Notas del Traductor: Esta es una secuela no lineal del Oneshot, "Después de la cueva" de la misma autora, LISELLE129, es su primera historia de varios capítulos con una buena aceptación, superando los 100 reviews. (A decir verdad, la mayoría de sus historias de larga duración, han superado con facilidad esta barrera).

Post Data: Estaré Publicando junto con esta historia, el Oneshot, "Después de la cueva" o "Alter the Cave" su primer fiction en la sección de Atla en ingles, que es como una pequeña introducción a esta historia, claro sin afectar la continuidad de la una o de la otra.

LA HISTORIA NO ME PERTENECE, LA TRAMA, LOS HECHOS Y DESENLACES AQUÍ MOSTRADOS SON AUTORIA DE LISELLE129, YO SOLO SOY UN SIMPLE FANATICO SUYO, Y DE LA SERIE.

Disclaimer: No poseo Avatar: El Ultimo Maestro Aire

Notas del Autor: Culpo por esto a MyrmidonGuy, no sabia que mi musa tomaba peticiones hasta ahora, de cualquier forma, esta idea vino a mi hace un tiempo, estaría clasificada como AU por ahora, aunque posiblemente se convertirá aun mas al continuarla, pero esencialmente tiene una base Canon a partir del episodio "Regreso a Omashu", iniciare con algunas "escenas perdidas" de ese episodio y continuare en adelante a partir de allí, también asumo que los eventos de mi Oneshot, "Después de la cueva" han ocurrido, pero no es necesario leerlo para poder entender esto.

No he visto todos los episodios, así que me disculpo por adelantado si existen inconsistencias.

Omashu Re-visitado

Aang, el último maestro aire y actual Avatar, caminaba por el mundo de los espíritus buscando a alguien en particular. Desde que el y sus dos amigos, la maestra agua Katara y su hermano Sokka, tenían que esperar a que anocheciera para infiltrarse a hurtadillas en la ciudad de Omashu, decidido que lo mejor era adentrarse al mundo de los espíritus en busca de la respuesta a una inquietud que había estado molestándole.

"¿Buscabas por mi, joven Avatar?" Súbitamente, el más reciente fallecido Avatar aparecía frente a el, logrando que Aang se inclinara en señal de respeto.

"Si, Avatar Roku, tengo una pregunta sobre el estado Avatar, recuerdo me dijiste que solo se desencadenaría cuando este sufriendo un peligro mortal."

"Cierto"

"Pero, han existido dos ocasiones en las que algo mas le desencadeno, no quiero que vuelva a suceder nuevamente, pero estaba esperando que pudieses explicarme la razón"

"Bien, háblame de esas dos ocasiones." Comento el Avatar Roku mientras comenzaba a caminar pensativo, logrando que Aang se moviera de inmediato para mantener su paso.

"La primera vez fue en el templo del aire del sur, cuando vi…" Aang se detuvo, aun en espíritu encontró bastante difícil el expresarlo en palabras, al menos, el se las arreglo para mencionar el nombre de su mentor. "El cuerpo de Gyatso, y luego en la ultima vez, una armada entera de maestros tierra estaban atacándome, pero no era suficiente. Solo cuando la vida de Katara estuvo en peligro entre en el estado Avatar"

"OH si" murmuro Roku, "Creo que puedo explicarte, cuando amas a alguien, esa persona efectivamente pasa a ser una extensión de ti mismo, en muchos casos, encontraras que la seguridad de otros importa mas que la tuya propia"

Aang pensó lo dicho, el ciertamente amaba al monje Gyatso; el era el único padre que Aang ha conocido, El definitivamente sintió que una parte suya había muerto el día que descubrió que Sokka y Katara tenían razón acerca de que su gente había sido aniquilada. Pero eso significaba…

"¿Que amo a Katara?" Exclamo Aang sorprendido deteniéndose repentinamente, Roku volteo en su dirección para observarle.

"¿Por supuesto, que no lo sabias?"

Aang considero, pensó acerca de todas las cosas que sentía hacia Katara, aun cuando ella estaba presente o ausente, intentando colocar la sombrilla de amor debajo de todas, todo parecía encajar.

