Disclaimer: The Vampire Diaries no me pertenece, es de L. J. Smith y The CW. Solo la trama es mía.
NdA: dedicado a Alleina, esto no habría sido posible sin su obsesión por Bonkai. Sigo con su idea de Kai fantasma porque soy muy fan :)
Palabras: 499
Aviso: Este fic participa en el Reto Drabble "Kai Parker" del foro The Vampire Diaries: Dangerous Liaisons.
Bonnie había sido una chica muy mala. Lo había apuñalado por la espalda y abandonado en un mundo prisión, nada menos que en 1903. Si había pensado que lo había pasado mal en 1994, eso no era nada con lo que tuvo que pasar en su nueva cárcel. No había agua corriente, ni luz, ni gas, ni snacks, ¡ni siquiera videojuegos! Y encima estaba encerrado con unos vampiros-brujos que no dejaban pasar la oportunidad de alimentarse de él.
Sí, Bonnie había sido muy cruel. Era perfecta, él habría hecho lo mismo.
Sabía que en realidad lo que estaba haciendo la morena era negar sus sentimientos hacia él. Desde la primera vez que coqueteó con ella en 1994 supo que había una chispa entre ellos, su mirada y su sonrisa se lo había confirmado. Si no hubiera sido por el vampiro, seguro que se habían enrollado allí mismo.
Cuando la vio en 2012 notó que estaba enfadada. Tal vez no debía haberla abandonado sola en la prisión pero… es que no tenía a su filtro (aka su hermano muerto, Luke). Además, considerando en retrospectiva lo que ella le había hecho, fue un castigo adelantado.
Descubrió cómo salir utilizando el ascendente y la piedra mágica de los Bennet. Planeó cuidadosamente sus movimientos. Primero, mataría a su aquelarre, eso por descontado, él moriría pero era un sacrificio necesario. Al fin y al cabo, resucitaría como híbrido. Después mataría a todos los molestos amigos de Bonnie, dejándola a ella para el final, vinculándola a su amiga Elena. Ni si quiera tendría que matarla él, lo haría Damon. Era brillante. Estaba seguro de que su Bonster admiraría su plan.
No contó con quedarse embelesado de la belleza de la morena en su momento triunfal y que el gilipollas de Damon le arrancara la cabeza de un manotazo.
Pero afortunadamente no murió. Estaba en un plano astral, sin cuerpo físico.
Estaba condenado a observar.
Vio como Bonnie se despedía de Elena, la vio reír con su amigo (¿Matt?), con la rubia y el cansino de su novio. Con Damon. También la vio discutir con él.
No era justo.
Pero una noche, Bonnie susurró su nombre mientras dormía. ¡Estaba soñando con él! A esa noche le siguieron otras y Kai se necesitaba saber qué soñaba. Tal era su deseo que una vez consiguió averiguarlo.
Apareció en su sueño. Era el día que lo abandonó en la nieve. Ella huía de él cuando se dio la vuelta.
— Motus.
No pasó nada.
Él no quería que pasara nada, quería que le sonriera. Y lo hizo. Luego deseo que se clavara el cuchillo a sí misma. También lo hizo.
Entonces él sonrió.
— He echado de menos jugar contigo, Bon-Bon.
Ella lo miró asustada.
— Esto es un sueño, no eres real.
— Soy un sueño pero soy muy real…
Kai era feliz. No necesitaba tener un cuerpo del que podían deshacerse para estar con ella. La vería cada noche y, un día, ella se daría cuenta de que era su Bonster.
