Los personajes de Avatar y su historia no me pertenecen

Fuego y Tierra

1

El barco

Ella despertó por el suave balanceo de las olas, le dolía la cabeza

--¿Dónde estoy?—preguntó mientras se frotaba, en ese momento recordó

Inicio del Flash back

Ella estaba en medio del bosque, corría, algunas partes de su ropa estaban chamuscadas. Su camino se vio obstruido por un joven

--¿Así que la Princesa Tierra huye?—preguntó él, mientras que de sus manos salían llamas—que poco honesto

--Ah—dijo la chica—y supongo que atacarme con toda tu flota es honesto—levantó sus manos y con esto varias bolas de tierra aparecieron y se lanzaron contra él

--Eres mejor que esto—el chico lanzó unas cuantas llamas que deshicieron las bolas de tierra

--Zuko—tenía los dientes fuertemente apretados—quieres que peleé en serio y así será

--Así me gusta—la chica movió su pie provocando una grieta en el suelo, Zuko saltó evitando caerse, entonces creo una enorme bola de fuego que se dirigió contra la chica, pero esta alzó una pared protegiéndose. Ella provocó que varios tumores salieran de la tierra, Zuko saltaba esquivándolos, pero salían demasiado rápido, así que saltó a un árbol. Cuando se volvio para atacar, su oponente había desaparecido, en su lugar había un gran agujero en el suelo

--¿Dónde estás?—Suko espero varios segundos—ya que no quieres salir—saltó y se paro a pocos centímetros del agujero—fuego—una gran llamarada salió de sus manos, y se dirigió a la oscuridad. Espero unos segundos, en ese momento otro agujero se abrió a metros de él. Ella salió sudando

--Maldito—dijo

--Gracias—cerró sus puños lanzando bolas de fuego sin cesar, ella sólo las esquivaba, estaba demasiado cansada, entonces un fuerte golpe la hizo caer

Fin del Flash back

Se levantó con los ojos inyectados de rabia

--¡Saquéenme de aquí!—gritó detrás de los barrotes—demonios—golpeó los barrotes con fuerza antes de irse a sentar en una esquina

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Media hora después, dos guardias abrieron la celda

--El Príncipe Zuko desea verte—dijo uno de ellos

--Me niego—dijo ella, entonces el otro guardia lanzó una bola de fuego en su contra, la bola pasó arriba de su cabeza y choco contra la pared, sin embargo ella no se movió para nada

--Muévete—la levantaron por los brazos, soltó un suspiro de fastidio. La llevaron a través de enormes pasillos de metal, hasta la cubierta, ahí se encontraba Zuko que entrenaba con su Tío

--Señor—dijo uno de los guardias

--Sí—contesto el joven, la batalla se interrumpió, el príncipe le dirigió una mirada penetrante a su prisionera—pueden irse—le dijo a los guardias

--¿Se encuentra bien, señorita?—preguntó el anciano con una cálida sonrisa

--Claro—contesto ella—a excepción de que soy prisionera de la Nación del Fuego, tengo unas cuantas quemaduras y… ¡ah!, me atacaron por la espalda, estoy bien

--Lo siento, teníamos prisa, yo fui quien la golpeó…

--Tío—Suko seguía mirando a la chica—por favor

--Sí, sí, sí—el anciano se dirigía a la sala de comandos—señorita, si necesita algo dígamelo—los dos enemigos se miraron por largos segundos

--¿Qué hago aquí?—preguntó ella, él levantó una ceja, cuestionando la pregunta—me refiero a, ¿por qué no estoy en la celda?

--Pensé que tenías dudas

--¿Cómo?—Suko se sorprendió

--¿No te interesa saber por qué te secuestre?

--No—él abrió los ojos como platos—ya lo sé, me entregarás a tu Padre, es lo que cualquiera haría, pero si quieres decirme algo más, adelante— se mordió el labio

--Eres una…--soltó un suspiro—no importa—se dirigió a babor—vales mucho, Toci—en ese momento llegaron los guardias y la llevaron

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Ya había anochecido, Zuko había echado una última mirada a su prisionera antes de retirarse.

Toci se despertó, el barco estaba en completo silencio, el guardia a lado de su celda estaba profundamente dormido

--Perfecto—sacó su mano y alcanzó las llaves, que se encontraban en el cinturón del guardia—por favor—rogó que la puerta no rechinara, una vez fuera echo a correr aunque sigilosamente, pero para su desgracia, Zuko ya la esperaba en cubierta

--Vaya—dijo—tardaste más de lo que esperaba

--¿Lo sabías?

--Tienes la fama de escapar de los lugares más difíciles

--No has dado la alarma

--¿Debería?

--No lo sé—la brisa del mar acariciaba sus cabellos—supongo que volveré…

--Vales mucho Toci, eres la esperanza de todos, después del Avatar, te entregaré a mi padre, tal vez no valgas su perdón, pero me dejará regresar a casa

--Así que por eso me secuestraste—él asintió, ella movió la cabeza negativamente

--¿Qué?

--¿Casa?—se burló antes de volver a su celda

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Está un poco corto pero espero que les guste. Aclaro Toci es el nombre de una de las diosas Aztecas de la tierra. Abucheos, aplausos, consejos, son bien recibidos

Manfariel