Capitulo 1: ''El principio del principio''
Era un día lluvioso, desde mi ventana veía como desde fuera pasaba la vida y ese vecino insoportable corría hasta el coche para no acudir al trabajo, como si una ducha se hubiera dado después de haberse puesto ese traje caro. Era el primer día de clase y me maldecía por seguir en esta puta cama tumbada, eran las 7:30 y ya debería estar bañada y cambiada pero no quería levantarme de la cama, no podía hacerlo ¿Qué me esta pasado? Todo el mundo se lo preguntaba mis padres y mis compañeros habían decidido no manifestarlo en voz alta pero ya podía vérselo en sus rostros apenados .
Intente levantarme pero no podía, tenia dormidas las manos y en mis pies había una extraña sensación de pinchazos, en mi interior me sentía vacía no había nada y me costaba respirar, ese vacío hacia presión sobre mi pecho y me estrujaba la cabeza. Como pude me puse la ropa que tenía preparada. Mi padre llamo a la puerta.
Leroy: Rachel! Baja ahora mismo a desayunar, estoy cansado de todo esto… - La miro de arriba abajo con desaprobación- ¿En serio, te vas a poner esa camiseta?... bueno… camiseta… no se si llamarla así, parece un trozo de tela que solo tapa lo mínimo... –Quiso seguir hablando pero su hija le interrumpió.
Rachel: CALLATE JODER! – Lo miro y puso esa cara idiota de la antigua Rachel. – Me voy a poner encima una chaqueta, lárgate a trabajar. – Dijo con tono hostil.
El hombre se cayó y decidió que lo mejor sería irse, hace un tiempo que su hija había cambiado de gustos y amigos, en su habitación ya no había poster de Broadway y su hasta ese momento amada Barbra Streisand, ahora su hija había decidido para sorpresa de sus padres pintar la habitación totalmente de negro y cambiar toda la decoración de esta, la música que se escucha en casa, (y en todo el vecindario), no era la que su hija desde que era un bebe había escuchado, ''Led Zeppelin'' , ''The Who'', ''Nirvana''… eran los grupos que de la noche a la mañana a su niña le gustaban. Eso no importaba en absoluto, su niña había crecido y ellos tenían que hacerse la idea de que no siempre seria esa ''princesita'' a la que estaban acostumbrados, lo que realmente le empezó a oler mal, muy mal fue que su hija cambiara de estilo, no era un estilo muy ''llamativo'' por así decirse, no se tinto el pelo ni nada… pero su niña tiro toda sus faldas, sueters y camisas para cambiarlo por pantalones vaqueros y camisetas anchas y oscuras.
El y su marido se acostumbraron a ese nuevo estilo ¿Por qué iban a cambiarlo? Ella se veía realmente bien con el y la música una vez que le das la oportunidad no esta nada mal, de hecho Hiram se lamento de que Kurt Cobain ya hubiera muerto ''Como puede ser! No me lo puedo creer, cariño era un genio…'' Había dicho bajo la atenta mirada de su marido y la risilla de su hija. Todo iba fenomenal hasta que la ''princesita'' de la casa, decidió cambiar a ser el centro de todas las desgracias que alli ocurrieran, su personalidad ahora era oscura, salía por la mañana y volvía muy entrada la noche o no volvía hasta el día siguiente, no hablaba con ellos no sonreía y la única vez que lo hacia era cuando se ponía sus Ray-Ban y tras abrir la puerta decía ''No me esperéis llegare tarde'' no les daba tiempo a decir nada porque la puerta se había cerrado y la angustia de ambos padres aumentaba ¿Qué debían hacer, castigarla? No, ellos nunca habían hecho eso. ''Es una racha'' se decían el uno al otro para tranquilizarse, pero llego el día en el que las cosas cambiaron de punto de vista…
(**FLASHBACK. Casa de los Berry día 1 de agosto del 2011, hora 3 y media de la mañana**)
Hiram no podía dormir, a diferencia de su marido Leroy que había caído rendido por el cansancio acumulado.
