Los personajes son creación de Masashi Kishimoto, Universo Alternativo, Mpreg y con un pequeñisimo crossover de Trinity Blood.
Uchiha
Por Tlacuilo
El desayuno constaba de jugo frutas, huevos con tocino, café, tostadas y… los clásicos reproches de Fugaku.
_ Itachi ya deberías estar en la oficina tenemos junta con los próximos socios y tenias que checar que todos los preparativos fueran por buen camino.
_ Si padre, ya lo deje hecho ayer.
_ Como gerente de ventas, sabes que nunca esta de mas un ultimo repaso.
El mayor de los hijos del matrimonio Uchiha se levanto dio las gracias y salió rumbo a la empresa -un emporio especialista en la explotación y la fabricación de materiales para construcción-, la madre y el hijo menor no tenían permitido inmiscuirse en los asuntos de la empresa, Itachi el primogénito sería el que se encargaría de todo cuando su padre se retirara, Sasuke el menor, a quien Fugaku consideraba un cero a la izquierda, estudiaba la universidad -Arquitectura- deseando ser útil a su familia. El silencio reino en cuanto Itachi dejo la casa, solo se escuchaba el sonido de los cubiertos, Mikoto, vio como Sasuke apuraba los bocados intentando terminar rápidamente sus alimentos para salir de ahí, cuando lo hizo se levanto dio las gracias y se retiraba cuando Fugaku le hablo.
_ Tu futuro esposo vendrá la próxima semana, procura estar presentable.
_ Si padre -el moreno se asombro pero no podía demostrarlo, si lo hacia, las frases que escuchaba desde que tenia uso de razón; se harían presentes en los labios de su padre y el no deseaba eso.
_ Mikoto encárgate de esto, no quiero que Minato se lleva una decepción, me interesa mucho esta sociedad y por fin el… doncel -esto lo dijo con fastidio- será de utilidad.
Sentado en la parte trasera del auto, con dirección a la universidad; Sasuke pensaba en su situación, era verdad que su condición, fue una decepción para su padre -quien culpaba por esto a su madre-; pero ¿por que lo trataba de esta manera?, había mas como el que no eran discriminados, el poder dar vida no te hacia un fenómeno ni mucho menos inútil, ni menos hombre, ¡¿por que entonces no podía ser parte de la empresa? Lo habían vendido para asegurar un contrato multimillonario con las empresas Namikaze -una de las compañías de construcción, más grandes de Japón- según las palabras de su padre; el hijo de Minato seria su esposo y con eso los Uchiha y los Namikaze serian socios. Por su parte Sasuke consideraba que ese tipo de trato era muy arcaico pero aun en se utilizaba en demasía en su país. El auto de detuvo y fue como el moreno regreso al mundo real, cogió su tubo -para planos- su mochila, donde traía su lap top y salió del auto con dirección a la entrada de la prestigiosa universidad ANBU; ahí camino hasta su facultad donde lo esperaban: sus amigo Juugo, Suigetsu y su novia Karin, quienes lo vieron y fueron a su encuentro.
_ Sasuke, hoy entrenaremos en las canchas, el gimnasio lo ocupara Ingeniería - decía el de cabello plata.
_ Hola a todos… y esta bien Suigetsu, estaré libre a las tres, hoy solo tengo proyectos y no creo que el profesor se tarde en revisarlos, ya que muchos no lo terminaron para la fecha.
_ Yo si -comentaba con voz tranquila Juugo.
_ Bueno Juugo tu tienes un novio que ya se graduó y tienes la ventaja de que trabaja en un constructora.
_ Si, como dice mi Karin tú tienes ventaja; en cambio yo no he dormido en tres días más que lo mínimo.
_ Si cariño pero tú tienes la culpa por no avanzar rápido- aseguraba la pelirroja.
Sasuke solo veía el intercambio de excusas entre la pareja y como Juugo se defendía alegando que Kimimaro solo lo asesoraba. El moreno por su parte a pesar de tener contactos en la rama que estudiaba -por la empresa de su familia- no los usaba por temor a que Fugaku se enterara y lo humillara, pues ya era suficiente con la mueca de desdén que obtuvo de su progenitor al enterarse de que estudiaría Arquitectura. Ya estaban por graduarse y su último proyecto seria el que entregaban ese día.
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En la facultad de ingeniería en el salón cuatro; Naruto Namikaze conversaba con Sakura y Sai sus amigos, ambos eran pareja desde meses atrás pero su relación no era muy melosa como para perder su individualidad, por lo que en ese momento ambos tenían opiniones muy distintas del tema que les comentaba Naruto.
_ Ese tipo de convenio entre empresas es muy común, además tu padre esta respetando tus preferencias -aseguraba la chica.
