Disclamer: Hetalia: Axis Powers, Hetalia: World Series, Hetalia: The Beautiful World así como todas sus variantes y personajes no me pertenecen, ni al otro autor de la saga Hetalia: Atlántida y Chipre (la cual no tiene que ver con este fanfic pero de la cual son sacados ciertos personajes como Atlántida, Atlantis, etc.) (Remus), esta saga por el contrario es totalmente distinta, pertenecen a su pertinente autor (al cual adoraré toda mi vida por haber creado esa maravillosa serie). Este fanfic ha sido creado sin ánimo de lucro, sólo es mero entretenimiento de unos fans para las fans. Aclaro de nuevo que este fanfic es un Atlantis x Inglaterra x Nueva Atlántida, Inglaterra x Atlantis x Nueva Atlántida y una antigua mención a un SpUK y como se está escribiendo sobre la marcha no se sabe cuántas parejas más, esta saga está siendo escrita sólo por entretenimiento y sin ánimo de lucro, sólo de una fan para las/os fans.
Aclaración: Por cierto, como hay algunas palabras en distintos idiomas pondré abajo del todo la traducción pertinente, lo que pasa es que he usado el traductor del google, entonces seguramente haya MUCHOS errores en la traducción, así que por favor, perdonad al traductor de google y a mí por ello. Este fanfic se basa en finales del siglo XVI, todos los personajes son humanos, que puedan hacer magia y esas cosas ya es otra cosa, aun que en este capítulo no se precise de esta.
My Beloved Obsessions
Capítulo 1. Protégelos sin importar las consecuencias.
Me quité el sudor de los ojos y pestañeé un par de veces cuando el brillante Sol de Valencia penetró en mis ojos cegándolos por un momento. Mi hermana Eternia y yo llevábamos toda la santa tarde recogiendo tomates de la huerta de nuestro padre Antonio. Poco faltaba para que nuestro autonombrado otro padre, Gilbert, y Francis, nuestro tío mayor, llegaran a la masía. En realidad ambos eran hermanos de Antonio, y por ello nuestro padre les dejaba entrar en casa. Si no fuera por eso no vendrían a casa con tanta frecuencia, pero nuestros tíos venían a comer cada dos por tres aprovechándose de la inocencia que tenía Antonio, siempre era demasiado familiar y ellos venían al olor de los churros calientes con chocolate y la paella de marisco que nuestro padre preparaba, es más, hacía poco nuestro padre Antonio había viajado a Madrid y había traído de ahí la receta para uno de sus famosos cocidos y pensaba prepararlo mañana para todos nosotros, sobretodo porque también vendrían con los tíos Francis y Gilbert nuestros otros tíos Lovino y Feliciano. Nuestro padre tenía muchos hermanos así que no era de extrañar que apenas conociéramos a una pequeña minoría de ellos, con muchos de ellos ni se hablaba por alguna razón así que cuando teníamos esas mini reuniones familiares se ponía muy contento. Tomé el último tomate que cabía en mi cesta de la planta suspirando, la masía era grande pero ni nuestro padre sabía dónde íbamos a caber todos juntos. Recibí en ese momento un pequeño codazo en mi brazo izquierdo, yo ya sabía de quién era así que hice un pequeño quejido a modo de molestia y me giré a mirar a mi hermana, una chica de largo cabello rubio que llevaba recogido con unas horquillas y una pinza haciendo que cayera este cual cascada por su espalda. Sus ojos rojos y grandes, como los míos, me miraban con molestia.
— Eternity, no esperes que vaya a quedarme aquí plantada esperándote todo el día hasta que despiertes de tus ensoñaciones, mientras tú vagueas yo tengo que hacer tu trabajo así que deja de perder el tiempo y vamos a llevar las cestas a casa antes de que papá venga a regañarnos –inquirió mi gemela levantando mucho la cabeza para mirarme a los ojos, como ella era una chica y era la mayor apenas superaba el 1,70 de estatura mientras que yo medía 1,90, eso la molestaba mucho, así que procedí a sonreír de medio lado divertido por eso.
