Este es mi primera historia, espero que les guste :)
Los personajes le pertenecen a Nobuhiro Watsuki pero yo me he enamorado de casi todos ellos, por eso los tomo prestados.
PRÓLOGO:
Después de la prematura muerte del emperador Okubo, en 1863, el imperio del Sol Naciente se sumió en una sangrienta lucha por la sucesión. Él no había tenido hijos varones por lo que diferentes nobles reclamaron como legítimo su derecho al trono. Pero sólo 3 lograron hacerse de la simpatía de los señores que gobernaban las diferentes regiones del imperio.
Por un lado estaba Kogoro Katsura, él era el esposo de la única hija de Okubo, Ikumatsu; señalaba que al ser Ikumatsu su hija legítima y por tanto él haber ingresado a la familia real como hijo le correspondía legítimamente el trono. 6 regiones le apoyaron, entre ellas Edo , la capital del imperio y la más fuerte política y militarmente y Choshu, región de la cual procedía Katsura.
Por otro lado se encontraba Yutaro Okubo, sobrino del fallecido emperador, quien apelaba a su cercanía sanguínea para reclamar el título. Habían 5 regiones apoyándolo, la principal era Hokkaido, la región más grande y con mayor población del Japón.
Y desde una tercera vertiente se encontraba Isami Kondo, proveniente de una familia de antiguos emperadores que siempre había tenido fuertes inclinaciones para recuperar el poder perdido. Este hombre contaba con el apoyo de 5 regiones: Toyama, Nara, Kanto, Otsu y Mie.
Por otra parte se encontraba la región de Kyoto, que tenía ambiciones independentistas y que había decidido mantenerse al margen de la lucha por la sucesión.
Después de años de luchas en las que el poder parecía mantenerse en equilibrio y en las que el Japón estaba fragmentado, apareció un hombre, un hombre cuyo poder fue capaz de inclinar la balanza. Ejércitos diezmados gracias a su habilidad sobrenatural lo hicieron merecedor de los más llamativos sobrenombres; Battousai (Ya que era maestro de la técnica de desenfundar la espada a alta velocidad, estilo conocido como Battojutsu), el diablo rojo o el demonio de Katsura, y se convirtió en una leyenda viviente. Su primer objetivo fue recuperar la región de Hokkaido. Cuando finalmente lo consiguió Yutaro Okubo decidió suicidarse: lo hizo con honor, abriéndose el estómago ante la presencia de Katsura y de Ikumatsu. Previamente había ordenando a sus generales que juraran lealtad a sus primos y fue así como 11 regiones pasaron a estar del lado de Katsura. La guerra continuó sin tregua y tanto Katsura como Kondo situaron sus ojos en Kyoto, la perla negra del japón, Kyoto no pudo mantener su neutralidad y aunque no dio su apoyo explícito a Kondo, luchó contra el ejército de Katsura.
Un año después del suicidio de Yutaro, Kondo y todo su clan fueron asesinados, murieron a manos de Battousai al tiempo que el ejército de Katsura entraba a las ciudades rebeldes. Una vez que se supo la muerte de Kondo los señores que gobernaban estas regiones, incluída Kyoto, declararon su rendición absoluta.
Inmediatamente Katsura mandó mensajeros a las 6 regiones para detallar las condiciones a las que debían someterse sus señores.