CON EL CORAZÓN EN LA MANO
Un joven de 25 años de cabello negro, ojos verdes y una cicatriz en forma de rayo,corría por los pasillos del ministerio buscaba a una ojimiel.
Su historia de amor, había comenzado sin darse cuenta, se habían conocido hacia 15 años cuando habían entrado al colegio de magia, habían compartido innumerables aventura, tristezas y alegrías.
Después de los once años, nunca había estado solo… sin embargo, se había condenado a la soledad por culpa de Voldemort; siempre temiendo, siempre huyendo… sin embargo, había esperanza sus amigos, la orden, Dublembore, su padrino…ELLA.
Pasaron muchos años antes que él se decidiera hablar de sus sentimientos y algunos más antes de que empezaran una relación como la que tenían o tuvieron… o algo así; para su desgracia y mayor felicidad, su relación se había intensificado en los últimos 5 años, donde habían pasado de amantes, a novios por un tiempo, después paso ese pequeño tropiezo de él, después la muerte de sus suegros, su rompimiento, su regreso fallido, los nuevos intentos… y luego esto, no eran amantes, no eran amigos, no eran novios… eran, eran… no sabia que eran, ese tipo de relación en un principio no le molesto; es mas ,le era divertido, pensó que solo era por un tiempo mientras todo sanaba pero no había pasado, ahora sus miedos se estaban cumpliendo, ella se alejaba constantemente y no sabia por qué, no quería perderla, mientras el se trataba de acercar rompiendo sus más íntimos miedos; ella evitaba acercarse mas.
Su peor miedo lo alcanzaba constantemente; esa palabra que muchas veces sonaba armoniosa y muchas veces poética, a él lo aterraba; había vivido muchas noches consolándose por estar completamente solo en este mundo donde le esperaba un sufrimiento continuo y le condenaba a la soledad.
Sus pensamientos fueron rotos por que a lo lejos vio la silueta de su castaña, de la mujer que había cambiado su vida. Lo único que pudo hacer es acercarse a ella y abrazarla como si fuera la última vez.. de sus labios salió lo que su corazón gritaba, le dijo al oído:
-Sácame del abismo donde estoy, sálvame-
-Harry!!- dijo ella con sorpresa.
-Quédate conmigo…- dijo acompañado de un hondo suspiro- acompañarme en la travesía de mi vida-
-Pero Harry estamos juntos…-dijo ella con seguridad, él la aparto lo necesario para ver sus ojos.
-No es cierto tu cuerpo esta aquí, pero tu mente y corazón no se donde están. Dejame estar a tu lado, dejame compartir tus penas, quedate a mi lado para siempr, dejame ser tu apoyo. Permiteme ser parte de ti, de tu alma, no solo el compañero ocasional que soy.
Se que he tenido errores y me arrepiento de eso, sin embargo, dejame reparar el daño que te hice, dejame sanar tus heridas, dejame vencer tus miedo, dejame acercarme a ti. Dejame darte mi corazón, deja que te entregue lo que soy, dame la oportunidad de ser feliz y hacerte feliz, no te arrepentiras. Solo quiero tener una vida a tu lado.
Si aceptas ser mi esposa, te prometo que algunas veces pelearemos, que otras tantas querras divorciarte de mi porque no te entiendo, en otros momentos tal ves nos gritaremos; sin embargo, siempre te amare, siempre regresare a ti… por que lo eres todo…por favor CASATE CONMIGO?
-Harry- Ella lo miro con extrañeza como sino entender cada palabra que había salido de la boca de su amante, se quedo estática, tratando de comprender, de entender. Cada segundo para el era una tortura que amenazaba con llevarlo a la locura.
-YO, yo… Harry… no puedo- Su mente hizo que ella diera vuelta y empezara a caminar, su corazón luchaba para llevarla a los brazos del amor de su vida.
El se sorprendió, quiso detenerla solo logro tomarla de la muñeca, su chica como muchas veces la nombraba hizo el ademan para que la soltara, el no pudo retenerla las cartas estaban echadas y el había perdido, solo soltó el amarre de sus dedos convirtiendo todo en la ultima caricia que le daría.
El salió derrotado ya no era Harry Potter, solo era un ser humano que tenia que respirar. Cuando salió a las calles de Londres, quería desaparecer.. quería borrar el dolor que lo consumía, el clima que arreciaba en la ciudad era reflejo de su estado interno, el viento era frio lastimaba la piel era la inminente advertencia de una nevada, él empezó caminar necesitaba desaparecer solo tomo una de las tantas calles y se mezclo entre la gente, ahora era uno de ello…
___________________________________________________________________________________
CONTINUARA….
Por favor dame tu opinión. Que final te gustaria??
HP no me pertenece, le pertenece a JK Rowling, este escrito fue hecho con el único fin de entretenimiento.
