¿Quién eres tú?

Introducción: Entender un no

¿Era tan difícil entender un "no"? Por supuesto que para el 85% de las personas no, el otro 15% podrían compararse con mi madre. Me di cuenta que un pequeño cambio, podría ser en verdad un gran cambio disfrazado de uno pequeño, un nuevo matrimonio, un nuevo hogar, son parte de una pequeña llama que puede causar un incendio

-No voy a ir y esa es mi última palabra.

Cerré la puerta de mi habitación y tire a la basura la carta que me entregaron hoy en la mañana, no abandonaría a mis amigos por nada del mundo, no quería cambiar. Suficiente tenía con que mi madre se casará con un señor que sobra de dinero, no me gustaban las personas como ellos, que piensan que pueden tenerlo todo solo por tener dinero, personas que no se esfuerzan lo mínimo porque nunca aprendieron a desear algo ni a conseguirlo por sí mismos, mi madre me había enseñado que si quería algo yo misma tendría que conseguirlo con mi propio esfuerzo, hoy ella misma se contradecía.

Flashback.

Hoy por la mañana me encontraba en la clase de química, nada fuera de lo normal por supuesto, minutos después me llamaron de la dirección, al principio creí que le había pasado algo a mi madre y no había fallado en mi suposición, mi madre estaba fuera de sus cabales.

-¿Ha pasado algo directora Oka?

-Tome asiento por favor señorita Kinomoto.

-No ha respondido mi pregunta-dije en tono de reproche a la directora y si las miradas pudieran decir algo la suya estaría diciendo "guarde silencio y siéntese".

-Ayer por la tarde recibimos un e-mail por parte del colegio South K. Derns , no me corresponde a mí decírselo, pero prefiero que lo lea usted.

Me entregó un sobre con el e-mail impreso, al abrir el sobre empecé a leer la primera línea y esa simple línea basto para que dejara de leerla, volví a guardarla en el sobre un poco roto y me levante del asiento frente al escritorio de la directora.

-Si es todo lo que tiene que decirme, me retiro.

-Piénsalo bien Sakura, es una gran oportunidad.

-Gracias, pero esta decisión la tomare yo, permiso.

Salí de aquella oficina un poco groseramente y volví a mis clases, ignorando aquella carta detestable, las preguntas de mis amigos no hicieron falta, pero trate de evitarlos con una simple excusa, lo cual no bastó, pues Kaito (mi mejor amigo) se dio cuenta de que algo me tenía molesta. Terminaron las clases y volví a esa detestable mansión en la que vivía, obviamente mi comentario al llegar por primera vez aquí no fue tomado en cuenta "No hacían falta más de 3 habitaciones, un gran comedor y etc. de cuartos para 3 personas". Al llegar me recibió un gran pasillo silencioso y unas grandes escaleras interminables y el silencio fue lo que me acompaño por más de 5 horas, hasta que llego mi madre.

-Adelante-respondí ante el toque de mi mamá en la puerta.

-¿Cómo fue tu día? ¿Novedades?

-Ninguna, todo sigue normal-Definitivamente no iba a abrir la boca sobre lo de la carta, mi madre sería la primera en influir sobre mi decisión sin tomar en cuenta la mía.- ¿Y a ti? Hablo sobre los empresarios.

-Bien, Satoshi les dijo que era muy buena con los números y me dieron el empleo-Suspire irónicamente al ver su sonrisa-Hija, sé que no te acostumbras a esto y tampoco a Satoshi, pero al menos dale una oportunidad.

-Mamá, yo respeto tu matrimonio, incluso respete que nos cambiáramos de casa, no me pidas más de lo que ya hago, es tu relación, no la mía y mientras tú seas feliz no tengo inconveniente sobre toda esta locura.-me levante de la cama y fui hacia el escritorio a sacar los cuadernos de mi mochila para tratar de que mi madre dejara de insistir al verme realizar el trabajo de la escuela.

- ¿Qué es eso?-al voltear la mirada pude ver que mi madre tomo la carta que se había caído de mi mochila y me arrepentí de no haberla quemado cuando llegue.- ¿Una beca para el colegio South K. Derns ? ¿Por qué no me lo dijiste? Es una buena oportunidad para tus estudios, no me extraña que no te hayan elegido por tus buenas calificaciones.

-No empieces mamá, yo ya tengo mi decisión y no la voy a cambiar, no aceptare esa ridícula propuesta, ya tengo una escuela, ya tengo maestros y ya tengo amigos ¿Para qué cambiarlos por algo exactamente igual?-volví a concentrarme en el trabajo dando por terminada la conversación, pero mi mamá seguía insistiendo.

-Pero en el South K. Derns tienes una mayor oportunidad de…

-No mamá, no sigas.

-Piénsalo, insistí mucho para que aceptaran mi propuesta y cuando lo…

-¿Aceptar tu propuesta? ¿Acaso el colegio no mando ese e-mail? ¿Tú fuiste quien le envió el e-mail a la directora? ¡Contéstame mamá!

-Yo…me refería a…mi sugerencia, que insisto en que aceptes mi sugerencia, cualquiera se puede equivocar.