Un sonido de llaves y pasos por las escaleras le tranquilizo, se acomodo para empezar a dormir. No le diría nada ahora, pero mañana mientras desayunaran le iba a poner las cartas sobre la mesa a su hija, lo tenia claro… estaba decidido. Algo le hizo levantarse como un resorte de su cama, unas risas que el no conocía y sobre todo un ''Me suda la polla si nos oyen'' que salía de los labios de su hija, corrió literalmente hasta la habitación y se quedo paralizado delante de ella durante 1 min. Intentando reunir fuerzas para abrir la puerta, no lo hizo, en vez de eso llamo a la puerta.
Hiram: Cariño, ¿Hay alguien contigo? … ¿Puedo pasar?
No obtenía respuesta del otro lado de la puerta, por lo tanto intento abrirla. Todo intento fue en vano su hija, no sabia como, ni cuando habia colozado un cerrojo en la puerta de su habtacion.
H: Cariño… ¿Qué pasa?... No se abre qu… - Se quedo callado cuando oyó lo que al otro lado de la puerta estaba pasando, paralizado, angustiado y dolido, su alma se partió en dos.
Su hija gimiendo entre respiraciones acompasadas y un chico que le decía que no parara lo que estaba haciendo ''Vamos preciosaaaaaa oh… Dios!''
H: RACHEL ABRE LA PUERTA! NO TE VOY A PERMITIR ESTO! VOY A ENTRAR Y VOY A CORTARLE LA CABEZA A ESE MALDITO DESGRACIADO! – Dijo a un tono que estaba seguro de que había oído todo el vecindario. –POR LO MAS SAGRADO QUE VOY A TIRAR LA PUERTA ABAJO! –Golpeaba la puerta, pero esta no se abria.
Leroy ya despierto acudió al lado de su marido y el también pudo escuchar lo que estaba pasando al otro lado de la puerta… como para no oírlo… No escuchaban con toda precisión pero alcanzaban a oír esas respiraciones y jadeos que no eran precisamente de estar dándose besitos inocentes. Los dos con lágrimas en los ojos y con una impotencia de no haber hecho algo antes, se quedaron frente la puerta.
L: Vamos a dormir – Dijo con la voz rota.
H: ¿Qué? – Pregunto enfadado con su hija, con su marido y con el mundo. – Piensas que nos vayamos a dormir mientras… ese… se… a nuestra hija.
L: Si. – Fue escueto en su repuesta, se dio la vuelta y se fue a su habitación. – Me rompe el alma seguir escuchando eso.
Hiram se tumbo en su cama junto su marido y le dio la mano, un ''Te quiero'' salió de sus labios. Los dos estaban despiertos cuando tras 20 min, los más largos de su vida, la ''Fiesta'' en la habitación de su hija había acabado.
Rachel estaba completamente desnuda y tumbada sobre el torso tatuado de Taylor.
Taylor: Tu padre y tu tío te van a matar mañana… - Dijo con mucha chulería. – Hemos hecho mucho ruido, dios… te pongo a mil, eres tan guarra en la cama… -Le dijo mientras le pellizcaba un pezón. – Levanta bombon, me tengo que largar.
R: Vale… -Le dijo mientras agarraba el pene del chico y lo acariciaba. –Bien hecho soldadito… vaya… vaya, al parecer no quiere retirarse aun de la guerra… -Le dijo con voz ronca al chico, al ver que todo el asunto del chico se volvía a ''Venir arriba''
T: La cogió del pelo y tiro de ella hacia abajo, ahora el chico no quería irse. – Ohh… Tocamela… no pares, chúpamela… saboréala, es toda tuya… -Estaba realmente excitado esa chica que a su lado parecia una niña, lo ponia a mil.
R: No no no… -Se levanto divertida. –Adiós.
