—LA PRINCESA Y EL DRAGÓN—
Por Zury Himura
Disclaimer: los personajes no me pertenecen, la historia sí.
THE DRAGON' STAR.
UNTIL THE WORLD DIES
CHAPTER ONE
"Decían que él solo venía a matar y destruir, por ende había sido utilizado por milenios y sin consideración. Sin embargo, la princesa de Orión quien había venido para cazar a su dragón le daría una diferente perspectiva durante su guerra. Porque de ella había nacido una promesa que ante sus ojos trascendería el tiempo y el espacio"
El nombre de Doragon representaba dos cosas en el mundo de los humanos en la antigüedad, cuando los dioses eran adorados y las deidades eran aclamadas en tiempos de necesidad y guerra. Su figura mística y majestuosa podía ser entendida en dos maneras totalmente opuestas, todo dependía de la voluntad, propósitos y oraciones del que se animaba a levantar sus plegarias. En los corazones de algunos, Doragon era la máxima autoridad del universo, además de tener su propia constelación, se pensaba que era el encargado y protector del balance en todo el sistema. Era benigno y parcial, tanto que se le llamaba el digno que protegía a todo ser vivo.
Sin embargo, su figura que además personalizaba el poder y coraje, valentía, fuerza y soberanía, también era usada para otras cosas que contradecían la primera ideología. Su superioridad muchas veces era aclamada por los humanos que en sus corazones mantenían la llama de la maldad. Y, por eso, también Doragon era conocido entre muchos como un ser malvado que prestaba su ayuda cuando se trataba de matar, devorar y destruir. En otras palabras, el poder de esta deidad dependía de qué tipo de persona se le hincara a adorarle.
A pesar de que su existencia fuera usada por estos tipos de personas, esta figura incomprensible mantenía una sola verdad. La cual era restaurar, responsabilizarse del caos, muerte, nacimiento y felicidad del manto cósmico del que estaba encargado. Prestaba todo su poder para mantener un orden universal para mantener el mundo humano como un lugar sagrado, donde dioses tenían prohibido posar pie para interferir en asuntos mundanos.
Por eso, su nombre retumbaba, ya fuera en pruebas como celebraciones terrenales. Protegía y peleaba, prestando esencia de su espíritu, poder y determinación. Era usado en guerras y regocijos de una manera que pronto fue descontrolada. Pues con el pasar de los años, con cada generación nacida, los deseos se hacían cada vez más fervientes, llenos de egoísmo y avaricia, más oscuros… llenos de maldad. Podía pasar desde un simple deseo de abundamiento hasta pelear contra el enemigo del que protegía, omitiendo si el sujeto que había clamado por él era bueno o malo.
Doragon amó a la humanidad y prestó con humildad de su sabiduría, amabilidad y apoyo cuando se le fue solicitado. Ya que era el poder supremo, el guardián de los cielos, de la tierra, las aguas y el universo, que solo los subestimó por simpatía. Estuvo ahí, siempre para ellos… esperando el día en el que la maldad del ser humano sucumbiera por si sola ante la apacibilidad de otras personas que representaban la luz ante sus ojos. Como un ser divino forzado a servirles… esperó durante generaciones y años hasta que ese día nunca llegó.
Cansado de la maldad humana y de sus plegarias para dañarse mutuamente deseó hacer algo que nunca seria perdonado, rompiendo las reglas del mundo espiritual y místico, sabiendo que sería condenado de alguna forma por la eternidad. Por eso, deshiló la formación de su constelación, la jaula que había servido para contenerlo durante su existencia, formándolo cruelmente en el títere de un linaje inferior a él y a la que tenía que servir a pesar de su depravación. Descendió de su casa sagrada e intocable, cuando varios ultimátum de su parte a los profetas del mundo fueron ignorados por los demás.
Bajó en gloria tomando forma humana, detalles parecidos a su ser translucido y ubicuo para interactuar de forma diestra. Sus cabellos eran largos y sueltos, tan rojos como el escarlata del cielo en el que había vivido, como el de su cuerpo donde podían habitar más de un millón de maravillas, indetectables ante ojos comunes… Un carmín que curiosamente reconocía cuando las batallas eran ejecutadas. Poseyó un par de manos y pies, todo semejante a los seres culpables de su decepción. Sus ojos tan únicos y destellantes, dorados como las estrellas y sus flamas que lo formaron en el cielo de su origen.
Desde ese día caminó con rostro en alto, dispuesto a cometer lo que en los cielos jamás le absolverían. Con una pequeña llama en su mano derecha que guardaría en ese mundo como su más grande tesoro. A sus caderas cubiertas de una yukata purpura oscuro, descansaron sus espadas sagradas, tan plateadas como la luna misma, manchadas de su esencia con un toque de su luz. Armas donde pondría su corazón destruido, para terminar con lo que más le dolía.
Con rostro serio se adentró al primer pueblo, donde muchas veces desde el cielo se lamentó de sus aberraciones. Ese era el comienzo de lo que ningún otro dios por egocentrismo y amor a la alabanza jamás se atrevería a hacer. No le importaba pecar y mancharse de la misma oscuridad que ellos.
Acabaría, al menos antes de que otros dioses intentaran detenerlo…
Lo juraba por quien era como deidad, Doragon, y no como un hombre sin nombre como el que se había convertido.
Continuará….
Notas de autor: bien, si se dieron cuenta por los nombres este fic va relacionado con otro mío que está publicado. La razón porque decidí partirlos en dos es por Ceder o Caer, haha. Esa historia esta tan llena de detalles que me es imposible acortarla. Y, aunque es mi fic favorito y en el que estoy posando toda mi energía, Ori, Tempouz, Escarlata, entre otros también lo son. Y no quiero alargarlos tanto ya que Ceder o Caer es el único fic que quiero llevar al límite. Es cierto que amo el misterio, pero como en CoC se trata más de descifrar con capítulos pasados, pues aquí quiero ir en par con el pasado y el presente para que se entienda mejor las cosas y sin restarle importancia a ambas historias de Ori.
Porque ambas, tanto "Ori presente y La princesa y el dragón" serán importantes y así no me tomare tanto tiempo en Ori presente para explicar todo lo que pasara en esta historia. No sé si me di a entender… pero espero que sí. En otras palabras esto es lo que ocurrió en el pasado, de lo que se explicara en Ori. Perdon de antemano si los confundi y si manejo de esta forma este fic y guardarlo como en CoC, pero como dije CoC es el único fic en el que quiero estar así XD. Asi que para entender Ori recomendaría seguir este fic cada que se actualice.
ah... y es mi primer fic con capitulos cortos ! Que raro...
