Pandora Hearts es de Jun Mochizuki.

Nota: Antes que nada, este fic es más bien un universo alternativo de mi otro fic de pandora hearts "White rabbit" (El cual no dejare a la deriba) no estará muy relacionado a él como para que fuera necesario leerlo para entender este, solo habrá unos cuantos Oc's que incorpore en el.


Prologo


—Es una oportunidad única—declaro el hombre vestido de negro, Break Xerxes, dijo que se llamaba. Su perfil apenas se podía ver por el espacio de la puerta, lo que el cerrojo permitía abrir, la muchacha rubia acepto el folleto que le entregaba entre la puerta y la pared, decía al reverso: "Academia Pandora". El hombre de ojos rojos hecho un vistazo hacia adentro—es una oportunidad única para ti y para tu hermano, después de la muerte de su madre, ya no tiene quien les de dinero, piénsalo—le dijo serio, se aparto de la puerta y al fin Ada Bezarius pudo relajar su mano alrededor de el pomo de la puerta.

—¿Porque nos hacen esta oferta?, es una beca demasiado completa—murmuro, saliendo al fin afuera, dándose cuenta que los short cortos y la remera vieja no eran buena opción para salir al pasillo de esos departamentos de renta barata, en especial cuando adentro había calefacción y afuera no.

—Estoy más que consiente de que es muy sospechoso, pero yo solo estoy aquí para ofrecerles la oferta—dijo el hombre, su cabello era blanco y tenía ese porte serio y elegante tan propio de un empresario que a Ada nunca le había interesado, la muchacha de cabello rubios hizo una mueca, enfatizando que eran más que obvios sus pensamientos —debo decirle, como persona y no como empleado, que esto se consigue una vez en la vida. Tómelo o déjelo, es su decisión, pero su hermano y usted necesitan esta beca…y lo sabe

Esas fueron las últimas palabras de Break Xerxes cuando se marcho y dejo a la chica rubia, esa de cabello corto, menuda y de rostro aun conservador de una dulzura infantil propia de alguien que apenas esta asimilando los 19 años.

—¿Quien era?—pregunto Oz, estaba saliendo de el baño con la pijama recién puesta y los cabellos húmedos y su hermana mayor hacia como si no hubiese estado hablando afuera de departamento con un completo extraño hace minutos.

—¡Oz Estas empando el piso!—Oz bufo un "pesada" que Ada llego a escuchar, el muchacho rubio de ojos esmeralda solo pudo negar todo argumento en su contra, hasta que pudieron cenar (si un combo de MacDonald para cada uno se podía llamar cena)

Reconsiderar sería una buena opción, porque, ¡Oh, vamos! Necesitaban dinero.


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"todo va a estar bien" ¿Cuántas veces le habían dicho aquella palabra? La verdad, es que ya había perdido la cuenta.

—levanta mas el pie, mantelo firme—Esmeralda solo hizo un ademan con su mano, Mary Ann suspiro, elevando mas su pie, el musculo de su muslo se entumeció aun mas, peros su madre le hacía llegar a los extremos y ella ya estaba acostumbrada, sus ojos esmeraldas, asi como el nombre de su madre se achicaron cuando sintió otro tirón en el musculo.

—si madre—murmuro, soplando el mechón de cabello negro que se había escapado de su bien recogido moño, se inclino aun mas, y, ciertamente, le dolió. Pero no diría nada, jamás diría que no podía hacer a la perfección una simple pose.

Mary Ann había aceptado tener clases de Ballet e incluso hacer uno que otro recital solo porque había pedido practicar gimnasia. El tema había quedado colgado por meses hasta que la muchacha dejo su orgullo de un lado y le suplico a su madre Esmeralda que convenciera a su padre.

Esmeralda solo tuvo una condición, que ella practicara ballet como le había pedido más de una vez, que siguiera el ejemplo de ella, su madre. Y se convirtiera en la prima balerina mas adorada por el ballet de ese país. Ella se había negado en el pasado pero ahora se veía entre la espada y la pared, enserio quería hacer gimnasia, de eso ya hace unos años y Ann había aceptado y asimilado las clases de ambas especialidades mas el colegio y el deber de llevar buenas notas a casa.

