Hola Gravity Falls.

Todo empezó cuando el respetable Fiddleford McGucket decidió invitar a su sobrino Larry a su mansión durante el verano.

Larry McGucket se consideraba un chico normal de ciudad, tenía 13 años, pelo castaño, ojos azules y usaba anteojos, cuando Larry volvió a su casa recibió la noticia de manos de su padre Eugenio McGucket.

- Larry ¿Recuerdas a mi hermano el tío Fiddleford?- pregunto su padre.

- ¿Cómo lo haría si no lo vi nunca? – le pregunto Larry.

- Cierto, bueno Larry… mañana lo recordaras- le dijo Eugenio en un tono misterioso.

- ¿A qué te refieres papá? – pregunto el niño, dudoso.

- Bueno… mi hermano no confraternizo mucho con nosotros debido a que estaba medio… chiflado, pero se ha curado y te quiere ver mañana Larry.

- ¿En serio? ¡Genial! Siempre quise saber cómo era después de que me contaras todas esas historias de que era un gran científico- le dijo excitado el chico.

Eugenio se rio, aunque Larry no lo demostraba debido a que era medio tímido, el salió mucho a su tío en cuestión de amor a la ciencia.

- Me alegra que te guste hijo, te irás esta tarde y pasaras todo el verano con el- le dijo Eugenio con una sonrisa.

- ¿Todo el verano? ¡Espectacular! Así podrá enseñarme más- hablo el chico aun más excitado.

Los dos comieron con tranquilidad unas pizzas y se fueron a la parada del autobús que llevaría a Larry al pueblo de Gravity Falls.

- ¿Mama no vendrá a despedirse?- pregunto triste el niño.

- No – le respondió el padre,

Larry bajo la cabeza.

- Debido a que la veras en Gravity Falls.

- ¿¡En serio!?

- Si, y…- empezó el padre en tono preocupado.

- ¿Qué pasa papá? ¿Tiene que ver con mama?- pregunto muy preocupado el niño.

- Si, veras Larry… Gravity Falls puede sacar a relucir un lado que no sabías que tenias, o si lo sabes aun así te lo sacara.

- ¿De qué hablas? –pregunto Larry sin entender nada.

- Veras Larry, tu madre… oh vaya, llego el auto bus ¡Adiós!

El empujo a su hijo hasta que se metió en el autobús, no sin cierta resistencia de parte de Larry, el cual se giro al meterse y empezó a abrir la boca, pero justo se cerraron las puertas y en un momento su padre era solo un manchón.

Larry suspiro triste debido al no saber lo que quería decir su padre sobre su mama, y se fue a sentar en última fila.

- ¡Larry! ¿Eres tú?

Larry giro la cabeza a toda velocidad al oír esa voz, y se lastimo el cuello, al lado suyo estaba su mejor amigo Dipper Pines, junto con su hermana Mabel.

- ¡Dipper! ¡Mabel! ¿Qué hacen acá?

- ¡Vamos a visitar a nuestros tíos! – grito la excitada Mabel.

- ¿Ustedes también tienen un tío en Gravity Falls?- pregunto sorprendido Larry.

- Si, Stanley y Stanford Pines ¿Quién es tu tío? – le pregunto Dipper.

- Fiddleford McGucket- respondió Larry.

A Larry le pareció que los gemelos se sonrieron entre sí, pero decidió no preguntar.

Las horas pasaron y se volvió de noche, los tres amigos se durmieron, y cuando despertaron miraron por la ventana y vieron un cartel que decía "Bienvenido a Gravity Falls".