Disclaimer: Los personajes no me pertenecen, son propiedad de Tadatoshi Fujimaki. ¡Abajo hay más notas!
— ¡Jan-ken-po! —Vociferó Takao, rompiendo el ambiente tranquilo de la mañana. Su grito parecía animado, aunque en verdad ya sabía cuál era el resultado, y tras tanta derrota diaria ni le quedaba una mínima esperanza de dejar descansar a sus piernas. Otra vez tendría que pedalear la maldita carreta.
Todavía con los ojos cerrados, suspiró con resignación y se montó en la rickshaw, deseándole suerte a sus maltratados músculos. La necesitaría, porque (¡Lo que uno hace por amor!) la odiosa cuesta hacia Shutoku era bastante empinada. Lo irónico, era que si el no fuese a recoger al escolta, no tendría que dar semejante subida, puesto que su casa era para el lado contrario.
—T-Takao…
—Sube rápido, Ace-sama —Sonrió, otra vez con entusiasmo, aunque este sí era sincero: no había nada más lindo que ver a su Shin-chan satisfecho con su victoria, ¡Nada más empezar la mañana! Aunque ahora no se veía muy conforme… Tal vez le tenía lástima~ ¡Qué tierno! — No quiero que me culpes si llegamos tarde~
—Pero…
—Ojalá ese pingüino afortunado caminara solo, sin embargo —No pudo evitar suspirar de nuevo— De verdad, Shin-chan, no creo que el tamaño influya…
—Sí lo hace nanodayo —Contradijo, ya habiéndose acomodado con su preciado lucky ítem; no sería la primera vez que ignoraba ese tipo de quejas. Pero sí era la primera vez de otra cosa…
—Hai~ ¡Vamos! ¡A pedalear!
Midorima no dijo más en todo el trayecto, ni siquiera le insistió para pedalear más rápido, cosa que agradeció infinitamente su sombra. Aunque de haberse enterado de la verdad, Takao no estaría agradecido en absoluto: porque si su querido Ace-sama no presionaba no era por consideración, sino que por un motivo mucho más oscuro.
Esta vez, había perdido. Por vez primera (y ojalá única, escúchalo Oha-asa), fue Takao quien ganó jankenpo, mas la fortuna le hizo caso omiso a su victoria, su inocente novio no se dio cuenta y asumió la derrota que a él le correspondía, sin advertirlo siquiera su ojo de halcón, que permanecían cerrados tras sus resignados párpados.
Pero Midorima decidió (también por única vez, aclaremos) que ese ese recuerdo se quedaría sólo consigo. Porque vamos, ¿era tan importante para el base ganar en ese juego? Cierto que no estaba siendo sincero… pero si Bakao no se dio cuenta, fue porque el destino así lo quiso… ¿O lo estaban poniendo a prueba para confesarlo?
No, ¡Debía ser un escarmiento para ese escorpio irresponsable que no traía su objeto de la suerte, a pesar de sus insistencias! Así que no estaba mal callar por hoy, ¿verdad?
El pobre Kazunari no logró entender (todo ese día, al siguiente lo olvidó) por qué su Shin-chan se dignaba a sonreírle, pero viéndose tan culpable también. ¡Aunque confiaba en que de seguro no era nada importante!
Fin.
...Pues... ¡Aquí me asomo con un drabble MidoTaka! Se me ocurrió cuando más necesitaba un sirviente/novio que me rescatara (léase: atrapada en el tráfico, sin alguien con una carreta, ja) pero quedó feliz (ojos que no ven...) (nomediga: título plz)
En fin, no tengo idea de su Takao ganó alguna vez(?) pero me suena Ooc(?)
Espero que lo hayan disfrutado, nos leemos pronto nwn