Bueno, durante el proceso de mi otro Fanfic, se me ha venido a la mente escribir los imaginativos momentos que he tenido, agregándolos durante la madures de estos jóvenes héroes. No digo que eso haya ocurrido, pero es lo que me imagino. Espero que sea de su agrado.

oOoOoOo

Usuario: Maayaa

Titulo: Solo a tu lado.

Serie: Avatar: El último maestro aire.

Personajes: No me pertenece ninguno.

Parejas: Principalmente Katara y Aang.

Summary: Los años han pasado, todos van madurado cada día más y cambiando. ¿Qué habrá sucedido durante estos siguientes años durante la construcción de Ciudad República?

Nuestros grandes y valientes guerreros jóvenes, ha logrado conseguir la paz que fue ausente durante más de 100 años por la nación de fuego, trayendo mucha destrucción y caos. El Avatar Aang y sus amigos han logrado terminar con toda esa tiranía, enfrentado a la nación del fuego y al temible señor del Fuego.

Esta pacifica paz, da una oportunidad nueva para el comienzo de una nueva vida. El Avatar Aang junto al nuevo señor del Fuego Zuko, han decidió formar un poblado donde Maestros y No maestros de las tres naciones (fuego, agua y tierra) puedan convivir en paz y armonía. Aun que al principio fue una difícil tarea por pequeños desacuerdos que se llevaron a cabo durante la planificación, al final lo lograron, transformando las colonias de la Nación del Fuego en la República de las Naciones Unidas, nombrándola como Ciudad República.

Pero no es lo único que ha nacido y creado. También nuestros jóvenes héroes han crecido, desarrollado y madurado. Aproximadamente han pasado siete años y durante estos siete años se ha logrado construir una población que con el paso del tiempo se va transformando en una perfecta Ciudad. En honor al Avatar Aang, se ha hecho una estatua en una pequeña isla frente a la gran ciudad, además de ello, en otra isla más extensa se ha construido un hogar para monjes trayendo consigo las costumbres de los monjes de los Templos Aires. Aquí es donde partimos. En el Templo Aire de Ciudad República.

Entre los largos, pacíficos y limpios pasillos del nuevo Templo Aire, un joven muchacho alto de ojos color grises, calvo, con tatuaje en forma de flecha en la cabeza, llevando puesto una túnica amarilla con detalles anaranjados, da su largo paseo matutino. El joven Avatar. Llevando las manos detrás, observa cada rincón del hermoso templo. No era tan igual como los verdaderos Templos Aire, pero tenía tres detalles importantes: una hermosa vista, vientos frescos y una tranquilidad.

Se detiene en el puente, que aparte de ser la conexión al otro templo, también tiene la vista directa a Ciudad República. Aun tenía muchos detalles por terminar. No cavia duda que este lugar armonizaría mejor la paz entre las tres diferentes naciones.

-¡Katara! – escucho a lo lejos el nombre de la persona tan querida para él y que le había dado el valor para lograr y enfrentar su destino.

Mira hacia abajo, encontrando a la duella de aquel hermoso nombre. Una joven muchacha de cabellos largos color café; ojos azules profundos como el mar; una piel morena y suave; alta; de vestimentas provenientes de la tribu agua. "Tan hermosa" pensaba nuestro joven Avatar mirándole. Junto a ella llega una muchacha de unos años más que ella. De cabellos cafés y corto; ojos verdes jades, piel clara, con vestimentas verdes.

-¿Suki? – murmuro pensativo el joven Avatar al ver a la muchacha.

-¡AANG! – gritaba un hombre moreno, de ojos azules, cabellos cafés sujetado, alto y con vestimentas de la tribu agua. Las dos muchachas miran hacia arriba, viendo al joven Avatar, que al parecer las estaba viendo. Aang las saluda apenado. Riendo las dos se retiran - ¡¿Qué hay, Aang? – le saludo el joven guerrero agua, colgándose de su cuello.

-Hola Sokka – saludo el joven Avatar sufriendo por las formas de saludarse entre ellos.

-¿Cómo esta mi Avatar favorito? –

-Muy bien, aun que algo confundido. ¿Qué está haciendo Suki aquí en las Naciones Unidas? No se supone que debería estar con el señor del Fuego, Zuko? –

-¿Mas tiempo? La pobre ha trabajado por más de cinco años. Ella también necesita descansos, ¿sabías? –

-Bueno, todos lo necesitamos – concordó con él.

-¡Exacto! Y por ello, ¡todos nos tomaremos unas merecidas vacaciones! – decía muy feliz.

-Suena bien – dijo feliz con una sonrisa – Pero, no lo sé Sokka. Ahora estamos muy ocupados con la construcción de esta pacifica Ciudad. No estaría bien que me fuese y dejara todo esto –

-¿Y quien dijo que lo dejaras solo? Para eso existe la asociación del Loto blanco. Son la segunda mano aquí, después de nosotros, el concejo –

-Pero ellos están en la tribu del agua del Polo Sur…

-Estaban – le corrigió e interrumpió – Les he informado sobre nuestros pequeños planes, y no me han negado nada. Están de acuerdo con nosotros para tomarnos unas pequeñas vacaciones. Supongo que no han de tardar en llegar – decía recordando que día les había avisado sobre ello – Bueno, vayamos a reunir con los demás – dijo empujándole para que avanzara hasta la sala.

-¿No crees que es algo repentino? –

-Por supuesto que no. Como te dije, tengo años deseando este momento. Por lo que no aceptare un no por respuesta por parte de nadie –

El moreno empuja al Avatar hasta la sala, donde se encuentran Suki y Katara con su divertida conversación, además de tomando un delicioso té. La sala es un poco extensa, con sillones largos para todas las visitas posibles. Las ventanas grandes que dan paso al viento tienen unas hermosas cortinas con el símbolo de los nómadas aire en el centro. Pronto el joven Avatar y el moreno guerrero se adentran a la sala, estando frente de ellas saludan:

-Hola, cuánto tiempo sin vernos – saludo Suki al joven Avatar.