— Perdona hermanita, es sólo que estaba buscándote con la mirada por si te habías perdido, pero se me olvidó de nuevo lo pequeña que eres –Eternia puso una expresión infantil apretando sus labios molesta y una venita se dibujó en su frente haciéndome reír a carcajadas.
— Ríete cuanto quieras, pero en cuanto lleguemos a casa ya veremos si la comida te sabe tan bien como querrías, que tú nunca la sirves perezoso –replicó ella caminando orgullosa de camino a casa, me reí un poco viendo su expresión de molestia.
— Es que como tú eres demasiado activa me quedo sin trabajo en seguida, es culpa tuya, luego acabas colapsando en cada rincón de la casa, la semana pasada casi te deshidratas por querer hacerlo tú sola todo, bruta, así ningún hombre va a quererte, eres toda una marimacho.
— Y tú eres tan delicado como una mujer, ese es tu problema, entre eso y lo mujeriego que eres no hay quien pueda contigo, ¿a cuántas mujeres les has tirado los tejos esta semana? ¿25? ¿33?
— Sólo a 15, estoy en baja forma –me reí a carcajadas mientras seguía a Eternia de camino a la casa.
— Ya te vale, sólo estamos a lunes.
— En vez de preocuparte por si me caso o no deberías preocuparte más por ti, tienes 17 años y a este paso te vas a volver la solterona del pueblo, y eso que mal cuerpo no tienes, al fin y al cabo somos gemelos, algo bueno tenías que tener de mí fusesesese–sonreí fanfarrón.
— Ya te gustaría ser tan perfecto como lo soy yo querido hermano, sigue soñando, lo malo es que a ti no se te ha pegado nada bueno de mí.
— Claro, porque no lo tienes.
— Anda y vete a freír espárragos –gruñó ella mirando en dirección al pueblo, la encantaba el mar, era inevitable que se quedara contemplándolo durante horas fascinada… sólo que esta vez… miraba al pueblo horrorizada. La cesta de tomates cayó al suelo de golpe –Eternity… mira…
Fruncí el ceño extrañado, no habían muchas cosas que pudieran asustar u horrorizar a mi hermana, pero cuando giré la cabeza lo comprendí… el pueblo… estaba en llamas. Estaba siendo atacado, como estaba pasando en muchos puertos españoles… por piratas ingleses. Mi cesta también acabó estampándose contra el suelo horrorizado, había que hacer algo, ¡papá Gilbert y los tíos Lovino, Feliciano y Francis podrían estar ahí ahora mismo!
— ¡Eternia! ¡Ve a avisar a papá, yo iré a ver si puedo encontrar a los tíos y a papá Gilbert! ¡Marcharos tierra a dentro y no dejéis de correr ni de mirar atrás! ¡En cuanto les encuentre os seguiré! –la grité buscando una rama grande de árbol que pareciera resistente.
— ¡Eternity! ¡¿Estás loco?! ¡Son piratas! ¡Te matarán en cuanto te vean sólo! No pienso dejar que vayas –se opuso Eternia agarrándome del brazo. Me deshice de ella rápidamente, no podía dejar que dañasen a mi gemela.
— No, Eternia, escucha, estaré bien, puedo ser sigiloso si me lo propongo, encontraré a los tíos y os buscaremos, pero necesito que vayas con papá Antonio y huyáis, aun que seas fuerte también eres una mujer, vete –la ordené imperativamente.
— ¡Claro, sigiloso con una rama de árbol más grande que tú! ¡¿Acaso tienes nueces en vez de cerebro?! ¡No vas a ir! –rebatió ella volviendo a aferrarse a mí.
— ¡Papá Gilbert y nuestros tíos podrían estar ahí y necesitar mi ayuda ahora mismo! ¡Tengo que ir!
