por dark_sakurita
Capitulo 1
En búsqueda de La Promesa Inconclusa
Me encontraba de camino hacia el desierto perdido, donde había nacido, mientras tanto el recuerdo de una promesa daba vueltas por mi mente, me preguntaba si algún día, se cumpliría.
Llevaba varios días de caminar, había pasado a visitar el santuario del Rey Coltazan, ya que hace mucho que no daba una mirada por ahí, luego continúe mi camino y entrada la noche llegue a donde me dirigía, a La ciudad de Sakhmet.
No pude evitar sonreír al llegar, ya que tenia mucho tiempo a causa de mi viaje que no venia por estos lados, y me alegro, notar que todo estaba tal cual lo recordaba, los puestos, el extraño y constante ruido de los petpets que de ves en cuando se le escapaban al comerciante de la tienda, todo se veía normal, tal cual como lo recordaba.
Me dirigí a un lugar que conocía, que no estaba muy lejos, mi viejo hogar en el desierto perdido. Admito que se ve extraña, porque no es igual que las tiendas normales, era un poco más grande. Cuando entre y mire a mí alrededor, note que el paso del tiempo había causado un poquito de estragos, un poco de polvo por ahí, algo de arena, pero nada pasaba de eso. Pero sin pensarlo mucho, me acerque a mi vieja cama y me quede dormida, ya de por si, por el cansancio de la larga caminata hasta llegar aquí.
A la mañana siguiente, cuando desperté, fui a comprar un poco de fruta y comida, también pase parte de la mañana haciendo la limpieza, ya que parecía que tenia mucho tiempo sin haberlo echo y había mucho polvo a montones.
Volvió a pasar el día, había pasado mi primer día de mi regreso limpiando, pero bueno, no podía evitarlo, nadie lo haría por mí, así que no me quedaba más remedio que hacer la limpieza.
A la mañana siguiente, había ido a caminar, paseaba por los puestos, hasta que un Lupe de espaldas a mi, llamo mi atención, me parecía conocido, pero ¿será el? Me preguntaba interiormente, al acercarme un poco mas, descubrí que era quien creí que era.
Sin poder decir una palabra me acerque, pero también en silencio, estaba segura que no me había visto, hasta que un "hola, como estas? Tanto tiempo desde que nos vimos la ultima ves" me saco de un solo tiron de mi silencio y de la sorpresa, no esperaba que me hubiese visto.
Frente a mi y sonriendo se encontraba, un joven Lupe, con una combinación de ropa algo extraña, aun así el era un arqueólogo y también algo aventurero, así que no me extrañaba mucho al menos verlo así, ¿su nombre? Alexander.
Lady: -sonrío nerviosa- creí que no me habías visto, y eso que no hice ruido
Alexander: -continua sonriendo- tengo tiempo que no te veía, realmente me sorprende verte igual que siempre
Lady: gracias, tu tampoco has cambiado mucho –sonrío apenada- ven, porque no me acompañas?
Alexander: Esta bien –sonríe- en fin, cuéntame como has estado? Realmente ha pasado mucho tiempo desde que nos vimos la última vez
Lady: -pensando- hmm, no hay muchas emociones en mi vida, solo he estado un tiempo viajando y visitando a un viejo maestro que vive en Shenkuu –sonríe- ¿y tu?
Alexander: he estado visitando algunas ruinas, las ultimas a las que visite fueron las de la antigua Maraqua, son interesantes, pero hay que tener cuidado, siempre hay peligro por esos lados.
Lady: Oh, yo hace un tiempo visite la nueva ciudad, es interesante, aunque aun me pregunto como le harán para mantener las ruinas antiguas, ha de ser un poco complicado, al menos eso creo
Alexander: un poco, pero no es tan complicado como parece, solo hay que tener cuidado, es todo, a parte claro, escuchar lo que te dicen cuando te hacen la visita guiada en ese lugar.
Lady: ya veo –me quedo pensativa-
Ambos caminamos y llegamos a la que era mi casa, me preguntaba si podría llegar a preguntarle acerca de aquello, pero temía que todo terminara como aquellas ves, el día que nos separamos.
Lady: hmmm, Alex –lo miro-
Alexander: ¿si? –voltea a mirarme-
Me había acostumbrado a llamarle Alex, se me hacia muy complicado al principio, ya que Alexander me sonaba muy, extraño, pero aun así, a el no parecía molestarle.
Lady: dime, ¿Por qué regresaste?
Alexander: ¿eh? –sin entender-
Lady: si, me pregunto el porque, me parece tan extraño, que haya tenido la suerte de volverte a ver
Alexander: -sonríe- por lo que veo aun sigues recordando lo ultimo que hablamos no es así?
Lady: si, pero…no sabia si hablar de ello o no, no sabia como lo tomarías
Alexander: -sigue sonriendo- no te preocupes, dudo mucho que yo muerda –se ríe- tampoco ladro, así que no te preocupes
Lady: -mirada sarcástica- no te hagas el gracioso justo ahora –lo miro enojada-
Alexander: -contiene la risa- bueno, bueno, calma –se tranquiliza- dime que es lo que te esta inquietando acerca de ello
Lady: lo que pasa es que…me estaba preguntando que pasará el día que te volviera a ver, como serian las cosas, que tanto habrán cambiado...
