Esta historia ha sido creada por DioXa y por Saiya Elite de forma conjunta. Esperamos que la disfrutéis, y estaremos encantadas de recibir vuestros comentarios, opiniones, críticas y demás.

Avisamos que el fanfic contendrá escenas algo fuertes y lemon bastante explícito, por lo que si a alguien no le agradan este tipo de historias, le invitamos muy amablemente a que no la lea.

Capítulo 1:

Instintos sexuales

Aquella noche era igual que las otras, sin nada que la haga especial o diferente a las anteriores. Ya había pasado un mes exactamente después del juego de Cell. La vida había vuelto a ser la misma para quienes no habían sufrido alguna pérdida significativa, pero ella¿qué es lo que había perdido? .-Absolutamente todo.-Se respondió la esposa del guerrero que sacrificó su vida para defender el planeta Tierra.

-Otra vez te marchaste de mi lado..Goku.-Milk estaba asomada en una ventana contemplando la oscuridad de la noche y también la gran cantidad de estrellas que cubrían el firmamento, ya casi había olvidado lo que era la felicidad, tanto tiempo sola había hecho que su alma se marchite poco a poco, como una flor cortada y abandonada a su suerte.

-Si tan solo estuvieras aquí.-Habló la mujer de cabello negro con la voz entrecortada y bastante débil.-Te diría una vez mas que te adoro.-Puso su mano en el pecho donde Goku la colocó por última vez, antes de marcharse para siempre.

En la montaña Paoz reinaba la calma, lo único que rompía el silencio eran algunos insectos de vida nocturna, que cantaban en la noche y los murciélagos que sobrevolaban el lugar cuando aparecía la ansiada oscuridad.

-Aún no puedo entender..¿como fuiste capaz de dejarnos abandonados?.-Milk sentía que el pecho le dolía al recordar aquellas escenas que marcaron para siempre su existir.-¿No nos querías?, preferiste estar muerto, eso fue lo que me dijeron.-Ella colocó su mano izquierda en su rostro cubriendo sus ojos y evitando emitir sonoros ruidos de llanto.-A veces siento que te odio, pero me doy cuenta que es tan solo una inútil y falsa máscara, porque solo kamisama y mi corazón son testigos de mi amor.

Su mano descendió hasta su pierna e inmediatamente cobró fuerzas para evitar seguir lamentándose.-Maldito seas Son goku.-La pelinegra se puso de pie y avanzó hasta la parte mas alejada de la sala y comedor.-Solo vivo por tí, hijo mío.-Milk se repetía constantemente esas palabras que la hacían sentir motivada para vivir un día mas en esa oscuridad en la cual estaba encerrada. De inmediato llegó a la habitación de su hijo, aquel que crió con tanto amor y dedicación y que ya estaba pasando de la niñez a la etapa adolescente."Mi Gohan, como vuela el tiempo y justo cuando necesitas la presencia masculina, para tu formación de niño a hombre".-Milk agachó su cabeza, ella tendría que ser madre y padre a la vez, aunque siempre lo había sentido así, ya que Goku no era un buen apoyo para la educación de su descendencia.-Una vez mas tengo que sacar fuerzas de mi espíritu.-La viuda abrió la puerta muy despacio, notando inmediatamente que estaba la luz apagada y que su niño estaba acostado en la cama, cubierto por las frazadas y con los ojos cerrados, señal de que estaba durmiendo.

Por un momento dudó en acercársele por temor a despertarlo, pero el amor y la costumbre que tenía de besar a su hijo todas las noches pudo mas. Muy despacio se dirigió muy cerca de la cama y posó sus labios en la mejilla de su hijo, que dormía como un ángel. "Me alegra que duermas en paz, buenas noches.-Milk rápidamente lo cubrió con mas frazadas y se dirigió a la salida, cerrando la puerta con suavidad.