— ¡¿Y piensas enfrentar pistolas y espadas con una rama de árbol?! ¡No quiero perder a mi hermano menor, cabeza hueca! –me regañó ella.
— ¡Ni yo a mi familia, así que coge a papá y vete Eternia! –grité también soltándome de su agarre y corriendo hacia el pueblo como alma que lleva el diablo. Eternia me miró pálida como una muerta de pie sin mover un músculo mientras me alejaba, sólo esperaba que me obedeciera esta vez, a veces era valiente en exceso y rozaba la soberbia.
Bajé por un terraplén dejándome deslizar para atajar camino hacia el pueblo, era lo malo de vivir en una masía en medio de una colina, habían muchas cuestas. Creo que me hice un par de raspones en la pierna a causa de eso, pero poco me importaba ahora mismo si se infectaba o no, mi familia podía estar en peligro. Tras bajar unas cuantas cuestas más corrí hacia la entrada del pueblo, había muchas casas incendiadas y vi a muchos piratas arrastrando mujeres de los pelos hacia quién sabe dónde, otros luchando con soldados que teníamos apostados en los puertos, contra ciudadanos sin más… y muchos de ellos ya ni luchaban y estaban tirados en el suelo sin vida. Me escondí tras una casa y miré sobre mi hombro cual alto era para observar el panorama, no tenía muchas posibilidades. Como dijo Eternia sólo era un chico con una rama.
Necesitaba de arma algo más consistente. En ese momento se me presentó la oportunidad, un hombre salía de la tienda de al lado, un pirata por lo que pude juzgar, tenía algunas bolsas, seguro que llenas de oro, sobre sus manos y se reía a carcajadas. Ese fue mi momento, rápido como un caballo español me agazapé felinamente entre las sombras del callejón que hacía la casa tras la que estaba escondido y la tienda y en cuanto el pirata pasó junto a este le propiné un buen golpe en la cabeza con mi gruesa rama de árbol haciendo que cayese al suelo. El factor sorpresa lo era todo, eso me decía mi padre siempre.
Antes de que él pudiera actuar rompí su cuello como si fuera una gallina con rapidez y empecé a registrar rápidamente su cuerpo. Ni si quiera me atreví a mirar su cara, no quería que su rostro se gravase en mi memoria, sólo tenía tiempo de buscar si tenía armas. ¡Suerte! Tenía dos pistolas, pólvora y una bolsa entera de balines de hierro. También tenía una espada, se veía bastante malucha, pero serviría para su propósito. Me quité la camisa y la rompí rápidamente en jirones, ni pensé en hacer lo mismo con la mugrienta camisa del pirata, suficiente tenía con lo que le había hecho. Anudé uno de los jirones a mi cintura y metí entre la tela y mi torso, musculoso y bien formado, por cierto, las pistolas a modo de cinturón para poder sujetarlas. Con otro de los jirones me hice una improvisada coleta que caía rebelde por el lado derecho de mi torso hasta mi cintura. Besé el rosario que tenía colgado en mi cuello al que le había añadido la cruz de hierro que mi padre Gilbert me regaló en una de nuestras visitas y tomé la espada con mi mano derecha, pesaba más de lo que esperaba, iba a ser difícil de manejar seguro.
— Requiescant In Pace1, Bruder2 –susurré levantándome, aun que fuera un pirata pagano tenía derecho a que le deseasen la paz al menos.
