Hola mis queridos lectores, les habla su amigo Maestro Dan, trayéndoles mi primer proyecto en FanFiction , llamado: Los secretos de Kalos.

Primero: Como ya los saben este es mi primer fic, por lo tanto los errores ortográficos, gramaticales, etc. Son de esperar así que les pido que cualquier error que cometa háganmelo saber.

Segundo: Si el capítulo fue de tu agrado, te invito a que mandes tus reviews sobre el mismo, poniendo tus impresiones, teorías, ideas, etc.

Tercero: Sobre las actualizaciones se harán semanalmente todos los viernes.

Cuarto: Si te gusto la historia te invito a que la sigas o que la pongas como favorita.

Finalmente, Pokémon y sus personajes no me pertenecen son propiedad de su respectivo autor.

Capítulo I

El primer día

Nos encontramos en la región de Kalos y una de las más llamativas regiones conocidas, ya sea por su atractivo turístico u obras arquitectónicas que se encuentran en ella como lo es, la torre Prisma que es el centro de ciudad Lumiose, una de las ciudades más llamativas de esta bella región.

Nos encontramos a las afueras de ciudad Lumiose casi cerca del bosque donde encontramos una enorme casa, donde en uno de los cuartos una alarma sonaba fuertemente y las ventanas que eran penetradas por los primeros rayos de sol que comenzaban a iluminar el cuarto, haciendo que un joven de cabellos azabache se levantara con mucha pereza.

– Aaaaah… – Decía el joven comenzando a abrir los ojos, mientras comenzaba a salir de su cama. Después de un par de segundos sentado en su cama intentando ganar fuerza para ponerse de pie, estira su mano en dirección a su velador para posteriormente apagar esa infernal alarma, para después dar un respiro muy profundo y ganar la fuerza suficiente para dirigirse al baño, acercarse al lavamanos y mirarse en el espejo.

"Parece que después de todo no logre dormir nada, desde que llegamos a Kalos no he podido dormir tranquilamente por esas constantes pesadillas que sigo teniendo cada noche… Será mejor olvidarlo hoy comienzan mis clases así que será mejor que me aliste" Pensaba Ash mirando al espejo.

Después de una merecida ducha, Ash se encontraba saliendo del baño en dirección a su cuarto.

– Que bien se sintió eso – Decía el Ash más relajado. – Sera mejor que me aliste o llegare tarde – Cuando comenzaron a tocar la puerta de su cuarto.

– ¡Oye! ¡Ash…! Espero que estés listo, porque no pienso llegar en nuestro primer día – gritaba un joven por detrás de la puerta.

– Si ya voy – respondía Ash aproximándose a su armario sacando una caja…

– Muy bien muchachos vayan a desempacar sus cosas, pero antes de que se vayan quisiera darles esto – Comenzó a sacar un par de cajas.

– ¿Qué es esto? – preguntaba Ash recibiendo una de las cajas.

– Son sus nuevos uniformes – respondía seriamente.

– ¿Qué pasa abuelo? – preguntaba Ash notando cambio de humor de su abuelo.

– Quería pedirles disculpas por todo lo que paso en estos días, sé que mudarse no es fácil y peor que fuera de repentino ya que no les dio tiempo para despedirse de sus amigos. Y que mudarse a una región tan lejana como esta no ayuda… – Pero fue interrumpido por Ash.

– No te preocupes abuelo – decía Ash con una sonrisa.

– Gracias Ash – Dijo su abuelo aliviado.

– Y a ti te molesta Gary – Dijo Ash mirando a su hermano que se encontraba a su lado sentado.

Gary se levantó de su asiento y los miro muy seriamente diciendo. – A mí tampoco me molesta – dijo para después sonreír.

– Gracia chicos – Dijo su abuelo. – Pero miren el lado positivo, ya no tendrán que compartir cuarto y no solo eso mi laboratorio es tres veces más grandes aunque la casa está un poco lejos de la ciudad es más grande que la que teníamos en Kanto.

– Viste abuelo no hay de qué preocuparse – Decía Ash con muchos ánimos. – ¿Pero? ¿Cómo podemos pagar todo esto?

