Espero que disfruten de estas pequeñas historias xD...es la primera vez que publico algo y estoy muy nerviosa y emocionada
Aclaraciones: (t/n)= tu nombre; (t/a)= tu apellido; (c/o)= color de ojos; (c/c)= color de cabello
Soltó un suave suspiro mientras se acomodaba en su asiento, intentando por todos los medios prestar atención a la reunión que se estaba llevando a cabo; después de todo él era el Décimo Vongola; ¿Qué clase de jefe sería si no prestaba atención?
...Y por no hablar de la paliza que recibiría por parte de su sádico tutor.
Se estaba quedando dormido, cuando de repente entro ella…aquella hermosa mujer de cabellos (c/c) brillantes y suaves a la vista, unos ojos (c/o) llenos de calidez y un magnetismo que solo te hacia desear acercártele.
"Tarde como siempre (t/n)" dice el peli plata un tanto irritado.
(t/n) (t/a)…solo el decir su nombre o escucharlo, hacía que al Capo le temblaran las rodillas.
"No te enojes Gokudera~" dice la (c/c) sonriendo mientras se sentaba al lado izquierdo del castaño y frente al guardián de la tormenta prestando atención a la reunión, ya que ella era una secretaria de la familia.
~Después de la reunión~
En la sala de reuniones donde hace unas horas había muchas personas, solo quedaban el castaño y la (c/c) mirándose de frente.
"Eso es todo entonces" dice el oji avellana caminando hacia la puerta y cuando estaba a punto de tomar el picaporte aquella voz lo detuvo.
"¿Te vas tan de prisa Tsu-kun?" pregunta la mujer con diversión.
'No voltees, no voltees', se repetía mentalmente Tsuna; pero su cuerpo no hizo caso a su mente girándose hacia la oji (c/o) que tenía una sonrisa como el gato Cheshire y sus ojos brillando con alguna emoción que no logro identificar…
Hombre que estaba perdido; tan solo por haberse volteado hacia ella.
"Tengo que irme, mi esposa me está esperando" era la primera vez que usaba esa excusa para irse solo consiguiendo que la (c/o) riera.
"¿Por qué no mejor te quedas conmigo?" dice aquello mientras se le acercaba lentamente aun teniendo aquella sonrisa en aquellos apetecibles labios carnosos y sonrosados "¿Qué dices Tsu-kun?"
¡Maldita sea!, ella lo sabía; siempre lo hacía…Sabia que solo con un chasquido de sus dedos el gran Vongola Décimo estaría de rodillas frente a ella como un perrito buscando cariño.
La (c/c) se terminó de acercar estirando su mano hacia el oji avellana, invitándolo a ir con ella y solo disfrutar, pero en vez de aceptar su mano, él le abrazo repentinamente por la cintura.
"(t/n)…" murmura teniendo su rostro oculto en el cuello de la (c/o) aun abrazándole; así no pudo ver aquella sonrisa llena de malicia que comenzaba a formarse en el hermoso rostro de la contraria.
"Está bien Tsu-kun…no te preocupes por nada" dice aquello acariciando los cabellos castaños con suavidad mientras su sonrisa se ensanchaba.
Sabía que había metido la pata hasta el fondo al aceptar, pero…
Pero estar con (t/n) (t/a) parecía no ser una mala idea.
…Mientras que su esposa no se enterara…