El chico se vistió y agarro a Rachel aun desnuda de brazos cruzados delante suyo, le empezó a besar y bajo por su cuello y pecho… al llevar a sus pechos el chico se volvió loco con su pezón derecho, lo chupaba y mordia para luego soplar al pezon erecto y hacer que la chica se arqueara y mandara su cabeza hacia atrás.
T: Ya estamos en igualdad de condiciones, yo también puedo dejarte a medias… -Le dio un pico y lo mas rapido que pudo salto por la ventana.
Rachel se tumbo en la cama aun desnuda y comenzó a tocarse hasta que se llego al climax, estaba derrotada pero queria mas y mas, estaba deseosa de placer. Decidio tranquilizarse y se quedo pensando que mañana iba a ver un desayuno ''movidito'', nadie le quitaría lo que había hecho esa noche, no era la primera vez, pero el sexo con Taylor era siempre excitante, no podía parar… ¿Eso era malo? Era joven y estaba para vivir lo maximo y ese hombre de 28 años la llenaba de vida cada vez que lo tenía entre sus piernas. Que se pudra el que no lo entienda, no estaba enamorada, pero le gustaba gemir su nombre y sobre todo esa manera tan posesiva que el tenia de tirársela… La agarraba fuerte con esos grandes brazos y la pegaba a su cuerpo jadeante y sudoroso, le gustaba estar sometida de esta manera, susurrarle al oido mientras el entraba y salia de ella… Dios…''Mejor me voy a dormir… '' se dijo, Tardo mucho tiempo en tranquilizarse y bajar su temperatura corporal, entonces su durmio y pudo descansar.
Leroy y Hiram estaban sentados en la cocina ''dispuestos a desayunar'', sin nada de comida sobre la mesa. Sus estómagos estaban cerrados y mas lo estarían cuando vieran aparecer a su hija por la escalera, el miedo se apodero de ellos cuando la oyeron bajar de la planta superior, ya estaba duchada y llevaba puesta solo una camiseta que dejaba ver sus braguitas. Una vez ella en la cocina nadie hablo, se preparaba el desayuno en silencio hasta que se acomodo en la mesa ya con todo preparado y Hiram empezó.
H: ¿Tienes hambre? –Tono muy serio, no sabia como tratar con ese y se estaba llendo por las ramas.
R: Mucha… Muchísima… -Dijo con arrogancia y un poco de sensualidad
H: ¿Por qué? –Pregunto todo lo calmado que pudo.
R: Dejaros de haceros los tontos e ir directos al grano. –Sonrió mientras miraba a sus padres. –Si, me lo folle… dios es tan… divino y excitante… ¿Quién no lo haría? –Puedo ver el enfado de sus padres en la mirada. –No os preocupéis, no es mi primera vez… tara tara taraaaa… -Canturreo con voz excitada.
Lo que paso después de eso ninguno ni siquiera el causante de ello se lo esperaba, Leroy le cruzo la cara a su hija, le pego la mayor bofetada jamás pegada y Rachel se le quedo mirando, hasta que para sorpresa de todos se levanto y empujo a su padre, tirándolo contra la pared y dejando ver una mirada de ira. Hiram se puso a su lado y la agarro el brazo.
H: NO, ESO NO TE LO PERMITIRE! – Dijo viendo como su marido se recuperaba del empujón.
R: QUE CASUALIDAD! ESO MISMO GRITASTE AYER DESESPERADO EN LA PUERTA MIENTRAS ME METIAN LA POLLA...PEDAZO DE MARICONES... SUELTAME QUE ME DAS ASCO. –Lo aparto con repulsión.
H: La miro impresionado por lo que acababa de oír. - ¿Quién eres tú y que has hecho con nuestra niña? – Dijo con voz rota, ese ataque verbal le había dolido más que si le hubiera pegado una paliza.
R: SE HA IDO. –Dijo duramente.