– Es fácil, como verán yo integrante del Centro de Investigaciones de Kalos y como integrante tengo algunos beneficios, como esta casa para que continúe mis investigaciones, también me otorgan el material científico y también les otorgan a ustedes la posibilidad de estudiar en la secundaria de Kalos – respondía su abuelo levantando su dedo índice.

– Aaaaah… Es por lo de los uniformes – respondía Gary.

– Si, pero antes… – Su abuelo saco dos sobres de su bolcillo y se los entregó a ambos.

– Que es esto – pregunto Gary.

– Son las cartas que acreditan su inscripción, solo se lo tienen que entregar al directo y ya están adentro.

– Quien es el director encargado – Peguntaba Ash a su abuelo.

– Si mal no recuerdo es un tal Prof. Sycamore… Eso es todo muchachos mejor vayan a desempacar y yo también comenzare a desempacar – Decía su abuelo mientras comenzaba a abrir algunas maletas.

– Ok – Los dos hermanos respondieron mientras se dirigían a sus cuartos.

– Haber veamos como es el uniforme – Ash abría la caja sacando el uniforme.

Dentro de la caja se encontraban un par de zapatos negros, un pantalón plomo, una chompa color negro en cuello ve con dos líneas blancas verticales al lado izquierdo de la chompa, una camisa blanca y una corbata negra.

Mientras que en la cocina Gary terminaba de comer su desayuno.

– Cuanto tiempo tendré que esperar a Ash, ya va a ser hora sino llegaremos tarde – Gary comenzaba a impacientarse. – ¡Apúrate Ash! – Gary gritaba impaciente.

– Ya no importa, será mejor que vaya yo solo – Gary salía de la puerta de su casa.

Después de un par de segundos, Ash bajaba ya cambiado en dirección a la cocina.

– Ya estoy listo, solo voy a desayunar y nos vamos – decía Ash bajado las escaleras.

– ¿Gary dónde estás? – gritaba Ash buscando a su hermano, para luego recorrer toda la casa sin encontrarlo, finalmente fue a laboratorio de su abuelo pero lo que encontró fue a su abuelo dormido encima de la mesa.

– Creo que se quedó toda la noche jugando con su nuevo laboratorio – Decía Ash mientras miraba a su abuelo con una gotita en la cien así que tomo una manta para cubrir a su abuelo que abrazaba un microscopio como si fuera un osito de peluche.

"Gary, seguramente ya te fuiste" pensaba Ash comenzaba a salir de su casa. "Muy bien solo tengo que tomar el autobús hasta cuidad Lumiose y caminar unas cuantas calles" Pensaba Ash dirigiéndose a la parada del autobús, no paso mucho tiempo para que el autobús apareciera.

"Vaya eso fue rápido, creo que no me tomara mucho tiempo llegar" pensaba Ash subiendo al autobús. "Qué bonito paisaje, quizás no sea como Kanto pero es muy agradable" pensaba Ash observando el paisaje de la ruta desde la ventana de su asiento.

Pero en ese instante autobús comenzó a detenerse en casi llegando a ciudad Lumiose.

– ¿Que pasa por que se detuvo el autobús? – decía un hombre alertado por lo sucedido.

– Apúrese tengo que llegar al trabajo – Decía una mujer molesta

El conductor intento encender el auto, pero no logro nada.

– Lo siento mucho pero el autobús se averió no podrá arrancar – Decía el conductor con mucha pena.

– ¡Que! no puede ser… – Ash salía del autobús comenzando a correr. – Muy bien, si me apresuro podre llegar sin problemas. Mmm… ¿Cuál era el camino? – pensaba Ash mirando a todos lados.

Después de varios minutos recorriendo ciudad Lumiose, Ash se perdido.

– No puede ser, según mi abuelo solo tenía que tomar tres calles a la derecha desde la torre prisma. – decía Ash desesperado. – Será mejor que dé una vuelta quizás esta calle sea la correcta. – Comenzaba a buscar calle por calle a toda prisa, hasta que en una se chocó con un joven moreno que iba saliendo de su casa.

