Candy Candy no me pertenece, así como ninguno de sus personajes, pertenecen al talento de Kyoko Mizuki. Este fic es algo de mi imaginación que quiero compartir, esperando les encante, agradecere mucho sus comentarios y el tiempo que le puedan dedicar para leerlo.
Gracias a las Chicas de "Historias de Candy" porque han sido de mucha ayuda en mi loka inspiración.
Amor sobre hielo.
Por Cielo Azul A.
Capítulo 1
Albert, ya es hora de comer, por favor llama a tus primos, esas fueron las palabras de mi madre aquella tarde de verano, un hermoso verano soleado con un maravilloso sol radiante de luz.
Me encontraba de visita en casa de mis tíos Arthur y Evangeline Stevens que por cuestiones de negocios se tuvieron que mudar de país, somos ingleses y por supuesto que adoro mi país, sin embargo Vancouver Canadá me encanta, el clima, la gente, todo; mis primos y tíos ya tenía un año radicando aquí así que aprovechamos las vacaciones y poder visitarlos aparte de conocer un lugar diferente, sin imaginar que este lugar marcaria mi vida para siempre.
Estuvimos dos largas semana en casa de los tíos, tanto mi hermana Rosemary como yo nos habíamos adaptado bastante rápido al ambiente, creo que era lógico cuando mis primos Archi, Stear y Annie ya estaban muy arraigados a pesar del poco tiempo viviendo aquí.
Ese día salimos a conocer el Castillo Craigdarroch, sin duda una imponente construcción, bueno como no debería de serlo si es un castillo, construido entre 1887-1890 por Robert Dunsmuir, un inmigrante escocés que hizo su fortuna a partir de carbón, Esta legendaria mansión victoriana, construida sobre una colina que domina la ciudad de Victoria anunció al mundo que Robert Dunsmuir era el hombre más rico y el más importante en el oeste de Canadá.
Ese día después de regresar de nuestro estupendo paseo vimos dos o tres camiones de mudanza descargando muebles, frente a la casa que estaba frente a la de los tíos, al parecer llegaba una nueva familia, me dio curiosidad saber quién llegaba pues mientras la casa estaba deshabitada mis primos, hermana y yo nos escabuiamos a su jardín para poder jugar, así que me quede contemplando la mudanza, al estar parado observando el panorama, vi a un chico más o menos de mi edad, que decía "caramelito ver por favor", me dije valla que nombre tan dulce y sonreí, justo en ese momento la vi, una criatura angelical sin duda alguna, piel blanca, enormes y expresivos ojos con lindos rizos dorados, risueña, por su actitud me imagine que era una chica muy extrovertida y alegre.
A lo lejos pude escuchar un poco de su plática, ella respondía, "Sebastián ya te he dicho que no me digas así, mi nombre es Candy que van a decir los que escuchen como me llamas, ehhh. Haber hermanito yo creo que a ti te voy a llamar terroncito a ver que dicen tus amigos"
En ese momento creo que ella sintió mi mirada pues volteo hacia donde me encontraba y me regalo una radiante sonrisa, creo que al verla me quede paralizado, no supe que hacer así que le sonreí y me fui.
Ellos siguieron así por casi el resto de la tarde, por una parte me sentí mal de no haber reaccionado de otra forma, me considero un chico extrovertido y creo que eso me ha ayudado a tener buenas amistades, pero con ella me paso algo totalmente diferente, no sé si fue su mirada o su sonrisa lo que me congelo en ese momento y esa tarde ya no fue la misma para mí, mientras mis primos y hermana se divertían sacándole provecho a nuestros últimos días en Vancouver yo simplemente quise seguir observando por la ventana a esa bella niña, esperando tener la oportunidad de por lo menos presentarme.
El tiempo voló y llego el día de regresar a Inglaterra, me sentía mal por no haber tenido la oportunidad de presentarme, pero tenía la esperanza de regresar en nuestras próximas vacaciones que serían en 6 meses.
Sin darme cuenta pues estaba perdido en mis pensamientos, no me percate que alguien en bicicleta venia hacia mi dirección, solo pude escuchar un ¡Cuidado!, demasiado tarde pues ya habíamos colisionado, lo único que pude hacer fue cerrar los ojos esperando no tener un golpe fuerte, en ese momento sentí una cálida respiración y al abrir los ojos pude ver aquellos hermosos ojos verdes, de verdad que eran como dos esmeraldas brillantes, sin duda era ella, más linda de lo que había visto en esa tarde.
