QUINN POV

...Uffffff, tengo media hora para ponerme algo presentable y llegar a esa cena...

La verdad, mataría por ponerme el pijama y acurrucarme en el sofá pero sé que es una oportunidad de conocer a la gente del bufete, llevo dos meses en New York y no se puede decir que haya hecho muchos esfuerzos por hacer amigos, ...tampoco es que me importe; pero desde luego no quiero ser la rarita estirada que no va a la cena de navidad de la empresa.

Me miro al espejo en la entrada de nuestro nuevo apartamento, Uaaa! este vestido me sienta realmente bien! todavía no has perdido el toque Fabray.Por un segundo sopeso si realmente me conviene estar atractiva esta noche y dudo el tamaño de mi escote… No hay tiempo, acabemos con esto. Me pongo el abrigo e inconscientemente miro al tentador sofá mientras veo por el ventanal que fuera está nevando, no acabo de acostumbrarme al frío de esta ciudad. Sin pensarlo más por miedo a echarme atrás, cojo la bufanda y el bolso, y salgo en busca de un taxi libre en New York.

Sonríe Quinn, esto es trabajo, me digo antes de abrir la puerta del restaurante. Si me pudiese ver la cara en este momento seguramente me habría esforzado un poco más en el gesto, podría recordar a ese capítulo de Friends en el que Chendler intenta sonreír para una foto,

La cena transcurre entre risas e historias pícaras pero inocentes, todo el mundo sabe dónde estamos y hace su papel, nadie quiere escandalizar a los socios octogenarios.

No sé si porque he tomado un par de copas de vino o porque de verdad me intriga ver qué piensan mis compañeros cuando se sueltan un poco la corbata, me uno al grupo de rezagados y nos vamos a un club cercano a bailar y tomar unas copas.

...Sin los jefazos esto va a ser otra historia...

Quedamos siete, sin quererlo nos hemos quedado las jóvenes promesas del bufete, el mayor parece Tom y no puede tener más de 35 años, estoy cómoda y realmente me estoy divirtiendo. Los temas de conversación ya tienen más que ver con cotilleos y líos de faldas en las oficinas. Tras diez minutos esperando a que Jake regrese de la barra con nuestras bebidas me levanto y voy a buscarlo. Quiero mi copa ya!

- "Hey!, qué pasa? Nos estamos secando allí en la mesa…"

- "Esa maldita camarera no me hace caso! Es una diosa pero la muy perra me atraviesa con la mirada cada vez que se acerca a este lado como si yo fuese invisible"

- "Déjame a mí, todavía conservo mis maneras de zorra capitana de las animadoras para estos casos" Le digo mientras él suspira sonriendo, imaginándome, supongo, dando saltitos con falda corta y pompones. Me acerco más a la barra e inclino medio cuerpo por encima para hacerme ver. La chica está de espaldas, cabello negro, largo y ligeramente ondulado, veo unos vaqueros ajustados y una simple camiseta blanca de tirantes en un cuerpecito escultural de piel tostada. Y entonces se gira.

Según su cuerpo gira sus ojos encuentran rápidamente los míos, como si hubiese sentido mi mirada. Se me corta la respiración. Por un segundo ella se queda quieta mirándome pero después aparece media sonrisa traviesa en su cara, de las que hacen resaltar sus adorables hoyuelos, y se acerca a nosotros desde el otro lado de la barra. Dios! Es preciosa, perfecta como la última vez que la vi hace seis años.

-"qué te pongo rubita?", me dice guiñándome un ojo.

...Así que vamos a jugar…

Oigo a Jake empezar a recitar nuestras bebidas pero Santana no desvía la vista de mí en ningún momento. Sigo apoyada en la barra con su cara a 20 centímetros de la mía. Mi corazón va a mil por hora, no sé muy bien por qué. Vamos Quinn, mantén la compostura, respira, por lo menos no te desmayes... Jake, sintiéndose ignorado, se ha rendido sin acabar el pedido y me da un suave empujón en el brazo que me saca de mi ensimismamiento. La digo lo que queremos con voz firme, casi sintiéndome orgullosa de saber hablar, y empieza a prepararnos las bebidas.

-"Guau, Fabray! La tienes rota! Veo que eres igual de implacable fuera de los juzgados!"

Le sonrío y levanto una ceja maliciosamente, como si realmente hubiese tenido algo que ver en lo que acaba de pasar. Santana vuelve, de vez en cuando me mira mientras acaba de mezclar nuestras copas. Jake intenta empezar a coger las bebidas pero ella le frena.

-"yo os lo acerco a la mesa, no os preocupéis...", nos dice mientras coge una bandeja de detrás de la caja.

