Este fanfic es solo de puro ocio~ Kill la Kill ni los personajes son mios, si no de su respectivo autor~

Además de que es mi primer fanfic de Kill la Kill... Es corto, pero solo quería escribir de mi pareja favorita jeje~ Así que, disfruten.


Estaba solo en una espesa oscuridad. No había nada más que el mismo en esa maldita negrura fría y cruel. Su cuerpo moreno parecía brillar. Escuchaba su respiración entrecortada, hasta creía que podía escuchar el cómo su sangre paraba por sus venas… Y un sollozo.

¿Un sollozo? ¿Alguien estaba llorando? ¿Quién podría ser aquel que está en esa "habitación"junto con él?

– ¿¡Gamagori sempai?! ¡Gamagori sempai! –

¿¡ESA ERA MANKANSHOKU!? Corrió como nunca, buscando a la pequeña chica. ¿Estaba llorando? Repentinamente el lugar se iluminó y vio una escena que él había vivido inconscientemente. Fue cuando protegió a la castaña de esa chica loca, Harime Nui. Ella peleaba con Matoi mientras la pequeña estaba a su lado, evidentemente, llorando de una manera algo extraña. Todos veían hacia él con horror, mas segundos después volvieron a la lucha.

–M-Mankanshoku…–

– ¡Sempai! ¡No mueras aún! –

Quiso abrazarle, detener sus grandes lágrimas, quiso parar el mundo para protegerla nuevamente a pesar de saber que no iba a morir. Pero verla así…definitivamente era algo que no querría ver nuevamente en su vida. Ella era…tan especial para él.

– ¡Mankanshoku! ¡Yo estoy vivo! ¡Mira detrás de ti y protégete! –

Pero la castaña no le podía escuchar, solo lloraba y decía su nombre "Gamagori Ira; Gamagori sempai; Sempai" definitivamente, eso era la peor tortura en el mundo.

Gritó, trató de tocar su hombro, su espalda, trató de hacer de todo, pero el tiempo justo cuando Mankanshoku Mako lloraba sin parar por la pérdida del rubio.

–¡MANKANSHOKU MAKO! –

No había respuesta. Tomó aire y con todas sus fuerzas gritó.

– ¡MAKO! –

Todo volvió a la normalidad, su pulcra habitación seguía inundada de oscuridad a excepción del tenue brillo de su reloj alarma. Miraba a todo su alrededor con miedo, ¿realmente era su habitación?

– ¿Ga-Gamagori? ¿Todo está bien? – Aquella vocesita con tono preocupado hizo que volteara hacia abajo. Se sonrojó y abrazó a la pequeña criatura que estaba a su lado. – ¿Se-Sempai? –

–Estás bien, ¿verdad? No estás triste, no estás llorando…yo voy a protegerte de todo, Mankanshoku, te protegeré y no dejaré que vuelvas a llorar nunca en la vida…–

– ¿Pasó algo, sempai? –

–Te amo, Mankanshoku Mako–

–Y-Yo…– Suspiró y sonrío, olvidando el porqué el moreno despertó así –¡También te amo, Gamagori Ira!–

Sonrió y definitivamente se juró que nunca, por nada del mundo, le protegería, no importaba si estaba vivo o muerto, él le protegería siempre y no perdonaría a aquel que hiciera llorar a aquel dulce ser llamado Mankanshoku Mako.