Alexander: ya veo, lo entiendo, y aun recuerdo lo que te prometí, pero…aun no has respondido a aquella pregunta de aquel entonces.
Lady: lo se –miro nerviosamente a la mesa por unos momentos- pero, deseo responderte a ello
Alexander: entiendo –se queda esperando-
Lady: con respecto a esto, yo…-sigo con la mirada algo escondida, apenada- lo he pensado bien durante estos años que no te he visto y tampoco he podido estar cerca de ti, y yo…
Alexander: ¿si? –espera pacientemente-
Lady: -suspiro profundamente- mi respuesta es si –levanto la mirada para mirarle- se que te he extrañado muchísimo, y que tampoco me gustaría volverte a dejar ir y menos como paso la ultima ves
Alexander: -sonríe- espera, antes de que continúes, tengo algo que decirte, yo tampoco estuve muy a gusto con la idea de haberme ido así como así, tal ves, esto nos hizo darnos cuenta de la verdad, y en cuanto a mi, también tengo la misma idea.
Lady: -sonrío apenada- entonces, eso quiere decir que, podemos volver a estar juntos? Que no tendremos que volver a separarnos?
Alexander: si es lo que quieres, pero si no es así, tendré que decirte que no, que no tendremos porque ¿o si?
Lady: Wa –ignoro la mesa y doy un ligero salto para abrazarlo- gracias
Alexander: -reacciona algo perplejo- oye, la mesa –mira las cosas que se cayeron y demás-
Lady: -sigo la vista de Alex- oops, jajaja que desastre –comienzo a reírme-
Alexander: -niega divertido- si que no has cambiado mucho, y con respecto a esto, claro
Lady: no te burles, aun sigo sin poder controlar ese tipo de impulso –le miro como regañándolo-
Alexander: jajá –se ríe a carcajadas-
Lady: eres un…-me levanto de donde estaba sentada y levanto alguna de las cosas que están en el suelo- oh vaya, tendré que ir a comprar mas –viendo una de las tazas rotas-
Alexander: me sorprende que haya sido solo la taza –sigue riéndose-
Lady: oye ya! Ya basta! –Miro enojada-
Alexander: jajaja –sigue riendo pero luego se calma- esta bien, ya me calme –sonríe-
Lady: -mirada cómica- eso espero
Alexander: en fin, en que estábamos?
Lady: dime, cuanto tiempo tienes? Al menos para quedarte? –le mira preocupada-
Alexander: tendré que volver dentro de unos días a las ruinas de maraqua y de ahí visitar La Ciudad de Qasala, al parecer tienen algunos problemas con algunos escritos –sonríe divertido-
Lady: ya veo –miro un momento, con la mirada algo perdida- entonces te iras pronto no es así?
Alexander: oye espera –mira preocupado-
Lady: es que no quisiera que te marcharas, no me gusta la idea de estar sola.
Alexander: ¿Por qué no vienes conmigo? –Pregunta incrédulo-
Lady: ¿crees que sea buena idea? –le miro sorprendida-
Alexander: ¿Por qué no? ¿Tienes alguna mejor idea? –sonríe-
Lady: Oh Entiendo, no creo tener alguna mejor idea –sonríe-
Alexander: entonces, será mejor que prepares algunas cosas, porque de aquí a unos dos o tres días tendremos que salir.
Lady: esta bien, creo que deberías acompañarme, no se que mas podríamos necesitar
Alexander: buen punto, a ver, deberíamos darnos un paseo por los puestos a ver que más nos puede faltar –se pone de pie- ven, luego ordenaremos todo esto
Lady: esta bien –sonríe- pero me consta que fuiste tu el de la idea de no ordenar nada ahora
Alexander: tranquila, ya vamos –extiende su mano y toma la de lady- vamos, que no se cuanto rato queda antes de que cierren todas las tiendas
Lady: -sonrío- vamos!
Así pasamos la tarde, de compras, evidentemente íbamos a necesitar bastantes cosas, pero aun así, estaba impresionada. Aunque por otro lado estaba muy feliz, pensaba que no valía la pena preocuparme mucho por esta promesa, pero aun así, termino como esperaba, aunque me comenzaba a preocupar la idea del viaje, admito que estando sola no me iba muy bien ¿Cómo era que me iría bien ahora? Esa pregunta pasaba por mi mente, llegada la noche, regresamos, ordenamos las cosas que habían quedado desordenadas y a los dos días partimos directamente hacia las ruinas de Maraqua, y luego pasaríamos de paso unos días para La Ciudad de Qasala, solo rezaba para no meterme en problemas o aun que mejor pensándolo bien, no causar problemas.
¿Qué nos esperaría en maraqua y en La Ciudad de Qasala? Eso lo sabremos en cuanto lleguemos allí.