Full Metal Alchemist no me pertenece, ésta magnífica creación es de Hiromu Arakawa & sin más damos paso a esta historia n.n
LA FELICIDAD ENCONTRADA
CAP I: After day Promised
Era un día como cualquier otro en el cuartel de Ciudad del Este, y el general Mustang, sí general (pues después de los sucesos ocurridos luego del día prometido, Roy recuperó la visión gracias a Marcoh, y también recuperó a sus subordinados; y ascendió a general, trasladándose a Ciudad del Este, junto a todos sus subordinados; pues ahora el nuevo FÜhrer era Grummam).
Mustang veía que su trabajo no acababa; cada vez seguían apareciendo cúmulos de papeles sobre su escritorio…. Llegó la hora de salida y todos sus subordinados se retiraban, bueno todos excepto uno: la teniente Hawkeye.
Hawkeye se compadeció de su coronel y decidió acompañarlo a terminar su trabajo; después de todo éste tipo de situaciones ya era costumbre.
- "¿Se quedará hoy también teniente?". Habló Mustang
- "Señor es mi deber acompañarlo", dijo Hawkeye y se paró a preparar café, pues sería una de esas noches largas.
Roy sonrió para sí y continuaron su trabajo. Dieron las dos de la madrugada y acabaron con los cúmulos de papel que se encontraban en la mesa. Ellos se prepararon para salir, era probable que casi nadie esté por el cuartel; al salir Roy se ofreció acompañar a Riza hasta su departamento. Riza dijo que podía cuidarse sola y que no era necesario, pero ante la insistencia de su superior, aceptó.
El camino hacia el departamento fue silencioso, ya que Riza estaba muy cansada como para tener una conversación en esos momentos; estando ya en la puerta del departamento Roy se despidió:
- "Bueno teniente, que tenga buenas noches o debo decir buenas madrugadas", dijo sonriendo.
- "Señor gracias por acompañarme, no se olvide llegar temprano, aún hay trabajo por hacer", dijo una firme Riza.
Roy solo atinó a sonreír, dio media vuelta y se retiró, estaba cansado y tenía flojera tener que ir a trabajar, pensaba inventar una excusa que estaba resfriado por ejemplo, pero era probable que Riza descubriera la verdad y le apuntara con una de sus armas, después de todo tenían mucho tiempo de conocerse.