Enishi

Llevamos juntos 4 días en la isla, al principio ella llora y me escucha, rápidamente entiende su posición y se muestra dispuesta a colaborar. Me gusta de inmediato, su parecido con mi hermana me deja sin aliento pero su personalidad es totalmente distinta, su esencia es distinta, pienso que tomé la decisión correcta.

Le doy una bata para que use mientras este en la isla, pienso que se ve más atractiva con el pelo suelto, por lo que en su estancia en la isla no dejaré que se lo recoja en una cola infantil, la imagen de mi hermana es más nítida de esta manera.

Observo como se mueve por la casa, no es tan elegante como mi hermana pero si es hipnótico, la bata me ayuda a imaginar cómo se mueven sus piernas. Intento hablarle diariamente pero todavía se ve perdida en sus pensamientos, responde en monosílabos. Cuando mueve su boca siento ganas de verla con un poco de maquillaje, tiene rasgos muy hermosos: Grandes ojos azules, una pequeña nariz fina, piel tersa y una boca pequeña pero carnosa. Lápiz labial rojo o rosado quizás le quedaría bien. Aunque me quede observándola por largos períodos ella no me dice nada, quizás sabe lo que pienso o quizás me está odiando mientras me mira.

Han pasado 14 días y ahora cocina, lo hace horriblemente. Lo peor es el sabor de las comidas, muy quemadas o mezclas que jamás debieron ser, pero quiero agradarle así que me como todo sin decir nada, le he dicho que debe comer conmigo todas sus comidas. No voy a negar que me emociono cada vez que se acerca los horarios que hemos fijado para comer, pero obviamente mi rostro se muestra sin ningún tipo reacción. Me doy cuenta que se acostumbra a la idea de que la observe y estar cerca de mí, me pregunto que más podría hacer acercarla sin ser obvio.

-Enishi- escucho mi nombre de sus labios, sólo puedo levantar la mirada y ver como se mueven y pronuncian mi nombre, mi estómago empieza a cosquillear, aprieto mis puños para controlar el cosquilleo en ellos, no me concentro en lo que dice- Enishi, escúchame-
-Si Kaoru, dime-
-Parece que viene una tormenta, no deberíamos estar afuera. Hay mucho viento y en cualquier momento saldremos volando también- Creo que es la primera vez que me dice una broma desde las dos semanas que lleva aquí.
-Está bien, si tienes frío podemos entrar, mi práctica por el día de hoy terminó. Cenaremos y nos acostaremos temprano, moveré tu cama a mi habitación en caso de que exista algún problema con la tormenta.
-¿Qué?- Se ve muy sorprendida por mi declaración, si bien sabe que no puede reusarse a mis peticiones era obvio que no pasaría por algo esta. Ahora sólo debo pensar que explicación le puedo dar para que crea que debe estar en mi habitación.
-La última tormenta que hubo botó muchos árboles y las ramas volaban con el viento, una rompió una de las ventanas y entro a la habitación. Ya que yo estoy en el lado contrario no hay árboles que puedan pasar, además el balcón sirve como protección. Y no te preocupes, mi habitación es grande y no vamos a dormir en la misma cama.
-Entiendo- se sonroja, a pesar de mi explicación se sonroja para mí y puedo disfrutar del espectáculo en primera fila, me pregunto si Tomoe me sonreiría por verla así, quizás aún no lo hace porque no estoy tan cerca de ella, esta noche probaré mi teoría y esperare la sonrisa de mi hermana.

Kaoru prepara la cena y después de mi baño bajo a comer con ella, me gusta la calma que su cara refleja cuando sirve nuestros platos, y como se sienta delicadamente frente a mí, como agradece y luego comienza a comer. Me pregunto si en un universo paralelo sin jinchuu esta mujer podría ser mía, donde mi hermana vive y se la presento, tengo hijos con ella y Tomoe los cuida cuando decidimos salir por la ciudad.