Ahora poco a poco la relación de sus padres se iba gastando, entre tantos viajes de negocios y zonas horarias de distancia, e, incluso, cuando podía, su padre se mantenía lejos de casa todo lo que pudiera solo por placer a hacerlo. Ella se limitaba a escuchar el "todo está bien" de su madre. Sufriendo en silencio ver como su padre le dedicaba sonrisas falsas a su madre, y ella igual a el…y…como poco a poco…su familia se iba derrumbando piedra por piedra, muro por muro…y ella en silencio, sufriendo las consecuencias.

Después de todo, ella no tenía otra opción


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—¡Me voy Jack!—grito por lo alto, estaba harta, MUY harta. Y ahora le importaba bien poco si incluso llegaba a despertar a las niñas (que ya no eran tan niñas) con su gritos. Estaba saliendo de el estudio de su esposo después de haber tenido una acalorada "conversación" que termino en gritos y en un "ya no aguanto más" departe de la mujer de cabellos ébano .

—Lacie no puedes hacerlo, tienes que…—Los cabellos cortos y rubios de Jack estaban despeinados cuando salió tras su esposa, había una marca roja en su mejilla, probablemente una cachetada, que jamás se digno a responder solo porque amaba rayando a la locura aquellos ojos rojos que ahora le veían con nada más que desprecio.

— ¡¿Hacer "qué"?!—exploto, haciendo ademanes exagerados y con los ojos rojos abiertos como dos llamas que esperaban el mínimo indicio de provocación para poder explotar y quebrar la pequeña esperanza de Jack por aun estar juntos dándoles un viaje gratis y sin regreso a Pakistán.—¡¿Hacer como si nada pasara?!—prosiguió con el humor bulléndole en la entrañas y haciendo que su legua dijera todas aquellas verdades que tanto temió echarle en cara a él—¡¿Sonreír como una idiota y auto-engañarme de que todo va estar mejor!? ¿Cuánto debo esperar?—se acerco mas a él, y Jack solo retrocedió, retrocedió al ver la primera lagrima resbalar la mejilla roja por el rubor de su frustración, la miro a los ojos y aparto la mirada mientras tragaba grueso, porque era imposible verle al rostro mientras ella estaba así—Dime Jack, ¿cuánto? —esta vez aminoro el volumen de su voz, y Jack se mareo, porque cuando Lacie se calmaba era que todo estaría peor, que ya no había marcha atrás. Porque cuando su esposa tenía la cabeza fría y el sentimientos bullendo dentro, es que podía ser mas certera con su golpes verbales, con sus verdades que dolían—¿Dos meses para que al fin me dejes siquiera que las niñas puedan ir con su padre los domingos? ¿Tres para que al fin yo pueda mirar a otro hombre a los ojos que no seas tú? ¡Seis para que al fin Lotti venga a verme a la casa! ¡¿Cuánto Jack?!

—Lacie por favor, no cometas una tontería, no ahora, no me dejes solo. No ahora—le suplico, le tomo de los hombros y el contacto físico le tomo por desprevenida ya que solo se exalto y observo con su brillantes ojos rojos hacia los ojos esmeralda de Jack, esos ojos tan desesperados, deseosos de amor y cariño y…que a veces, llegaban a dejarla a merced de él, porque Lacie quisiera o no, aun un pedacito de ese amor tan descabellado que le dio por nacer cuando se caso con él, ese amor que le hizo soportar el primer arranque de celos de Jack, que conllevo un mes encerrada en la casa sin salir un solo dia. Ese amor que, ahora, parecía se esfumaba a ratos y solo llegaba para hacerles daño.

—Despertare a las niñas, me iré esta misma noche—dijo, secándose los restos de lagrimas mientras dejaba a un Jack con la camisa mal puesta, lo ojos húmedos y esa marca de mano de mujer plantada en el rostro que sería lo único de ella que dejaría en esa casa vacía, que ella misma había decorado.

Habían tenido problemas, siempre los habían tenido.

Solo que ese día en particular no quisieron ignorar el elefante en la habitación, que solo mencionaban con indicios y hablares subjetivos.

Ya no…


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Lotti suspiro, miro hacia atrás y se acomodo un mechón de cabello detrás de su oreja, su BabyDoll era demasiado corto, al menos eso pensaba Oswald, al otro lado de la habitación.

