Eclipse de Medianoche
Ok, este fic lo escribí hace mucho tiempo y nunca lo acabé (tengo la mala costumbre de escribir algo y no terminarlo xD) Así que no les prometo un final, pero si hay unos capítulos más luego de este que ya están escritos.
Después de leer Evernight de Claudia Gray decidí que tenía que escribir algo mezclando a los Cullen. De ahí el título.
Les agradecería que no me spoilereen acerca del tercer libro de Gray, Hourglass, ya que aún no ha llegado a mi ciudad :/
Disclaimer: La saga Twilight no me pertenece. Tanto ella como sus personajes (incluyendo a Edward :/) son propiedad de Stephenie Meyer.
La saga Evernight no me pertenece. Tanto ella como sus personajes (incluyendo a Balthazar :'[) son propiedad de Claudia Gray.
Capítulo 1
"Querido diario:
Te cuento que es mi cumpleaños y tú eres mi regalo, aún no entiendo del todo para que escribir en un libro que nadie aparte de mí va a leer, pero mamá dice que debo recordar esta etapa lo mejor posible, ya que al ser inmortal voy a olvidar gran parte de mi vida. Así que empezaré desde el principio, o lo que al menos me parece que lo es;
Me llamo Renesmee Carlie Cullen, tengo doce años (nueve realmente pero crezco de un modo anormal) Mis padres son Edward Anthony Masen y Isabella Marie Swan, tengo cuatro tíos por parte de mi papá: el tío Emmet y la tía Rosalíe, Jasper y Alice, y mis abuelos son Carlisle y Esme Cullen. No tengo tíos por parte de mi madre pero si a mis abuelos Charlie y Reneê. ¡Guau, nunca creí que esto terminaría en una biografía!.
Mmm… Nací en Forks, un pueblito de y he vivido allí durante toda mi vida, tengo algunos amigos en La Push, una reserva quileute, pero el mejor es Jacob, nos conocemos de niños y siempre fuimos muy unidos. ¡Ah! Lo olvidaba, mis padres son vampiros y mis mejores amigos son licántropos (hombres lobo) aunque para mi realmente nunca fue algo extraño, es el modo en que me crié y pese a que parece sacado de una película de terror para mi son lo mejor del mundo, yo soy una híbrida, mitad vampiro (de parte de mi padre) y mitad humana (de parte de mi madre) siempre me dijeron que soy una en un millón ya que el único caso a parte de mi que mis padres conocen es el de un semivampiro llamado Nahuel…"
En ese momento el Volvo de papá pisó un bache y provocó que se explotara la lapicera, estaba a punto de decirle unas cuantas cosas al conductor pero se me adelantó.
"Vaya Nessie", dijo papá incómodo, "¿pero de dónde sacaste ese vocabulario?"
Estaba a punto de reclamarle por haberse inmiscuido en mi mente pero mi tía Rosalie me interrumpió.
"Es evidente que lo aprendió de esos perros de la Reserva, ¿Qué más puedes esperar dejando a una mujer entre tantas bestias?".
"¡Tía!", protesté, "¡ni siquiera sabes en lo que estaba pensando!".
"No necesito saberlo", replicó, "ese chucho sabe de groserías como yo de moda".
"Chucho" era el apodo con el que mi tía se refería a Jacob, quise defenderlo pero no podía negar que fue el quién me había pegado ese lenguaje, por lo que me quedé callada.
"Nessie, ¿Estás bien?", preguntótío Emmett observando la lapicera, "Se nota que eres un imán para los accidentes cómo tu madre, tienes suerte de cambiar de instituto y no acarrear con tu mala reputación de por vida.", bromeó
Le propiné un codazo en el abdomen por su inoportuno comentario, ya estaba bastante nerviosa como para que me lo hicieran más difícil. Tío Jasper lo notó y se dispuso a calmar los ánimos.
"No tienes de que preocuparte", dijo tía Alice tomando mi brazo. "He visto que harás varios amigos".
Hice una mueca, no dudaba del don de mi tía pero tambien podría haberlo dicho para tranquilizarme.
"Yo creo que se lo está tomando bastante bien", agregó mamá. "La primera vez que ingresé al instituto estaba aterrada y lo último que me pasaba por la mente era hacer amigos". Recordó nostálgica.
Hablaba de ello como si hubiesen pasado siglos. Reposé mi mano en su hombro y regresamos a su primer día, experimentar su vergüenza fue tan incómodo que la solté, nunca creí que mamá reaccionara así simplemente por conocer gente nueva, yo no estaba tan asustada, hasta dónde sabía, esta era una academia de vampiros por lo que me ahorraría la faena de fingirme humana, iba a estar con personas (¿o debería decir criaturas?) iguales a mí, quizá incluso encontrara otro híbrido como Nahuel y podríamos compartir nuestras inquietudes. Pero había algo que me dolía; tener que dejar mi hogar, a mi abuelo, mis amigos licántropos… Aún recordaba aquella conversación con Jacob que cambiaría mi vida para siempre…
(Flashback)
Estábamos sentados debajo de un frondoso árbol que tenía a fin evitar que mi piel empezara a lanzar destellos por todas partes, que nos permitía olvidar por un momento que éramos híbridos y licántropos para que sólo fuéramos Jake y yo. Estaba sentada a su lado, recostando mi cabeza en su hombro.