-Enishi- Siento como mi corazón da un salto cuando dice mi nombre, estaba mirando mi universo perfecto y no había prestado atención a sus llamados-Enishi, ¿me estas escuchando?
-Ahora tienes toda mi atención Kaoru- trato de suavizar mi mirada cada vez que me habla directamente ¿se dará cuenta de mi gesto hacia ella?
-Siempre son dos llamados verdad, siempre pareces estar perdido en tus pensamientos- por supuesto, tengo que pensar en ti, en esta realidad y la que vivo en mi cabeza, donde eres la mujer del asesino de mi hermana-me preguntaba si es necesario que hoy duerma en tu habitación, entiendo que lo hagas para cuidarme y lo agradezco mucho, pero no me parece correcto-
-Kaoru- recuerdo que ella japonesa, tradicional y probablemente nunca ha compartido habitación con un hombre, esto me alegra sobremanera- no te preocupes por favor, no te hare nada, pero hoy debes dormir en mi habitación, si la tormenta no pasa a mayores mañana vas a regresar y dormirás nuevamente sola- me mira preocupada, pero suspira derrotada de inmediato, es una batalla perdida.
-Confío en ti- me sonríe y siento que mis rodillas son débiles, agradezco estar sentado. Ella vuelva a comer en paz, y me vuelvo a relajar y la miro con una pequeña sonrisa que se me escapa, no puedo esperar a la hora de dormir.

Mientras Kaoru se baña yo meto su cama en mi habitación y la dejo muy cerca de la mía, pretendo estar "durmiendo" cuando llegue al extremo contrario de su cama, así no podrá pedir que la aleje más. Cuando termino me saco mi ropa y me pongo mi pijama, unos pantalones sueltos y por esta noche una polera blanca, no quiero que se asuste pensando que estoy desnudo.
A Kaoru le tengo distintos tipos de batas y una camisa para dormir, ambas se apegan a su cuerpo pero no son muy reveladoras, no podría contenerme si lo fueran.
Siento cuando entra a la habitación, siento como la sangre de mi cuerpo empieza a hervir, solo el hecho de saber que está cerca de mi cama me descontrola un poco, pero quiero creer que me puedo controlar y disfrutar la sensación que voy a poder vivir.
Toma las ropas de la cama y se acuesta, escucho que se arropa y acomoda, como estoy mirando al otro lado y estoy en el otro extremo no puedo darme vuelta a mirarla, para eso debo esperar que se duerma.

-Enishi- siento como mis mejillas y mis orejas arden, mi estómago empieza a girar, me cosquillean las manos

