oks... ps uno de mis primeros fics, a ver q les parece vale? porfa respondan!
One dream, one truth
-Cuantas veces lloré por ti... cuantas...?
Una chica se encontraba recostada en El suelo, veía las estrellas, al parecer, nada podía controlar su tristeza... la tristeza ocasionada por aquella persona
-por que? -se decía a si misma- por que nunca me respondiste? desde la primera vez que te vi, sentí algo extraño, algo... dificil de describir... poco a poco intenté descubrir lo que era, hasta que lo supe... me había enamorado, me había enamorado de ti...
-pero ahora, tu te has ido, sin importarte lo que yo sentía por ti, me has dejado...
Kagome pensaba eso a la vez que sollozaba, hacía solo un día habían reunido la perla, y ahora... ahora Inuyasha estaba lejos de ella, se había dejado llevar por la ambición de la perla e insistía en convertirse en un demonio completo... razón por la cual Kagome lo había dejado.
Ahora se encontraba sola, lejos de su amado Inuyasha, intentando entender por que Inuyasha la había dejado...
Volteó a ver El cielo nuevamente, se encontraba hermoso, lleno de estrellas, sin otra cosa mas que estrellas... estrellas? un momento¿y la luna?
-santo cielo, lo había olvidado -se dijo a si misma- hoy hay luna nueva... de seguro Inuyasha se encontrará como humano en estos momentos...
Un día mas, todavía un día mas... cuando terminaron de reunir la perla, la anciana Kaede le advirtió claramente a Inuyasha que fuera cual fuera su decisión, debia recordar pedirle su deseo a la perla cuando se encontrara como Hanyou, cuando estuviera en su estado natural...
Así que había un día mas... Inuyasha tendría que esperar hasta que amaneciera para ver cumplido su deseo, para convertirse en un youkai (demonio)...
Kagome no sabía que pensar, no sabía si debía ir con él e intentar convencerlo de que no se transformara en demonio... que se quedara así... con ella... pero supuso que sería inutil, la decisión de Inuyasha ya estaba tomada, y nadie lo haría cambiar de parecer, nadie...
Se dió la vuelta en su futón, dispuesta a dormir... debía hacerlo, debía dormir y sacar a Inuyasha de su mente...
Un ruido la despertó, alguien se encontraba ahí, donde estaba ella... no quería abrir los ojos por miedo que fuera un demonio y al verla despierta quisiera hacerle algo... de modo que se quedó ahí, con los ojos cerrados escuchando lo que sucedía a su alrededor...
Oyó los ruidos de pisadas de alguien, y luego sintió que ese "alguien" se detenía junto a ella, se había incado y ahora estaba así, junto a ella, luego, una mano tocó su rostro y se detuvo en sus cabellos.
-Kagome, si supieras lo que siento -dijo esa persona, a Kagome la voz le resultó familiar, era la voz de... de Inuyasha...
- si supieras lo extraño que me siento en este momento -continuó él- no se que hacer, no se lo que debo hacer ahora... solo se que me preocupé demasiado cuando te fuiste...
Kagome abrió lentamente los ojos y vió a Inuyasha, se encontraba viendola, y una de sus manos se encontraba en los cabellos de ésta, estaba como humano, con aquellos hermosos cabellos negros callendole por El rostro y esos lindos ojos negros.
-Inu..yasha... eres tú... -murmuró Kagome
-Kagome... yo... pensé que dormías... -él se veía sorprendido, pero no por eso se separó de ella
-yo... ¿sigues con la idea de volverte demonio?
-Kagome, debes comprender que es lo mejor, eso es lo único que me hará ser fuerte...
-pero ya eres fuerte¿por que no mejor te quedas así?
-no, esta apariencia de hibrido no me gusta... la gente nunca ha querido a los híbridos por lo que somos...
-eso no es cierto -Kagome se sentó en su futón- sabes que todos te estimamos... y sabes que yo te amo... -esto último Kagome lo dijo muy bajo, pero aún asi, El joven hanyou lo alcanzó a oir.
-Kagome... es cierto¿es cierto, que no te importa mi apariencia?
-si Inuyasha, no me importa que seas hanyou... pero no te transformes en demonio, por favor, no lo hagas...
-esa... esa es la única manera de ser fuerte... para poder protegerte...
-yo... Inuyasha¿crees que cuando seas demonio te acordarás de mi? no... solo desearás pelear, y acabarás a todos... recuerda lo que te pasa cuando te las convertido en demonio... solo desearás destruir... -Kagome comenzó a sollozar- por favor... no lo hagas...
