Disclaimer: Ningún personaje es mío, son todos de Hidecaz.

Título: Punto Nemo.

Resumen: Lovino se perdió en el mutismo y Antonio entre la habladuría.

Pareja: Spamano.

Explicación: Quiero decir que ciertas partes las he cambiado. Sería muy bueno que lo vuelvan a leer, ya que he cambiado algo fundamental en esta parte. ¡Disculpen las molestias!


Prólogo.


La luz de la luna alumbra tenuemente su sonrisa, mientras gotas carmín resbalan de sus manos. Su mente se hundió entre recuerdos benignos y caóticos, haciendo que su cuerpo se estremeciera. Vio sus palmas cubiertas de ese líquido viscoso y ahí, al volverse a ver, siente un escalofrío recorrer por su columna vertebral. Tiembla sin saber muy bien por qué.

Quizás la inestabilidad de sus rodillas se deba al miedo —a ser atrapado, a que sea un sueño o simplemente que ese espectro se levante— o, tal vez, a la mera excitación que siente al ver al cuerpo botado.

El vaho sale de su boca lentamente, parece el venenoso tabaco que antes le gustaba y ahora solo necesita.

Piensa «¿Y ahora qué?». Ante eso solo pude comprimir los labios algo molesto y aterrado, pensando en las posibilidades del día siguiente o del mismo ahora. Su mirada comienza a recorrer el cuarto vacío, encontrándose en la casa de años pasados, el patio de sus sueños y la persona botada en el suelo. Quizás no debió hacerlo, pero era inevitable.

Su boca seca aún tiene la mueca dibujada, sin ganas que esta desaparezca siente la gran intención de reír cual loco, mas no puede hacer eso; no ahora. Se contiene un par de segundos antes que alguien toque la puerta. El miedo le inunda de nuevo y el deseo de reír igual.

Cuando la puerta de metal es abierta, Antonio Fernández Carriego llora a más no poder. Solloza fuertemente, mientras cortadamente va diciendo un:

—…Lo hice… Yo lo hice…. Fui yo.


Hola.

¿Qué tal?

Bueno, yo soy nueva en el fandom —y es más, también soy nueva en este mundo que es Hetalia. Recién este año lo he visto— y como tenía las grandes ganas de escribir sobre estos dos, aquí está mi historia. Debo de admitir que mi favorito está a punto de ser España, me encanta, aunque tengo cierto rencor con lo que hizo a América —sí, sí, sí. Ya sé que aquello no importa, pero mientras más investigo de esa nación, más rabia siento. Pero aquello no evita que me agrade—.

Si ven que voy a ir manejando mal a los personajes, solo díganme y lo cambiare. Yo acepto cualquier tipo de crítica constructiva, así que no se cohíban.

En fin, en cuanto a la historia, esta historia nació de la simple idea de: «Deseo algo con Antonio no tan bueno». Si bien España es buen tipo, hay algo mal en él —el mismo creador lo dijo— o al menos no es tan bueno. Además yo, como la buena américa que soy, sigo resentida. Aquí —a pesar que no quiero contar mucho, pues el misterio es lo que deseo— solo diré que quizás no sea dulce o no tanto.

Espero que les haya gustado y ya deseo leerlos para saber qué opinan.

Nos leemos pronto (o eso espero).

Introducción de antes. Para la nueva versión….

Hola. Bueno, quería decir que este fic lo hizo hace mucho, mucho tiempo, sin embargo ya con los años en este fandom les puedo decir que quiero acabarlo y que quiero hacerlo bien. Ya tengo la idea establecida y un final preescrito.

Espero que les guste aún les guste y que lo siguen queriendo tanto como lo quisieron antes.