Fusión de Vidas
Perspectiva de Jasper
Mi Vida se ve Afectada con Cambios Inesperados
Después de ir al hospital, regresamos a casa un poco cansados, Rosalie solo tenía un pequeño resfriado, aunque me sentía bien por su estado no podía evitar sentirme enfadado; ¿la razón? Simple, el doctor no me da buena espina. Carlisle luce como un hombre recto, honesto; y lo peor es que a mi madre no le es indiferente. Desde que ellos cruzaron palabras noté que ese hombre estaba fascinado con Esme, mi madre, por supuesto no puedo culparlo, ya que mi madre es hermosa, ¡ella no tiene la culpa de que los hombres se asombren al ver tal belleza! Pero con este tipo, no pude evitar sentir coraje, y por qué no decirlo, también sentí celos. Con otros hombres no había problemas porque mi madre ni siquiera los volteaba a ver, pero con Carlisle sucedió todo lo contrario, ella se maravilló tanto con él que no hacía otra cosa más que hablar del Doctor Cullen.
-¡Maldita la hora en que te enfermaste Rose!
-Tranquilo hermanito, puedes seguir haciendo todo lo que hacías… la enferma soy yo, ¿Lo recuerdas?- dijo Rosalie con enfado.
-No me refiero a eso, ¿viste como veía ese tipo a Esme?- le contesté caminando de un lado a otro, un tanto exasperado.
-¿A quién te refieres? ¿Y qué tiene que ver el hecho de que me enfermara?
-Es obvio, ¿no?… ¡tu doctor no le quitaba la vista de encima a mi mamá!- mi voz se elevó una octava, sin darme cuenta.
-¡Jasper!... ¿Estás celoso del Doctor Cullen?- mi hermana se estremecía de la risa al decirlo, que mi enfado aumentó de nivel.
-¡No es gracioso!, además Esme… tú la escuchaste, no paraba de hablar maravillas del doctor: "El doctor Cullen es muy humano, ¿verdad?"… ¿Qué importa si él es un humano, un vampiro o un licántropo? ¡A Esme nunca le ha importado nada de los hombres que la buscan!
-Ay, hermanito, te ves lindo enojado… pero no tienes porque estarlo- seguía divirtiéndose con mi actitud protectora, presente en cualquier hijo menor.
-Aunque pensándolo bien, no es muy mala idea, ¿has visto a su hijo? Creo que se llama Emmet…- ¡Oh, oh! cada vez que Rose hace un comentario al aire sin terminar de articular su plan, es para asustarse…
-¿Qué estás pensando?
-¡Ya lo verás!... – ella se dirigió a su recamara, mientras que yo me quedé en la sala, ensimismado con mi coraje.
Más tarde me di cuenta de que mi madre se había dado una ducha, se había maquillado y se había puesto un vestido hermoso. Apenas iba a preguntarle si iba a salir, pero el timbre de la puerta sonó. Y mi madre no pensó en abrir la puerta.
-Pase doctor, por aquí- ¿doctor? ¿Qué hace él aquí?
-¿Su hija empeoró?
Pero claro, esto tenía que ser obra de Rose… solo ella haría algo así para salirse con la suya.
Esme dirigió al doctor a la recamara de Rose. Yo, por supuesto que los seguí. Y ahí estaba ella, en su cama haciendo su mejor actuación de moribunda.
-No sé qué pasó, doctor, cuando llegamos estaba bien –mi madre sí sonaba preocupada, ella ni siquiera sabía que era un plan de Rose-, incluso creo que escuché que discutía con Jasper, como de costumbre.
Mientras tanto, el doctor se acercó a mi hermana y empezó a checar sus signos vitales.
-No hay de qué preocuparse, Esme, tu hija está perfectamente.
¿Esme? ¿Por qué la llamaba por su nombre? ¿Y cómo se atrevía a hablarle de "tu"?
-Oh, ¡gracias a Dios!
-De cualquier modo, ella debe cuidarse bien.
-Yo me encargaré de eso- Mi voz sonó con un tono de ironía sin pensarlo, pero al mismo tiempo me gustó. Rose puso los ojos en blanco.
-Eh, ¿Esme? -el doctor vaciló un momento-, me gustaría hablarte un momento.
-Por supuesto, doctor, pase por…
-Carlisle, llámame Carlisle –la atajó. Está bien, ¡confirmado! Rose tenía un plan pero… ¿El doctorcito estaba involucrado en dicha trampa?
Ellos se encerraron en el pequeño despacho. Y ya que no podía escuchar nada, me metí a la recamara de mi querida hermanita.
-¿Qué te traes entre manos?
-Jasper, creo que nuestra madre sí te enseñó a tocar las puertas, ¿o no?- no podía creerlo, hace un momento estaba moribunda y ahora estaba sonriente, mostrando unos dientes perfectos.
-¡Ya escúpelo!
-Mira, piénsalo… El doctor es un buen partido para Esme, y además ¡es muy guapo!
-¿Qué? ¿Quieres juntar a Esme con ese… doctor?
-Esme tiene derecho a ser feliz, y tú mismo lo dijiste, ella no paraba de hablar de él…
Aún no terminaba su monólogo cuando yo cerré la puerta de un golpazo detrás de mí. Alcancé a escuchar que Rose refunfuñaba en su recamara, y me lanzaba un sarta de groserías. No le hice caso y me dirigí a la cocina, y en el trayecto me encontré a Esme que estaba despidiendo ya al doctor en la puerta.
-Claro que sí, Carlisle, nos vemos mañana.
-Buenas noches, Esme.
-Buenas noches.
Esto me estaba sacando de mis casillas, ahora también Esme le hablaba de "tu" al susodicho.
-¿Saldrás con el doctor, mamá?
-¡Oh! ¡Jasper!, me asustaste, no te sentí llegar.
-No me has respondido…
-En realidad, cariño, veremos al doctor y a toda su familia.
Esperen un momento, ¿veremos? Eso es en plural, ¿pretende que mi madre, mi hermana y yo estemos en convivencia con ellos? Ja, yo con el doctor, ¡bonita broma!
-¿Qué quieres decir con "veremos"?
-Sí, hijo, Carlisle nos ha invitado a un partido de baseball, en el cual va a jugar Emmet, su hijo mayor.
-¿Escuché bien mamá? ¿Conoceré al hijo del doctor Cullen?- Rose se emocionó ante la perspectiva de convivir con… ¿cómo dijo Esme que se llama?
-¡Rosalie! ¿Qué haces fuera de la cama? ¡Debes guardar reposo si quieres ir al partido mañana!
-No te preocupes mamá, Rose irá aunque tú se lo prohíbas.
Nos dirigimos una vez más a la recamara de mi hermana para que ella se recostara y su salud mejorara, el cual estaba perfectamente.
-Hijos, mañana será un gran día, iremos a ese partido con Carlisle y sus hijos, como les dije Emmet, el mayor, es parte del equipo. Alice y Edward también estarán ahí, ellos son los hijos menores de Carlisle.
-¿Y para qué queremos ir? El baseball me gusta pero no estoy seguro si quiero ver un partido con ellos- mi humor no cambiaba ni siquiera porque veía a mi madre muy entusiasmada. De hecho, eso me estresaba más.
-¿Alice?... Bueno Jas, quizá tu también encuentres algo interesante después de todo- mencionó Rose con la esperanza de que yo accediera.
-Claro que no, pero está bien… ¿A qué hora es el partido?
Continuará…