Corrí entre las sombras lo más sigiloso que pude en busca de mi padre Gilbert y mis tíos en dirección al puerto. Era bastante probable que estuvieran ahí teniendo en cuenta que venían del puerto de Civitavecchia porque habían decidido coger el mismo barco los cuatro y así iban juntos, aun que tío Francis venía de Francia había ido a ver a los tíos Feliciano y Lovino unos días antes de embarcar, quienes se visitaban frecuentemente aun que Feliciano vivía en Venecia así que lo más seguro es que estuvieran cerca del puerto. Raudo como un felino llegué hasta el puerto y ahí estaban… unos piratas apuntaban a mi padre Gilbert quien blandía una espada frente a ellos amenazante, tío Francis blandía otra a su lado sí, pero parecía mucho más asustado y la blandía con bastante torpeza. Tío Lovino y tío Feliciano se escondían tras mi otro padre temblando de miedo. Podía escuchar desde aquí los "ve" asustados de tío Feliciano y los "¡Chigi! ¡Sálvanos bastardo!" de tío Lovino.
Tomé una de las pistolas que había anudado a mi cintura, era hora de probar mi destreza con la puntería. Limpié un poco la pistola por dentro y metí la pólvora y el balín con rapidez y apunté a la cabeza de uno de los piratas humedeciéndome los labios. Esperaba que funcionase. Apreté el gatillo con fuerza y escuché el ruido del disparo, el retroceso fue bastante fuerte, no me esperaba eso. Llegué hasta perder un poco el equilibrio del susto antes de darme cuenta que no había dado al hombre en la cabeza, pero sí en el pecho, tenía que apuntar mejor, y más ahora que sabía lo difícil que era controlar la endemoniada pistola.
El hombre cayó al suelo de golpe alertando a los demás piratas que se dieron la vuelta rápidamente. En el descuido en el que buscaban al agresor mi padre Gilbert, quien se repuso del shock rápidamente clavó la espada en el pecho de otro de ellos mientras el último de los piratas en pie se giraba por todos lados buscándome. Limpié el arma con rapidez, me temblaban las manos, no podía fallar, no debía hacerlo. El pirata volvió a girarse hacia mi padre quien había liberado su espada y se dirigía a atacarle a él también. El pirata paró la embestida del prusiano desenvainando su espada mientras me buscaba con la mirada. Reparó entonces en cómo metía torpemente la pólvora dentro de la cámara y sonrió macabramente apuntándome con su arma, momento de distracción suficiente para recibir de lleno el corte de mi padre Gilbert en su cuello haciéndolo caer inerte al suelo también.
Las piernas me fallaron y metí corriendo la pólvora de nuevo en su bolsa y la pistola en el improvisado cinturón mientras caía al suelo. Había estado muy cerca de morir ahí mismo. Mi padre corrió hacia mí junto con mis tíos y me tendió una mano.
— Eternity, bist du okay?3 –me preguntó mi padre en alemán tendiéndome la mano.
— Ja, ich denke schon4 –respondí aceptando la mano para volver a levantarme - ¿y vosotros? ¿Estáis heridos? –les pregunté volviendo al español.
— Non, c'est bon, où est Antonio et Eternia?5 –preguntó Francis en su idioma natal.
— Ils devraient être sur le chemin de la forêt, fuyant6 –le contesté también en francés –id a reuniros con ellos, enseguida os sigo, quiero quedarme a desearles la paz al menos a esos mugrientos piratas que habéis dejado fuera de combate.
— Chigi! Eternity sei pazzo? Potevano ucciderti! Basta con le stronzate e Eternia con Antonio e ci vediamo!7 –me regañó tío Lovino.
— Ve, Eternity, mio fratello ha ragione, si potrebbe finire con l'essere che dobbiamo fare la pace8 –inquirió tío Feliciano.