-No soy tonta mama, se cuándo me mientes, lo haces cuando te trabas, tampoco es como si por acto de magia decidieran darme una beca, alguien tuvo que haber influido. ¿Por qué lo hiciste? Sabes muy bien que no me gusta nada que tenga que ver una suma grande de dinero, puedo estudiar en la preparatoria en la que estoy sin pagar lo que cuesta esa dichosa colegiatura del South Arens o como se llame, además es mi último año.

-Pero no tienes que pagarla toda, fui al colegio para ver si podía conseguir la beca de verdad, sabía que si te ofrecía inscribirte al colegio incluso con mi sueldo no lo aceptarías, así que pensé que si obtenías la beca por ti misma podrías aceptarla.

-Tampoco dejaría que pagaras lo restante de la ayuda de la beca, incluso si trabajo yo misma no alcanzaría a juntar todo en un mes.

-No es necesario que lo pagues, yo podría…

-No voy a ir y esa es mi última palabra- tome la carta de las manos de mi mamá y la arrugue entre mis manos, abrí la puerta de mi cuarto y espere a que mi madre se saliera.

Fin del flashback.

Si yo quisiera ir al dichoso colegio ahorraría él dinero de mi sueldo (una de las pocas que conserve desde que llegue a esta jaula adornada de moños, mi empleo, aunque al principio mi madre y Satoshi no dejaban de decirme que no era necesario que lo tuviera) por el contrario, no lo hago por qué no lo quiero, necesitaba que ellos entendieran y respetaran mis decisiones como yo las de ellos. Claro que nunca lo harían ¿En qué momento mi mamá había cambiado tanto, lo suficiente como para que el dinero lo haga? No lo sabía, o tal vez si y no lo quería ver, ni aceptar.

Una de las mucamas me llamo para decirme que la cena estaba lista, para mí era un tanto incomodo comer en una mesa tan grande en donde solo nos sentábamos 3 personas, a excepción de hoy, no éramos 3 mas bien esta ultima la desconocía y por como vestía podría ser uno de los socios de Satoshi , lo salude sin darle importancia a quien era, después de todo, no era mi invitado, así que pensé que lo mejor sería no decir nada mientras cenábamos, mi madre era la única que faltaba en la mesa, esperamos un momento y llego diferente a cuando estábamos discutiendo, estaba mucho más arreglada, Satoshi como siempre llevaba traje y yo, aún conservaba el uniforme, en cuanto sirvieron la comida ninguno hablo, hasta que él señor desconocido interrumpió aquel silencio.

-¿Y qué tal te va en tus estudios?

-Bien-me limite a hacerle platica, después de todo no tendría por qué hacérsela.

-Perdona por no haberme presentado, soy el rector y director del colegio y la universidad South K. Derns , mi nombre es…-claro, ya salió el interés, tuve que haberlo supuesto, la pregunta sobre mi estudios, mi madre y Satoshi con vestuario presentable ¿Cómo pude ser tan ingenua?

-Siento interrumpir su presentación, supongo que usted sabe quién soy y aprovecho para responder su carta, no estoy interesada en su propuesta, se lo agradezco mucho-(mentira)-pero no puedo aceptarla.

-Tu madre me comento sobre ello-lo que me faltaba, ni si quiera puedo ser yo quien avise-es por eso que he venido, eres una buena estudiante y muy inteligente, queremos personas como tú en el colegio, sé que no quieres aceptar la ayuda de tu madre, pero he pensado mucho y me gustaría que aceptaras esta opción, me han dicho que tienes un trabajo-¿Acaso mi mamá le comento de qué color era mi ropa interior? Porque si no es así, está a un solo paso de saber mi vida entera-podrías encargarte de tu colegiatura tu misma y nos bastaría con lo que ganes en el mes ¿Qué dices?

Sabía que si denegaba la opción ninguno dejaría de molestarme, así que pensé en un gran plan que yo nunca en mi sano juicio haría, pero era la única alternativa para hacerles entender lo que significaba la palabra NO.

-De acuerdo, acepto ir al colegio-Una desagradable sensación se hizo presente en mi cuerpo que hizo que temblara cuando pronuncie aquellas palabras de las que estaba segura, no decir jamás.

-Entonces podrías integrarte a las clases la próxima semana, para que te despidas de tus amigos y aproveches tu semana para descansar porque en cuanto llegues una gran pila de trabajo te estará esperando, tampoco lo suficientemente grande para que te encargues de tu empleo-Soltó una risa y yo también, pero la mía era irónica, era necesario comportarme así para hacer lo que estaba por hacer.

Sería la persona más conflictiva del mundo como para que me corrieran del colegio y si eso era necesario para que mi madre entendiera una sencilla palabra de dos letras, lo haría.

N/A: Hola, espero que les haya gustado la introducción de esta historia, si mis cálculos no fallan subiré el próximo capitulo la siguiente semana y si lo termino antes lo subiré entre semana (lo más probable es que no suceda XD). Pueden dejarme sus comentarios y los leo en el siguiente cap.