Prologo

Declimer.: los personajes de sakura card captor no me pertenecen, le pertenecen a CLAMP, pero la historia es completamente mía.

Sumary: sakura esta enmarada de shaoran li, mejor promedio de la escuela, ante su rechazo ella se siente muy triste, así que sus amigos intentan ayudarla en su cometido, empezando un juego que a lo mejor ni ellos mismos saldrán sin secuelas.

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Las puertas del elevador se abrieron. Pienso que es muy tonto construir seis elevadores para cada uno de nosotros, los números van subiendo, 2, 3, 4, me acomodo los lentes antes de que se detenga, seis. El elevador se abre en el último piso. Hay un gran silencio en el habitual pasillo alfombrado de color rojo, abrazo mi libro y comienzo a caminar.

—¡hey, espera!-me detengo de inmediato, sus pasos corriendo me indican que está cerca de mí. —hoy tendremos un día excelente ¿No crees?-asiento, por su puesto, hoy tendríamos el partido de fútbol con la escuela enemiga.

—Tenlo por seguro.-Afirmo ante la pregunta.

Él es Eriol Hiragizawa, tercer lugar de la academia Seijio , sus padres son los directores de esta escuela, es mitad inglés, tiene el cabello negro azulado , sus ojos azules están ocultos de tras de esas gafas que le daban un toque de misterio que, como era obvio, enloquecía a las chicas, pero como ahora. siempre estaba detrás de alguna computadora, Tablet o lo que fuera tecnología.

Caminamos a paso rápido y fácilmente llegamos al frente de una gran puerta de madera tallada, apreté el picaporte para entrar; al abrir la puerta la luz resplandeciente que venía de la inmensa ventana que daba frente a la puerta, me cegó.

—¿preparado para el partido de hoy?-Ese chico llegó y me dio un golpe en el hombro, yo asentí si un más mínimo de gracia, aun sobandome el lugar afectado.

Él era Takashy Yamasaki, lugar número cinco, sus padres era dueños de todas las empresas hoteleras de Japón, era el más relajado del grupo, tenía el caballo negro, los ojos de un color oscuro, piel clara, casi tan clara como la de Eriol, con una sonrisa radiante.

Con cansancio me fui a mi asiento, que para varia estaba en medio del salón, a mi lado derecho estaba él chico más reservado, perspicaz y valiente de la clase, él era Yue Tsukiro, cuarto lugar, su padre era el jefe de la armada de Japón y su madre era de una importante familia americana, sus estrategias eran infalibles, el hacia lo que quería, cuando quería, era el más respetado por nosotros, tenía el cabello gris y lacio, sus ojos eran de color azul cielo.

-buenos días Yue-saludé, él me alzó la mano para saludarme y después volver al libro que tenía en la mano, me senté y esperé…

No entendía, porque teníamos que ocupar el último piso, es mas no entendía por qué éramos como una especie de celebridades, si bien era cierto que éramos los mejores cinco promedio de la escuela, eso no nos hacía más o menos de todos, los chicos que acudían en esta escuela también eran hijos de importantes empresarios.

Aún faltaba mucho para que empezará las clases, me levante y fui a la ventana. Saqué un lápiz y una hoja en blanco. El paisaje era muy bonito, había arboles por doquier. Observé como venían llegando el resto de la comunidad estudiantil, como me gustaría a veces estar con ellos, como antes…tome mi lápiz y comencé a dibujar lo primero que vi, a un chico de anteojos y cabellos grises, se llamaba Yukito, era el mejor amigo de mi hermano y era hermano de Yue, aunque pensándolo bien eran muy diferentes, ellos dos acudían a la facultad de medicina, sonreí al recordar que alguna vez estuve enamorada de Yuki, ya saben cosa infantiles como el amor platónico.

—es muy bueno, deberías considerar entrar al concurso de dibujo-me dijo una voz detrás de mí, me congelé al instante, volví mi vista y lo tenía sonriendo ante mí.

—Li, buenos días-digo un poco aturdida

—buenos días - dice mientras se sentaba en su lugar, guardé mis cosas y lo imite al ver que el maestro venia entrando.

Shaoran Li, primer lugar, heredero de la dinastía Li de china, tenía el cabello castaño, unos ojos color ámbar, era alto, inteligente, el mejor en el deporte, el mejor de la clase y por supuesto el más codiciado entre las chicas.

—hoy tendremos la clase de cálculo-abrimos a la par nuestras libretas, aunque ustedes no lo crean… éramos solo nosotros quienes conformábamos la clase, triste, ¿no?, nuestra escuela se regía mucho por estatus, en el quinto piso se encontraban los chicos de intercambio, en el cuarto estaba los líderes de clubs y los del concejo estudiantil, en el tercero estaban los integrantes de los clubes ganadores, y en los últimos salones estaba… los otros, como decía Yamasaki.