Rachel y Hiram se miraban a los ojos con intensidad, como si una pelea estuviera pasando entre ellos, el hombre no duro mucho y bajo la mirada jamás pensaría decir esto, pero le tenía miedo a esa chica que lo miraba con dureza, asco y arrogancia.
L: Las cosas van a cambiar ¿Vale Rach? No saldrás mas en todo el verano y vas a traer hoy a cenar al chico con el que ayer… bueno… si, traerás a su familia para que nos conozcamos. –Ignoro lo que antes había sucedido y hablo con calma.
Una risotada se escucho en la estancia.
R: Vale aquí vamos por partes… - Dijo recuperándose de la risa y teniendo a sus padres en ascuas. –NO, es mi novio… El si tiene una mujer y creo que un hijo… un estorbo desde mi punto de vista... – Dijo y sus padres se tensaron. – Solo es SEXO ¿Vale? Y si, uso proteccion – Puso cara de obviedad. – Y… las cosas… no van a cambiar. –Su tono se volvió amenazante. -¿Sabéis por que? Si me encerráis aquí todo lo que queda de verano, me largare ¿Lo pilláis? MIRARME A LOS PUTOS OJOS! – Dijo poniéndose bien frente a ellos. -Y creerme se apañármelas muy pero que muy bien para que no volváis a verme un pelo en vuestra asquerosa vida.
Ella se dio la vuelta y se fue, dejando a la pareja con la boca abierta por lo sucedido.
Se acabo, esa es la última vez que habían tenido una conversación larga. Vivian bajo el mismo techo pero nada más. Con el tiempo su hija había encontrado un nuevo chico y sus padres tuvieron el interés de saber un poco más de él, removieron cielo y tierra y el chico parecía al menos, más decente que el casado con el que su hija en un pasado solo compartía sabanas.
(**FIN DEL FLASHBACK**)
Rachel bajo las escaleras dispuesta a ir a clase, espero unos minutos y cuando salió Jack ya estaba esperándola se dieron un pico que a ella le supo a poco y se subió en la moto del chico.
Fueron hasta la puerta del Instituto donde la despedida fue más larga, se besaban con pasión mientras él le agarraba el trasero y la presionaba contra su cuerpo, el chico sabia lo que le gustaba y se lo daba gustoso. Ella le metió la mano en el bolsillo delantero del pantalón.
Jack: No, enana no están hay… - Se rebusco en el bolsillo de atrás del pantalón y con disimulo le dio a la morena una bolsita chiquitita.
Rachel la guardo con cuidado en su bolsillo más pequeño de la mochila y siguió con su despedida.
R: Te espero en la salida. – Beso. – Más te vale estar aquí o…
J: La calla con un beso. –No podre venir nena, tengo que entrar al trabajo antes y me es imposible pero… te prometo que te lo recompensare…Relaaaaaaaaajateeee.
R: Vale, me relajo... –Dijo sonriendo y metiendo la mano bajo la camiseta para tocar esos abdominales que la volvían loca.
J: ¿Te veo esta noche en casa de Emily?... ¿Paso por ti?, estoy a tus ordenes.
R: Pásate a por mi mejor, luego volveré con Rory ya sabes que le pilla de camino.
J: ¿Tengo que hablar con ese tal Rory? –Dijo un poco molesto, su chica pasaba mucho tiempo últimamente con él.
R: ¿Por qué? Tu y yo no somos nada para empezar. –Dijo con un tono muy serio. –Y además el chico me cae bien es como… un hermanito pequeño, le he estado ayudando… y bueno le e cogido cariño.
J: Bueno, bueno olvidemos lo que a pasado… ¿Vale? –El chico estaba muy colado por la morena y eso todo el mundo lo sabía. –¿Me perdonas?... –Ponía cara de cachorrito.
