Aquí empieza la historia, espero q' les guste.
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Capítulo 1.- Capitán Sparrow, para ti.
Ya había amanecido. No podía creer q' había llegado ese día, el día en el q' el joven más rico y antipático de Port Royal le pediría matrimonio. Ella no sabía q' había visto Eduard Harrison en ella; él era tan ignorante, tan frío; mientras q' ella solo estaba interesada en leer, conocer gente y lugares. En ese mismo instante, el instante en el q' no pensaba salir de su recámara, alguien entró a su recámara y abrió las cortinas.
-Señorita, es hora de levantarse. Su madre la espera abajo en el comedor para que desayunen juntas, y después se arregle para esperar al joven Eduard. -Gracias Juliette, avisa a mi madre q'enseguida bajo.
Esperó a q' Juliette saliera de su recámara y salió de su cama, bajó las escaleras y se sentó a desayunar sin muchos ánimos y sin querer ver a su madre.
-Buenos días Paulina, te ves hermosa, ¿estás liste para hoy en la tarde?. Va a ser una tarde encantadora ¿no lo crees?. -No, no lo creo. Sabes muy bien q' no soporto a Eduard y sobre todo q' no me quiero casar con él. ¿Sabías q' ayer me llego una carta de mi padre? -¿En serio? ¿Y q' dice el borracho de tu padre? -Capitán Sparrow, para ti madre. Y él piensa lo mismo q' yo, q' no debería casarme con el antipático de Eduard, y q' sería más feliz en el mar, en la Perla, siendo libre, estando con él y ayudándolo con la Perla. -Pues yo no pienso lo mismo, te casarás con Eduard aunque no te guste la idea y fin de la discusión.
Paulina se levantó muy seria de la mesa sin terminar de desayunar y se retiró a su recámara con lágrimas sin querer salir de sus ojos tan azules como el mar, donde ella realmente pertenecía.
Cuando llegó a su recámara, pensó q' se tenía q' ir de esa casa, y encontrar la forma de llegar a Isla Tortuga y reunirse con su padre. Aquí termina la primera parte, ojala les haya gustado, manden reviews para mejorar cualquier cosa.
Ya había amanecido. No podía creer q' había llegado ese día, el día en el q' el joven más rico y antipático de Port Royal le pediría matrimonio. Ella no sabía q' había visto Eduard Harrison en ella; él era tan ignorante, tan frío; mientras q' ella solo estaba interesada en leer, conocer gente y lugares. En ese mismo instante, el instante en el q' no pensaba salir de su recámara, alguien entró a su recámara y abrió las cortinas.
-Señorita, es hora de levantarse. Su madre la espera abajo en el comedor para que desayunen juntas, y después se arregle para esperar al joven Eduard. -Gracias Juliette, avisa a mi madre q'enseguida bajo.
Esperó a q' Juliette saliera de su recámara y salió de su cama, bajó las escaleras y se sentó a desayunar sin muchos ánimos y sin querer ver a su madre.
-Buenos días Paulina, te ves hermosa, ¿estás liste para hoy en la tarde?. Va a ser una tarde encantadora ¿no lo crees?. -No, no lo creo. Sabes muy bien q' no soporto a Eduard y sobre todo q' no me quiero casar con él. ¿Sabías q' ayer me llego una carta de mi padre? -¿En serio? ¿Y q' dice el borracho de tu padre? -Capitán Sparrow, para ti madre. Y él piensa lo mismo q' yo, q' no debería casarme con el antipático de Eduard, y q' sería más feliz en el mar, en la Perla, siendo libre, estando con él y ayudándolo con la Perla. -Pues yo no pienso lo mismo, te casarás con Eduard aunque no te guste la idea y fin de la discusión.
Paulina se levantó muy seria de la mesa sin terminar de desayunar y se retiró a su recámara con lágrimas sin querer salir de sus ojos tan azules como el mar, donde ella realmente pertenecía.
Cuando llegó a su recámara, pensó q' se tenía q' ir de esa casa, y encontrar la forma de llegar a Isla Tortuga y reunirse con su padre. Aquí termina la primera parte, ojala les haya gustado, manden reviews para mejorar cualquier cosa.