y la cara-Enishi ¿estás despierto?- me giro lentamente y la miró, esta acostada de lado mirándome tristemente.
-¿Qué pasa Kaoru?- espero que su mirada cambie pero sigue triste, no tengo idea de los que piensa y siento que moriría de dolor si me dice que extraña al battousai.
-Bueno, quería saber si podíamos hablar un poco. Llevamos mucho tiempo juntos en la isla y no hemos conversado nada, sé que es mi culpa por haber estado tan deprimida, pero creo que ya no aguanto la soledad, nunca lo he hecho- Quiero traerla a mi cama y abrazarla, pero no me controlaría.
-Lo siento, no sabía que estas tan deprimida. Por supuesto que podemos conversar, ¿puedo acercarme un poco más?- Quizás no me controle si la tengo cerca, pero no puedo desaprovechar la gran oportunidad que me da, después de todo soy un hombre que siempre toma lo que la vida le da.
-Si Enishi, confío en ti- me pregunto si existe alguien más perfecta que ella, además de mi hermana. Sé que en este momento sólo piensa en mí, sólo me tiene a mí y la idea me gusta tanto que siento ganas de reír de felicidad. Creo que voy a poder acelerar las cosas así, sólo debo ser muy cuidadoso y jamás mencionar al asesino.
-¿De qué te gustaría hablar?
-No lo sé, no sé qué es lo que puedo saber y lo que no.
-Hay algo que te tenga preocupada, si quieres puedes partir por eso
-Está bien, ¿me matarás cuando tu Jinchu?
-No Kaoru, no te mataré nunca. Lo juro.
-Bueno, eso es un alivio-ríe un poco, realmente parece más relajada, creo que mi cara no se suaviza lo suficiente si aún cree que la voy a matar-¿Qué pasó con mis amigos?
-Creen que estas muerta-su cara se tensa de nuevo, no es un tema agradable pero mientras más pronto le diga lo que sucedió más rápido podemos pasar ese capítulo- hice una muñeca idéntica a ti y le hice creer que te había asesinado-
-Oh kami-gruesas lágrimas salen de sus ojos y se cubre la boca, no quiere que la vea llorar, probablemente piensa que me enfadaré con ella y no contestaré más de sus preguntar- ¿Por qué hiciste eso?
-Lo siento mucho Kaoru, es la primera etapa de mi Jinchu. El battousai quedó en estado catatónico, es el primer sufrimiento que debe pasar. Luego espero que se den cuenta y te vengan a buscar, pero la búsqueda puede ser larga, estamos bastante aislados.
-¿Y qué más debe sufrir?-
-Lo voy a matar-espero tu respuesta pero tus ojos no me dicen nada, no sé si sentir alivio o esperar que ardas en ira y me maldigas en llanto.
-Entiendo tu Jinchu Enishi, comprendo tu dolor y no me imagino por lo que habrás pasado, pero creo que me estás dando más importancia de la que debiese tener en todo este plan. Kenshin no me ama como tú amaste a tu hermana o inclusive como él amó a Tomoe. El me ama como yo amo a Yahiko o Sanosuke, como una especie de hermanos- repaso rápidamente el nombre de ambos hombres, Yahiko es el niño pequeño que acogió, antes de Kaoru era un ladrón y probablemente terminaría asesinado. Sanosuke es el peleador y amigo del Battousai, no me fío de él, un hombre adulto viviendo con Kaoru que no vea lo hermosa que es aunque sea unos años mayor que ella, quizás engaña a los demás pero a mí no-Si crees que el estado catatónico es por el dolor de perder a su amada estás equivocado, probablemente está lamentándose de cómo volvió a causar una muerte y se atormente por todos los otros asesinatos que lleva en su espada.
-Kaoru, piensas muy poco de ti-ahora soy yo quien la mira con ojos tristes, sé que quiere parecer fuerte y decidida con su respuesta pero veo el dolor en su verdad, aunque está errada no le diré que el battousai si la ama, él no la merece y jamás la hará feliz-Dime ¿lo amas?- estoy esperando la respuesta tratando de no dejar de mirarte, tratando de no reaccionar ante un sí.
-No sé Enishi, de verdad no lo sé-empiezas a derramar lágrimas y aprietas tus puños contra tu cara, siento como mi corazón se recoge ante tu dolor, siento tu sufrimiento y me muevo sin pensarlo, tomo tus puños y los acerco a mí, a pesar de que te resistes te abrazo y escondo tu cara en mi pecho, apoyo mi cabeza en la tuya y trato de relajarte con cariños en tu cuello y espalda.
Esa noche lloraste hasta que te quedaste dormida, y esa noche yo no dormí. Primero odie al battousai por causarte tanto dolor, por jugar con tu joven corazón, después pensé en la maravillosa oportunidad que tenía gracias a él, te tenía en mis brazos durmiendo, la lluvia golpeaba la ventana y la pieza tenía un calor que no sentía desde que era un niño: hogar. Mi jinchu ahora era otra, mi hermana me miraba con aprobación, sentía como mi locura se desvanecía con los latidos de tu corazón, esto es exactamente lo que ella quería, quizás la última etapa de mi jinchu cambiaría, ya no mataría al battousai, le robaría la mujer que ama y el vería como nos amamos.