No hicieron falta mas palabras, se tumbaron en la moto si eso era posible y siguieron besándose como si no hubiera nadie a su alrededor, todos los que pasaban se esperaban que en cualquier momento ninguno de los dos pudieran contenerse y empezaran una escena inolvidable para sus retinas al igual que denunciable por escándalo público.
Al otro lado del aparcamiento están Kurt y Blaine mirando la escena un poco conmocionados con lo que estaban viendo. Kurt al igual que todo Ohio ya sabía de este cambio de la morena pero si había algo que realmente no podía creerse, eran otros chismes que a él le habían llegado a los oídos, se lo había comentado a Blaine y Mercedes y los tres llegaron a la misma conclusión ''rumores absurdos''.
El chico no podía olvidar como antes de subirse al autobús que la llevaría al campamente en el que iba a pasar apenas 15 días, ella le dijo que lo llamaría y que cuando volviera le contaría todo y quedarían a dormir para ponerse al día. Lo llamo los 5 primeros días el resto no supo nada mas de ella y cuando llego nunca se puso en contacto con él.
''Maldito campamento'' murmuró a lo bajo, él sabía que era allí donde había comenzado todo.
Quinn y Mercedes llegaban cogidas del brazo y con una sonrisa de oreja a oreja, Quinn se puso en las orejas de ambos chicos.
Q: BUH! –Risotada pero no tardo en ponerse seria al ver el semblante de estos - ¿Qué pasa?
Kurt y Blaine se miraron, Mercedes dirigió la mirada hacia la moto aparcada y lo entendió. Si este verano Rachel se había perdido completamente, Quinn había sido todo lo contrario, tras pensarlo decidió acercarse a este grupo de amigos que ahora eran como su familia y les había contado que estaba, perdida y locamente enamorada de Rachel e iba a utilizar este verano para conquistarla, tanto que el primer día de instituto se pasearían de la mano por los pasillos, para que todos pudieran verlo. El entusiasmo se fue apagando en el verano tras saber del cambio de la morena.
Q: -¿Podemos irnos? - Se había dado cuenta de lo que pasaba y una punzada le atravesó el corazón.
B: SI! Tengo muuuuuuuchas ganas de empezar y el Glee Club… Nos espera. –Soltó a Kurt de la mano y agarraba a la rubia por los hombros.
M: Este año voy a patear traseros… Va a ser diferente.
Q: Y que lo digas… - Miro hacia Rachel. – Va a ser… Diferente.
Entraron y enseguida se fueron cada uno a su clase, las primeras horas se hicieron inmensas para todos pero en la hora de la comida ya estaban de nuevo juntos, se unieron Santana, Britt, Finn, Puck, Tina y Mike, este ultimo saludo a la rubia también con una sonrisa resplandeciente, este verano habían coincidido en una actividad de baile y se habían hecho muy buenos amigos, ella le había contado también a él sobre lo que le ocurría con Rachel y había soportado más de un derrumbamiento de la chica. La comida había transcurrido entre risas y bromas, excepto cuando se mencionaban los nombres de los ausentes (Sam, Rachel y Lauren).
Puck: Este año tendremos que buscar nuevos integrantes en el Glee Club, no me puedo creer que de ser una gran familia no hayamos quedado tan vacios. –Expresó con mucha tristeza.
Finn: ¿Vacios? Mira a tu alrededor… nueve, somos nueve. ESO ES UNA GRAN FAMILIA NUMEROSA!
Santana: Ya estaba tardando en salir el cara feto en plan ''Soy el Jefe, aunque nadie me haya elegido'' – Dijo en tono de burla, provocando la risa en el resto.
Puck: Se que es un tema delicado pero… ¿Rachel…qué? – Todos lo miraron confundidos.
Britt: Estoy un poco preocupada por ella. – Todos la miraron y asintieron con la cabeza.