-Buenas noches mamá...-Susurró el adolescente que yacía acostado, abriendo apenas sus ojos.-Espero que no llores esta noche, tal y como lo has hecho desde que murió mi papá...-Nuevamente los cerró para intentar descansar, estaba tan debilitado y cansado por tanto estudio.-Papá, te quiero a mi lado.-El niño agarró las sábanas fuertemente y al sentir sus ojos humedecerse intentó controlarse.-No debo llorar, sólo tengo que ser fuerte y superarlo.-Intentó relajarse respirando profundamente.-Debo acordarme de los buenos momentos.-Gohan sonrió y poco a poco fue hallando la paz y la felicidad que tenía en sus recuerdos pasados, en donde su padre aún seguía vivo.

Un buhó comenzó a realizar algunos ruidos e irrumpir la tranquilidad de la noche.-Mañana tengo que madrugar, realizaré las compras de la semana y conseguiré los útiles escolares que le faltan a Gohan.-Habló tiernamente la mujer dentro de su alcoba, deshaciéndose de sus botas y el largo vestido de color amarillo, quedando en nada mas que en ropa interior. Buscó con afán en su closet alguna pijama para empezar a dormir, mas no encontró una limpia.-Uff había olvidado que hoy hice lavado general.-Replicó Milk.-Iré a buscar en...en...el closet de Goku, haber si tengo alguna limpia.-La joven comenzó a dirigirse muy lentamente hacia el guardarropas de su fallecido marido. Ha lo que tomó la puerta, supo enseguida que estaba nerviosa, debido a que sus manos le temblaban y sus piernas no eran la excepción, su corazón le latía a mil, su nudo en la garganta aparecía nuevamente, acompañado de la vista nublada que tenía cuando lloraba.-No, otra vez no, esta vez tengo que lograrlo.-Se dijo así misma y lo abrió de golpe.-Goku..-Dijo una vez más de manera sumisa el nombre del saiya.-Cuantos recuerdos.-Sus ojos se agrandaron al ver la ropa de él, su típica vestimenta de combate que siempre cargaba y de la cual no se desprendía, a menos que se tratara de la hora del baño o la de dormir.-Agarró el traje naranja y lo condujo hacia su nariz, inhaló la frescura que poseía y captó de inmediato el olor de su amor.-Lo usó, se que lo usó y mi Goku lo volvió a guardar aquí.-Sonrió ella con ternura, acariciando la parte de la inscripción de kamesenin.

La mujer comenzó a dar media vuelta, dirigiéndose nuevamente hasta su cama, olvidando que buscaba una pijama.-Te extraño.-Soltó esas palabras con una voz totalmente diferente a la habitual y apegó la ropa de su marido a su rostro con mucha fuerza, causando incluso que le doliera la presión. Cayó de golpe acostada sobre el colchón y con una sonrisa no muy típica en ella, al menos no para quienes no la conocían donde no daba el sol, comenzó a besar la tela con fervor, como si estuviera embriagada del olor que desprendía aquella prenda, luego achicó sus ojos y dejó el uniforme naranja a un lado.-Tengo tantas ganas de..-Su mano comenzó a recorrer su vientre, ombligo y por último la introdujo dentro del interior, causando que ella enseguida suelte un suspiro y empiece a otorgar movimiento a su extremidad.

-Ah... ah...-Soltó unos leves gemidos de satisfacción, para luego acariciar su clítoris de una manera circular y bastante suave, había abierto sus dos dedos e introdujo su clítoris en ese espacio, cerrándolos inmediatamente, para provocar un estímulo en esa parte que daba placeres gratificantes. Había seguido explorando su vagina hasta que decidió colocarse el dedo índice en su entrada perfectamente lubricada. Inmediatamente al empezar a penetrar, pudo sentir que el calor aumentaba cada vez más en su cuerpo y ya no era víctima del frío que había a esas altas horas de la noche.-Su dedo avanzaba cada vez mas, sintiendo como su entrada se habría para dar paso a su visitante.-Si..ahh...si.-Gemía Milk cuando abrió las piernas y dispuso poner dos dedos más allí dentro.-AHH...AHHHH...AHHHH.- sus dientes se apretaban fuertemente y su cuerpo estaba rendido al placer que ella mismo se estaba otorgando. Una vez que dejó de estimularse en la zona intima femenina, su mano ascendió hasta sus pechos y comenzó a acariciarlos fuertemente, ya no quería algo despacio sino algo mas violento, algo mas salvaje. Tomó su ceno derecho y lo alzó para poder lamer el pezón. Primero le dio una rápida lamida, para después comenzar a succionarlo completamente, con tanto afán como si de un chupón se tratara.