En ese momento olvide cualquier dolor que hubiese podido tener por el choque así que simplemente le pregunte si estaba bien y la ayude a ponerse de pie lentamente, ella estaba bastante apenada pues se veía el rubor en sus mejillas y lo único que pudo decir es un "lo siento".
Yo le sonreí para que no sintiera pena por el incidente y le pregunte nuevamente.
-¿Te encuentras bien?
-Sí, disculpa por el golpe, no soy muy diestra en la bicicleta y mi hermano no me acompaño en esta ocasión, me gustaría poder hacer algo para reivindicarme por lo sucedido, dime que puedo hacer por ti.
En ese momento me sentí el chico más afortunado, parecía que el destino estaba en ese momento de mi lado y me había dado la oportunidad de verla nuevamente antes de partir, por lo que no pude decir palabra alguna y de repente escucho.
-¿Tú te encuentras bien?, pregunto ella.
-Sí, disculpa mis modales.
-Me sonrió y me respondió, no discúlpame tú a mí porque primero te golpeo y ni siquiera me presento contigo.
Mi nombre es Candice Biel, pero me puedes llamar Candy.
Pensé, valla que nombre tan dulce, ahora entiendo porque lo de "caramelito", pero nuevamente algo pasaba, escuche a Rosemary gritarme, "ya es hora de irnos, ven por favor"
Candy me miro con sus bellos ojos y me dijo, creo que ya vas de salida, pero por favor espero poder tener la oportunidad de reivindicarme por lo sucedido, cuídate mucho, hasta pronto.
Así se aproximó y poso sus suaves labios sobre mi mejilla lo que hizo que el color se intensificara sobre mi rostro y me dije por Dios me está dando un beso, nuevamente me quedaba sin habla y me sorprendía del efecto que ella había causado sobre mí.
Sin tener oportunidad de decirle mi nombre ella se fue y yo tuve que partir también, de esa forma me uní con mi hermana para ir rumbo al aeropuerto.
Por un lado me sentía muy feliz de haberla visto nuevamente y sobre todo de saber cómo se llamaba, no sin decir que ese beso que me dio aún lo podía sentir y me decía jamás me lavare la cara nuevamente, quiero tenerlo por siempre.
Creo que jamás había deseado estar en un lugar como en Vancouver, sin duda habían sido mis mejores vacaciones, ya pensaba en las siguientes para poder volver a verla.
Han pasado 10 años de aquella experiencia en ese entonces yo tenía 16 años y probablemente ella unos 12, aún la recuerdo al igual que a esa experiencia como si la estuviese viviendo en este momento, es un recuerdo que atesoro en lo más profundo de mi corazón, ese día aquella niña robo mi corazón, solo nos vimos un par de veces, una bicicleta, un choque y un beso, a eso se limitaba mi historia con ella, sin embargo se convirtió en lo que llaman "amor platónico".
Tal y como lo había deseado mi hermana y yo regresamos 6 meses después nuevamente, en esa ocasión mis padres no fueron con nosotros pues tenían negocios que atender, pero cuál fue mi triste destino que ella había partido de aquella casa una semana antes de que yo llegara, al saber que ella había partido sentí un profundo dolor, es algo indescriptible, a pesar de que no sabía prácticamente nada de ella, pero como era de esperarse eso no pasó desapercibido por mis primos y hermana por lo que me confesé ante ellos, creo que quedaron sorprendidos por mi confesión, sobre todo por el efecto que "Mi princesa caramelo" había causado en mí, cuando ellos sabían que era demasiado extrovertido como para sentirme cohibido ante alguien; por otro lado ellos me platicaron que habían hecho una buena amistad con los hermanos Biel, su padre era Almirante de la marina canadiense y jamás tenían un lugar fijo por lo que constantemente estaban cambiando de residencia, pero por su amistad prometieron que cuando tuviesen una residencia permanente ellos escribirían para mantenerse en contacto, es hora de que eso no sucede.
El tiempo ha pasado y nuestras vidas como era normal debían continuar, Archí, Stear y Annie realmente hacharon raíces en Vancouver asi que desde entonces ellos siguen radicando ahí, Rosemary ahora ya solo los visitamos cuando hay oportunidad, pues ahora nuestras responsabilidades son más, mi padre afortunadamente tiene una buena posición económica por lo que sé que en algún momento tendré que tomar el control de sus negocios como varón de la familia y no es que piense que las mujeres no puedan hacerlo pero para mí mala fortuna a mi hermana no le interesa sumergirse más de lo debido en los negocios familiares asi que ella tiene la fortuna de dedicarse a lo que le apasiona que es el diseño de moda y realmente creo que tiene un gran futuro en ello, soy hombre pero eso no me impide admirar la vestimenta femenina.