– Aaaaauh… Eso dolió – Decía Ash sobándose la cabeza por el repentino choque

– Ahí… porque siempre me pasan estas cosas – Decía el otro joven en el piso haciendo lo mismo que Ash. – ¿Porque la prisa amigo?

– Lo siento mucho es que estoy muy apurado – respondía Ash ayudando al joven a levantarse.

– Jajaja… si ya veo – Ya los dos estaban de pie. – Hola mucho gusto me llamo Brock.

– Así perdón mi nombre es Ash.

– Mucho gusto Ash – Ambos se estrechaban las manos cordialmente.

– Eres nuevo en la ciudad, verdad – Preguntaba Brock.

– Si, porque la pregunta – respondía Ash.

– Porque si te diriges a la secundaria de Kalos estas yendo en sentido contrario.

– ¿Cómo lo sabes? – decía Ash.

– Porque ambos llevamos el mismo uniforme – respondía el moreno.

– Jejeje… No lo había notado – respondía Ash mirando que llevaban el mismo uniforme.

– No te preocupes aún es temprano – respondía Brock sacando su reloj de su bolcillo. – Mira.

– Ah… Brock las manecillas de ese reloj no se mueven.

– Claro que se mueven.

– No, no lo hacen.

Brock miro su reloj – No puede ser, no puedo llegar tarde otra vez, – Brock comenzaba a asustarse. – Entonces ¿Qué hora es?

– Haber déjame ver – Ash comenzaba a sacar su celular. – Faltan diez minutos para las ocho.

– No podremos llegar a tiempo, está muy lejos – Decía Brock casi rendido en el piso. – Espera un momento, hay una ruta por los callejones que corta la mitad de camino.

– Enserio – Ash respondía entusiasmado. – Entonces vamos.

– Sera mejor apurarnos – Brock se levantaba del piso.

Así que ambos se dirigieron al atajo que Brock propuso.

– Dime Brock por que no usas este atajo, si dices que corta el camino por la mitad – Preguntaba Ash.

– Veraz solo lo use una vez pero…

– Vaya no puede ser otra vez me quede dormido y esta ya es la tercera vez. Si comenzó a correr desde ahora quizás llegue a tiempo a quien engaño no llegare a tiempo. Mmm… Ya sé, solo tengo que tomar el atajo que me dijo Misty, pero no recuerdo porque solo debía usarlo en casos de emergencia, no importa tengo que usarlo – Comencé a acercarme al callejón.

– No veo cual es el problema y los mejor es que ya estoy a puno de llegar – recorría el callejón tranquilamente pero aun no dejaba de pensar en la advertencia que me había dicho Misty. En ese instante unos perros salían de sus casas comenzando a gruñir.

– Tranquilos, tranquilos, Ah… Auxilio ayúdenme, no quiero morir joven – comencé a gritar y correr a toda prisa pero cuando estaban punto de llegar al final del callejón, encontré que la puerta estaba cerrada.

– Y que paso – Preguntaba Ash asombrado.

– Logre sobrevivir aunque con cinco puntadas en un lugar muy específico y un mes de inyecciones – le contaba Brock cuando ambos llegaron al callejón.

– Estas seguro de esto Ash – Decía Brock algo nervioso.

– Si – Decía Ash muy decidido.

– Esta bien, a las una, a las dos y a las tres, Aaaaaah… – Ambos gritaban con fuerza, mientras corrían a toda velocidad lo cual fue mala idea ya que alertaron a los perros.

– Creo que no debimos gritar – decía Ash viendo que los perros los perseguían. – Pero ya estamos cerca.

– No creo la puerta está cerrada – Gritaba Brock asustado – No quiero volver al hospital, otra vez.

– No volverás al hospital amigo Brock, derribaremos la puerta.

– Que estás loco nos romperemos el brazo antes de derribarla.

– Es la única forma o quieres volver al hospital.

– No, no quiero volver al hospital.

– Estas listo Brock.

– Si… Aaaaaaaaaaaaaaaah…

Ambos corrieron a toda velocidad poniendo sus hombros al frente para impactar con la puerta, haciendo que esta cediera.

Los dos estaban en el piso casi algo aturdidos por el choque.

