Parte I
¡Heda! ¡Heda! ¡Heda!
Lexa se abría paso en la multitud como siempre acompañada de sus mejores guerreros. Su paso firme e imponente presencia lograba que las personas se apartaran rápidamente y es que nadie en su sano juicio se atrevería a entrometerse en el camino de la Comandante y menos cuando se halla tan enojada por no estar cerca de su Mujer.
¡Heda! ¡Heda! ¡Heda!
Mas voces y gritos se unían conforme Lexa llegaba a su destino, se encontraba en una aldea a medio día de distancia de Polis, según le informaron un grupo de personas atacaron la aldea robando todas las provisiones y llevándose la vida de muchas mujeres y niños. Con suerte, gracias al apoyo del Decimo Tercer Clan, los Sky People se encargaron de capturar algunos de los implicados en el ataque
¡Heda! ¡Heda! ¡Heda!
Los gritos se volvían desesperados por cada paso que el comandante daba para llegar al lugar donde tenían a los culpables. La necesidad de justicia está presente en cada grito y Lexa lo sabe, su aptitud inquebrantable dirigiendo la mirada siempre al frente, donde puede observar que los líderes de los 13 clanes la están esperando.
Los gritos callan al momento en que Lexa llega a la zona central de la aldea, donde se encuentran atados los prisioneros. Lexa no despega la mirada de ellos, mas sin embargo sabe que todos los que le rodean están arrodillados ante ella mostrando su lealtad y respeto. Si Clarke estuviera presente seguro haría una mueca chistosa por lo exagerado de la situación, ese pensamiento hace que Lexa casi suelte una sonrisa, Casi.
- Levantaos – ordena a los 13 líderes. Cuando todos se encuentran de pie puede visualizar a Kane, quien le regala una pequeña sonrisa a la que solo responde con un pequeño asentamiento de cabeza, aunque le agrade mucho Kane no puede dejar su papel de comandante.
¿Quién diría que los Sky people formarían parte oficialmente de su coalición? Después de todo lo que paso con el Ex-canciller Pike, Lexa dudo seriamente que una tregua entre ellos se lograra y más cuando había gente tras ella intentando matarla por no tomar acciones contra ellos, pero como siempre Clarke y su inagotable determinación tomo cartas en el asunto para finalmente tener la paz entre los pueblos. Desde entonces han pasado 2 años.
- ¿Ya les sacaron información? – Lexa pregunto dirigiéndose directamente a Kane – para Que estemos todos reunidos debe ser algo importante
- Disculpe las molestias Heda, pero aparentemente estos hombres provienen de la zona muerta y han estado recolectado información de nosotros.
- ¿Qué clase de información? – Lexa no pudo ocultar su curiosidad, los ladrones comunes poco le importa a quienes robaban y pocas veces se molestaban en tomar vidas.
- Saben Todo sobre nosotros. Revise sus pertenencias… tienen mapas donde están ubicadas cada aldea de cada clan de la colisión. Tienen información de nuestras armas y además tienen planos de toda Polis.
- ¿Y qué es lo que exactamente quieren hacer con todo eso? – No se preocupo de esconder el enojo en su tono de voz, que el enemigo tenga conocimiento de todo solo los deja en desventaja.
- No lo sé… eso fue todo lo que obtuvimos de ellos, tampoco nos quieren decir cuántos de ellos son, dicen que prefieren morir antes de…
- Pues que así sea – Lexa no dejo que Kane terminara de hablar cuando ya había hecho la seña a sus guerreros para que comenzara el castigo de los prisioneros, toda la aldea empezó a gritar puesto que al fin obtendrían su deseada justicia.
Al mismo tiempo Lexa y los demás líderes se adentraron en la carpa para discutir mejor la situación. Desde los altercados con Ice Nation y Mount Weather hace 2 años, nadie había intentado romper la paz que existía entre los pueblos. Ahora esta posible nueva amenaza ponía en peligro todo, necesitaban prepararse para cualquier inesperada situación.
Al finalizar la reunión Lexa estaba ansiosa por irse, pensar en Clarke esperándola solo aumentaba su deseo de montar su caballo e irse inmediatamente "Si las cosas fueran tan fáciles" pensó luego soltar un profundo suspiro, a veces ser la comandante la frenaba de hacer lo que en verdad deseaba.
- Hey Lexa ya te hacia a mitad de camino hacia Polis – la Voz de Octavia la distrajo de sus pensamientos - ¿Por qué no trajiste a Clarke contigo? Se nota a kilómetros que sin ella posees un terrible mal humor – Bromeo. Con el tiempo (y con mucha insistencia por parte de Clarke) Octavia y Lexa hicieron las paces y ahora se tenían la confianza suficiente para hablar casualmente.
