No quiero ser tu chica
-Te Amo Letty -. Murmura contra mis labios mientras acaricia mi cara.
Nos besamos, mientras él desliza su boca sobre mi vientre desnudo, sus manos siguen sus pasos y hacen lo mismo, se deslizan sobre mi vientre, siento como su mano toca mi vulva y desliza un dedo entre mis labios, yo empiezo a jadear contra su boca, mientras lo que parecería una corriente eléctrica recorre mi cuerpo.
Muerdo los labios de Dom mientras introduce un segundo dedo en mi vagina, mis paredes vaginales aplican presión sobre sus dedos impidiéndoles salir o moverse con facilidad, como aprisionándolos en mí…
Me tortura moviendo sus dedos dentro y fuera mientras estimula mí clítoris, me enloquece, no deseo que pare.
Después de unos minutos la presión que sentía por fin se libera, el grito que sale de mi boca se combina con mis gemidos, mientras mis manos se sujetan a sus brazos con desesperación.
Busca mis labios con desesperación como si deseara ahogar mis gemidos, mientras saca sus dedos de mi interior.
-Seguimos?-
-Por favor- Murmuro, bajando mi mirada y encontrándome con los dedos de Dom llenos de mis fluidos y su pene completamente erecto, así que pienso en tomar la delantera en este juego.
Me siento sobre él, frotando sin ningún pudor mi cuerpo sobre él suyo, lo deseo tanto como él me desea a mí.
-Por favor te necesito, ahora- Ruega
Sé que lo estoy volviendo loco con el movimiento de mis caderas, sé que lo vuelvo loco por el ritmo de sus jadeos, y yo estoy loca por su amor pero quiero seguir jugando a esto.
-Aguanta, no cedas, quiero seguir jugando a esto- Murmuro mientras me inclino hacia delante y lo beso.
Se ríe, coloca sus manos sobre mis caderas y seguimos el juego por unos segundos más, hasta que posiciono la punta de su pene donde minutos antes estaban sus dedos, con sus manos roza mi trasero, mis caderas, me penetra lentamente, haciendo vibrar cada célula de mi cuerpo y estimulando mí clítoris con cada movimiento, nos movemos a la par, el placer y la excitación está en su máxima expresión, el ritmo de nuestros cuerpos esta en sincronía, nuestros gemidos se vuelven más salvajes que humanos, inconscientemente arqueo mi cuerpo al llegar al clímax, sé que Dom también ha llegado al clímax porque puedo sentir su semen expandirse en mi interior, mi cuerpo cae sin fuerzas sobre el suyo, nuestras respiraciones son agitadas, me dejó caer al lado suyo, giramos para encontrarnos frente a frente intentando controlar la respiración.
Durante las siguientes horas invertimos los papeles del juego un par de veces más, hasta que Dom termina agotado y duerme.
Me quedó observándolo en silencio, mientras acaricio su cara, besándolo y cuidando de no despertarlo.
Lloro en silencio mientras coloco mi mano sobre su pecho y la suya sobre el mío, nuestros corazones están conectados, no hay diferencia en nuestro latir.
Por último antes de salir de la cama, inclino mi rostro y beso su frente:
-Sé que no entenderás esto, pero sé que es lo mejor-
Me cambio, salgo de la casa, subo al auto y comienzo a manejar.
Estamos bien, estamos mal, es difícil de explicar, las cosas están fuera de mi control, intento controlar mi respiración, mi corazón pesa, es como si me estuviera ahogando y el agua se volviera profunda, como si tuviera que decidir entre nadar o hundirme, sé que aún queda un largo camino por andar, mi cuerpo ésta débil, estoy cansada, sé que mi cuerpo se ha vuelto frío y transparente, no sé si logre llegar a fueras de la ciudad, lo lograre? no lo sé, pero juro que lo intentare o al menos moriré intentándolo.
No diré que no he intentado que esto funcione, porque si lo he hecho de mil formas y simplemente no está bien, esto me está matando esta noche.
Él no puede hacerme sentir bien así que decidí que… No quiero ser más su chica, no más, no estoy viviendo bien.
-No quiero ser tú chica Dom, no más- Repito mientras manejo lejos de la cuidad.