– Lo logramos – Decía Ash tirado encima de la puerta.

– Si lo logramos, espera un momento no siento mi hombro derecho – Decía Brock asustado.

– Vamos Brock, creo que ya veo el edificio – decía Ash levantándose.

Ambos llegaron a la secundaria Kalos algo adoloridos.

–Vaya sí que es un edificio enorme – Decía Ash muy impresionado.

– Si lo había olvidado, como eres nuevo aquí te daré un breve explicación. Esta es la secundaria de Kalos la más grande de toda la región de Kalos y no solo eso parte del edificio pertenece al Centro de Investigación de Kalos o mejor dicho el C.I.K. El más importante centro de investigación del todo el mundo.

– Si, algo así me había contado mi abuelo – Comenzó a tocar la campana.

– Sera mejor que entremos, antes de que nos cierren la puerta – Decía Brock mientras se dirigía hacia la puerta.

– Si, vamos.

Ash y Brock se despidieron, entonces nuestro joven azabache se dirigía a la oficina del director pero como no era de esperarse se perdió.

– No puede ser que me haya perdido otra vez – Ash seguía buscando por todos lados hasta que en un cruce de pasillos choco con una joven.

– Eso dolió – Decía nuestro adolorido azabache

– Lo siento mucho, pero estoy muy apurada – La chica despareció rápidamente.

Ash se quedó extrañado mirándola ella tenía el uniforme correspondiente, pero usaba un pañuelo de color rojo sobre su cabeza y su cabello castaño estaba peinado de tal forma que se formaba dos coletas a los lados.

Cuando en ese instante un hombre le toco el hombro.

– Puedo ayudarte – Preguntaba el hombre.

– Si gracias por favor, sabe dónde se encuentra la dirección – Preguntaba Ash al hombre

– Si, se encuentra al fondo del pasillo, acaso busca al director o algo así.

– Si tengo que entregarle esta carta que me dio mi abuelo – Mientras sacaba la carta.

– Si ya los sé, tu hermano vino más temprano esta mañana y ya me entrego su carta. Sera mejor que vayamos a la mi oficina.

– Eso significa.

– Si yo soy el director Sycamore, pasa – Decía mientras invitaba a pasar a Ash.

Ya dentro de la oficina.

– Gracias Ash… Mmm… Todo está en orden y bienvenido a la secundaria de Kalos, esperamos mucho de ti joven Ash – El comenzó a sacar unos papeles y se los entregó a Ash. – En estos papeles se encuentra el número de tu casillero, las materias que vas a cursas y todo lo que necesitas. – Sera mejor que vayas a tu primera clase que está a punto de comenzar.

Con ayuda del director Ash llego a su aula sin problema, luego el profesor hiso que se presentara ante toda la clase y posteriormente tomar asiento.

– Hola Ash al parecer nos tocó en el mismo salón – susurraba Brock que se encontraba a su lado.

– Aaaah… Hola Brock, no te vi – susurraba Ash.

Después de un par de horas la clase había culminado dando comienzo al receso.

– Sera mejor que vayamos al comedor a comer algo tengo mucha hambre – decía Ash agarrándose su estómago.

– Yo también, vamos – respondía Brock.

Ya dentro del comedor.

– Al fin después de esa tan larga fila pudimos conseguir algo de comida – decía Ash muy feliz mientras ambos se dirigían a una mesa. – Listo a comer se ha dicho – Pero antes de comenzar a comer entro por la puerta del comedor una joven de ojos celestes y cabello peli miel acompañado de una joven morena, haciendo que Ash se quede totalmente paralizado.

– Ash, Ash, tierra llamando a Ash – decía su amigo al notar esto, intentando hacer que Ash reaccionara.

– Ah… que… que – Decía Ash reaccionando.

– ¡Oh…! Parece que se te fue el hambre con tan solo ver a esa chica – Brock le mostrando una sonrisa picara

– ¿Quién es ella? – Preguntaba Ash.

– Creo que ella es, Serena – respondía Brock.

"Serena..." pensaba Ash mientras la miraba.

Continuara…

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Próximo capitulo

"Conociendo a amigos y enemigos I"