-Digo lo mismo Suki. ¿Alguna novedad de la nación del fuego? – quiso saber interesado.

-Todo pacifico. De a veces desacuerdos, pero suelen solucionarse. Pero tengo una interesante noticia para todos. Aun que no se si sea debido que yo se los diga – pensaba la guerrera.

-¿Una interesante noticia? – dudaron Katara y Aang mirando a la guerrera Kioshy.

-Me encantaría también a mi decírsela, pero creo que eso solo le corresponde a Zuko – dijo Sokka sentándose a un lado de su querida Suki.

-Bueno, eso quiere decir que para saber sobre eso, tenemos que viajar a la nación del fuego y averiguarlo nosotros mismos – opino Katara.

-¿Averiguar qué? – quiso saber una joven aproximándose a ellos. De cabellos negros sujetos en un peinado, con algunos mechones frente. Siega y de piel clara. Lleva puesto un traje hecho de metal, muy resistente, con el símbolo de los BeiFong.

-Hola Toph – saludo Suki a la siega.

-Sí hola – saludo a su manera – ¿Y a que se debe toda esta reunión? ¿Qué, hoy es el cumpleaños de alguien? ¿Y qué es lo que quieren averiguar? –

-No, no es el cumpleaños de nadie – dijo Aang.

-El señor de las armas ha hecho algo sin nuestra opinión – dijo Katara arqueando una ceja.

-¿Qué? ¿Es que no la has convencido? – le pregunto Sokka a Suki.

-Ups – expreso Suki apenada y divertida.

-Oh, genial –

-¿Y bien? – insistió Toph.

-Lo que mi queridita hermana quiere decir es, que es tiempo de darnos unas merecidas vacaciones – decía Sokka explicando – Desde hace seis años que no disfrutamos de la vida. Siempre creando la paz para los demás, pero ¡¿Y nosotros qué? – mientras hablaba hacia caras graciosas – Se lo he comentado a Zuko, y el acepto dándole un tiempo libre a Suki, tanto como la asociación del Loto Blanco, dejando salir al Avatar… -

-¿Y yo? –

-Como tú eres la jefa amando de las tropas, tú misma puedes darte las vacaciones. ¡No estaría mal volver a los viejos tiempo cuando solíamos viajar por todo el mundo! – termino de decir - ¿Qué les parece? –

-Yo estoy muy de acuerdo con ello – dijo Suki.

-No estaría mal unas merecidas vacaciones. Además tenemos como apoyo a la asociación del Loto Blanco – decía Katara.

-Tres a favor – dijo feliz Sokka - ¿Qué dicen ustedes dos? –

-Puede que esté de acuerdo – dijo Toph – Pero, aun sigo dudando –

-¡Vamos, Toph! Solo será por un mes. ¿Tú qué dices Aang? –

-Pues… - pensaba el joven Avatar mirando a todos sus presentes, deteniéndose en Katara. Unas vacaciones significaban estar tiempo a solas con Katara, sin ninguna persona diciéndole que deba leer y supervisar o firmar papeles – De acuerdo. Tienen mi voto –

-¡Sí! ¡Cuatro contra una! – dijo Sokka.

-Sin mí no serán buenos y completos recuerdos – decía Toph. Katara se pone de pie y se acerca a la joven siega para murmurarle – Esta bien. Me convencieron -

Sokka muy feliz comienza a gritar y celebrar. Tendrían vacaciones. Viajaran por todo el mundo como antes. Era una gran oportunidad para ello, para recordar viejos tiempos. Toph regresa a Ciudad República para hablar sobre ello con sus tropas. Sokka lleva a Suki a visitar toda la ciudad para que pueda conocerla.

Mientras el joven Avatar también dispone de salir del templo para tomar aire, visitando a su gran amigo Appa, su bisonte volador. Momo llega volando de los altos arboles hasta el hombro del joven Avatar. El atardecer da un hermoso color al cielo. La joven morena se aproxima a su querido novio, el Avatar.

-¿Qué te parece la loca idea de mi hermano? – pregunto Katara acariciando a Appa también.

-Ciertamente, perfecta. Así podre liberarme un poco de todo este asunto de Ciudad República – contesto. Silencio mirando hacia el cielo y sentir la fresca brisa - ¿Cómo convenciste a Toph para que estuviera de acuerdo? –

-Eso quiere decir que aun no conoces muy bien a Toph –

-¿A qué te refieres? –

-Tal vez durante el viaje te des cuenta de ello – le contesto tomándole la mano – Estas vacaciones podrían ser una gran oportunidad para poder pasar más tiempo los dos juntos –

-Es por eso que he aceptado –

Con una iluminada sonrisa, la morena se eleva un poco –ya que esta más alto que ella– para estar a su altura, topando y rosando un poco sus narices. La morena se retira entrando nuevamente al templo aire. El joven Avatar le observa entrar. Acariciando nuevamente a Appa mira el atardecer. Momo despega y vuela a lo lato de la isla.

Continuara…

oOoOoOo

¿Que les ha parecido? Es el comienzo, no dice mucho. Pero durante sus vacaciones habrá interesantes cosas. Como lo que Suki y Sokka vieron en la nación del Fuego. Lo que le dijo Katara a Toph para convencerla de ir. Los momentos que desean Aang y Katara pasar como novios. Etc.

Gracias por leerlo. Espero comentarios buenos y que ayuden.