_ Si pero es el Uchiha, El bloque hielo Uchiha- comentaba Sai mientras el rubio asentía con el.
_ Por favor nos conocemos desde que entramos a la universidad y aun siguen con ese estúpido mote y tu Naruto convives con Sasuke desde que iban al jardín de niños, ¿acaso no hay algo bueno en el, de lo que te sientas atraído?
_ Bueno… tiene un culo perfecto -un sopapo cayo en la rubia cabellera.
_ ¡Naruto!
_ Tú preguntaste Sakura chan.
_ Si amor tú se lo preguntaste.
_ Pero me refería a sus sentimientos a… ¡otra cosa!
_...
_...
_ ¡Hombres!
Los dos chicos se miraron y encogieron los hombros, caminaron con dirección hacia su amiga que ya salía rumbo a la cafetería -pues era hora del almuerzo-. Ahí el rubio y sus dos acompañantes se sentaron cerca de la ventana para seguir conversando, pero notaron que Sasuke y sus amigos también llegaban a comer; Naruto se levanto y fue en la dirección del moreno.
_ Hola Sasu chan -decía burlón pues sabia que el otro odiaba esos diminutivos
_ Dobe.
_ Vamos una sonrisita para tu prometido.
_ Vete a la….
_ ¡Huy que genio Sasu chan!
Al ver que el moreno lo ignoraba olímpicamente el rubio se retiro. Caminó hasta su propia mesa y se sentó con desgana, Sakura dejo de besar a su chico y lo miro.
_ ¿Y?
_ ¿Por que no puede ser como su hermano?, con Itachi me llevo de maravilla, desde que recuerdo siempre es divertido… incluso cuando tuve edad me llevo de parranda y eso lo hacemos muy seguido, deberían de ver como…
_ Si Naruto lo sabemos hemos estado ahí, pero el problema es que Itachi no es tu futuro esposo.
_ Pues debería seriamos muy felices juntos.
_ Y quien seria el seme -preguntaba Sai mientras comía las papas que acompañaban a su hamburguesa.
_ Mira pues…
_ A eso me refiero Naruto, Itachi y tu son muy compatibles por que a ambos les gusta la diversión, pero como matrimonio no seria muy buen opción.
_ Lo se -suspiro derrotado Naruto- si tan solo Sasuke fuera mas… no se… desinhibido.
Sai vio a Naruto con lastima y Sakura con molestia, ella no veía mal que el moreno fuera así de serio, lo que esos dos enfrente no entendían es que el menor de los Uchiha se protegía así de salir lastimado.
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Caminando con dirección a las canchas al aire libre Sasuke se preguntaba por que Naruto insistía en tratarlo como chica si el era tan masculino como cualquiera, era tan bueno en deportes como el que mas y no tenia esa arranques hormonales como ellas, incluso eran tan fuerte como el propio rubio, por eso la actitud de Namikaze lo molestaba en demasía, el que fuera a ser su esposo no le daba derecho de tratarlo así. Sin embargó no podía negar que… amaba a Naruto y que el… negocio que harían sus padres para él era como un regalo. El equipo de futbol soccer de Arquitectura, practicaba cuando Sasuke llego, Suigetsu lo llamo mientras se terminaba de amarrar los tacos, el de cabello plata se acerco.
_ Juugo será portero, el Profesor Nightroad* no vendrá
_ …
_ Al parecer su esposo tenía consulta y le cambiaron la fecha.
_ Bien.
_ Iruka su portero es un hueso difícil de roer.
_ Pero con lamentarnos no ganamos nada, además Juugo será suficiente, con esa altura no creo que tenga tanto problema.
_ Bien por que el zorro rubio, no perderá oportunidad para golearnos si lo dejamos.
_ No lo haremos.
La practica continuo y Sasuke se unió en su puesto como delantero, sus fuertes piernas lo hacían muy veloz, claro que en contra del zorro rubio eso no serviría, ya que en velocidad nadie le ganaba a el hijo del rayo amarillo -como nombraban a Minato, en sus tiempos de escuela- la astucia Uchiha seria la que decidiría el resultado de ese juego, y para lo que la mayoría era un simple juego entre facultades para divertirse, para nuestro Uchiha era la oportunidad de demostrar que el ser doncel no lo hacia débil.
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En la compañía Uchiha, Itachi terminaba de redactar el contrato con los Namikaze a su secretaria, sus horas de labores culminaban con eso y siendo viernes, tenia salida con Naruto a algún antro para celebrar su triunfo… o derrota, no importaba la excusa no importaba, se encamino a su auto y salió para Sharingan el lugar del que su primo Shisui era dueño, ahí esperaría al rubio con algunas chicas para el y unos chicos para Naruto; era lo menos que podía hacer por su futuro cuñado. Una hora después el de coleta disfrutaba de su vodka en las rocas cuando vio entrar y dirigirse a su mesa a Naruto, este lo vio y pidió lo mismo para beber.