- Si dependiera de mi, ya estaría en casa descansando en mi habitación – Lexa termino de recoger los planos y toda información importante para llevársela consigo a Polis – Además sabes perfectamente la razón por la que Clarke no está aquí.
- Si lo sé, pero conociendo a Clarke pensé que te ignoraría y se fugaría para estar acá
- Créeme eso casi sucedió, tuve que ordenarle a varios guardias que la vigilaran – Octavia rio ante la declaración mientras que Lexa se permitió sonreír ante el recuerdo de una Clarke completamente furiosa gritando que más le valía regresar rápido.
La pequeña charla fue interrumpida cuando un guardia de Lexa entro para avisar que todo estaba preparado para salir cuando se le ordenara. Después de recoger todo lo necesario Lexa y Octavia salieron para encontrarse con kane y Bellamy. En este tiempo la relación de Bellamy y Lexa no era mala pero tampoco era buena. Aun no se tenían la suficiente confianza pero trataban de ser lo más cordiales posibles.
- Comandante – Kane saludo respetuosamente – tengo un mensaje de Abby, quiere que le digas a Clarke que intente no meterse en problemas y no tome riesgos innecesarios – Kane hizo una mueca – Al parecer Abby está muy preocupada por como Clarke tome la información de este nuevo "Posible enemigo"
- No se preocupen – respondió dirigiéndose a los tres – Clarke no será participe de esto, tratare de mantenerla al margen – Lexa rápidamente le hizo señas a sus hombres para marcharse – Dile a Abby que pronto visitaremos Arkadian, creo que Clarke quería hablar con ella
- Creo que no es lo indicado – Kane se negó - exponerlas a ustedes dos no es algo que pueda permitir, si nos permite, prefiero que usted nos deje ir a Polis es más seguro de esa forma.
- Los sky people son siempre bienvenidos a Polis – Lexa estiro su brazo para despedirse – los estaremos esperando con ansias – Kane le devolvió el gesto.
- Así será.
Luego de despedirse, el camino a Polis se volvió eterno. Desde que estaba con Clarke a Lexa no le gustaba estar muy alejada de Polis y menos en estos momentos. Desde Joven le enseñaron que el amor era debilidad pero con Clarke descubrió que también era una fortaleza, ella misma se encargaría de destruir a cualquiera que intentara lastimar a Clarke, el solo pensamiento la enfureció a tal grado de acelerar el paso.
Ya pasaba de media noche cuando por fin llegaron a Polis, Lexa se sentía tan exhausta que se permitió soltar un suspiro, rápidamente dejo su caballo en los establos para ir a la torre y por fin descansar, desgraciadamente fue interceptada por Titus.
- Heda – dio una pequeña reverencia – me alegro que ya este de regreso ¿Cómo le fue en su viaje?
- Mañana hablaremos Titus, lo único que quiero ahora es ir a descansar sin ser molestada – Lexa trato de pasar de largo pero fue detenida nuevamente por Titus
- Me temo que no será posible Heda, recuerde que aun tiene deberes atrasados que deben cumplirse lo más rápido posible.
- Titus – Lexa intento no perder la poca paciencia que le quedaba – es muy tarde, mañana me ocupo de todo, solo quiero estar junto a Clarke y descansar
- Usted sabe que primero tiene que cumplir su deber con SU gente, Clarke solo la esta distrayendo y más ahora que... –
- No te atrevas a terminar esa oración – Decir que La comandante estaba Furiosa era quedarse corto – En el momento en que Clarke y yo Nos unimos ella se volvió parte de NUESTRA gente, mi deber también está con ella. Acéptalo de una vez – Y sin más Lexa se fue.
"Esto fue el colmo" en estos instantes Lexa pensaba seriamente en matar a quien sea que se atreviera a entrometerse en su camino. Cuando por fin estuvo al frente de su habitación una sensación de alivio la invadió, cruzando esa puerta dejaba de ser la comandante para ser simplemente Lexa y eso era lo que más necesitaba, sin más que esperar se adentro a su habitación para encontrarse lo quien más anhelaba en todo el día.
Clarke se encontraba en el balcón observando la vista, sus ojos azules como el cielo se veían aun más hermosos bajo el brillo de las estrellas. Vestía el mismo conjunto que tenia puesto la noche después del enfrentamiento con Roan, el cual desde entonces ha sido el favorito de Lexa.
- Clarke – Esta vez Lexa no contuvo la sonrisa que causaba el decir su Nombre. Todo su cuerpo se relajo al observar como Clarke se percato de su presencia y le devolvía la mirada con una pequeña sonrisa – ¿Qué haces despierta a estas horas?
