésta hora ¿lo recuerdas?"
Ren asintió decepcionado –"Sí, tengo un vuelo a las diez" – comentó –"No pude hacer mucho para que mi hermana cambiara el plan de mi vuelo"
-"Descuida" – le respondió amablemente –"¡Éste fue el mejor cumpleaños que haya tenido!" - le dijo muy agradecido, observando cuando su compañero hizo una seña a la joven que les atendió para que se encargara de llevar la cuenta a su mesa.
-"No se si lo recuerdes" – mencionó el ojidorado con cierta perturbación en su voz –"Pero había prometido no solo festejar tu cumpleaños al invitarte aquí, sino que.."
-"¡Sino que me entregarías un obsequio!" – le interrumpió resaltando sus palabras infantilmente con una sonrisa, acto que provocó que Ren se sonrojara notoriamente.
Ren Tao movió su mano derecha sobre el asiento donde había colocado el abrigo, trayendo sobre la mesa una pequeña caja, muy curiosa para los ojos de su compañero, llenándolo de alegría al saber que había recordado la promesa.
-"El primer regalo después de todo" – rompió su silencio con ternura.
El proveniente de China nunca le había obsequiado algo, por eso ahora no le extrañaba que se haya puesto ciertamente nervioso, de hecho esperaba una reacción más tímida por su parte.
Sin embargo, con una expresión seria en su rostro, Ren se lo extendió, entregándoselo sobre sus manos. –"Ábrelo cuando estés en tu cuarto" – le dijo.
Extrañándolo al no esperar que le pidiera algo así.
En ese momento la joven llegó con la cuenta, impidiendo que Lyserg cuestionara a su petición extrañamente.
.
.
.
-"Quédese con el cambio" – le dijo Ren al incorporarse de su lugar y negarse a esperar a que le entregara el vuelto –"Es tiempo de irnos" – invitó a Lyserg como una orden.
El dueño de ojos esmeraldas, agradeció a la muchacha cuando se levantó de su lugar, aún cuado ella les había agradecido por la propina.
Salieron del local con cierto ánimo entre ellos, sin embargo y por desgracia, ambos tomarían caminos distintos así que se despidieron con un abrazo frente la entrada del establecimiento en el que habían pasado toda la tarde.
Ren subió al auto que lo esperaba desde minutos antes, por lo que Lyserg se despidió con un gesto de mano cuando se fue.
-"¡Qué curioso!, ¡una cajita!" - dijo como si se tratara de un niño de cinco años al que le habían entregado un puñito de dulces.
Miró ambos lados, esperando poder no acatar sus instrucciones. Agitó la cajita, y un sonido en su interior se escuchó.
.
"No pesaba y le parecía hueca, por lo que la sensación de que no habría algo ahí dentro lo había perturbado por un momento."
.
-"¡Sí hay algo en su interior!" – se dijo al romper su silencio, guadando la cajita en alguno de los bolsillos del fino saco que le protegía.
Camino siete metros a través de la banqueta cuando decidió abrir su obsequio hasta llegar a casa.
- "Abrir cuando esté en mi cuarto" – se dijo. Pero la idea de descubrir lo que le habían obsequiado, le invadió con fuerza, creciendo su deseo conforme avanzaba. -"¡Oh! Necestito saber ¿qué es?" - interrumpió su camino al cambiar de opinión, parándose en seco. Tomó la cajita entre sus manos observando su color azul celeste que brillaba con el contacto de las diversas luces. Y sin poder evitarlo, la abrió, encontrando una pequeña nota en su interior.
.
"¿Fue todo lo que pudiste esperar?
Pues te tengo noticias,
¡Ésta estúpida caja no tiene ni un regalo!
Ni para qué te molestaste en agradecérmelo
Si en verdad deseas tu regalo
Acude a la dirección que te he dejado en la siguiente nota"
.
.
& - & -&
.
.
Volví a buscar en la cajita azul, la nota que se requería que encontrara, ésta era más pequeña como si se tratara de una tarjetita de felicitación, y efectivamente, ahí escrito: una dirección y por detrás de esta, unas letras impresas en diversos colores que decía:
.
VÁLIDO EN LA TIENDA "SAPOS ENCANTADOS"
POR UN SAPO.
.
Me extrañe de la descripción.
Observé que la tienda estaba a unas cuadras de ahí, y al no tener mejor actividad por hacer, me dispuse a llegar a la tienda.
.
.
.
- . - x - . - X - . - x - . -
.
.
.
Al llegar a la dirección, me sorprendí al encontrar un gran letrero que decía:
.
"Bienvenidos a la tienda SAPOS ENCANTADOS".
.
Todavía incrédulo miré la puerta. El local no me dio confianza, pero por tratarse de un obsequio de Ren, decidí entrar.
.
¿Cuál fue mi sorpresa?.
.