_ ¿Y bien?
_ No preguntes tu hermano y su equipo nos ganaron aunque no por mucho.
_ Te confiaste.
_ Mmm, supongo.
_ Bueno, no hay opción mas que pasarla bien para olvidar tu derrota.
_ Y que lo digas Itachi.
Entre tragos baile y mimos por parte de sus acompañantes; el dúo término en la madrugada su fiesta en un hotel cerca de ahí, cada uno con sus respectivas conquistas.
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Mientras en La granja, un restaurante bar cerca de la universidad lugar asiduo de los estudiantes, los futuros arquitectos, celebraban su triunfo, el final fue bastante cerrado pero ellos se habían erigido como ganadores; el ultimo tanto había sido anotado por Lee uno de los ayudantes del profesor -jóvenes graduados que hacían su trabajo social de ese modo- Abel quien sintiéndose culpable por no participar en el juego por la cita con su esposo al medico, ofreció a su asistente como suplente. Sasuke sonreía con los alaridos -cantos- de sus amigos por la victoria. Una hora antes de la media noche el Uchiha se despidió y regreso a su casa -el chofer lo esperaba afuera- camino a la mansión el moreno tomo una llamada, era su hermano comentándole que esa noche no llegaría y que por favor no le dijera nada a sus padres, Sasuke respondió con monosílabos, ya que su concentración estaba en la voz de un rubio muy conocido por el, que hablaba con una chico y sus carcajadas se escuchaban por el teléfono, la llamada finalizo, y un sentimiento de perdida se instalo en el pecho del menor, no era tan inocente para no saber que harían su hermano y Naruto en ese lugar y donde terminaría esa velada, pero ese conocimiento no hacia menos doloroso.
La casa Uchiha se veía cerca, el auto se estaciono y Sasuke entro. Lo que no esperaba, era ver a su padre en el pasillo aguardando, Sasuke se detuvo.
_ No me importa que hagas a estas horas y con quien estés solo asegúrate de… estar completo para tu esposo; no quiero sufrir una humillación si te regresan.
_ Yo… yo gane… ganamos un partido contra…
_ No se para que pierdes el tiempo, tu serás un ama de casa y no necesitas mas conocimientos que traer hijos al mundo.
_...
Fugaku se giro y dejo rumiando su enojo y desilusión al menor de los Uchiha, Sasuke camino lentamente y subió las escaleras hasta su habitación; al principio cuando era un pequeño lloraba por la indiferencia y palabras amargas de su padre, corría hasta el jardín y ahí se escondía hasta que Itachi lo encontraba , su hermano lo abrazaba y le hacia avioncito hasta que el morenito sonreía de nuevo… pero ya con veintitrés años no podía esperar a su hermano, ni esconderse ¡mucho menos esperar ese abrazo!, hace mucho que Itachi -igual que su padre- lo consideraba una molestia, o por lo menos ya se había cansado de defenderlo. Lo que los otros dos hombres Uchiha no sabían es que Sasuke era el mejor de su generación y ya le habían ofrecido trabajo en muchos despachos pues tres de sus diseños fueron ganadores de los concursos anuales: Un hotel, un hospital y una ciudad deportiva, fueron respectivamente los proyectos ganadores; ese y otros logros eran los que el joven de ojos negros se guardaba para si mismo -no por opción propia-, su madre lo escuchaba silenciosamente pero cuando una idea de autonomía surgía en una arranque de optimismo, ella se encargaba de recordarle sus deberes. Más quien realmente conociera a Sasuke sabría que este no se rendiría en luchar por sus metas.
En la habitación del matrimonio Uchiha Fugaku le informaba a su esposa la nueva travesura de su hijo menor.
_ Seguramente se embriago con sus compañero de facultad, y si Minato se entera…
_ Naruto sale de juerga con Itachi desde los quince años.
_ No es lo mismo, ambos son herederos de compañías y necesitan un poco de diversión por el estresante trabajo, no apruebo que lo hagan pero no se puede evitar, mientras no afecte en lo más mínimo su desempeño en los negocios.
_ Sasuke es muy responsable…
_ Por favor, ¿que mas podría hacer? después de todo no le exigimos mucho a pesar de que se le da todo
_ No todo
_ ¿Que?
_ Nada… que es mejor dormir, seguramente Itachi no regresara esta noche.
_ Si.
La mujer de hermosos rasgos dejó el libro que leía y suspiro tristemente, su familia era una farsa y el amor eterno de juventud que anhelo, no lo conoció nunca y como se veían las cosas su hijo menor sufriría el mismo destino.