- Buenas Noches comandante – Clarke disminuyo un poco la distancia entre ellas, riendo un poco al observar como Lexa no le despegaba la mirada – no podía Dormir sin saber si habías llegado bien
- Sabes bien que debes descansar – Lexa elimino la distancia que había entre las 2 para luego colocar sus manos suavemente en su caderas – no quiero que te esfuerces demasiado.
- Lexa – como si temiera romper el momento, Clarke levanto lentamente su mano para acariciar su rostro notando como la pintura de guerra se empezaba a borrar – Estoy bien – Sonrió al sentir las tiernas caricias que Lexa le regalaba a su abultado vientre – Estamos bien.
Así como leen, después de algunos desafortunados acontecimientos, Clarke y Lexa unieron sus vidas y ahora estaban esperando la llegada de su primer hijo. Noticia que causo revuelo en todas partes por muchas razones…
- Solo quiero asegurarme – Lexa beso brevemente los labios de Clarke para luego separarse y quitarse la ropa – Iré a asearme antes de dormir así que…-
- Te esperare – Lexa le regalo otra sonrisa antes de besarla nuevamente para así salir de la habitación.
Clarke suspiro profundamente cuando se hallo de nuevo sola en la habitación, se sentó lentamente en el gran sillón cubierto de pieles tratando de calmar su acelerado corazón. Desde hace 3 meses cada vez que Lexa salía de Polis un mal presentimiento siempre la embargaba, era como si algo malo fuera a ocurrir en cualquier momento. Muchas veces paso la noche en vela preocupada por el bienestar de Lexa, el solo pensar que podría estar en peligro le quitaba el sueño y hoy no fue la excepción. Clarke se removió un poco al sentir como su pequeño/a hacia acto de presencia, algo que siempre ocurría cada vez que se sumía en sus pensamientos.
- ¿Se está moviendo? – Lexa regreso a la habitación completamente limpia y cambiada de ropa. Era increíble como al quitarse toda su "fachada" de Comandante se veía aun más joven.
- Esta algo inquieto – Clarke observo como Lexa terminaba de secar su cabello – Pero creo que le gusta tu voz, siempre se tranquiliza cuando te escucha – el corazón de Lexa empezó a latir rápidamente ante esa declaración, volvió a acercarse a Clarke pero esta vez se arrodillo ante ella colocando sus manos en su cintura y apoyando la frente en su vientre.
Estos pequeños gestos siempre hacían temblar a Clarke, solo en la intimidad Lexa mostraba su lado más tierno y apasionado. Después de todo lo ocurrido, que Lexa acepte y este feliz por la llegada de su hijo la hacían inmensamente feliz.
- Quién diría que La gran comandante de los 13 clanes se arrodillaría ante alguien como yo – Susurro con algo de gracia mientras acariciaba el cabello de Lexa, la nombrada levanto la cabeza achicando los ojos haciendo reír melodiosamente a Clarke.
- Como "Alguien como tú" te refieres a la Legendaria Wanheda, la gran unificadora de nuestros pueblos y, no menos importante, mi mujer – Lexa se acomodo mejor entre las piernas de Clarke para que no existiera ni un centímetro de separación entre ellas – Tu eres la única que tiene derecho de verme tal como soy, es lógico que seas la única ante la cual me arrodille – ni siquiera intento ocultar su risa al ver el gran sonrojo en la cara de Clarke.
- A veces te odio
- No, no lo haces – Lexa se separo de Clarke para levantarse y tenderle la mano – Ya es muy tarde vamos a dormir
Ambas se levantaron del sofá para dirigirse a la cama, Lexa se encargo de apagar algunas velas mientras ayudaba a Clarke a acostarse cómodamente para luego unirse a ella. Al momento en que su cuerpo toco la cama y Clarke se acoplo a ella todos los músculos de Lexa se relajaron, era como si todos sus problemas perdieran peso en su mente, son estos momentos los que la hacen desear por un segundo no ser Comandante para así disfrutar de mas como estos.
- Lexa…
- Dime
- ¿Cuándo me Dirás como te fue en tu viaje?
- Mañana
- Espero que así sea…
Lexa se dedico a observar a Clarke, era increíble que aun soñolienta podía expresar un tono de autoridad, Lexa sabía que debía contarle acerca de los hombres de la zona muerta pero también sabía que si Clarke se enteraba buscaría una forma de involucrarse y no podía permitir eso. No ahora.
- Yo también
Lo único que tenía seguro es que no dejaría que nadie lastimara a SU familia. Habían pasado por mucho para que al fin las cosas estuvieran bien, ella se encargaría de matar a quien sea que se entrometiera entre ellas
Y con ese último pensamiento pudo finalmente cerrar los ojos y descansar