Sin embargo no me puedo sentir tan desafortunado pues mi pasión son los animales, por lo que estudie Veterinaria a la par que pude estudiar Administración de Empresas ya que algún día me será de mucha ayuda en los negocios de la familia, en este momento me encuentro planeando poder estudiar una Maestría en Finanzas así estoy buscando regresar nuevamente a Vancouver de donde guardo gratos recuerdo.
Por su parte Archí es un exitoso administrador de empresas y ya apoya a su padre en los negocios, Stear se dedicó a ser hombre de ciencia por lo que realiza algunos experimentos e investigaciones pues su más grande deseo es poder aportar algo a la ciencia y mi bella prima Annie lleva la música en las venas su pasión es el piano por lo que estudia para volverse una gran concertista.
Asi han pasado 10 años en nuestras vidas, hemos crecido y ya no somos aquellos niños que disfrutábamos del juego que podía ser en ese entonces nuestra más grande preocupación.
-Mamá, ya estoy aquí.
-Si Albert, en un momento estoy contigo.
Mientras mi madre baja veré si hay mi postre favorito.
-Albert, ya estás buscando postre, aun no comemos.
-Mamá, sabes que no puedo evitarlo.
-Mejor platícame como te fue, ya por fin te decidiste a regresar a Vancouver.
-Sí, sabes que siempre me ha encantado esa ciudad y bueno creo que empezare a buscar lugar donde vivir.
-Sabes he platicado con tu padre y a nosotros nos agrada esa ciudad, sé que tanto a tu hermana como a ti les agrada también, por lo que nos gustaría vivir un tiempo allá, qué opinas.
-Valla, sí que es una grata noticia, por mi encantado de que podamos ir juntos, tal vez se decidan a quedar por tiempo indefinido, sé que ya soy un hombre pero aun asi no deja de ser difícil separarme de la familia.
-Para nosotros igual es difícil que te vallas, te confieso que ya estamos buscando casa, he estado hablando con tu tía Evangeline y dice que la casa frente a la de ellos está en venta asi que estamos planeando comprarla.
Al escucharla decir eso los recuerdos llegaron a mi mente como una película en donde lo que quedo en mi mente son sus maravillosos ojos verdes, lo que daría por volver a verme en ellos.
Al final solo pude decirle lo sorprendido que estaba por la enorme coincidencia de que compraran esa casa.
-Albert y que dice Amy de tu decisión.
-Inicialmente habíamos planeado hace algunos meses ir juntos, ella nunca fue ajena a que deseaba poder ir a estudiar allá, pero le ofrecieron una beca para estudiar en España y sinceramente no quiero interferir en su decisión, también yo sé cuánto tiempo estuvo esperando esa oportunidad y no es justo que por mi ella la arriesgue.
-Me imagino lo difícil que puede ser para ti esta situación.
-Asi es mamá, es difícil pues la quiero y no sé si nuestra relación podría soportar una separación tan grande, ella es muy importante para mí, en realidad estoy en un dilema.
-Bueno hijo, creo que no deberías de sentirte asi, si entre ustedes hay realmente un amor verdadero creo que podrán resistir eso y más, se paciente, me lo prometes.
-Claro que sí, gracias por escucharme siempre.
-Bueno tu padre y hermana ya llegaron, ordenare que sirvan la comida.
Asi pasaron algunos días de esa plática con mi mamá, aunque ella me pidió paciencia en realidad era lo que menos tenia, no quería dejar a Amy pues la quería demasiado y realmente deseaba que me acompañara, pero tampoco quería alejarla de su oportunidad, no sabía cómo abordar con ella el tema, cada que nos veíamos hablábamos como siempre de todo menos de eso.
Después de estos sentimientos he tomado una decisión así que la invite a cenar para poder platicar con ella.
Para esa noche elegí un bello restaurant con una mesa que tuvieses un poco de privacidad a la luz de las velas, llegamos y a ella le agrado mucho, algo que imagine pues ella es una mujer muy romántica.
La ayude a tomar asiento, la velada transcurrió con una plática muy amena, la verdad estaba algo nervioso por lo que le diría esa noche, así que intente calmarme y exprese mis sentimientos en ese momento.
-Amy, todo este tiempo que hemos compartido ha sido maravilloso, hemos vivido hermosos momentos y de igual forma hemos aprendido el uno del otro, con los altibajos que puede tener un relación pues es parte del aprendizaje y crecimiento del día con día, ahora que puede existir la posibilidad de separarnos no puedo dejarte ir, por ello quiero saber si te gustaría seguir siendo mi compañera por el resto de mi vida, poder caminar juntos, te amo, quieres casarte conmigo.