Estar aquí, en el último piso era como estar en casa, nuestra comida era traída, si necesitábamos algo bastaba con pedirlo, básicamente somos los más privilegiados.

—¡llego la hora de derrotar a la academia kioa!-gritó Yamasaki cuando dio las tres de la tarde, si bien en nuestra escuela habían clubes oficiales de deportes, ellos no podían competir con los estudiantes de "clases especiales" de escuelas enemigas, esos torneos solo eran reto para nosotros, bajamos cada uno en su elevador, a veces me reía por lo absurdo que era, pero ni modo. Caminamos hasta las canchas llenas de alumnos que nos aplaudían y gritaban emocionados con nuestra presencia, ¿acaso no se daban cuenta que éramos simples humanos como ellos?, llegamos y allí estaban los cinco chicos de la academia kioa, eran muy buenos pero sin modestia alguna puedo decir que somos mejores, sería un partido muy divertido, yo era delantera al igual que Li, Yue y Eriol eran las defensas y Yamasaki era el portero. Sé que son pocos alumnos pero reglas eran reglas, teníamos prohibido incluir a personas que no fueran de nuestra clase, además de que ellos también eran cinco.

El capitán de la otra escuela y Li, se debatían para ver quién empezaba, el reto era sumamente sencillo, el que metiera la primera anotación era el vencedor de la contienda, Li había ganado pero les dio la ventaja de empezar, me miró con seriedad y yo asentí, eso significaba que estuviera lista.

El chico que tenía el balón era muy rápido pero yo no me queda atrás corrí de tras de él, en cuanto lo alcancé y le quité el balón, se lo lancé a Shaoran quien corría a aprisa, dos chicos del equipo contrario le quitaron el balón y venia directamente a la portería, entonces Yue apareció y saco el balón para que no anotaran, Shaoran estaba molesto por que no estábamos respondiendo, era hora de jugar enserio…

En cuanto yo tuve el balón, se la pase a Takashy, haciendo que dos chicos se fueran detrás de él, en cuanto estuvieron muy cerca se lo tiro a Yue quien de inmediato me lo lanzó a mí, corrí un poco para alejarme, luego se lo lance de nuevo a Shaoran, él sin pensar tiró, el portero no se movió siquiera, habíamos vencido…

Sin decir nada nos retiramos, yo no era ninguna presumida ni nada por el estilo, pero si mi equipo salía yo tenía que seguirlos. Los alumnos nos aplaudían y gritaban, llegamos a la salida y cinco carros negros nos esperaban, nuestros padres siempre nos mandaban un chofer para llevarnos a casa, cosa de la que me estaba cansando, sinceramente.

—buen pase, kinomoto-Se despidió de Li, entro a su auto y yo al mio.

Yo era Sakura Kinomoto, segundo lugar de la escuela Sejio, hija del dueño de la compañía Kinomoto, que no era otra cosa mas que la compañía más famosa y grande de abogados en Japón, y doblemente sí, yo era la única chica en esa clase. Como verán no me tratan como una, eso se debe a mi apariencia, era algo alta, delgada, con cabello no muy largo (me llegaba debajo de los hombros, pero siempre me lo acomodaba de tal manera que parecía muy corto, sí como los niños), al ser la única chica pues… no llevaba falda si no el uniforme como ellos (pantalón, camisa y corbata) para no hacer diferencia ni llamar la atención ni nada por el estilo, uso lentes y no, nunca, pero nunca , utilizo maquillaje, ¿amigas?, no tengo, mis únicos amigos son los chicos de la clase y con ellos me la paso… ¿bien?, sí podría decirse que sí, aunque a veces tenga que soportar los comentarios tan propio de ellos. Mi familia estaba conformada por mis dos padre mi hermano y yo, mi hermano era tres años mayor que yo y como dije antes estudiaba medicina; mi madre era modelo de joven, era muy linda y yo no había sacado nada de ella a excepción de sus ojos verdes, ahora se dedicaba a ser empresaria de una joyería, le iba muy bien; mi padre era igualito a mi hermano Toya pero más feliz, mi hermano era un gruñón y le encantaba molestarle.

Cabe recalcar que lamentablemente mi familia como la de todos mis compañeros estaba algo antiguadas, a pesar de vivir en pleno siglo veintiuno tenían la tonta idea de casarnos por contrato, así como lo oyen, los famosos matrimonios arreglado que para mí mala suerte pronto me tocaría, en cuanto cumpliera diecisiete para ser exactos, yo estaría comprometida y eso no me gustaba en lo absoluto, lo peor era que solo faltaba dos semanas para eso.

continuara...