Yaoi Fangirl

Ya eran las tres de la madrugada, y se supone que a esa hora todos estamos dormidos.

Todos menos cierta pelirrosa que está frente al ordenador, mordiéndose las uñas. Reprime grititos a mayoría del tiempo, pero es que el fanfic que se está leyendo está muy bueno y no puede esperar a terminar el capítulo y...

Oh no, ya llegó la parte yaoi. Sakura Haruno inmediatamente cubrió su boca con sus manos, para no dejar escapar grititos de alegría.

Pero era una escena demasiado...interesante. Tanto que a la misma pelirrosa se le caía más y más baba de la boca conforme más leía.

Y quién diría que leer yaoi a las tres de la madrugada sería tan divertido, sin que nadie más sepa tu pequeña y sucia diversión nocturna. No, nadie lo sabe. Ni tus amigas ni tu familia. Tal vez porque no has encontrado la forma de decirlo, o porque ya te imaginas como reaccionarían.

Te tratarían como a cualquier degenerada y te enviarían a un internado sólo para mujeres, con la esperanza de que "vuelvas al buen camino".

Ella lo creía injusto, sin embargo. Naruto y Sasuke sí podían ver perversiones. Podían ver hentai y yuri. Tenían más opciones. ¿Por qué ella no podía ser pervertida también? La única opción que ella tenía era el yaoi, e iba a aprovecharla al máximo.

La conservadora sociedad quería mantener a las mujeres limpias, ¿Eh?

No señor, ella se vengaría de ese machismo e imaginaría a cada hombre que se le cruzara... siendo uke o seme, depende del tipo.

Sonrió, iluminada tenuemente por el monitor. Sería mejor apagar el ordenador antes de que la descubran, y volver a ser la misma "niña ejemplar" que todos veían en el día.

Hasta que llegue la medianoche y comience a dar rienda suelta a su imaginación...

-Qué Kawaii-murmuró al día siguiente, al ver a sus amigos Naruto y Sasuke andar muy juntos.

No se arrepentía de ser lo que era, una yaoi fangirl.