-Albert, para ser sincera estas palabras las soñé muchas veces escuchar y ahora que me las dices parece que ese sueño se hace realidad, que más deseo yo que caminar a tu lado por el resto de mi vida.
Al verme en sus bellos ojos y escuchar sus palabras podía sentir el amor que me tenía, y tuve más seguridad en mi decisión, le tome la mano y puse sobre su dedo anular un sencillo anillo y con ese acto selle sus labios con un beso.
Salimos del lugar y la lleve a casa, esa noche me sentía tranquilo por fin después de tanto tiempo donde la incertidumbre se había apoderado con el hecho de tener que separarme de Amy.
Planeamos y acordamos que seguiría antes de poder planear la boda así que ella acepto su beca a España mientras yo estudiaría la maestría, les hicimos del conocimiento de las familias de ambos nuestro compromiso, ellos encantados con la noticia.
Ella partió dos semanas antes que yo, ese día la lleve al aeropuerto, nos dolía mucho sepáranos a pesar de que ya estábamos comprometidos, pero prometí que en sus primeras vacaciones yo la visitaría y posteriormente ella en las mías.
Por otro lado mis padres ya habían hecho las gestiones necesarias y ya se había concretado la compra de la casa, yo tenía que viajar antes pues debía de concretar trámites en la Universidad de Vancouver.
Creo que por fin las cosas ha tomado un rumbo y estabilidad, me siento tranquilo y en paz conmigo mismo, aunque no puedo negar que en mi hay una nostalgia por aquella angelical rubia y en ocasiones me pregunto cómo estará, siempre deseando que sea feliz.
Ya me encuentro en Canadá, listo para poder iniciar una nueva experiencia, he visitado la Universidad para poder conocerla mejor y así familiarizarme, mis primos me han apoyado mucho en este cambio y me agrada poder tener la oportunidad de vivir cerca de ellos, seremos vecinos, jajaja.
Quiero mantenerme ocupado la mayor parte del tiempo para no tener nostalgia por la separación de Amy, así que me inscribí para dar tutorías en clases de francés, es un idioma que me apasiona y se me ha dado con mucha naturalidad, las clases comienzan la próxima semana ya para todos así que ese día sabré que alumnos necesitan de mi apoyo.
El fin de semana antes de iniciar a nuestras actividades los primos organizaron poder ir a navegar en kayak en False Creek, me gustan las aventuras así que siempre estoy dispuesto a ir a donde pueda conocer y hacer algo nuevo, ese día Annie se nos unió ya que cuando yo llegue ella había viajado con unas amigas, llegamos y realizamos nuestro plan de actividades.
-Chicos, Albert, les tengo una súper noticia, creo que jamás adivinaran que puede ser, nos dejó en suspenso.
-Annie, porque tan misteriosa, sabes que no me gusta, replico Archie.
-Vamos hermanita, no nos tengas en este sufrimiento, confiesa, se le unió Stear.
-Primo, tú no vas a decir nada, preguntó ella.
-Bueno la verdad es que me tienes intrigado, pero puedo ser paciente primita.
-Creo que tú serás el más feliz con esto, está bien no los mantendré más en suspenso, recibí carta de "Tu Princesa Caramelo", cuando escuche eso me quede paralizado, después de 10 años y regresa, vaya que sorpresita.
Aunque puedo decir que yo era muy consiente que el pasado simplemente fue vivencia de niño, casi adolescente así como yo tenía una vida me imaginaba que ella igual.
-Archí y Stear sonrieron y lo primer pregunta, que nos platica?
-La carta es breve, me platica un poco de donde vivió los últimos años y que nos dará pronto una sorpresa.
-Valla, pues la primera sorpresa ya la dio con su carta, dijo Archie.
-Qué opinas tu Albert, probablemente su sorpresa sea regresar, al oírla pude sentir una leve emoción, pero le respondí a Annie.
-Han pasado muchos años y tanto ella como yo hemos hecho nuestra vida, me imagino que menos me recuerda si no tuve oportunidad de decirle mi nombre, bueno pero tampoco he tenido oportunidad de contarles, le pedí matrimonio a Amy y ella acepto así que pronto estaremos festejando nuestra unión, con esta respuesta el tema de Candy quedo terminado en ese momento.
Mis primos se sorprendieron, no sabían que mi relación con ella fuera tan seria, pero me felicitaron, aunque Annie tomo una actitud algo indiferente a la noticia.