"Si, creo que si lo sabia" se detuvo de nuevo. "¿Acaso tiene que sentirse tan horrible?"

Roku soltó una carcajada, la primera y más genuina carcajada que ha escuchado de su predecesor, logrando que se preguntase a si mismo que habrá sido tan gracioso.

"Si, es horrible, y maravilloso, al igual que hermoso y terrible," Comento Roku mientras se recuperaba, "El amor compromete lo mejor y lo peor de todo lo que nos hace humanos. Al igual que el estado Avatar, nos provee tanto de grandes fuerzas, como de gran vulnerabilidad"

"¿Acaso ella me ama?" Pregunto Aang deseando saber.

"Eso es algo que tendrás que averiguar por ti mismo"

Aang asintió, el había esperado esto, pero igual tenía que preguntar.

"Permíteme daros un consejo antes de que te marches" asintió Roku pensativo, "Acepta la fuerza de tu amor, pero también se conciente de sus debilidades."

Los dos Avatar, unidos a través del tiempo, se inclinaron el uno al otro en señal de respeto, antes de que Aang regresase a su cuerpo.

Cuando abrió sus ojos Aang observo a sus amigos, Katara y Sokka sentados cerca de él, mirando hacia el exterior, intentaban parecer casuales, pero Aang podía ver la sutil alerta en sus posturas, sonrió para si mismo ante su sobreprotección, desde que el príncipe Zuko había capturado su cuerpo mientras su mente estaba afuera, los hermanos han sido mas atentos sobre sus venturas en el mundo espiritual.

Aang intento tomarse unos minutos para observar a Katara en la luz de su nuevo entendimiento, pero sabía que dentro de poco ellos notarían que estaba moviéndose, por lo que decidió dejarlo aun lado por ahora.

"Hey, estoy de vuelta" comento casualmente, ellos voltearon de inmediato en su dirección.

"Hola, ¿obtuviste las respuestas que necesitabas?" Pregunto Katara.

"Si" respondió Aang, sin elaborar demasiado por obvias razones, Katara parecía dispuesta a presionar un poco para conocer más, pero era demasiado educada para hacerlo, y como siempre, Sokka no estaba demasiado interesado en lo espiritual, sino en entrar en acción.

"¿Entonces podemos irnos ahora?"

"Claro" asintió Aang. "Hay una entrada secreta…"

Aang los lidero por el sistema de alcantarillas de la ciudad, encontrándose eventualmente con la resistencia subterránea, (intento de broma). Sokka saco a relucir la brillante idea de sacar a todos de la ciudad haciéndoles aparentar sufrir una especie de plaga. Y cuando estaban aplicando los succionadores de alcantarilla a los Omashenses, Aang noto que Katara estaba retirando uno de ellos a un hombre de joven apariencia.

"¿Qué hace una chica linda como tu en un lugar como este?" Pregunto el hombre del reino de la tierra, era una línea antigua, pero obtenía el efecto deseado – Katara se sonrojo ligeramente y observo hacia otro lado.

"Es una larga historia" Respondió con timidez.

"Me agradaría escucharla alguna vez"

Un surgimiento irracional de celos se esparció a través de Aang, una mano sujetaba firmemente su bastón, mientras que la otra se convertía inconscientemente en un puño, y antes de que pudiese actuar por cuenta propia, sintió sobre sus hombros una mano restrictiva.

"Tranquilo" Murmuro Sokka sobre el. "Yo soy su hermano mayor, este tipo de cosas es mi trabajo."

"Tu no entiendes." Aang algo enojado intento liberarse de la mano, solo logrando que el agarre del guerrero se estrechara aun más.

"En realidad, si lo entiendo."

Tomado por sorpresa, Aang miro hacia arriba para encontrarse con el rostro de su amigo ungido con el dolor de un amor perdido, junto con una mirada de entendimiento. El rostro de Aang bajo de nuevo, esta vez confundido.

"Acaso ella sabe" el susurro.

"Nah" Respondió Sokka, removiendo finalmente la mano del hombro de Aang. "Como puede ella no notarlo, esta mas allá de mis posibilidades."

