Aquí les dejo mi nuevo one shot, que podría convertirse en un long fanfic solo si ustedes quieren.

Si no quieren, los odiare!

Aclaración: Naruto y todos los personajes de esta historia pertenecen a Masashi Kishimoto, Studio Pierrot y Tv Tokio. Esta historia es creada sin fines de lucro y por pura diversión para olvidarnos un rato del estúpido relleno que nunca termina. Del manga solo puedo decir que es lo MEJOR DEL MUNDO MUNDIAL.

\\(*o*)/

.

.

.

.

Una pequeña carta gris en la nieve

Cap. 1 La primera nevada

Escribí esto porque lo siento. Estoy escribiendo esto porque estás llorando. Porque siento que corro sin aliento. Son las palabras que mi tonto corazón está sacando fuera. He tratado de bloquearlo y retenerlo. Cubro mi boca pero las palabras "te amo" permanecen como si siempre hubieran estado escritas en mi corazón. Me iré mientras tú te estarás alejando y desapareciendo. Esta es la última vez. Te he hecho tantas promesas que no pude cumplir. Espero que tú te sigas alejando de mí, después de tanto daño que te hice. Sé que ni siquiera merezco tu perdón.

El único que debería ser herido soy yo, por favor.

La primera nevada del invierno cubría toda la ciudad de Tokio, dándole una mágica apariencia donde todo era blanco. Un escenario fantástico de admirar pero a la vez parecía todo tan nostálgico.

Las calles y avenidas que se habían cubierto de nieve por la noche impedían que la gente caminara con normalidad. Además de que todos se habían abrigado mucho más. El frio era atroz y la mejor forma de remediarlo era tomar un de café caliente y evitar salir de casa. Por ello no había tráfico y se veía desierta una ciudad que la mayoría de las veces estaba repleta.

Para ser la primera nevada fue muy fuerte y los termómetros bajaban conforme pasaban las horas. En los noticieros informaban que este era uno delos días más fríos de la historia. Y recomendaban sobretodo tomar precauciones.

.

.

.

.

Una pareja se observaba en el parque principal de Tokio. Ambos con gruesos abrigos para protegerse del frio. La chica llevaba un abrigo azul de lana y un gorro blanco. Su acompañante vestía un abrigo negro combinado con naranja, que sin duda llamaba la atención. Al igual que el clima su relación parecía muy fría y ninguno se hablaba, solo permanecían de pie sin mirarse.

Los minutos transcurrían y el frio empeoraba. La verdad era que si seguían así terminarían congelándose.

-Hinata, déjame explicarte por favor.

Al oír su nombre la joven se atrevió a mirarlo y decirle todo lo que no se atrevía.

-Ya que tienes el valor, dímelo. Porque sinceramente no sé como puedas explicar lo que hiciste.-La Hyuuga lo miraba con odio.

-Perdóname, ¡júrame que si te lo digo me perdonaras!

-No hay forma de que eso suceda, Naruto kun

No pudo contenerse, simplemente no podía. A pesar de querer parecer enfadada, fue demasiado para ella. Como era posible aguantarse las lágrimas ante él. Ante ese chico que tantas veces le hizo feliz, pero su indiferencia era la que más le dolía. Por más que quería parecer fuerte ante él, no pudo. Las lágrimas salían sin cesar. El dolor en su pecho se acrecentaba y su corazón era el más afectado. Ese corazón que estuvo tan dispuesta a entregárselo y que ahora sufría ante las recientes acciones. Las fuerzas se le fueron y no pudo evitar caer de rodillas al frio suelo. Aunque así era más fácil y ya no tendría que verlo a la cara. Así tampoco la vería llorar y parecer más patética.

-No llores por favor, ya sé que soy el malo. Pero no te quiero ver así por mi culpa.

Naruto se acercó a ella para ayudarla a levantarse y notó que incluso la pobre temblaba. No debió citarla en pleno parque cubierto de nieve.

-Te odio, tú eres el único culpable de que mi vida este así.

Viéndola así tan enojada con él por primera vez le hizo enternecer. La dulce Hinata que siempre lo trato bien y escuchó, la que siempre estuvo para él. La misma que no supo apreciar y que cuando sintió perderla cometió el peor error de su vida.