El interior del local mostraba un ambiente mágico, una sensación extraña de encontrarte en un cuento de hadas: las luces tenues del establecimiento eran de colores rosas, amarillos, azules con cierto toque verde y variados colores pasteles sobre el polvo que adornaba los muebles de madera vieja, adornando de igual manera el techo de la presencia de variadas hadas sobre techo, uno que otro pequeño nomo y duendes sobre el piso, sin mencionar el peculiar sonido de un sapo en una grabación que se mezclaba un sonido de hacer encantos y magia.
Llegué junto al aparador, detrás de ella, una joven que me sonrió al verme.
-"Disculpe, espero pueda ayudarme" – le dije.
Pero ella me extendió la mano esperando a que le entregara algo, y sobresaltado busqué en el interior de mi abrigo la cajita que Ren me había entregado, sacando la nota que creí que ella me pedía.
Cuando ella miró la nota, la bajó sobre el cristal del aparador. Yo estaba que me moría de nervios con tanto misterio en el que me envolví desde que Ren Tao me entregó la dichosa caja, así que impaciente, pregunté:
-"No entiendo, ¿de qué se trata todo esto?"
Y ella tan solo sonrió.
-"¡Se convierten en príncipes!, Sólo tienes que seguir las instrucciones" – y diciendo esto, me entregó un cuadernillo, lo que se supone eran las instrucciones.
La idea se me hizo una tontería, - "¡¿príncipes?!. Eso es lo más absurdo que he oído" – me dije.
Pero entonces, la vendedora tenía un sapo, ¡Dios sabe de dónde lo sacó! Y me lo extendió frene mió.
-"¡Todos son iguales!. Sigue las instrucciones al pie de la letra y mañana a ésta hora ¡vas a tener a tu príncipe azul!".
Sus palabras invadieron mi mente, me perturbaba la idea de querer tener un príncipe azul en vez de una hermosa doncella, pero como deduje que la mujer estaba loca y que Ren también lo estaba, tomé al sapo y lo metí sobre la caja que se me obsequió, alejándome de ahí tan pronto como me fue posible.
.
.
.
- . - x - . - X - . - x - . -
.
.
.
.
.
Llegué a mi apartamento muy cansado por el largo trayecto en el que me sometí; de la manera más irracional decidí llegar hasta mi casa caminando, luego del disgusto de me trajo el dichoso regalo.
En fin, cerré la puerta cuando entre a mi apartamento, aventando las llaves sobre la mesita de la sala. Me quité mi saco y al aventarlo junto al sillón escuché cómo aquel feo sapo, arrugado y de ojos saltones, se quejó con su chillido de "sapo". Me acerqué, sentándome junto al sillón, sacando la cajita de una de las bolsas de mi abrigo.
-"¡Par de locos!" – dije –"De seguro esto es obra de una de sus bromas pesadas" –exclamé con disgusto –"¿Ahora que voy hacer con éste sapo?"
Miré la caja con angustia, dejando que pasaran varios minutos al pensar en qué hacer, y así, sin la menor importancia y sin ningún ánimo de hacer algo productivo conmigo, decidí seguir con el juego.
Tomé las instrucciones que guardé en otro de los bolsillos y aburridamente descubrí que lo único que se requería era en alimentar a éste asqueroso animal cada media hora exactamente durante 24 horas exactas, Día y Noche, eso no importaba. ¡No tenía qué retrasarme ni un segundo!, ¡Ni saltar una comida! porque de lo contrario, el hechizo no se rompería y seguiría siendo un común y corriente animal.
-"¡qué novedad!" - me dije, definitivamente, esto olía muy raro, y digo raro, no por el olor que despedía este terrible animal, sino por que esto parecía un plan malvado que solo a Ren se le podría ocurrir. Pero en fin, de alguna manera me animé a seguir con su juego, me sonó mas divertido luego de no tener nada más que hacer, así que me dispuse a seguir leyendo:
.
"ACLARACIONES: Los sapos encantados se alimentan de amor cada media hora exacta. Debes decirle a tu sapito: palabras cariñosas, tiernas, piropos, hacerles sentir que no es un sapo sino un príncipe para que efectivamente se convierta en uno."
.
-"¡No!.. ¡puede!.. ¡SER!" – me dije incrédulo de lo que había leído, llevando mi vista sobre el sapo que se encontraba sobre mis piernas. –"¡¿Qué clase de broma es esta?!"
Miré sobre el techo buscando una cámara que me revelara las intensiones de ese ojidorado, mirando los posibles rincones donde podría ser un buen ángulo para aquella broma. Sin embargo, no tenía ánimos para averiguarlo y como ya había dicho que lo haría por falta de qué hacer, tomé el arrugado sapo y me lo llevé a mi cuarto, ahí lo coloque sobre mi cama buscando una señal que me afirmara lo especial que era éste ¡frío! y ¡resbaladizo sapo!. Me levanté para dar un par de vueltas en mi habitación, no era creíble lo que estaba a punto de hacer, la idea me sonó fuera de lugar, aún si cumplía con los requerimientos ¿en verdad..?... Mejor no quise pensar en eso, ya que después de todo, posible o no posible, yo había dicho que lo haría, ¡no podría desperdiciar mi regalo de cumpleaños!, así que me acerque junto a la cama tomando el sapo entre mis manos pero antes de comenter cualquier locura, miré el reloj junto a mi mesa de noche, eran las nueve con quince minutos y me sorprendí que no me haya llevado tanto tiempo el llegar a casa, pero entonces, muy decidido, lo coloqué frente a mi cara….. pero el solo mirar a ese repugnante sapo tan más feo, mis inspiración se volvió a cero, por lo que supuse que el esfuerzo sería aún mayor:
"¡vamos!, ¡yo pudo!.. ¡yo puedo!"