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La mañana encontró a la familia Uchiha cada uno en su lugar favorito Sasuke estudiando en su habitación, Mikoto cuidando su jardín, Fugaku revisando documentos en su despacho y a Itachi… compartiendo la cama en la habitación de un hotel con una mujer desconocida pero muy hermosa; después de una ronda mas de sexo la chica se despidió algo renuente y dejo al moreno duchándose, la puerta que conectaba a la habitación con la de Naruto se abrió y dejo ver a un rubio algo despeinado pero recién duchado, al salir Itachi lo vio en el sillón y pidió el almuerzo ¿o seria comida? Se sentó frente al Namikaze y este lo miro con una sonrisa en las zorrunas facciones.
_ ¿Que tal tu… noche?
_ Supongo que tan bien como la tuya.
_ Bueno hay que organizar tu despedida de soltero… bueno de hecho ya hice los preparativos y será ¡Una bacanal! Espera y veras cuñadito.
_ Bueno es lo menos que merezco, tu hermano no creo que me deje seguir con esta -suspiro dramáticamente- hermosa vida.
_ No exageres, además para que se inventaron las juntas y los viajes de negocios.
_ Cierto…. Pero eso estar bien ¿no te molesta que engañe a tu hermano?
_ No, ¿que te hace pensar que el no hará lo mismo?
_ ¡Oye!
_ Por favor no creo que te duela mucho su infidelidad.
_... Supongo que no.
Los dos hombres siguieron conversando y haciendo bromas, y nuevamente el rubio se lamento que Sasuke no tuviera una personalidad divertida como Itachi
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Los días pasaron volando para esas personas y el gran día del compromiso llego, en la mansión Uchiha todos los sirvientes se apresuraban a decorar según les indicaba el especialista, la recepción seria en el jardín al aire libre ya que estando en época de calor seria el lugar perfecto; las mesas de la comida se encontraban en una orilla donde los chef y ayudantes les daban un ultimo toque, los camareros se encontraban con el capitán recibiendo instrucciones y tomando las charolas. Mientras tanto la familia se arreglaba en sus respectivas habitaciones, Sasuke era el mas nervioso sin embargo su traje de manta de color perla era el mas adecuado para no sentir sofocado que ya con sus nervios tenia suficiente, su madre entro para ver que estuviera listo –por supuesto por ordenes de Fugaku- el se giro hacia ella desde su lugar cerca del ventanal donde veía el jardín, ella lo miro como hace mucho no lo hacia, con infinita ternura.
_ Ellos ya están en la puerta de la mansión.
_ Bien… bajemos
La mujer lo detuvo y como su hijo le ganaba en estatura se tuvo que levantar más sobre sus sandalias de tacón para acariciarle el cabello.
_ Un ave enjaulada no es feliz… nunca lo será.
_...
El de cabello azulado miro a su madre con curiosidad, no entendía esas palabras así que opto por sonreír sutilmente y ofreció su brazo a la dama para que bajaran juntos. Salieron de la habitación y descendieron las escaleras donde los Namikaze ya estaban siendo recibidos por Fugaku e Itachi, Minato giro la vista hacia la pareja y comprobó la similitud en las facciones hermosas de ambos: Madre e hijo; Kushina se acerco de inmediato a saludarlos efusivamente, Sasuke supo de quien había heredado la hiperactividad Naruto. El rubio por primera vez se dio cuenta el alcance de este trato: seria total y absolutamente dueño de esa preciosidad, que importaba que tuviera mas carácter si con solo verlo podía olvidar hasta la fría forma de actuar de su futuro esposo, una mano palmeándole el hombro lo hizo voltear, ahí estaba su gran cómplice y camarada de correrías, quien le sonrió engreído, se quedaron rezagados para hablar a sus anchas.
_ Tu sabias que no podre serle infiel.
_ Me asombras, ¡¿de verdad el casanova Namikaze se portara bien?
_ Bueno por lo menos fingiré.
_ Ya decía yo.
Sasuke miro a su hermano y prometido, no pudo negar que se veían muy bien juntos, ambos con porte elegante y con esa aura atrayente a su alrededor. Eran los perfectos herederos, el siguió saludando y recibiendo felicitaciones adelantadas, suponiendo que el anuncio no se había dado; Naruto también recibía felicitaciones pero para desgracia del menor de los Uchiha, los coqueteos de algunas féminas iban incluidos en los buenos deseos. Ya entrada la tarde Minato y Fugaku anunciaron el compromiso y la fiesta llego a su apogeo; ahora el rubio estaba a su lado tomándolo de la cintura pero para Sasuke se sentía mas como un gesto de posesión más que uno de amor. Cuando bailaban una pieza lenta el rubio confirmo sus sospechas sobándole el trasero, la pálida fas del moreno se encendió de inmediato y estuvo a punto de golpear a Naruto pero la mirada severa de su padre y el lugar en donde estaban lo evitaron, Naruto tomando eso como una aceptación lo llevo hasta donde el jardín se encontraba solitario y los ecos de la música se perdían, ahí lo beso -el primer beso entre ellos- prácticamente violando su boca un hilo de saliva los unió cuando el contacto termino , y el rubio aprovecho la confusión de su pareja para colar las manos entre las ropas, al sentir esto Sasuke reacciono y un gancho al hígado fue la contestación, el rubio se tomo el estomago y cuando pudo hablar .