— Piú il mio dovere di cristiano è quello di portare la pace9. No os preocupéis, no me demoraré mucho, lo prometo, ahora marcharos –pedí insistentemente. Mis familiares me miraron indecisos, pero pronto asintieron y corrieron en dirección a la entrada del pueblo. Suspiré agobiado y me acerqué a los piratas que habíamos dado muerte mi padre y yo y me agaché frente a ellos sin mirar sus rostros y volví a humedecerme los labios –Requiestcant In…
— Ey! Another Spaniard's here!10 –gritó un hombre tras de mí. Di un bote sorprendido y tomé mi espada con rapidez, no tendría tiempo ni pulso para recargar las pistolas y le apunté con ella volviéndome hacia él… con tal mala suerte de que él ya me estaba apuntando con la suya y con un rápido movimiento se deshizo de mi espada mandándola a volar. El mugriento pirata sonrió divertido levantando su espada frente a mí para degollarme. Cerré los ojos con fuerza rezando en mi mente a Dios para que me ahorrara mi muerte cuando escuché un disparo. Abrí un ojo sorprendido para ver caer al suelo frente a mí a mi agresor. Un pequeño encapuchado había disparado al hombre en la cabeza salvándome de mi horrible muerte.
Me levanté agradecido mientras el encapuchado bajaba el arma, no podía divisar su rostro. El encapuchado me hizo un gesto indicándome que siguiera dándoles la paz a los difuntos y se agachó a la altura del hombre al que había disparado. Susurró la paz tan bajito al pirata que ni si quiera pude escuchar el timbre de su voz, pero sí pude escuchar un "bruder" al final. Supuse entonces que sería alemán o prusiano tal vez. Yo me agaché frente a los otros hombres con la respiración acelerada del susto y susurré un "Requiestcant In Pace, hermano" muy tembloroso. Tras eso, me giré hacia el encapuchado, quien estaba de pie mirándome fijamente, o eso pensaba, no lograba verle la cara, su capa era larga y negra con un broche plateado. Me levanté nervioso y miré a todos lados sin saber qué hacer.
— Danke11 –inquirí en alemán. El encapuchado hizo un gesto de cabeza aceptando el agradecimiento y tras eso señaló con la cabeza la entrada del pueblo. Asentí muy serio y ambos empezamos a correr en dirección a esta. Se movía tan rápido como yo, tal vez algo menos porque mis piernas eran muy largas… pero a ambos a esas alturas nos importaba poco hacer ruido, supongo que por las ganas de salir de ahí. Llegamos rápidamente a la entrada del pueblo. Podía saborear la ansiada libertad cuando… un grupo de piratas nos cortó el paso – ¡No! –grité horrorizado. Tampoco tenía balas para todos ellos y ellos ya nos apuntaban a nosotros con sus pistolas. El encapuchado se detuvo a la vez que yo. Rechiné los dientes… no podríamos salir de ahí. Sólo esperaba que mi familia hubiera conseguido escapar.
— Surrender, no escape Spaniards12 –dijo uno de ellos. Un chico rubio un poco más joven que yo con un mechón que salía de su cabeza bastante vertical, de cabello rubio, ojos azules y gafas alargadas.
El encapuchado y yo tratamos de dar la vuelta pero fuimos interceptados también por otros piratas que habían tras de nosotros. Los ingleses tenían razón… no había escapatoria. A regañadientes levanté mis manos al igual que mi salvador, ¿de qué había servido el salvarme si ahora íbamos a morir ahí?
— They are brave, Captain Kirkland'll decide his fate, let's go!13 –dijo el chico, el cual tenía cierto acento americano. Uno de los piratas me agarró los brazos y me ató las manos tras la espalda. Hice un gruñido ante la fuerza de las ataduras y me giré a mirar a mi compañero, el cual mantenía gacha su cabeza mientras le ataban junto a mí de la misma forma, con un nudo marinero lo llevábamos claro. Nos arrastraron hasta el puerto sin dejar que nos detuviéramos por el camino un solo segundo, de vez en cuando algún bruto de los piratas nos daba un golpe que otro, mi compañero ni se quejaba cuando alguno lo hacía. Nos obligaron a subir a la proa del barco y con una patada nos hicieron caer de rodillas al suelo del barco –saludad al Capitán Arthur Kirkland, españoles –dijo el americano en español con un cerrado acento.
