Antes de empezar a leer, este fic solo lo escribí porque mi amigo Kashio me insistió con que hiciera un fic de FonxViper xD (aunque yo con mucho gusto si es de esta pareja n.n)

Por eso quiero aclarar que este fic es:

AU y Romance

Le meteré Drama y un intento de Lemon jaja

KHR es propiedad de Akira Amano, no mío, solo me pertenece los personajes OC y la trama, que no tendrá nada que ver con el anime o manga.

Y este fic va dedicada a todos los fans de la pareja FV n.n

Capítulo 01

El nuevo

En un aula de clase, estaban todos levantados y charlando tranquilamente, menos una persona. Era de cabello melena morado, que su flequillo tapaba completamente sus ojos, era bastante bajito y llevaba el uniforme de la escuela. Su rostro estaba apoyado en su mano, mirando con molestia por la ventana, más aún cuando dos chicos se le acercaron.

-¡Hey! ¿Por qué llevas el uniforme femenino? ¿Eres un travestí o que? –Se burló uno de ellos.- Y seguro que tiene los ojos blancos ¡Cómo si estuviera poseído! –Se rió el otro acercando su mano hacia su flequillo, pero enseguida la persona le agarró de la mano y lo mira amenazante.

-No me toques… Y si queréis saber como son mis ojos, simplemente pagadme y os lo enseñaré –Dijo con avaricia apretando más el brazo del chico.

-¡Suéltame! ¡Viper! –Se quejó el chico intentando zafarse de su agarre, pero no podía.- ¡Viper! Me haces daño…

-Entonces no volváis a molestarme… Mi sexo no os importa y menos, el color de mis ojos –Acabó por decir soltando su brazo.

Los dos solo soltaron una maldición y se fueron. Después de eso, la pelimorada dio un gran suspiro y volvió a apoyarse sobre su mano. Todo era igual, siempre iban a molestarla y decirle que era hombre, solo porque su voz era algo más grabe que las demás… Después de todo tenía 16 años y estaba en pleno desarrollo, ni siquiera los pechos se le notaban como a las demás.

Entristeció sus ojos al recordar algo, pero el ruido de cómo se abría la puerta corrediza del salón, dejó ver a su tutor de curso.

-Bien chicos, hoy quiero daros una noticia –Dicho eso, todos se sentaron de golpe y pusieron atención.- Hoy llegó un alumno nuevo, viene de China así que no entiende mucho el japonés… Por eso mismo –Mira a los chicos que molestaron antes a Viper.- No quiero que le molestéis, es nuevo y para él será duro entenderos… -Los alagados solo bostezaron en signo que no le harían caso, cosa que no notó el hombre.- Y bien, ya puedes pasar –Dicho eso, entró un chico al ver como el tutor le hacía un signo con la mano.

El chico era verdaderamente alto, de cabello largo recogido en una trenza y de ojos rasgados color negro. Al entrar, las chicas dieron un grito al ver esa hermosa sonrisa del chico, además, de que llevaba unos pantalones color negro y una de esas camisetas chinas color rojo. Al entrar y quedar en frente de ellos, hizo una reverencia que hizo dar un suspiro a todas las chicas y a los chicos, fruncir el ceño por llamar la atención a todas las chicas.

-Bien, este chico se llama Fon, que en chino quiere decir disciplina o viento, aunque mayoritariamente, viento –Le presentó el hombre para después mirar al chico.- Siéntate ahí –Le dijo señalándole el asiento que estaba detrás de Viper, a final del todo.

El chico solo sonríe y se acerca a su pupitre, donde se sentó y simplemente era observado por todas las chicas, y algún chico que era de otra acera, aunque con disimulo. Viper, curiosa lo mira de reojo y en ese momento, se da cuenta que este le miraba muy fijamente con esa sonrisa que volvería a cualquiera loca; con esa sonrisa, algo cálido se sube a sus mejillas y solo vuelve a mirar al frente corriendo, nerviosa y sin saber porque.

El chico apoyó su cara sobre su mano, mirando a la persona que estaba delante de él, que solo podía sonreír lo máximo que podía. No paró de mirarla hasta que escuchó los murmuro de dos chicos, que la miraban con burla y se reían de ella. No entendió lo que decían, pero al ver como esos dos repasaban a Viper con sus ojos se pudo imaginar algo malo, que solo los miró fríamente, cosa que estos se dieron cuenta y enseguida se pusieron derechos, asustados de él.

Viper, al ver eso pestañea confusa y mira al pelinegro, quien la miraba con una sonrisa. Ella solo volvió a mirar por la ventana nerviosa por esa sonrisa tan bonita que tenía el chico.

Las horas pasaban y los chicos bostezaban aburridos, menos Viper que miraba por la ventana medio dormida y Fon, que le daban faena para que en vez de dar clase, se pusiera a aprender japonés. A final, el timbre por fin sonó y todos se levantaron de golpe para empezar a recoger y a hablar.

Viper recogía tranquilamente hasta que esos dos chicos volvieron a acercarse a ella.

-Dijiste que si te pagábamos, nos dejarías ver el color de tus ojos ¿Cierto? –Dijo uno de ellos acercándose mucho a ella.- ¿Y si te pagamos para divertirnos contigo? Seguro que nadie te quitó tu inocencia –Dice acercándose a ella lamiendo de su cuello.- ¿Qué te parece? Después de todo te vamos a pa… -No pudo terminar de hablar.