-pero... Kagome... yo... -Inuyasha se acercó mas a Kagome- por favor no llores -pone su mano en la mejilla de esta quitandole las lágrimas- por favor Kagome, no me gusta verte llorar, y menos por mi...
Kagome se sentía diferente, un minuto antes pensaba que no volvería a ver a Inuyasha, y ahora El se encntraba con ella, abrazándola y consolándola.
-pero...pero -instintivamente, ella se recargó en El bien formado pecho de Inuyasha- no quiero perderte...
-yo... es lo que debo hacer, nunca me perderás...
inuyasha abrazó a Kagome,estrechándola contra si, poco después, no pudiendo resistirse, toma la barbilla de ella, y comienza a acercarse, hasta que los dos se unen en un hermoso beso, lleno de amor y ternura...
-Inuyasha... yo...
-shhh! kagome, perdoname, pero no puedo contenerme...
Inuyasha vuelve a besarla, y acto seguido, la recuesta en El futón... aún siguen besándose...
Kagome abrió los ojos, ya era de día...se encontraba recostada, dentro de su futón, volteó para ver si Inuyasha estaba con ella, pero no, no era así, El no estaba... pensó que aquello había sido un sueño, aquel acto de amor que Inuyasha había tenido con ella... deseó que aquello no hubiera sido un sueño... aquellas confesiones que él le había hecho...
Entonces, se sentó en El futón, y fue entonces cuando descubrió El haori de El sobre las cobijas... no, aquello que había pasado no era un sueño, Inuyasha realmente la había besado...realmente había estado con ella esa noche... realmente ellos...
Kagome rapidamente se levantó y se vistió, poniéndose El uniforme de su escuela... ya El sol había salido hacía mucho, debía ser demasiado tarde, Inuyasha debía er un demonio para entonces...
Kagome, sin prestar atención al hecho de que dejaba sus cosas, comenzó a correr en dirección a la aldea, al lugar en donde se encontraría con Inuyasha... El lugar en donde encontraría a un demonio...
Comenzó a llorar, no creía que aúna pesar de lo que había pasado con ella, inuyasha siguiera pensando en la idea de ser un demoio... no creía que solo le importara eso...
Aún se encontraba lejos de la aldea, mas sin embargo, seguía corriendo, no le importaba que sus piernas hicieran un gran esfuerzo... no le importaba lo que le pasara... solo quería ver a Inuyasha una vez más... aún seguía llorando...
De pronto, Kagome sintió una energía que hizo que se detuviera de improviso... si, no podía ser otra cosa... era la energía de la perla de Shikon... Inuyasha debía de haberla utilizado en ese momento para pedir su transformación...
Aún sabiendo lo que encontraría, Kagome corrió nuevamente, aún con más fuerza que antes... si, cuando llegara a la aldea, seguramente encontraría a Inuyasha como demonio... seguramente todos su amigos habrían muerto... seguramente Inuyasha no se acordaría de ella...
Kagome llegó a la aldea, y fue entonces que lo vió... ahí parado en El centro de la aldea, se encontraba Inuyasha...
Sin siquiera verlo bien, Kagome se tiró al suelo y comenzó a llorar aún mas fuerte.
-Inuyaha... por que... por que lo hiciste... por que...
Percibió unos pasos, Inuyasha se acercaba a ella...
-por que Inuyasha... por que me dejaste sola...
Inuyasha se detuvo junto a ella, Kagome, con una mezcla de miedo y tristeza, no se atrevió a levantar su rostro, así que ahí permaneció, mirando El suelo...
-Kagome... -la llamó
Ella no sabía que hacer, mas sin embargo, al oir que Inuyasha la llamaba, se calmó un poco... Inuyasha aún se acordaba de ella!
Finalmente, levantó su rostro... viendo de frente a Inuyasha, y sorprendiéndose de paso.
Ahí, junto a ella, se encontraba Inuyasha, con su hermoso cabello negro cayendo por su espalda... en sus lindos ojos negros se notaba una mirada de ternura, de amor...
-Inuyasha... tu.. tú...
-así es Kagome, le pedí a la perla que me convirtiera en humano...
-pero tú...
- si, se que mis deseos eran otros al principio, pero... después de anoche, me di cuenta de algo... que te amo mas que a nada... y no podía dejarte sola...
- tu.. ¿lo hiciste por mi?
-si, porque te amo...
-oh, Inuyasha...
Inuyasha y Kagome acercaron sus labios y se fundieron en un dulce beso... ahora todo estaba bien... Inuyasha y Kagome permanecerían juntos.. para siempre, y nada los podría separar, es mas, había algo por lo que permanecerían aún mas juntos... aquel pequeño cachorrito que pensaban tener...
Fin.