Miramos hacia la puerta del camarote del capitán de donde salió un hombre más o menos igual de mayor que nuestro padre, puede que tuviera 32 años más o menos. Era sumamente atractivo, llevaba el cabello recogido en una coleta baja de color rubio y desordenado dándole un aire de misterio, unas cejas anchas y piel blanca como la nieve que acentuaban sus grandes ojos verdes olivino… el mismo color de ojos que papá Antonio.
— What is happening here?14 –preguntó en un marcado acento inglés.
— Captain, I saw them killing some of our men and gave them the pace instead of run away, some of them finally run away but this man shot your second oficial. I thought you would want to punish them personally15 –dijo el hombre de antes señalando a mi compañero. El cual no daba muestras de importarle que le nombraran.
El capitán se inclinó frente a mí primero examinándome. Le miré con profundo odio y rencor que él ni dio muestras de importarle y luego se giró a mirar a mi compañero y se inclinó para intentar ver tras la capucha, pero entonces mi compañero golpeó su cabeza contra él levantándose cual felino y dio una patada a uno de los piratas que estaba tras de mí haciéndolo caer al suelo y se agachó rápidamente para recoger la espada que se le había caído a este al caer cortando sus propias cuerdas mientras los demás piratas se le echaban encima. El encapuchado blandió su espada rebanando el cuello a uno de ellos con rapidez y todos se alejaron sorprendidos. Entonces el capitán se acercó a él desenvainando su espada. El encapuchado la alzó inamovible frente a él retándole y empezó un duelo que terminó rápido… con el encapuchado en el suelo… comparado con el capitán su destreza era la de un aficionado, si bien lo había hecho bastante bien hasta ese momento. El encapuchado trató de coger de nuevo su espada pero el rubio pisó la empuñadura de esta sobre la cual estaba su mano haciendo al encapuchado soltar un gruñido fuerte por la presión de la bota del inglés que le levantó la capucha con la espada. ¡Cuál fue mi sorpresa al ver que el misterioso encapuchado era mi hermana gemela! Ante el fragor de la batalla su peinado se había deshecho y su cabello caía cual cascada enmarañada por su espalda cual largo era.
— A woman! Are you kidding me? A woman killed Frederic?16 –palidecí mirando a mi gemela. Imposible no reconocerla, su cabello rubio y su piel morena eran inconfundibles.
— ¿Eternia? –pregunté sorprendido. Ella sopló un cabello que se la había metido en la cara para apartarlo y miró con asco al inglés.
— ¡Soltadnos ahora mismo malditos piratas! –dijo ella.
— Tienes valor, en la situación en la que estás no tienes derecho si quiera a reclamar bloody bitch17.
— ¡Qué os den! ¡Soltadnos ahora mismo a mi hermano y a mí! –ordenó iracunda ella.
— No, prefiero degollaros aquí mismo –dijo el inglés sonriendo de forma macabra.
— ¡Parlamento! –grité horrorizado ante la idea de ver morir a mi hermana mayor. El inglés me miró con ira fulminándome con la mirada.
— What?18 –inquirió él.
— ¡Parlamento! ¡Solicito nuestro derecho al parlamento!
— ¡No tenemos nada que hablar con ellos Eternity! –gritó ella.
— Tsk, deberías escuchar más a tu hermano chica estúpida, ¿cuáles son vuestros nombres, español? –preguntó el capitán.
— Eternity Fernández Carriedo y Eternia Fernández Carriedo –respondí firmemente. El capitán Kirkland palideció más aún, si eso era posible y nos miró fijamente a ambos.
— Very well19, los señoritos Fernández Carriedo pasarán una buena temporada con nosotros, tenéis suerte de que sea benevolente. Take them to my cabin Alfred!20
— Yes, my Captain21 –indicó el americano obligándonos a ponernos de pie y arrastrándonos hacia el camarote del capitán y encerrándonos ahí.
1Requiescant In Pace: En latín, "Descanse en paz".
2Bruder: En alemán, "Hermano, compañero".