La sonrío y nos vamos hacia nuestra mesa. El resto de los chicos, viéndonos llegar con las manos vacías, empiezan a reír y a reclamarnos, pero en un momento todos se callan al tiempo que Santana se acerca y comienza a repartir las copas. Me hace gracia que coloque la copa de vino tinto delante de mí, suponiendo que es mía. Bueno, ha acertado. Me mira una vez más a los ojos mientras los demás le agradecen, y se va.

Por supuesto el encantador Jake tenía que contar, y exagerar, nuestro momento en la barra con la camarera. Hay que decir que ya hemos bebido bastante para entender las estupideces que vamos a hacer.

De repente Tom se envalentona:

-"no Jake, lo que pasa es que esa chica busca un hombre de verdad. Qué os apostáis a que voy allí y la saco un beso?"

Le miro entornando los ojos como diciéndole No sabes dónde te metes, pero no digo nada. Nadie sabe que la conozco todavía. Y le dejo ir, todos le seguimos con la mirada, nadie se quiere perder esto. Él se acerca a la barra y ella parece que le hace caso, algunos se ríen dándole una palmadita en la espalda a Jake; la escena continúa, Santana parece que sonríe un par de veces mientras hablan. Tom se da la vuelta y viene hacia nosotros.

-"jajajaja, te lo dije. Está loca por Fabray!"

-"Na, no es una chica fácil pero la tengo en el bote. Me ha dado su número", me río por dentro preguntándome quién cogerá el teléfono cuando Tom marque ese número.

-"Oh!, venga!, apuesto a que si Quinn lo hubiera intentado, lo habría conseguido en diez segundos..."

-"Coghh!", me atraganto con el vino sólo imaginando lo que Jake acaba de decir.

-"si Fabray la saca un beso, le cedo el caso Walker", Tom dice y me mira esperando mi reacción.

Se me quedan los ojos como platos, los Walker son una familia de renombre, ese caso está en los medios a diario y aún no ha empezado el proceso, lo quiero. Me siento como un niño mirando un dulce desde el escaparate. Venga, es sólo un beso, no es algo que no hayas hecho antes Quinn; y es Santana, ellos no saben que os conocéis, eso es una ventaja…creo…

-"promételo delante de todos que me darás el caso", le digo,

-"te veo muy segura de tus posibilidades...", bromea, pero le mantengo la mirada y no digo nada, "Lo prometo, pero te tiene que besar ella, no vale que te abalances encima…",

Asiento mientras doy un último sorbo a mi copa de vino, me levanto y voy hacia mi objetivo.

...

SANTANA POV

No puedo dejar de mirarla desde lejos. Está preciosa. La veo más madura y tiene el pelo más largo. Evito pensar en la última vez que la vi aquella mañana en aquella habitación de hotel, las cosas que hicimos, las cosas que nos hicimos…

...Dios mío! Viene hacía mí. Disimula S...

-"ejemmm" Oigo una tos forzada frente a mí y levanto la vista.

-"Quinnie, veo que los años te tratan bien" digo mientras la miro descaradamente de arriba a abajo.

-"Hola Santana, bueno, yo puedo decir lo mismo" Me dice con una sonrisa que deslumbra, levanto las cejas,

...esto no funciona, evita contacto visual...

-"Te hacía en Los Ángeles después de acabar la Universidad, fue lo último que supe de ti por Mercedes", hablo con ella haciéndome la distraída, muevo vasos debajo del mostrador.

-"Estuve allí, llevo en New York un par de meses..., aunque es la primera vez que salgo por la noche, lo que ves allí son los restos de la cena de navidad de SMITH&WILLIAMS", las dos miramos a la mesa mientras seis chicos nos saludan embobados en la distancia.

-"Podías haberme llamado, sabes que vivo en New York, podría haberte enseñado esto", es lo que sale sin control de mi boca, Quinn me estudia un momento,

-"La verdad, lo pensé, pero ha pasado tanto tiempo, no…, no sabía si aún somos amigas, suena ridículo pero no hemos intercambiado más que unos pocos emails en seis años, no estaba segura de si querrías verme o... te sentirías obligada"

Rodeo la barra para salir de detrás y me acerco a ella poniendo una mano en su hombro.

-"Quinn, sí que te has olvidado de mí en este tiempo si crees que voy a hacer algo por sentirme obligada..., mi número es el mismo, más te vale usarlo", Viendo que había gente esperando me doy la vuelta mientras hablo, "Ahora estoy un poco liada, pero llámame", y doy un paso hacia atrás…

-"Espera, hay otra cosa...", la miro, "...es una tontería, verás…, eeeeeee..., necesito... que me des un beso...", dice lo último rápidamente. Estoy paralizada (...esto no está pasando...) "...quiero decir, bueno, los chicos estaban hablando de ti, y... no sé cómo, han apostado que si me dabas un beso me cedían un caso importante…, sé que es una locura pero de verdad, San, lo quiero…, por favor..., porfa, porfa...", me mira sonriendo con su más dulce cara de cachorrito inocente y no puedo evitar reírme, por lo menos ya hemos perdido la tensión entre nosotras. De repente caigo en algo.