_ ¡¿Qué diablos te pasa?
_ ¡¿Qué me pasa? ¡¿Qué te pasa a ti?
_ Estoy tratando de conocer a mi pro-me-ti-do.
_ Vaya ¿así conoces a la gente?
_ Claro, y tu estas exagerando; te recuerdo que ya casi eres mi esposo, no deberías de negarte.
_ Tu esposo, tú lo has dicho no tu puta.
_ …
Sasuke lo miro desafiante
_ Que aburrido.
Y se largo de ahí, el moreno inhalo aire y rogo por que este incidente no llegara a oídos de su padre, pues estaba seguro que le recriminaría su forma de actuar tan mojigata, no es que Sasuke fuera tan cerrado pero por que no hablar, tratarse, salir o algo mas antes de tener sexo, es verdad que sus hormonas eran tan activas como cualquiera pero ¿era mucho pedir un poco de respeto de su futuro esposo?
La recepción llego a su fin y los invitados se despidieron; los últimos por supuesto fueron los Namikaze, pero Itachi insistió en que debía revisar unos documentos con Naruto, a pesar de la hora que era, el rubio suponiendo que saldrían de juerga acepto sacrificar sus horas de sueño por el bien de las empresas. Sasuke por su parte negó internamente con la actitud de ambos herederos, y su padre que permitía esos engaños, opto por olvidarse de lo que harían esos dos y se fue a dormir para descansar; ya que el no tenia tiempo para desperdiciar con su graduación ya próxima tenia mas tareas que realizar.
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Mientras Itachi y Naruto descansaban la resaca, Sasuke ya estaba en la facultad entregando su proyecto para la tesis, el profesor Abel –un hombre de cabello plateado y ojos azules- revisaba los planos, Lee su profesor auxiliar le comentaba al moreno las mejoras que podía realizarle a su trabajo; con las correcciones ya anotadas la mayoría de alumnos salió del aula, pero el Uchiha se quedó un rato mas ya que Abel y Lee eran mas que sus profesores, eran sus amigos.
_ Es una pena que este año me tenga que despedir de un alumno sobresaliente como tu y de una auxiliar ejemplar como Lee.
_ ¿Te vas a ir Lee sempai? –preguntaba Sasuke.
_ Si, mi esposo me permitió hacer el post grado en Konoha pero una vez que termine, regresaría a Suna, para ejercer en su empresa.
_ ¿Tu esposo?
_ Si, Sasuke, sabias que Lee era casado ¿no?
_ Si, pero pensé que con alguien de Konoha.
_ No, yo nací aquí pero cuando tenia diez años me mude a Suna por el trabajo de mi padre y ahí estudie hasta la universidad, pero aquí el profesor Abel colaboro un tiempo en la empresa de mi esposo y me convenció para que hiciera mi doctorado.
_ Si, y aparte me toco convencer a Gaara para que lo dejara a mi cuidado.
_ Vamos profesor, no exagere –decía apenado el de cejas grandes.
_ Es cierto tu esposo no puso peros, pero créeme que ya te ha de extrañar.
_ Igual que yo a el.
_ Bueno y entonces… tu… esposo…
_ Oh si, el es Sabaku no Gaara.
_ ¡¿De constructoras Sabaku no? –comentaba Sasuke.
_ Si.
_ Vaya.
_ Pero no creas, Gaara deseaba que yo siguiera aprendiendo, eso lo hace feliz y se siente orgulloso de que use mi conocimiento en la empresa.
_ Me imagino… Yo desearía poder ejercer mi carrera y que me alentaran como a ti Lee sempai –susurraba Sasuke.
_ ¡Y lo harás Sasuke! aunque tenga que ir personalmente a hablar con tu padre- decía Abel Nightroad, pues era bien sabido que era una eminencia en la Arquitectura y que todos los relacionados con esta rama conocía su brillantes, y los Uchiha no eran la excepción.
_ No serviría de nada Profesor, mi padre no quiere ver mas allá de mi… como el lo llama, mi condición.
