Hola! Acá un pequeño drabble que escribí, espero les guste ^^

Doctor Who le pertenece a la BBC.


The last of his kind.

La sala de control estaba vacía, como lo había estado desde hacía tiempo, más del que ahora mismo podía recontar de hecho. Paseé mis dedos por la consola, acariciándola, mientras miraba ciertos controles. Ya nada sería como antes, no podía serlo. Levanté apenas la vista, para poder ver la luz que desprendía la columna central y, cuando lo hice, ésta se intensificó un poco, como si ella misma supiera en qué estaba pensando exactamente y quisiera hacerme saber qué opinaba lo mismo. O quizás era su forma de decirme que lo sentía, que todo iría bien; su forma de darme una palmada en el hombro y susurrar "Descuida Doctor, el tiempo lo curará". Pero si había algo que había aprendido en novecientos años de viajar por el tiempo y el espacio, era que había ciertas heridas que ni siquiera el tiempo podía curar. Y estaba seguro de que ésta sería una de ellas. La Guerra del Tiempo. Mi gente, mi propio pueblo… Todos muertos. Estaba solo. Completamente sólo.

Comencé a apretar botones casi que al azar. Ahora mismo no quería pensar a dónde ir, simplemente quería alejarme de todo aquello que aún tenía grabado a fuego en mis retinas, en mi nuevo cuerpo que aún no había terminado de acomodarse del todo luego de la regeneración. Cuando terminé de ajustar todo, tiré de la palanca y el familiar traqueteo que indicaba el comienzo de la desmaterialización comenzó. Me aferré fuertemente a la consola, comenzando a corretear sin demasiado ánimo para poder manejarla y que nada saliera mal. No podía permitirme, no podía darme el lujo de que ella también sufriera justo ahora. En un par de minutos, el traqueteo terminó y la tranquilidad volvió a invadir la habitación, por lo que me pasé las manos por la chaqueta –esa nueva chaqueta que había decidido usar, de cuero negro, sobria, que no llamaba mucho la atención, tan diferente a los anteriores trajes que me había acostumbrado a usar- y volví a mirar a la columna, que volvió a emitir una luz un poco más brillante.

Entonces, sin decir ni hacer nada más, abrí las puertas, para observar el paisaje a mi alrededor. Una ciudad que había visto cientos de veces antes, en la cual había vivido muchas cosas, conocido muchas personas, pero que seguramente no volvería a ver con los mismos ojos –casi literalmente hablando-: Londres. Salí de la Tardis y, apenas pisé el asfalto, escuché un pitido proveniente del interior de mi chaqueta. Saqué el artefacto que lo había producido y lo observé. Había actividad de tecnología no terrícola. Entonces, casi sintiéndome como un niño mirando su primer regalo de navidad, sonreí y me giré de nuevo hacia mi querida compañera de viajes.

- ¡Fantástico!- exclamé, sin quitar de mi rostro aquella sonrisa. Por supuesto, no estaba sólo, ella estaba conmigo, y quería que distrajera mi mente de lo que había pasado con los demás Señores del Tiempo.

Cerré sus puertas y caminé sin vacilar ni un segundo, con esa nueva postura a la cual me había acostumbrado. La guerra había terminado, pero mi vida no y, por más que me pesase, era un soldado, y la Tierra necesitaba uno en este momento. Y lo tendría, me tendría.


Los reviews me hacen feliz, me dejan uno? **

Saludos~!