3Eternity, bist du okay?: En alemán, "Eternity, ¿estás bien?"
4Ja, ich denke schon: En alemán, "Sí, creo que sí"
5Non, c'est bon, où est Antonio et Eternia?: En francés, "No, estamos bien, ¿dónde están Antonio y Eternia?"
6Ils devraient être sur le chemin de la forêt, fuyant: En francés, "Deben de estar de camino al bosque, huyendo".
7Chigi! Eternity sei pazzo? Potevano ucciderti! Basta con le stronzate e Eternia con Antonio e ci vediamo!: En italiano, "¡Chigi! Eternity ¿estás loco? ¡Podrían matarte! ¡Corta el rollo y vamos con Eternia y con Antonio!"
8Ve, Eternity, mio fratello ha ragione, si potrebbe finire con l'essere che dobbiamo fare la pace: En italiano, "Ve, Eternity, mi hermano tiene razón, podrías acabar siendo tú al que tengamos que dar la paz".
9Piú il mio dovere di cristiano è quello di portare la pace: En italiano, "Más mi deber como cristiano es llevar la paz"
10Ey! Another Spaniard's here!: En inglés, "¡Ey! ¡Aquí hay otro español!"
11Danke: En alemán, "Gracias".
12Surrender, no escape Spaniards: En inglés, "Rendíos, no hay escapatoria españoles".
13They are brave, Captain Kirkland'll decide his fate, let's go!: En inglés, "Son valientes, el capitán Kirkland decidirá su destino, ¡vámonos!".
14What is happening here?: En inglés, "¿Qué está pasando aquí?"
15Captain, I saw them killing some of our men and gave them the pace instead of run away, some of them finally run away but this man shot your second oficial. I thought you would want to punish them personally: En inglés, "Capitán, les vi matar a algunos de nuestros hombres y darles la paz en vez de huir, algunos de ellos huyeron pero este hombre disparó a su segundo oficial. Pensé que querría castigarles personalmente".
16A woman! Are you kidding me? A woman killed Frederic?: En inglés, "¡Una mujer! ¿Me estás tomando el pelo? ¿Una mujer mató a Frederic?"
17Bloody bitch: En inglés, "Maldita zorra".
18What?: En inglés, "¿Qué?"
19Very well: En inglés, "Muy bien".
20Take them to my cabin Alfred!: En inglés, "¡Llévalos a mi camarote Alfred!"
21Yes, my Captain: En inglés, "Sí, mi capitán".
N/A: Vale, no tengo ni papa de idea de alemán, italiano y de francés menos aún. De inglés es posible que esté mal también así que si me queréis matar antes de eso por favor sólo avisadme de qué tengo mal y lo corrijo y no necesitamos matar a nadie en el proceso (¿?). Los gemelos están muy mal de la chota, ¿verdad? Pues se puede poner mejor muahahaha en el próximo capítulo veremos la historia de Arthur. Y vaya historia~. Espero que os vaya gustando. Por favor, contadme vuestras impresiones, los reviews son hermosos y el silencio me atormenta el alma y mi enferma cabeza (¿?). Besines~ tengo otro capítulo además de este que subiré ahora pero de momento no he seguido la trama. Puesto que en el de "W Gakuen" me habéis pedido tan encarecidamente una rápida continuación me he puesto a ello hoy mismo pero no sé cuándo acabaré porque estoy rebosante de tareas del mal y también tengo otros fanfics que aún no he subido aquí aun que creo que de hetalia ya no hay ninguno sí me gustaría subir los de yugioh! así que voy a estar un poco liadilla aun así haré lo que pueda mientras combino mi tiempo escaso y hermoso (¿?) entre el instituto, la escuela de idiomas, dibujar y escribir así que no os preocupéis si desaparezco o si no lo hago (¿?). Besines y reviews~ (¿?). Por desgracia no funcionan los subíndices así que se van a tener que quedar así los numerajos, lo siento chicos.