—¿ahora qué?—pregunto la muchacha, exasperada, Oswald intento abrir la boca para decir algo, pero Lotti no le dejo que interviniera, porque el era abogado y la podría convencer de cualquier cosa.

Ella estaba apoyada en la pared, al otro extremo de la habitación, Oswald residía sin camisa y con solo pantalón, al otro extremo, sentado en la cama y con una mirada de arrepentimiento peor que la de Revis cuando Lacie le dijo que se casaba con un Bezarius.

—No intervengas, quiero dejar todo claro Oswald—dijo, le picaban los ojos pero no lloraría, porque ella era una mujer fuerte, y las mujeres fuertes no lloraban—Te amo, te amo desde el primer día en que te conocí, te amo desde que fuiste a mi primer desfile de modas arrastrado por tu hermana. Pero tú no me amas, ni siquiera me tienes aprecio, este matrimonio que se nos viene encima es solo conveniencia, los Baskervilles necesitaban alianzas, ¿Qué mejor alianza que la empresa de los Fonteu para hacerlo? ¿Qué mejor que tu? ¡¿Un Baskervilles lo suficientemente alejado de la línea de descendencia principal para entregárselo a una niñita como Charlotte?!

—Lotti, yo, mira, esto…—susurro, Oswald enterró la cabeza en sus manos ¿Que diría? Era todo verdad, habían tenido una que otra cita a principios del año pasado, fueron avanzando y…Charlotte se dio cuenta que Oswald solo la invitaba a cenas y idas al cine solo porque le obligaban, que el mismo día en que organizo el desfile con la ropa diseñada por ella misma independientemente de las empresas de sus padre, ese día en que Oswald se incoo y le mostro el anillo dentro de la cajita aterciopelada…y, le pidió matrimonio…que aquello era solo por conveniencia.

No había amor

No había cariño

Solo dinero de por medio

—¿Cuando lo supiste?—murmuro por lo bajo, mirando hacia Lotti, hacia el cabello rosa que se había teñido por rebeldía y los contactos rojos que le impedían ver los marrones de naturaleza. Era una mujer hermosa, de cuerpo moldeado y una belleza digna de (inserte diosa extremadamente hermosa aquí- porque la pobre afrodita ya esta rayada). Tal vez, solo tal vez, aprendería a amarla…

Lotti se acomodo un poco en la pared miro hacia la lámpara que desprendía una luz mortecina y miro su anillo de compromiso, el maldito anillo de compromiso.

—cuando me lo pediste.

—¿Tanto?—Lotti rio ante el tono sorprendido de el mayor.

—Quería auto-engañarme y pensar que el vacio que vi en tus ojos ese día no era porque no quisieras casarte, que no era por mí, que había sido mi imaginación, que no me tocabas era porque eras uno de esos hombres de la vieja escuela, que debía esperar y todo estaría bien…pero ya ves…—argumento, sus pasos ligeros se dirigieron a la puerta, ondeado la tela vaporosa y trasparente con la que quiso seducir a su prometido y se vio flaqueada al sentir como sus besos eran forzados y carisias muy escasas—buenas noches Oswiii

Y se marcho por la misma puerta que habia pasado con un botella de vino (pregúntenle al vecino, así el pobre tendrá un explicación de porque hay una botella de vino caro en su jardín) y la mirada afilada en el.

Y dijo el bendito apodo que el tanto odiaba solo para hacerlo enojar, lo sabia…

Lotti, esa alma libre que no se dejaba domar


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Nota:

Bueno, si has llegado hasta aquí pues os agradezco, le deseo lo mejor y les piso poooooor favor, dejar un pequeño Review que me diga si les gusto o no. Quiero hacer notar que esto es un prologo, y para mi un prologo no lleva casi diálogos ni detalles y mucho menos es largo (mi promedio de capítulos son de 14 a 16 páginas) un poco más bajo que mi promedio sobre 20 en el colegio por estar aquí escribiendo en vez de estar repasando la tarea. ¡Pero bueno!

Gracias por leer, se agradecen review (Huy! Rimo :D)

Por si a alguien le interesa, NO dejare varado a White Rabbit, solo que tengo esto guardado desde hace tanto y me picaba la tentación. Ademas no será una serie muy larga.

Si veo que gusta subo el capitulo en tres días, si no en una semana (si me acuerdo xD)


¡Gracias por leer!