Luego de eso, tomó la almohada y la rozó en medio de sus piernas, comenzó a realizar movimientos rítmicos bastante acompasados, seguidos de un sube y baje de caderas, provocando gran satisfacción y una sonrisa llena de lujuria. Sin darse cuenta, cayó rendida víctima del cansancio.

Y a la mañana siguiente...

El sol daba indicios de que ya finalizó la noche y era un nuevo día para levantarse e iniciar las actividades matutinas. Levemente los rayos solares se infiltraron por las cortinas púrpuras de la habitación, consiguiendo así molestar a la joven madre que parecía no querer despertar.

-Um..um.- Su rostro se movía de izquierda a derecha y sus cejas se fruncían al recibir la primera luz del día.-¿Que...que hora es?.-Se preguntó así misma y trató de enderezarse poco a poco. Abrió sus negros ojos de manera interrogante al notar su cuerpo completamente desnudo, lo que hizo sobresaltarla enseguida, dando un salto sentada y con una expresión aterrada en su rostro.

-¿Que ha pasado aquí?.-Preguntó Milk nerviosa, pensando en que alguien más estaba en su habitación. Se puso de pie y tapándose los pechos instintivamente, agarró la frazada mas cercana para cubrir su cuerpo desnudo.-Sus pupilas miraban cautelosamente cada rincón de la habitación, en eso vió el traje de Goku encima de la cama y pudo recordar los acontecimientos de la noche anterior...

-¡¡¡Ahhhh!!.-La viuda soltó sin querer la cobija y miró impactada sus manos.-¿Que he hecho?.-Se desplomó en el suelo perdiendo fuerzas.-No puede ser¿como pude hacerme yo misma esto?.-Unas lagrimas cristalinas se derramaban de sus ojos, cayendo inevitablemente al piso de madera.-No, todo es por tú culpa.-Ella comenzó a golpear con insistencia el lugar donde habían caído sus lágrimas.-Ahora he bajado al nivel de una ramera, aquellas que no tiene ni el mas mínimo respeto por su cuerpo.-Sus labios temblaron al mencionar esa palabra.-Ahora yo...soy..-

En eso sintió que alguien tocaba la puerta y sin salir de su impresión hizo caso omiso a los llamados.

-Mamá, mamá ¿estas bien?.-El muchacho de cabellera negra llamaba a su madre preocupado.-Mamá responde por favor ¿te sientes bien?.-Volvió a formular la misma pregunta.

La joven al notar que los golpes en su puerta se hacían mas fuertes y constantes, salió de su estado perturbado.-Gohan, estoy perfectamente, solo tuve una pesadilla.-Dijo Milk con la voz pasiva tratando de convencer a su único hijo.

-¿Seguro?.-Peguntó dudando de la respuesta de su progenitora.

-Claro que sí, ahora vete a bañar y empieza a estudiar , que yo en unos momentos empezaré a preparar el desayuno.-Se puso de pie con dificultad y ordenó un poco su largo cabello.

-Bien mamá, nos vemos después.-Gohan caminó hacia su habitación, no sin antes dar un último vistazo a la puerta. "Mamá, se fuerte".

La viuda no paraba de llorar, se sentía tan decepcionada de ella misma.-Soy un fracaso, tanto como madre y mujer.-Con paso cansado se introdujo dentro de la bañera y abrió la llave.

-Esto no se volverá a repetir nunca mas.-Su puño se cerró con mucha fuerza.-Si vuelve a ocurrir yo misma me impondré un castigo.-Habló muy decidida mientras tomaba una esponja y empezaba a eliminar todos los restos de la secreción desperdigados en su abdomen y muslos.

-Una mujer decente no hace esas cosas.-Se pasó mas fuerte la esponja en sus pechos, causando que estos se enrojecieran completamente.- Si sigo con estos comportamientos tan denigrantes no seré un buen ejemplo para Gohan.-

Milk se introdujo completamente en la bañera, intentando olvidar la noche anterior y seguir con su vida como si nada hubiera sucedido.

CONTINUARA...