Tina: ¿Habéis escuchado los últimos rumores? No me lo puedo creer…
Mike: Chicos! Visteis el otro día a los Lakers, FUE TAN PATETICO. –Logro cambiar de tema antes de que Quinn se enterara. Y no hay nada mejor que insultar a los Lakers, delante de Puck.
Puck: RETIRA ESO! OH DIOS! ESO NO CHINITO! –Risas y más risas.
Ya habían acabado de comer con la típica discusión sobre deportes y aunque le dio mucha pena se tuvo que levantar para ir al baño se despidió con mucho cariño de todos y emprendió camino al lavabo
Todo el camino se lo pasó pensando en Rachel como en definitiva el resto del día, no sabía cómo había pasado esto pero llevaba sin hablar con ella tres largos e inmensos meses. Lo hubiera dado todo por ser ese estúpido… ¿Motorista? Esa mañana, tocarla ¿Cómo se sentirá? No lo sabe, pero lo que tiene que ser un fuera de serie es besarla, besarla hasta que se te caigan los labios, hasta que duelan, hasta que no quede nada de ellos… Siguió pensando en formas de besarla y bueno… recordando el sueño que hace unos días había tenido, a veces pensaba que lo que sentía por la morena era obsesión pero cuando veía una foto de ella o escuchaba una de las muchas pistas colgadas en ese MySpace (ahora totalmente abandonado), lo confirmaba.
Rachel estaba en un cubículo sentada en la taza y con la mirada perdida, ya había ingerido lo que le hacía falta para empezar con ganas, empezaba a sentir como la sensación de esta mañana desaparecía para darle paso a una nueva y completamente diferente, salió del retrete y en ese momento entro Quinn.
La rubia se quedo impresionada y agradeció esa suerte, la miro sonriendo y se acerco a ella. La vio rara y distante, un poco temblorosa.
Q: Hola, Rachel! ¿Qué tal? –Pregunto con todas sus ganas, la mejor manera de acercarse a ella era arriesgarse y lo iba a hacer.
R: Levanto la mirada y se dirigió a ella con desprecio. –¿Y a ti que te importa? –Dio un paso y se zarandeo un poco, las pastillas estaban empezando a hacer efecto.
Q: ¿Estás bien?. –Pregunto dudosa. –Mira… acompáñame a la enfermería. –La cogió de la cintura y no pudo evitar sonreír.
R: NO! VETE, TU SOLO VETE! –Sus ojos estaban perdidos como si no miraran a nadie y estaban un poco dilatados, cada vez se encontraba mas ágil y la adrenalina se apoderaban de ella cada vez mas como siempre que tomaba su ''medicina''.
Q: No me importa de verdad… hare todo lo que haga falta para ayudarte. –Era tan raro tomar de la cintura a la morena. -¿Quieres que te lleve a casa?
R: Sera mejor que te vayas… -Aunque Quinn la tuviera agarrada, estaba sujeta con una fuerza sobre humana al lavabo.
Q: No podría dejarte así Rachel, no me lo perdonaría. –Estaba muy preocupada por Rachel como para dejarla sola.
R: Sabes… si puedes hacer algo por mí. –Se acerco peligrosamente hacia el rostro de la rubia y soltando su cintura le agarro su cabello corto.
La rubia estaba realmente impresionada … su respiración se agito y sus ojos iban de sus labios a sus ojos. Nadie, podía hacerla sentir de esa manera como ella… ''¿QUE ME AS HECHO RACHEL? DEVUELVEME MI CORAZON!'' Pensó. Todo el encanto se rompió en 2 segundos. La morena hizo ''Click''… ese jodido ''Click'' y después sonrió maliciosamente.
Tiro del pelo con brusquedad y esta soltó un quejido de dolor, posteriormente miro a la morena a los ojos mientras sus manos se iban hacia su cabeza y le rogaba a Rachel que la soltara. La miro y esa no era la cara que ella conocía, le invadió un miedo horroroso.