_ Me extraña que tu padre siendo un genio en los negocios sea tan cerrado para tratar a su familia –comentaba molesto Abel.
_Si pudiera te llevaría conmigo Sasuke, a Gaara y a sus hermanos les encantaría tener a alguien tan eficiente como tu trabajando para ellos.
La entrada de una figura que caminaba elegantemente hacia el grupo detuvo al conversación Abel se levanto de inmediato y camino para recibir a su esposo, un rubio de ojos azules y hermosa facciones, vestido con una conjunto blanco que parecía flotar alrededor de la esbelta figura: Caín esposo de Abel saludo cortésmente y tomo asiento junto con Abel cerca de los dos jóvenes. Caín a pesar de su apariencia frágil era conocido como un despiadado hombre de negocios que manejaba la mas importante firma de abogados de Konoha, pero que su influencia se extendía por todo el país; sin embargo lo que nadie sabia era que este hombre era un Doncel bastante apegado a su esposo a quien amaba profundamente y que era igual de correspondido. El rubio escucho la conversación y siendo de mente ágil identifico la situación de Sasuke, lo miro con una sonrisa ladeada y le pregunto.
_ ¿Y dime tu familia te ha dado tanto como para sacrificar tu vida entera por ella? –Abel se tenso pues para variar su amado esposo, expresaba su opinión sin consideración.
_Buen… bueno…
_ Lo ves, ese es el punto por que hacer algo por unos egoístas, que no piensan mas que en los negocios y que te usan como mercancía. Bueno si amas al muchacho y crees ser correspondido, te diré que lo intentes, pero si no hay posibilidad ¿Por qué no buscar y hacer tu propio porvenir? Yo nací siendo un doncel como tú; pero nunca pensé en eso hasta hace unos meses cuando quede embarazado, durante toda mi vida he actuado como lo que soy: un hombre como cualquier otro, ¡Que digo! Como un ser humano normal que busca su lugar en este mundo.
El silencio envolvió al grupo pero una invitación a comer por parte de Abel amenizo el ambiente nuevamente.
La conversación giro en torno a lo que les apasionaba a esos tres: Arquitectura; así paso una tarde muy relajante para Sasuke pero no solo eso obtuvo de la conversación con sus mayores, si no también el conocimiento de que había algo mas para el allá afuera, algo mas que un matrimonio sin amor ni futuro: la libertad de vivir sus sueños y luchar por ellos; las palabras de Caín estaban llenas de fuerza y de sabiduría y un grito de rebeldía se empezó a escuchar dentro de la mente de menor de los Uchiha.
Esa noche Naruto lo fue a buscar para que salieran; una cena, luego el antro de moda; fue una cita que Sasuke esperaba, el blondo conversaba con el, intentando buscar algo que los hiciera compatibles; pero ambos eran como agua y aceite. El regreso a al mansión Uchiha fue una constante perorata del rubio, claro que el moreno no podía negar que era muy divertido escuchar las tonterías de Naruto si tan solo fuera mas atrayente para Naruto pensó el Uchiha.
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Antes de iniciar la primera clase, Naruto comentaba con Sakura los últimos acontecimientos, la chica lo miraba con las ganas de golpearlo a flor de piel.
_ Y luego se negó, como si yo fuera a violarlo, ¡¿lo puede creer? ¡No vamos a casar y el sigue tan frio como el polo norte!
La de cabello rosa inhalo y pregunto pacientemente.
_ ¿Y ti consideras que como se van a casar… el tiene que… complacerte?
_ Bueno así como lo pones, se oye feo.
_ Pues así me pareció entender.
_ Bueno…. No, yo solo quiero que no me tema y que nos conozcamos más.
_ Pues entonces reconsidera tus métodos; no tener una relación seria hasta ahora es lo que te impide ver, que estas forzando la convivencia, por que no empiezas de cero, una cita conversar…
_ ¡Ya lo hice!
_ Claro…. Y de casualidad no fue como todas.
_ Pues si, ¿Cómo debería ser entonces?
_ Naruto el no quiere ver tu superficie esa ya la conoce ¿por que no le muestras, lo que nuca han visto tus… conquistas?… el verdadero tu, eres mi amigo y se que esa frivolidad y desenfreno es solo una parte de ti; que dentro hay mas cualidades.
_ Lo haces sonar como si fuera fácil.
_ Ciertamente no lo es, pero date cuenta que el será tu esposo y con quien compartirás tu vida ¿De verdad no te interesa que se enamore de ti?
_ …
_ Una vida de mentira será cruel para ambos.
_ Si… hare mi mejor esfuerzo, además mi prometido es lo suficientemente atractivo como para que me gusto mucho.
_Ahmm -suspiro la joven- por algo se empieza.
