Como llegue a perderte
Iba a paso rápido a que quería ver a su aniki hace mucho que no se veían por culpa del trabajo pero hoy será especial, lo llevaría al restaurante que tanto le gusta al mayor
Ya en casa del otro entro por la puerta lateral que siempre dejaba abierta, quería que fuera una sorpresa y con un ramo de rosas en la mano e adentra en busca del mayor
Busca en el primer piso sin resultado así que decide subir a las habitaciones.
-"Tal vez está tomando una ducha" -piensa el surcoreano acercándose a la habitación del mayor deteniéndose al percatarse que la puerta está abierta, estuvo a punto de abrirla cuando oye un gemido que lo desubico, se quedó petrificado- "esa es la voz de aniki" - cuando escucho otra voz más grave que murmura -"y ese es Rusia!".
Se armó de valor y termino por abrir la puerta encontrándose con la peor de las imágenes posibles su aniki, aquel con quien llevaba saliendo por años estaba en la cama con Iván, su cuerpo se tensó, sus ojos se dilataron y el ramo callo que sostenía cayo con un ruido sordo
El ruido de la puerta a ser abierta de improvisto llamo la atención de ambos amantes en el lecho. El mayor con horror vio que el surcoreano estaba ahí parado en el umbral de la puerta con su mirada llena de odio y tristeza. De un empujón se separó del ruso cubriéndose con las sabanas
-Yong Soo p-puedo explicarlo, aru -dijo nerviosamente mientras se ponía de pie acercándose al menor.
-Yao? -el ruso estaba confuso, que pasaba. Porque el chino debía explicar algo al coreano
El nombrado se tensó al oír hablar al ruso, ya no sabía que hacer enfrente está a su hermano con el que lleva años de relación y detrás su amante con el cual se veía a espaldas del otro, con el que tenía sus noches de pasión desenfrenada.
-Qué significa esto Yao? -ahí estaba Yong dejando salir su lado yandere, el pelinegro al oírle hablar así tembló ligeramente.
-Yo.. b-bueno lo que p-pasa.. -tenia pánico no quería perder a ninguno de los dos, los quería a ambos aunque en forma diferente.
-China -el ruso también se levantó cogiendo algo de ropa para cubrirse- que pasa aquí, puedes explicarlo, da?.
-No hay nada que decir está muy claro, me engañas con el -el sur coreano señalo a Iván.
-Como que te engaño si él está conmigo no China? -el mayor al borde de las lágrimas no sabía que hacer solo miraba a ambos.
-Espera Rusia aclaremos algo, Yao y yo llevamos más de 10 años de relación -dijo el del rulo armándose de paciencia.
-Pero si China y yo estamos juntos desde hace 7 años -dijo mirando al chino que estaba llorando en silencio apoyado contra la pared del cuarto.
-Yo...yo solo q-quería estar con a-ambos, aru -dijo entre sollozos el mayor.
-Ya veo, así que por eso no querías que viviéramos juntos, no? -dijo con rencor el coreano- ahora todo queda claro, las llamadas y mensajes, las ocasiones en que no te hallaba por ningún lado todo cobra sentido, nos estuviste engañando a ambos.
-Jugaste con, ambos? Es eso, China? -escupe con furia el ruso al mayor que solo se dedicó a llorar amargamente.
-Me largo, no quiero seguir viendo a -el coreano mira con asco a Yao- este.
-Es verdad, no vale la pena -apoyo el ruso recogiendo el resto de sus prendas.
Ambos abandonaron la habitación en silencio dejando al mayor llorando amargamente.