Q: ¿Qué haces? Ahhhhhhh… ME ESTAS HACIENDO DAÑO! –Era arrastrada al interior del cubículo del que Rachel había salido.
R: Te acuerdas de todas y cada una de las putadas que me has hecho… -Dijo con un enfado más que visible.
Q: Lo siento… -Lloraba mientras se lo decía. – Yo… no, no… NO POR FAVOR!
Rachel la puso de rodillas frente al retrete y tiro mas y mas del pelo de Quinn, después ella se coloco detrás y apoyo una rodilla en la espalda de la rubia logrando que la asi adoptara una posición mas correcta para lo que ella tenía planeado, toda su ira y dolor consigo misma estaba pagándolo con Quinn que indefensa lloraba como nunca, antes de hacer lo siguiente la morena le susurro al oído ''Hola soy Quinn Perfecta Fabray y voy a joderte la vida'' mete su cabeza en el retrete y la mantiene unos segundos , la rubia pataleaba y los ojos de la morena sonreían ante esa imagen… saca la cabeza y Quinn respira agitadamente ''Oye, Gnomo… hazme paso soy la reina y tu eres una puta mierda'' cabeza dentro y tras unos segundos vuelve a sacarla, ''BLA BLA BLA muérete Berry, que me das asco'', ''BLA BLA BLA no te quiere nadie, ni si quiera tu madre'' la cabeza de la rubia vuelve a sumergirse con más fuerza y rabia entonces se mantiene el doble no, el triple del tiempo que antes.
''Click''
Quinn se estaba ahogando cuando Rachel la vuelve a sacar y la deja libre, ha Quinn le cuesta respirar y le duele la cabeza por el anterior tirón de pelo.
Rachel está paralizada mirándola ¿Qué le ha hecho a esa cosita menuda que ahora esta encogida delante de ella temerosa y frágil?
Q: Lárgate, antes de que venga alguien. –Llora e intenta ponerse de pie, pese lo que acaba de pasar no quiere que la morena se vea metida en problemas.
Rachel solo camina dos pasos hacia atrás y no deja de mirar los ojos de Quinn.
R: Lo siento...
Quinn se pone de pie tiene la cabeza que le va a estallar y a la cabeza le sube un calor que le hace girarse para vomitar en el retrete, está muy segura de que Rachel le ha arrancado un puñado de pelo, cuando acaba ese espantoso momento y la rubia consigue ponerse de pie sin que le entren nauseas, se para justo al lado de la morena que estaba paralizada y le susurra ''No sé qué te pasa, intento entenderte pero ahora se me hace muy difícil…el resto si y no sé porque no quieren decírmelo… yo… necesito decirte algo…siempre que necesites ayuda… sea lo que sea, búscame''. Se para frente al espejo y se echa el pelo hacia atrás.
Q: Adiós Rachel –Se acerca a ella y le da un beso en la cabeza. Cierra los ojos y aspira buscando su olor.
Esta dispuesta a irse cuando se da la vuelta y le echa un último vistazo a Rachel, esta le devuelva una mirada perdida, vacía y llena de angustia. La rubia le sonríe y se va.
Todo había sido tan irreal que incluso pensó que había pertenecido a su imaginación, Quinn no había utilizado lo sucedido en su contra para hundirla y hacerle pagar por ello. No podía explicárselo.
La morena consiguió moverse de la posición adoptada y tras observar el baño se percato que en el suelo había una pulsera de colores en la que ponía ''Quinn'', la cogio y se la metió al bolsillo antes de salir por la puerta.
''Un buen arrepentimiento es la mejor medicina que tienen las enfermedades del alma.''
Una historia que tenia en la cabeza hace mucho tiempo y quería plasmarla de alguna u otra manera. Os ruego consejos y sugerencias para escribir, tengo la idea bien formada pero me cuesta expresarla.
Este capitulo es solo una presentacion de hay el titulo que le he puesto.
BESOS Y ABRAZOS A TOD S!
