capítulo uno: noche de copas
Una fiesta normalmente te deja algún recuerdo bueno o una noche inolvidable, pero en mi caso lo único que me dejo fue una resaca de los mil diablos y un embarazo de 4 semanas. Pero te preguntaras ¿cómo sucedió esto verdad? Déjame empezar del comienzo.
Estaba estudiando licenciatura en lingüística, había pasado la mayoría de los ramos y ya tenía una editorial que quería contratarme solo me faltaba terminar mi tesis y recibir mi título. Aunque mi apellido sonará como el de una familia aristócrata, yo vivía por las becas que daba el gobierno, mi familia era clase media y el presupuesto no alcanzaba para dos hijas en la universidad, y yo siendo la mayor debería haberme sacrificado dejando mis sueños y ponerme a trabajar para después estudiar. Sin embargo, el destino es caprichoso, pude conseguir una beca, aunque esta me exigiera las mejores notas siempre y un trabajo adaptado a mis horas libres que no fueran estudiar claro. Un fin de semana antes de terminar de terminar el semestre con unas amigas de la universidad decidimos salir a festejar el haber aprobado todo los ramos, al principio no tenía muchas ganas de ir, el trabajo me tenía exhausta y la largas jornadas de estudios intensivos me tenía agotada mentalmente, pero nunca le eh podido decir no a las chicas.
-bien, fiesta!- la animada de nosotras cuatro: erza. Estaba estallando en euforia pura, ella se había eximido del último ramo* más difícil de la carrera de economía, estaba en todo su derecho relajarse hoy.
-erza tranquila, primero lleguemos al bar y después libérate como quieras- las cuatros íbamos por la anchas calles de Crocus(capital de Fiore), donde en la noche su flujo de gente aumenta el doble, no por nada se llama la ciudad que nunca duerme.
-escuche que michel ya va en su segundo año de asistente social, como pasa el tiempo, ¿no creen?- con juvia nos conocemos de los viejos barrios de magnolia aunque íbamos en escuelas diferentes siempre nos topábamos en la mismas fiestas o actividades de allá, con el tiempo nos hicimos amigas.
-sí, realmente a todos nos sorprendió el que haya seguido con la carrera, con mi mamá pensábamos que se iba arrepentir al mes- juvia soltó unas alegres carcajadas que yo correspondí. Michel nunca había sido una chica aplicada al estudio ni mucho menos a lo social, así que cuando nos dijo lo que quería estudiar no pudimos negar el asombro.- Lo único malo es que ahora está muy lejos mío y de mis padres- suspire resignada.
- ¿dónde está estudiando tu hermana lucy?- entramos al bar "locura express" un nuevo local de los muchos que habían en este barrio, reconocido por dar muy bueno carretes* y muy cerca de la universidades, por ende el 90% del publico era universitarios, que hay que decir son los más alocados.
- en la ciudad de margarett, a una dos horas de aquí levy .
-ya veo, y ¿ no le costó vivir sola?- elegimos una mesa lo bastante alejada de la bulla pero lo suficiente del bar, erza tenía una verdaderas ganas de perder la conciencia en alcohol, específicamente en tequilas.
-bueno a cualquiera le cuesta alejarse de la familia, aunque se fue a vivir a un departamento de una amiga de ella, así que no está sola y paga la mitad de un arriendo.- nos acomodamos y enseguida pedimos nuestros respectivos tragos: un tequila para erza, una cerveza helada para juvia y dos margaritas para levy y para mí. Los precios era relativamente baratos algo normal en los nuevos bares para atraer al público joven que siempre anda con el presupuesto ajustado y nosotras no éramos la excepción.
-aquí tienen chicas, una cerveza, tequila y dos margaritas, que lo disfruten.
- hagamos un salud por este año que se acaba y que el próximo sea mejor-las cuatro levantamos los vasos- ahh y que pasemos la tesis también!- entre carcajadas, estampamos nuestros vasos botando un poco de líquido entre ellos, para demostrar nuestra verdadera alegría.
La noche avanzaba y los tragos también, al parecer la euforia se contagia porque yo ya estaba en la pista de baile moviendo todo lo que podía y lo que no, también. Erza con juvia ya tenían a dos chicos entre su cuerpos moviéndose al ritmo de la música, en cambio yo con levy bailábamos entre nosotras, ambas no éramos muy coquetas que esas dos, además levy ya tenía una relación así que sus ojos solo podían mirar a piso o cualquier cosas que no sea un chico, porque si contacto visual aunque fueran unos segundos ello pensaran que quieres e irán al ataque enseguida. Bailamos por más de dos horas hasta que mis pies dijeron basta y volvimos a nuestra mesa, pedimos dos margaritas más y no resignamos a mirar al resto de las personas que la palabra cansancio no existía en su vocabulario.
-erza y juvia se me perdieron de vista, ¿las vez?- yo negué con la cabeza.
- la última vez que las vi estaban coqueteando con unos chicos al fondo de la pista-levy asintió, al estar ahora las dos solas nos dispusimos a beber y hablar, aunque la música aumentaba cada vez más.
- gajeel quiere crear su propio taller mecánico de ponys, yo simplemente lo apoyo, pero en realidad….ME CARGAN LOS PONYS- ya en la octava margarita y la segunda botella de vodcka, ya no entendía muy bien de que hablábamos. Mis oídos se sentían tapados , aun así algo salía de mi boca.
- si lo amas déjalo ir, él y Ariel deben ser felices- sip, yo ya no entendía lo que salía por mi boca.
-yo creo que esas dos casquivanas ya no volverán, mmejor vámonos a casa. Espera déjame ver si me pongo de pie- pagamos la cuenta medias y a medias nos pudimos levantar de la mesa e irnos. Nuestro estado no era el más aceptable, pero por lo menos lo que hablábamos se entendía, aunque fueran puras estupideces.
-levy cuídate y que no te VIOLEEEEE ese taxista, como que teee mira con cara de deseooshhh- había pedido un taxi para levy que era la más vivía lejos de aquí. Nos despedimos como si nunca más nos volviéramos a ver, entre besos y lágrimas el taxi partió, sin antes que yo le amenazara que no abusara de mi amiga, juro que si me vuelvo a encontrar con este caballero le pediré disculpas.
Mes dispuse a caminar, mi departamento quedaba muy cerca de la universidad y los bares, así que solo debía preocupar de que mis pies avanzaran uno detrás del otro. Después de eso yo ya no me acuerdo de mucho.
Desperté en una habitación que no era la mía, en una cama nunca me había acostado, al lado de un hombre que jamás había visto, ni siquiera en peleas de perros* y yo completamente desnuda. Después de eso mi vida empezó a fallar de una forma que nunca hubiera pensado.
-felicidades, está embarazada de cuatro semanas y medias.
eh vuelto! oh yes! ha pasado mas de un año en el que no eh escrito nada solo borradores y ya, pero ahora me decidí y les traigo este fanfic , todavía estoy pensando si natsu sera mafioso o empresario, ahi vere, lo que me dice mi cabeza y ustedes claro...extrañe tanto escribir, aunque sea tan poquito .
~o~
ramo: se le define así en chile a las materias de las carreras universitarias.
carrete: se le denomina a fiestas de mayor magnitud, también es un termino chileno.
peleas de perros: tambien es un término chileno, que significa que nunca antes te había visto en su vida.
creo que esas son todas las palabras chilensis que escribí y muchas gracias por volver a leer mis historias c:
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como siempre...me dejan un zukulento reviews?