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En la soledad de su habitación Sasuke analizaba su situación, si hacia lo que su padre decía ¿Quién le aseguraba que dejaría de verlo como un estorbo? ¿Valía la pena buscar la aprobación de un hombre que nunca lo trato con amabilidad? ¿En esa casa a quien le importaba realmente? Y no es que pensara en quitarse la vida, a pesar de todo al moreno no le paso esa idea por la cabeza ni cuando era mas joven; amaba la vida y el esfuerzo por sobresalir, así que morir por su mano no era una opción; tenían tantos deseos de viajar y aprender mas, trabajar en lo que amaba; que muchas veces sentía ganas de correr , salir de esa casa y no parar, ni dar una vista atrás hasta estar muy, pero muy lejos de ahí. La posibilidad de amar y ser correspondido ya no era un bálsamo para su soledad. Ó… tal vez si; pero buscando y luchando por encontrar a esa persona por sus propios medio y sus propias fuerzas, ese era un reto que anhelaba enfrentar.
El sonido de unos toques en la puerta de la habitación lo alertaron, la vos de una de las sirvientas lo llamaba informándole que Naruto lo esperaba en el recibidor, Sasuke se levanto con tranquilidad y salió a recibirlo, una visita del chico que te gustaba siempre era bien recibida, bajo las escaleras y observo la escena cotidiana, Itachi y Naruto sonriendo , conversando con complicidad, el rubio fue le primero en verlo y camino hacia el, un beso en a mejilla del moreno fue el saludo del blondo, Itachi se despidió y regreso a su despacho; la pareja salió hacia el lugar de su cita.
Sasuke espero hasta que su novio le quito las cadenas a las bicicletas, le dio una de color azul a Sasuke y el tomo una amarilla, subieron y dejaron atrás el centro de renta para adentrase en el parque; a velocidad moderada atravesaban el camino de piedra que rodeaba las zonas verde y de esparcimiento, algunos de los perros que paseaban los seguían ladrando pero en forma juguetona, el rubio le contaba que en sus días libres le gustaba recorrer el parque de esta manera y sentir las caricias del viento sobre su rostro, el moreno escuchaba atentamente asombrándose de esta parte inocente de Naruto, pararon cerca del lago dejando las bicicletas y acercándose a una de las lanchas con remos; ahí el rubio con una sonrisa zorruna le mostro los músculos de sus brazos a Sasuke demostrándole que el remaría y que no debía preocuparse -sobra decir que Sasuke no se quedo atrás y remo también- llegando al centro del lago se detuvieron y Naruto rebusco en su mochila dándole una hogaza de pan a su acompañante que lo miro dudoso.
_ Es para los patos.
_ Vaya y yo que pensé que querías ahorrarte la invitación a comer.
_ Teme.
Ambos se rieron y comenzaron a desgajar el pan, pronto ya estaban rodeados por los plumíferos que pedían -a su modo- mas comida de sus invitados dadivosos. Al regreso el rubio saco una manta de su mochila y la tendió sobre el césped, se dirigió hacia los puestos de comida y con las manos llenas de comida -nada nutritiva- regreso con Sasuke, acomodo las viandas y con un gesto invito a su novio a degustar.
Llegada la tarde y empujando las bicicletas, la pareja busco un lugar mas intimo y ahí se besaron con tranquilidad; el rubio recostó al moreno y lo siguió besando pero sin intentar nada mas, se miraron por un rato y luego siguieron con los besos, pero como se acercaba la noche interrumpieron su idilio para regresar la bicicletas y volver a casa.
El termino de su cita los dejo con ganas de seguir juntos pero eso no era posible por el momento, ya tendrían su tiempo a solas cuando se casaran. En la cena esa noche con los Uchiha por primera vez en largo tiempo el cabeza de familia felicito al menor de sus hijos.
_ Bien hecho Sasuke, en tanto mas se estrechen tus relaciones con tu futuro esposo, menos problemas me causaras.
_ Si padre.
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Viendo su correo para saber las calificaciones que le habían dado sus profesores, Sasuke se debatía entre tomar el camino más fácil -uno que ya le habían arreglado- y el otro por el que tendría que luchar por sus propios medios, uno en el que no tendría el dinero y nombre Uchiha para respaldarlo; ¿y Naruto? Si escogía dejar su vida cómoda, significaba dejar también al rubio, al chico que por fin estaba conociendo. ¿Y si la distancia lo hacía entender mejor sus sentimientos? Eso seria algo que no sabría si no lo intentaba, también cabía la posibilidad de que Naruto siendo tan popular y un soltero millonario no esperara por el y buscara su remplazo, y no podría culparlo.