"A menos… que ella no quiera verlo."

"Oye, no pienses así, veraz, yo nunca pensé que la princesa Yue jamás se fijaría en mi…" El guardo silencio.

"Siento lo ocurrido con Yue," Dijo Aang antes de tomar una pausa, Aun cuando el no había estado allí, había escuchado que ocurrió con ella. Sokka asintió ligeramente.

"Ella hizo la decisión correcta," Admitió Sokka. "Ella cumplió con su labor, y yo aun tengo que cumplir con la mía."

La última parte fue adherida por si misma, Aang giro hacia el, preguntándose cual era exactamente lo que el sentía como su deber. ¿Su hermana? ¿El avatar? ¿El mundo? Esto abría un mar de preguntas que Aang no estaba seguro si deseaba perseguir. Al menos, Sokka entro en razón por si mismo y hablo con Aang nuevamente.

"Ve, has lo que tengas que hacer, yo mantendré la vista fija en esta situación."

Aang asintió, dejo atrás a Katara y comenzó su búsqueda en la ciudad por el rey Bumi.

Cuando Aang se reunió con los otros nuevamente, sin éxito alguno, Katara le otorgo un abrazo consolador, desafortunadamente, Aang estaba demasiado preocupado por su viejo amigo como para notarlo. Después de un rato, llego un mensaje confirmatorio de que los representantes de la nación del fuego, estaban dispuestos a intercambiar al rey Bumi por el bebe que inesperadamente se había vuelto parte del grupo de los refugiados.

Transcurrido un tiempo, Katara se había quedado dormida con el niño descansando en sus brazos, Aang sonrió ante los dos, ella de seguro tendría un brazo adolorido cuando se despertase, pero justo ahora ellos parecían muy calmados.

"¿Son todas las chicas así?" Susurro hacia Sokka.

"¿Como que?"

"Tu sabes," Aang señalo hacia el par de durmientes. "Buenas con los bebes."

"No lo se, eso creo" Respondió Sokka sin mucho interés, luciendo como si estuviese a punto de intentar dormir el también, pero Aang estaba muy interesado y buscaba que la compañía durase un poco mas.

"¿Acaso nunca has pensado en tener niños?" Pregunto hacia el chico mayor.

"No, no realmente." Sokka se recostó de espalda en Appa. "¿Supongo que tu no tienes muchas opciones, verdad?"

Aang parpadeo confundido.

"¿A que te refieres?"

Sokka se giro hacia el en sorpresa. Aparentemente satisfecho que el joven Avatar no le entendiera. Así que respondió.

"Aang, tu eres el ultimo maestro aire" comento pacientemente. "Si tu no tienes niños, entonces no habrán mas."

Sokka espero hasta que el chico lo entendiese por completo, situación que se confirmo cuando los ojos del monje crecían y tragaba aire ante la realización.

"Lo que significa que la línea del Avatar terminaría" realizo, la inmensa importancia de este asunto se filtro con rapidez en su conciencia. No solo no habría más maestros aire para nacer como Avatar en el siguiente siclo, sino que los tres Avatares entre ellos no tendrían un maestro aire de quien aprender, por lo que jamás alcanzarían su potencial. "Grandioso, sin presión alguna."

Sokka soltó una carcajada ante la expresión de Aang o quizás por su predicamento, Aang no estaba seguro, entonces Sokka hizo lo mejor que pudo para confortar a su compañero.

"Hey, tu aun tienes mucho tiempo, dejemos primero el asunto de salvar al mundo en el camino, concluido el propósito, puedes comenzar a pensar sobre criar a un grupo de maestros aire." Sokka observo ligeramente en dirección del monje. "Y tal vez uno o dos maestros agua."

Los ojos de Aang se abrieron por completo ante el, incluso el pudo sentirse a si mismo sonrojarse, al menos en la oscuridad el tenia las esperanzas de que Sokka no lo hubiese notado.

Al día siguiente, después del fallido intercambio y la arriesgada batalla y persecución, Aang envió a sus amigos al frente mientras el regresaba al niño a la familia del gobernador. El estaba satisfecho de ver que la familia realmente se mostró feliz de tener al niño de vuelta.