-Hinata, ¿de qué forma quieres que me disculpe? Estoy dispuesto a todo, te lo juro.

-No la hay. ¡NO LA HAY!-lo encaro aun con lágrimas.

Gritarle a su querido amigo fue quizá más doloroso para ella. Nunca creyó que algún día desarrollaría algo más que amor para él. Pero su comportamiento le decía que siempre jugo con sus sentimientos. Justo cuando ella había encontrado la felicidad él se colocó en medio y la destrozo por completo.

Hacia un día que le llamó y la citó en el parque para hablar de lo sucedido, sinceramente aunque le doliera volver a verlo quería explicaciones. Se sentía tan tonta de mantener una esperanza y que Naruto por fin se hubiera dado cuenta de lo que siempre sintió por él.

-¿Ni si quiera ayudaría en algo que te dijera porque lo hice?

Naruto le sonreía de forma tan infantil, como un niño pidiendo disculpas. Si se valía soñar, sin duda ahora era el momento y quería que él le dijera "porque te…"

Sus pensamientos fueron interrumpidos por el abrazo de Naruto, la tomo con delicadeza y acaricio su cabello para luego besarlo y enseguida mirarla a la cara. Tiernamente seco con sus dedos las lágrimas de su amiga sabiendo que solo él era el único culpable.

Hinata podía oír el latir de su corazón tan fuerte que parecía que de un momento a otro saldría de su pecho.

-Te amo

¿Qué? Creía haber odio mal. Naruto nunca la vio más allá de su "mejor amiga", una chica rara que siempre estuvo a su lado. Aun cuando su corazón se alegró al escucharlo, ya no era tan ingenua. Naruto la había dañado tanto que ya no debía amarlo más. Seguramente le estaba mintiendo ya que la ingenua Hinata siempre le creía.

Se soltó de su abrazo y lo empujo con las pocas fuerzas que le quedaban.

-No te estés burlando de mí. No quiero que te me acerques de nuevo.

Lo miro enfadada, ya no dejaría que Naruto saliera y se metiera en su vida tantas veces como él quisiera. Ya había sufrido demasiado por tantos años de estar perdidamente enamorada de él y que nunca lo notara.

Él en respuesta la miro confundido, mantenía la ilusión de que ella le correspondiera. La cruda realdad del momento es que ya no podía seguir utilizando a Hinata como si le perteneciera. Ya eran adultos y después de tantos errores, solamente él merecía sufrir.

Rio un poco y se dispuso a marcharse para siempre de ella, la única solución era no verla nunca más para que pudiera ser feliz. Ella lo hizo tan feliz en el pasado y le debía tanto. Si hacía unos días rompió en miles de pedazos el futuro de Hinata ahora ya no le quedaba nada que la atara a él. Ella solo quería verlo desaparecer, se lo había dicho ya. No le quedaba más. Huiría para siempre de esta maldita ciudad donde lo único bueno que tuvo fue la persona que miraba en frente y que ahora lo echaba de su vida. No supo apreciar lo maravillosa que era Hinata. Toda su vida lo habían tachado de ser un idiota y hoy lo confirmaba por las palabras de su amiga.

Le sonrió a pesar de que por dentro sentía morirse y la miro detenidamente; quería guardarla para siempre en su memoria. La imagen actual no se parecía en nada a la Hinata sonrojada que en el pasado le sonreía dulcemente y se reía de sus chistes, la amiga que lo escuchaba y lo abrazaba. Sus palabras y abrazos era como una medicina que siempre habían curados sus heridas. Ahora ella lo miraba distante y esperando que el por fin se marchara de su vida y la dejara en paz. Supo muy bien que su amistad se había roto para siempre. Bajo la mirada ya que no podía seguir viéndola, para su estúpido corazón era demasiado perderla. Una chica como Hinata no la hallaría en ninguna otra parte. Su destino se había vuelto sombrío y solitario. Pero no se arrepentía de lo que hizo al separar a Hinata de su "destino". Tenía que reconocer que era un tipo bastante egoísta. Alguien que nunca mereció tanto amor de la chica Hyuuga.

-Aun así no me arrepiento, Hinata

-Eres un imbécil

La bofetada que Hinata le propino lo dejo aún más helado de lo que estaba. No se lo esperaba de ninguna forma. Pero sin duda se lo merecía. Miro a Hinata y ella lloraba de nuevo. En realidad era un imbécil que hasta en el último segundo la hacía sufrir.