El menor se estiro sonriendo por las excelentes calificaciones y se dirigió a tomar un baño, la tina estaba a rebosar y el agua le cubría el marfileño cuerpo; recorriendo sus extremidades enjabonándolas rememoro los besos con su prometido y una erección se hizo presente, le dedico toda la atención, y cuando el orgasmo lo golpeo su mente estaba inundada de imágenes de su rubio amor. Aun jadeaba cuando se decidió, una mejor persona seria la pareja ideal; un hombre que compartiera con el las responsabilidades, un duplo que lucharía hombro a hombro, un ser humano que se sintiera pleno se amaba así mismo y seria capaz de valorar lo suficiente a su compañero, en eso se convertiría para Naruto y para si mismo.
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Kushina se consideraba a si mismo una mujer intuitiva, y por eso notaba que su hijo ya no era el chico que se divertía sanamente con sus amigos; ahora su esparcimiento consistía en la empresa, la universidad y salidas con el mayor de los Uchiha, ella no quería ser exigente pero muchas veces deseo que Naruto tomara mas en serio sus relaciones, si ellos habían aceptado el trato con Fugaku era por que no creían que Naruto se casara nunca; de hecho si lo dejaran tal vez se casaría hasta que fuera muy viejo y ellos -por que lo había hablado con Minato- deseaban que su hijo conociera el amor como lo sentían uno por el otro. Por eso cuando Naruto llego de su cita con su novio con una sonrisa en el rostro, su corazón de madre descanso y se alegro; ahora solo restaba que su retoño no echara las cosas a perder.
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La ceremonia de graduación se acercaba y con eso el giro en la vida de Sasuke. Salió de la cafetería cuando vio al profesor Abel y a Lee caminado hacia la salida; corrió hasta ellos.
_ ¡Profesor! –el grito detuvo a la pareja, que espero a su ex alumno.
_ Sasuke, ¿Por qué la prisa? –preguntaba el de cabellos plata.
_ Yo quiero preguntarle algo a Lee.
_ ¿Si que pasa? –decía Lee.
_ ¿Crees que puedo ir contigo a Suna?
_ Bueno… si, pero… ¿Y tu familia te dejara?
_ La cuestión… es… que no quiero decirles nada.
_ ¡¿Sasuke, quieres escapar de casa? -se asombro Abel.
_ Su esposo, él… me abrió los ojos… yo, quiero… ¡Quiero ser libre!
_ ¡Oh dios! Sabia que no debía dejar que hablara contigo, perdóname, le conté lo que sabia de ti.
_ No hay problema Profesor, de hecho se lo agradezco, su esposo y usted son los primeros que se preocupan por mi de esa forma.
_ Pero ¿estas seguro de tu decisión? - preguntaba Abel y asentía Lee.
_ Si, quiero crecer por mi mismo.
_ Bien pues no se hable mas, Lee; Sasuke se ira con nosotros
_ ¿Nosotros?
_ Si Sasuke, mi esposo y yo iremos a Suna por un proyecto que me ofrecieron en Sabaku no, los gemelos nacieron antier y solo esperaremos a la graduación y viajaremos con Lee.
_ Es cierto, sus hijos son muy apuestos -aseguraba Sasuke.
_ Gracias, pero sus ojos son carmín supongo que por mi hermana Lilith; Ichiru y Kiryuu son los primeros de mi familia que heredan sus ojos.
_ Yo quisiera tener ya un niño, pero ahora no es posible Gaara me ha escrito que su asociación con Akatsuki –Firma de contratista internacionales- depende de este proyecto así que tenemos que trabajar mas duro, por eso mismo tu ayuda nos ha caído del cielo Sasuke; con Abel Nightroad como encargado del proyecto y nosotros como arquitectos; el nuestro será el ganador y Sabaku no será mas fuerte con la asociación de Akatsuki.
_ Pues que esperamos, en una semana partimos Sasuke estate preparado.
Una sonrisa triunfadora se dibujo en los labios de Sasuke, el paso estaba dado.
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El avión despegaba del aeropuerto de Konoha, el moreno veía todo su una curiosidad infantil, Lee hablaba hasta por los codos, asegurándole a Sasuke que tendría una vida plena en Suna, Abel y Caín cargaba a sus pequeños que comían tranquilamente, Ichiru y Kiryuu eran bastantes quietos y no lloraban a menos que de verdad estuvieran muy molestos, Caín había tomado sus vacaciones y las unió con su permiso por paternidad y acompañaba a su esposo, sin afectar su trabajo en la firma de abogados.
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En el compartimento de equipajes una maleta de lona negra con llantas y otra pequeña que contenían: ropa, una lap top, documentos; así como una sola foto de varios chicos vestidos con togas de graduación abrazándose. Eran las únicas pertenecías del ahora mundialmente desconocido Sasuke Okimura…
Continuara.