-N.A: bueno esta historia ( o mas bien el prologo) iia lo habia subidho en otro tema pero me parecio que la historia no se amoldaba a los personajes que iba utilizar, espero que les gusthe por kela verdad esto lo escribi en uno de esos momentos que no puedes escribir ni en una servilleta.
La historia es mia pero los personajes le pertenecen a rumiko takajashi =)
-No!! No puedes estar muerta!! Por favor reacciona yo sé que sigues viva!! Hazlo por favor, no te preocupes pronto llegará la ambulancia- entre más gritaba con desesperación y frustración menos podía traerla ala vida, era imposible que estuviera muerta. La persona que más he amado con cada latido de mi corazón se fue y jamás volverá.
No creo poder tener la fuerza para soportar la situación, me resisto a aceptar esto, pero para mi mala suerte había algo más que tenía que enfrentar, el funeral. Su funeral. Me niego a tener que ver por una hora en completo silencio a esos maravillosos ojos ahora inertes, sin la chispa de ilusión, fríos, lejanos. Muertos como ella.
El día del funeral llegó en un abrir y cerrar de ojos, me puse mi traje negro para que reflejará la pena que sentía en carne viva y me dirigí directamente hacia el automóvil donde se encontraba mi mejor amigo que ya estaba esperándome. De camino al cementerio no hubo nada más que un silencio expectante y cauteloso a cualquier derrumbamiento por mi parte, pero no sucedió nada, solamente silencio. Pero lo que más trataba de evitar estaba por suceder, por fin la iba a ver pero esta vez en lugar de parecer un sueño era una pesadilla que, al parecer no iba a tener fin. Al caminar hacia donde estaba su ataúd a punto de ser bajado por el agujero, sentía la mirada de todos los que se encontraban ahí, la lastima en sus ojos reflejaba la tristeza en los mios, no quería llegar hasta donde estaba su ataúd. Temía por la falta de coraje que podía tener, los horrores que podía recordar, la felicidad que experimentada ahora ya tan lejana.
La oz aguda y sepulcral del padre solo aumentaba la profundidad del vacio en aquel momento. ¡Si tan solo hubiera llegado antes! Nada de esto habría pasado y ella seguiría viva como la recordaba en estos instantes.