-"¡Oh!" – exclamé como si encontré al ser más divino en este mundo –"¡Eres tan hermoso!" "¡No sabes lo que esperé para encontrar un alma como la tuya!" "¡Te amo!" - le dije con esfuerzo.
¡Me sentí!... ¡el ser mas pendejo en todo éste planeta!, mira que estar hablando con ese sapo tan … tan más eso… me hizo creer que había perdido la razón en algún lugar durante el trayecto a casa.
Pero de repente, algo en ese animal cautivó mi atención, me pareció ver una luz dorada que resplandecía perturbando mi visión al mismo tiempo que escuche una especie de campanitas. –"Pero… ¿Qué fue eso?" – me dije alarmado. Pero aquella sensación desapareció cuando volví a encontrarme frente a mí, a esos repugnantes ojos saltones.
.
Y todavía dudoso de que lo haya imaginado me dije: "Lo voy a volver hacer."
.
.
Esperé a que el reloj me indicara que habían transcurrido media hora desde entonces, así que tomé mi sapo una vez más y dije con voz encantadora: "¡Eres el ser más hermoso!" "¡El verdadero príncipe de mis sueños!" "¡El más hermoso de todos!" "¡Hay!" "¡Te amo!"
Aquella luz que había resplandecido, brilló con mayor intensidad que antes, el sonido de de cantos y campanas parecía que me envolvía, haciendo que mi corazón palpitara de la emoción,
.
"No lo podía creer… Aquello no podría ser algo creado por Ren, ¿o sí?"
.
Pero todavía incrédulo, y algo perdido en la razón, decidí que en cada media hora exactita le hablaría a mi hermoso sapo verde....
.
.
(Media hora después)
Me dirigí a mi cama acostándome sobre ella con mi sapo en mis manos, elevándolo sobre mi rostro, le miré y le dije:
.
-"Hay momentos en la vida en la que miramos en muchas direcciones"
"Pero hay muchos otros en la que nuestros caminos se cruzan manteniendo una misma dirección"
"Tu camino y el mío están ligados en un mismo destino"
"Velaría tus sueños si me abrazas y robas con un beso, mi corazón"
.
¡Si! eso había sonado bastante cursi, pero mi sapo ni cuenta que se dio de eso, solo un cruak escuché salir de su interior.
.
.
En la siguiente media hora, coloqué a mi sapo sobre la cama y yo me quedé sobre el suelo, arrodillándome frente a él, entonces, canté la primera canción que se me vino a la mente, una de Miguel Gallardo:
.
.
Te quiero tal y como eres, con todos tus defectos,
Te quiero como nadie te ha querido,
Te quiero como el niño que hay en mí,
Te quiero tanto,
Que solo entre tus brazos soy capaz de sentir amor,
Que solo una razón..
Te quiero,
Y es todo lo que puedo comprender….
Te quiero tanto
Te busco en la penumbra triste y gris de mi habitación
Y sueño con tener tu corazón…
.
.
.
Si, aquella canción de la que no sabía bien su letra, había removido mi corazón, una letra muy profunda, y yo…se la canté a mi sapito…
.
.
Así como ésta tarugada, seguí con el proceso de transformación. No se qué chingados me estaba pasando, pero yo en cada hora exactita lo hacía al pie de la letra, tanto que prefería no comer, ni iba al baño con tal de seguir con el proceso del sapo feo.
.
Todo el siguiente día me dedique a mi sapito…
.
Asi que al día siguiente estaba tan cansado que yo creo que comenzaba a delirar con tantas palabras hermosas a un sapo verde apestoso que sin darme cuenta me quedé dormido, hundiéndome en un sueño en el que incluso ahí, yo adoraba a mi espantoso sapo arrugado.
.
¡Lo sé!, ¡lo sé!. Nunca hubiera imaginado hacer esto en mis cinco sentidos, pero lo hecho, hecho está, así que para cuando desperté:
.
.
"¡huy!... ¡Papacito!... ¡Diganme que estoy soñando!"
.... ¡HABÍA UN HOMBRE A LADO MÍO!
.
.
.
.
.
.
Ayer en mi rato de ocio lo hice, después de todo, no se me ocurre qué hacer en mi otro fic.. u.u.
No me inspiré mucho en él ¿se nota?.. Asi que si los personajes salen muy occ, disculpen, se supone que esta historia será un tanto así…. Aunque he de admitir que no creo ser nada buena para este tipo de historias…
Si no les gusta, no se apuren, desistiré en este intento… =)
.
.