La mano de ese chico se estaba dirigiendo a la intimidad de ella, pero algo le lanzó volando hacia el otro lado de la clase, que la gente se quedó sorprendida viéndole tumbado en el suelo y a su amigo, corriendo hacia él. Quien le había golpeado había sido el nuevo.

-¡Tú! ¡Nuevo! ¡¿Cómo osas?! –Se queja el chico levantándose doloroso.

El pelinegro simplemente no entendió lo que dijo, pero le miraba fríamente mientras las chicas suspiraban por esa mirada que también las volvía locas y los chicos, reían por lo ridículo que se vio el otro chico.

-¡No te metas dónde no te llaman! –Exclamó corriendo hacia él para golpearle, pero el pelinegro simplemente se apartó haciéndole la trabanqueta, cosa que este cayó al suelo.- ¡Ouch! ¡Tú, maldito! ¡¿Llegas nuevo y ya estás metiendo problemas?! –Le echó la culpa para hacerse el bueno delante de sus compañeros de clase.

-Creo que aquí el que mete problemas eres tú, Akira y como no, tu amigo Ken –Dijo el profesor de la última clase, que aún no se había ido y obvio, había visto todo eso.

-¡Shamal! ¡Él fue el primero en golpear!

-Tú fuiste el primero en molestar a Viper, él simplemente la defendió –Dijo con gran tranquilidad mientras miraba al chico.- Os tendré que llevar a los tres ante el director… Aunque la ayudaste, no fue correcto golpearle de esa forma…

El ojinegro no entendió pero solo hizo una reverencia para mirar a Viper, quien se había quedado sorprendida, sin saber que hacer o pensar, que solo podía pestañear, sorprendida por el acto del chico nuevo.

Shamal, al ver eso solo sonríe y empieza a caminar en dirección a la puerta para salir.

-Vosotros tres, seguidme –Dijo con un movimiento con la mano para que Fon le entendiera.

Los tres solo asintieron y le siguieron. Al irse, las chicas chillaron y empezaron a comentar sobre aquello.

-¿Viste lo hermoso que se vio? ¡Viper! Debes ser feliz ¿No? Nos das envidia… -Exclamaron dos chicas con ojos degollados.

-¿Eh? –Dijo reaccionando por fin y volviendo a ponerse seria.- No necesito la ayuda de nadie para quitarme de encima a esos dos –Respondió fríamente recogiendo y marchándose de ahí con paso ligero.

Al salir de la escuela ya, solo caminaba por las calles, sola y con la vista roja. No tenía ganas de volver a casa, esa casa vacía y siempre oscura. Le entristecía nada más pensar en eso. Dio un fuerte suspiro y al notar una mano sobre su hombro soltó un grito girándose asustada.

-Ah… Tu… -Dice al ver a Fon con esa sonrisa tan despreocupada.- ¿Qué es lo que quieres? –Al preguntar eso, el pelinegro simplemente giró la cabeza a un lado en signo de no entender.- Es verdad, lo olvidé, eras extranjero –Dice suspirando y viendo de alguna forma para comunicarse con él.- ¿Sabes hablar italiano? –Preguntó hablando en este idioma.

-Si –Dijo por fin hablando el chico rascándose la nuca.- Me pensé que nadie sabía hablarlo… Lo digo porque no se estudia en esta escuela

-Tengo familia italiana –Dice girándose para empezar a caminar.- No pienso agradecerte por lo de antes –Dijo egoístamente mirándole de reojo mientras caminaba.

-Tampoco esperaba que lo hicieras –Dijo siguiéndola con una sonrisa amplia.- ¿Y esos dos suelen molestarte mucho?

-Bastante… Tienen manía de intentar saber si soy mujer u hombre y el color de mis ojos

-Se ve de lejos que eres mujer sino, no utilizarías la ropa femenina

-Pero son idiotas –Al oír eso el chico solo rió un poco.- ¿De que te ríes? –Dice mirándole desafiante.

-De nada –Dice con una gota en la nuca y sonriendo torpe.- Que no pareces de las que se dejan pisar así como así

-No, porque soy yo quien los pisa –Dice hablando bien egoístamente.

El pelinegro solo pestañea y ríe otro poco para detenerse delante de ella.

-Para mi de seguro que debes tener unos hermosos ojos –Dice agachándose un poco para estar a su altura y después, extenderle la mano.- Me presentó correctamente, me llamo Fon, encantada –Dice con su típica sonrisa.

La pelimorada solo pestañea y algo nerviosa, intenta aceptar su mano, pero frunce el ceño y se cruza de brazos pasando de largo.

-Viper, si quieres saber algo más de mí, solo págame –Dice avariciosa caminando tranquilamente.

Pestañea unas cuantas veces confuso para sonreír satisfecho y correr hacia ella.

-Te acompaño

-Para que te deje ya sabes –Dice extendiéndole la mano y haciendo signo de que le pagara.- Sino, ya te puedes ir

El pelinegro toma de su mano y clavando una rodilla en el suelo, besa la mano de Viper y la mira galantemente.

-El hombre siempre debe acompañar a las damas ¿Sabías? –Le dice con una sonrisa que hizo que los colores se subieras a las mejillas de ella.

La pelimorada solo quita la mano de entre la suya y la llevó a su pecho nerviosa, mientras le daba la espalda para que no viera el color carmesí sobre sus mejillas.

-Por hoy… Te la perdono… Por aquí –Dice caminando nerviosa, encaminándose a su casa.

El chico solo sonríe satisfecho y empieza a caminar a su lado.