Nota: Hace poco, en un rodaje, se me ocurrió esto. No se hacia dónde va, solo lo que imagine mientras grababa. Espero opiniones para saber si continúo o no.

Through thick and thin

By elisabeth-p

Desde hace una semana, las cadenas de noticias no cesan de advertir sobre una posible lluvia torrencial, acompañada de fuertes vientos, que puede llegar a inundar y causar serios daños en la ciudad de Nueva York, y otras ciudades aledañas, cercanas a la costa atlántica.

Aconsejan abandonar la ciudad, trasladarse fuera del país o sino a zonas más centrales, o en su defecto cercanas a la costa pacífica. La gente ha entrado en pánico, muchos se han ido, otros viven encerrados en sus casas, hacinados frente a los televisores, intentando saber más sobre la inminente catástrofe.

Rick, por su parte, ha decidido enviar a Alexis y a Martha al condado de Lincoln, en Nebraska. Ambas mujeres de ciudad se han quejado, pero ante la preocupación de Castle han accedido a ir. Allí las aguarda un amigo escritor, John Parker, quien se ofreció a hospedarlas en su residencia.

Abuela y nieta descienden las escaleras acarreando su equipaje, mientras Rick aguarda para llevarlas al aeropuerto sentado en el living mirando las noticias.

-Richard, tu deberías venir con nosotras. No es seguro que te quedes en la ciudad.

-Las alcanzare luego, ya se los he dicho.

-Se que no lo harás, papá. No abandonaras Nueva York hasta que Beckett no lo haga. Y no me intentes convencer de lo contrario, se que vas a arriesgarte a costa de no dejarla aquí.

Rick percibe la tristeza en los ojos de su hija, y la preocupación en los de su madre.

-Richard… Todo tiene un límite en la vida. Beckett es una mujer adulta, si ella decide quedarse, es su decisión, no debes quedarte tu también. Ven con nosotras por favor.

-Madre… me he ocupado de conseguirles un sitio a donde ir, pero no me pidas que me vaya dejándola aquí. Les prometo que las alcanzare apenas pueda convencer a Kate de venir conmigo.

-No puedo creer que la elijas por sobre nosotras. Somos tu familia, papá.

-No la elijo por sobre nadie, Alexis. No se trata de preferencias. Ustedes estarán a salvo, necesito saber que Kate también lo estará.

-¿Y qué hay de ti?

-Estaré bien. Ahora mejor vayamos yendo.

Rick toma ambas maletas y salen.

Las lleva al aeropuerto en el convertible rojo. Ya pueden percibirse vientos más fuertes de lo normal, y algunas repentinas lloviznas.

Se despiden con besos y abrazos, y promesas de reencontrarse pronto por parte de Rick.

Luego, él se dirige a la comisaria.

Al entrar en el piso de homicidios, casi desierto, ya que la orden de evacuación es para todos por igual, Rick visualiza a Kate en la sala de descanso parada junto a la máquina de café, con su teléfono en mano y el seño fruncido.

-¡Kate!

-¿Castle? ¿Qué estás haciendo aquí? Pensé que te irías con Alexis y Martha.

-Acabo de dejarlas en el aeropuerto.

-¿Y porque no te has ido? Dicen que es probable que esta noche empiece la tempestad.

-Lo sé. Pero si tú no te vas, yo tampoco.

Kate se sorprende una vez más al oír lo que él está dispuesto a hacer por ella. Y le sonríe tenuemente.

-En verdad, había pensando irme con mi padre hacia Kansas, donde vive un primo de mi mamá. Pero mi papá ya hace dos horas que debió llegar aquí. No me responde el teléfono. Estoy preocupada, Rick. Pudo haberle sucedido algo en el camino.

-¿En qué venia?

-En su coche.

-Seguro llega en cualquier momento, Kate. No te preocupes. ¿Quieres un café?

Ella asiente.

Rick prepara café para los dos, y se sientan en el escritorio de Kate a esperar por Jim, mientras oyen las noticias.

Anuncian que Nueva York y las ciudades vecinas ya han sido casi evacuadas por completo. Que se ha reducido la circulación de vehículos. Ya no están saliendo más vuelos. Y en pocas horas se interrumpirá el servicio de trenes y subtes. Recomiendan que la gente que ha decidido no abandonar la ciudad se refugie en la Biblioteca Pública, donde se proveerá comida, asistencia médica, etc.

El sonido de la lluvia y de los vientos comienza a ser perceptibles desde la comisaria. En la televisión, anticipan cortes de electricidad, peligros de derrumbe, rebalse de ríos, crecimiento de mares, entre otras cosas.

-Rick… Presiento que algo malo le paso a mi papá. Si él estuviera tan solo demorado se hubiera comunicado conmigo.

Rick la mira preocupado, sin saber que decir para tranquilizarla. La toma de una mano.

-No pienses así, Beckett. Todo Nueva York y alrededores esta en caos. Tal vez debió para en algún lado, o quizás en cualquier momento aparece.

Pasa media hora más, el sonido del viento comienza a ser de temer.

Kate se levanta de su asiento, toma su abrigo y pertenencias.

-¿A dónde vas?

-No puedo quedarme sentada esperando. Iré a buscarlo.

-¿A dónde?

-No lo sé… recorreré el camino que se suponía que hiciese.

-Kate, no puedes circular con este clima, ya has oído las noticias.

-No me importa lo que digan, Castle. Necesito hallar a mi padre.

-Entonces iré contigo.

-De ninguna manera, tú debes buscar el modo de ir con tu familia o sino ve a la biblioteca como dijeron en le televisión.

-No me iré a ninguna parte si no vienes conmigo.

-No puedo, Castle… Lo siento, pero debo encontrar a mi papá.

-Iré contigo. Y no es ninguna pregunta, es una aseveración.

-Bien, vamos.

Ambos salen de la comisaria, suben al coche de Kate, y se encaminan hacia Queens. Pero no logran salir de Nueva York que la tempestad se desata con toda su furia, quedando ellos en el ojo de la tormenta.