Hinata seguía llorando y fue ella quien se fue primero. Corrió lo más rápido que sus pies y la nieve le permitían.

"Seguramente ya no aguanta mi presencia" pensó Naruto. Ese era su merecido por su tan mal comportamiento.

¿Qué era lo que quedaba?

Solamente…verla partir.

Y con ella el resto de su miserable vida.

.

.

.

"Corre, corre, huye de aquí. Él nunca te quiso. Solo te utilizó" con ese pensamiento en mente huía de él. A pesar de saber bien que ahora ese chico solo merecía su odio las lágrimas corrían por su rostro y su corazón se estrujaba. El dolor solo aumentaba, Naruto jamás la dejaría ser feliz; siempre haciéndola sufrir pero ella como una idiota amándolo hasta el final.

Ya faltaban pocos metros para salir del parque y poder irse a su casa para llorar sin temor a que él la viera. Pero el frio impedía que corriera como en un día normal. El frio es tan fuerte que es tan extraño que no lo había notado, el dolor en sus articulaciones la hace tambalear y caer. Cae detrás de una banca, encima del césped cubierto de nieve.

En ese momento comprendió el único camino que le quedaba. Un camino sin regreso.

Siente que su corazón ya murió para siempre. Jamás volverá a ver a Naruto. A pesar de todo lo que le hizo lo extraña tremendamente aun solo unos minutos que lo acaba de ver pero sabe muy bien que este fue el final.

Se queda acostada en la nieve mientras más y más nieve cae. La nieve para ella es como una suave capa que la cubre y la aleja de todo. Poco a poco siente como sus manos, pies y todo su cuerpo ya están entumecidos. El dolor en su cuerpo ya no es tan fuerte incluso su corazón se ha enfriado tanto que apenas late. Su nariz roja y las lágrimas silenciosas que se empeñan en salir.

Ya nada importa.

Un pequeño papel revolotea en el viento. Es de un color gris tan triste como el cielo. Hinata observa el trayecto del papel hasta que finalmente cae en su mano izquierda.

Lo levanta con mucho esfuerzo temblando y al leerlo vuelve a llorar. Su llanto se hace más fuerte y arruga el papel en su ya muy pálida mano.

Ya todo es peor. El dolor acumulado se hace mayor.

Ya nada puede repararlo. Irónicamente los dos se han separado por el amor, eso que se supone une más a las personas.

Solo quedan rastros de una vida compartida al amor de su vida, a su mejor amigo.

Ese papel gris que era tan triste, que decía muchas verdades.

Recuerdos y dolor de una esperanza que nunca llegó.

Él le rompió el corazón y ella de vuelta lo hizo también.

Un corazón muerto.

Un alma vacía.

Una vida sin luz.

Un futuro sin él.

La nieve cae suavemente por toda la ciudad de Tokio.

Un copo de nieve

Dos copos de nieve

Miles copos de nieve

Cada uno es distinto al otro

¿Sabías que ninguno es igual a otro?

Cada uno es único

Como las personas

Pero los copos de nieve no lloran

No sufren

No aman

Si tan solo fuera un inocente copo de nieve

Si tan solo nunca hubiera conocido el amor

.

.

.

.

.

.

¿Merece continuación?

Dependiendo de los reviews y favoritos esta historia continuara.

Ustedes deciden

^3^

Nota: al principio está la maravillosa canción (traducida al español) GRAY PAPER de mi amado oppa Yesung (SUPER JUNIOR), pero la modifique un poco. Escúchenla tanto en la versión original como la instrumental. Esa canción me inspiro a escribir esta historia. Y si! SOY TAN ELF COMO NARUHINA.

Saludos a todos y gracias por leer mis fanfics. Ya saben que un review y favoritos es el pago de quienes escribimos fanfics. Los invito a leer mis otros one shots. Anímense alguno les podría gustar *o*

Y quiero agradecer a todos los que han leído mi fanfic "Las palabras más ansiadas" porque se cumplió una de mis metas: tener más de 10 reviews.

T_T en serio muchas gracias!

Muchísimas gracias a todos!

Arigato! Cualquier duda díganme!

Nos veremos en la próxima?