Aang se encontró con Sokka y Katara justo antes de la puesta del sol, a cierta distancia de Omashu en el claro de un bosque. Ellos ya habían comenzado a alzar el campamento y trataban de decidir a donde marcharían luego, Katara recibió a Aang con una sonrisa que calentó sus adentros.

"¿Estaban felices de tenerlo de vuelta?" Pregunto ella, mientras le entregaba una pieza de fruta, Aang la mordió de inmediato mientras asentía, aparentemente los hermanos habían decidido no encender una fogata, posiblemente debido a la hora, o a la proximidad de una ciudad ocupada. De cualquier manera, habían encendido dos linternas para iluminar su camino en la oscuridad entrante.

"Muy felices, ni siquiera les importo el como había llegado allí."

"Tal vez aun hay esperanza para la nación del fuego." Comento Katara.

"Ellos no son como su hija, aparentemente," Comento Sokka mientras aun terminaba de colocar su tienda. "¿Que clase de hermana es ella de todas formas?"

"Que conste, que nunca me rendí contigo fácilmente," Le informo Katara.

"Lo mismo aquí, hermanita."

Katara alzo sus cejas ante el "hermanita" decidiendo dejarlo pasar por ahora, Aang sonreía ante sus dos amigos, era bueno saber que a pesar de las constantes rencillas, ellos se amaban el uno al otro.

"Creo que algo salio mal en las ultimas generaciones de la nobleza de la nación del fuego," Dijo Aang. "No recuerdo que nada de esto sucediera en el pasado."

"No lo se Aang," Comento Sokka, "Debió haber algo raro en el Señor del fuego aun en aquel entonces. Este tipo de cosas toma tiempo en establecerse en una familia."

"¿Además, que no fue el quien comenzó la guerra?" Agrego Katara.

"¿Y que recientemente no oímos un rumor sobre la hermana de Zuko?" Inquirió Sokka.

"Claro, que ella intento capturarlo o algo parecido," Respondió Aang. "Para ser honesto, nunca conocí al señor del fuego de hace 100 años."

"Familia modelo," Dijo Sokka sarcásticamente, mientras movía su cabeza.

"Efectivamente, y sin lugar a dudas la familia real no es el mejor ejemplo," Agrego una nueva voz, Todos voltearon para encontrarse con el príncipe Zuko y su tío acercándose lentamente cabalgando sobre una bestia.

Notas del autor: ¡Sorpresa! Estaré colocando algunas cosas en este fic, que yo predigo irán pasando en la serie eventualmente. Solo que estoy acelerando las cosas, En adición, en caso de que no lo hallan notado, también estaré insertando algunas de mis filosofías e interpretaciones, estaré usando a Toph como la tutora sobre el tierra control porque nunca tuve una idea pre-existente sobre ese personaje.

Notas del Traductor: Finalmente termine el primer capitulo, espero que al menos os deje tan intrigados como a mi cuando lo leí por primera vez. Su adaptación al principio seré sincero, me costo un poco, pero a medida de que leí mas y mas de sus escritos, simplemente quede fascinado.

Mas aun porque entre esta historia: Avatar in Training y Destiny Call la autora cuenta con mas de 800 reviews, muy bien merecidos si me preguntan. (sumando juntas las cantidades de reviews claro esta).

Esta historia cuenta con 15 capítulos, que estaré más que dispuesto a traducir si agradan en la sección. Hasta entonces por favor, Lean y dejen su opinión de la historia, y si saben leer y escribir algo de ingles, dirigirles sus merecidos elogios a LISELLE129.

Post Data:

Esta historia ya tiene su tiempito publicada, por lo que creo ella comenzó a escribirla cuando los últimos capítulos del segundo Libro de Avatar comenzaron a estrenarse en Estados Unidos. Por eso el comentario sobre las predicciones, aunque si somos mas visionarios, aun existe la posibilidad de que Zuko y Iroh puedan unirse al grupo del Avatar.

Atentamente… ShiroWolfmank