-"...por eso el carabesugo ha venido a contarme una loca historia de cómo se ha metido algo en el ojo y a pedirme que se lo quitara..., imagino que el también estaba en la apuesta?...", Me sigue mirando con la misma sonrisita y asiente, "...le dije que había un hospital aquí al lado, que le iban a atender mejor que yo…, si pretendía robarme un beso mientras yo le buscaba algo en el ojo se hubiese acordado de mí por el resto de sus cinco minutos de vida!"

-"Buenooo, eso no hubiera valido...", me quedo mirándola esperando que se explique, "...me tienes que besar tú a mí...", entonces Quinn desvía la vista de mis ojos,

De repente besarla se convierte en una posibilidad en mi cabeza, pero este mismo pensamiento me aterra,

...tengo que escurrirme de esto...

-"Lo siento Fabray, pero me debes muchas cenas por estos seis años antes de que te deje acercarte tanto..." La digo jugueteando, "...llámame esta semana, tomaremos un café, si?"

Me mira y asiente como rindiéndose, se da cuenta de que no iba a ganar esta apuesta. Da un paso atrás para volver a su mesa, pero ver esa cara, esa última mirada de decepción… y me miento a mi misma,

...es ayudar a una amiga, es por trabajo...

Sin pensar la agarro por el brazo antes de que se dé la vuelta completamente y la acerco hacía mí, el brazo que no estoy agarrando de repente rodea mi espalda en el momento en que nos chocamos, su cuerpo está pegado al mío y la siento respirar muy fuerte,

...será por trabajo, pero sé que ella también está rememorando nuestra última noche...

Pongo mi mano en su cintura y me permito disfrutar del momento. Y entonces poso mis labios sobre los suyos y mi pecho explota,

...si me hubiesen dicho esta mañana que hoy la iba a ver..., no, que hoy la iba a besar…

Sus labios comienzan a moverse y suelta un suspiro que se ahoga en el beso, la agarro más fuerte hacia mí y rozo mi lengua con sus deliciosos labios, todo se vuelve más húmedo, noto el sabor del vino tinto, lo sabía, y siento sus dientes atrapándome el labio inferior. Con esto prácticamente gimo sintiendo más humedad en mis bragas. Me aparto y la miro a los ojos. Sonríe otra vez. Tiene un brillo especial.

...Joder! Es preciosa!...

-"Gracias", me coge la mano un segundo y me la aprieta un poco. "...te llamaré", Luego se va a su mesa, sin más,

Me doy la vuelta y meto en el almacén, ...Gracias? En serio? Gracias?!, Santana eres imbécil, …pero esos labios…, me pregunto si tendrá novio, y qué habrá estado haciendo todo este tiempo, no, Santana, a ella le atraen los hombres, quítate esos pensamientos de la cabeza!. Bueno, esta semana quedaremos y me contará todo lo que quiero saber…y lo que no quiero…

Mi cabeza se empieza a enfriar y comprendo que ha sido una estupidez besarla, después de todo lo que sentí aquella noche. Pero me da igual, estoy decidida, sé lo mucho que he echado de menos a mi mejor amiga y quiero tener a Quinn Fabray en mi vida otra vez.

...

QUINN POV

El pánico me paraliza y me voy alejando de ella, Madre mía! Qué beso!, mientras me besaba tenía flashes de la noche que pasamos juntas hace ya tanto tiempo. Vuelvo a la mesa en piloto automático, los chicos me felicitan entre risas de lo bien que me "Gané el caso". Sigo en Shock.

...Qué beso!, …Quinn!, para ya! Deja de pensar en ella así, sólo te ha hecho un favor...

Me tranquilizo un poco y busco la manera de escapar de aquella "noche de copas", Ya he tenido suficientes emociones por hoy. Me despido de los chicos diciendo que mañana tengo que hacer algo temprano,

...gracias a Dios es mentira, no me puedo ni imaginar la resaca que voy a tener…

Veinte minutos más tarde llego a mi edificio caminando, pienso que no ha sido mi mejor idea caminar sola por New York a las dos de la madrugada pero el aire frio me ha sentado bien, me ha despejado un poco la cabeza.

Abro la puerta del apartamento en tinieblas, entro y mientras camino hacia mi habitación mis zapatos salen disparados y me voy quitando ropa, lo que consiga quitarme antes de llegar a la cama, bienvenido sea. Yo misma me sorprendo de que de alguna manera haya salido del vestido y estoy en ropa interior. Llego al cuarto y sin encender la luz me meto en la cama. Todo va dejando de dar vueltas.

-"Hey, babe, Buenas Noches" Me susurran en el oído mientras un brazo me rodea por la cintura. Yo me dejo abrazar y cierro los ojos.

Me toco los labios con la punta de los dedos,

...Dios mío, qué beso!...