"Jake", susurré para no quebrar del todo el dulce silencio que nos envolvía.
"¿Umm?", asintió sin levantar la vista.
"¿Que harías si tuviese que ir a otro sitio", tragué saliva, "lejos de la reserva?"
Sentí como sus hombros se tensaban.
"Supongo que iría contigo", respondió pensativo y continuó, "tú sabes que luego de que naciste yo me instalé en tu casa sólo para poder pasar más tiempo contigo".
"Lo sé, pero ¿Y si no fueran sólo unos kilómetros? ¿y si fuera otro estado?".
"Depende del motivo por el que... ¿a qué viene tu pregunta?", inquirió volteándose para poder examinarme con sus profundos ojos negros.
"Sólo me preguntaba", mentí rompiendo el contacto visual, pues sentía que su mirada era capaz de sacarme todas las respuestas.
Él seguía observándome y una sonrisa se coló por la comisura de sus labios.
"¡Ya basta!", exclamé.
"¿Que ocurre Nessie?", dijo con una nota de petulancia en la voz.
"No importa", dije cruzándome de brazos y frunciendo el ceño.
"Reneesme, te conozco y sé que eres una pésima mentirosa", dijo sonriendo para alivianar la tensión.
"Eso no es verdad", protesté para luego agregar "¡a ti te ocurriría lo mismo si Billy pudiese leer tu mente!".
"¿Asi que lo admites?", afirmó triunfal, pero al ver que me puse seria continuó, "otra vez estás cambiando de tema, ¿a dónde vas a mudarte?".
Lo miré de soslayo y supe que no iba a dejarme en paz hasta que lo dijera.
"Mis padres no quieren que estudie en Forks, han oído hablar de una Academia en Riverton llamada Evernight".
"¿Y qué es lo que tiene de especial?", pronunció molesto.
No pude evitar sentirme halagada por su reacción; iba a alejarme de él y eso no le gustaba.
"Es una academia para vampiros".
Sabía que Jacob nunca había estado muy a favor de las tradiciones de mi especie y era algo a lo que estaba acostumbrada pero aún así no me esperaba su respuesta.
"Pues vé, ¡diviértete con tus amigos chupasangres!", dijo iracundo, "nunca creí que querrías convertirte en un monstruo, ¿cómo puedes estudiar en un sitio dónde aprueben matar humanos?".
"¿Cómo puedes decir esas cosas?", pregunté indignada. "Ni siquiera los conoces…", me rectifiqué "ni siquiera me conoces a mí".
¡Claro que si! pero tú has vivido recluida en tu mundo Nessie! No todos son como tú allí fuera, no todos siguen tu misma dieta", dijo con repulsión, "¿De veras crees que no acabarán convenciéndote para que pruebes sangre humana?".
"Yo tengo mis principios Jacob Black, no soy un títere al que le dicen que hacer", sentí que se me hervía la sangre.
"Lo sé Ness pero pronto serás una adolescente y lo más importante para ti será hacer amigos, cueste lo que cueste".
Yo no podía soportar que dijera esas cosas de mí, detestaba que me tratara como una niña pequeña que se dejaba llevar por cualquiera. Lo fulminé con la mirada y eché a andar indignada. El trató de alcanzarme para arreglar las cosas pero yo no estaba de ánimo. En un momento me tomó del brazo y me clavó su mirada azabache.
"Nessie, no quiero que te vayas", soltó apesadumbrado, "No soportaría tenerte lejos"
Sentí como mis facciones se ablandaban y las lágrimas pujaban por salir. En un impulso lo abracé y él me acarició la cabeza.
"¿Qué esperabas que hiciera después de enterarme lo que en verdad piensas de mi?, "le recriminé con un hilo de voz.
"No quise decir eso", susurró contra mi pelo como cuando era pequeña, "tan sólo estaba molestó por la idea de no verte más, de no poder tenerte así cerca mío".
Allí, envuelta en sus brazos, me percaté que podía oír su corazón y sentí su respiración en mi pelo. ¿A quien quería engañar? Nunca podría estar lejos de él, era mi mejor amigo, una parte importantísima de mi vida.
"Ven conmigo", susurré impulsivamente contra su pecho.
"¿Qué?".
"Acompáñame, sé que siempre has estudiado en la Reserva pero no puede ser tan difícil como parece, podríamos hablar con Billy y…".
Se deshizo lentamente de mi abrazo para tomar mi barbilla y escudriñarme con esos ojos oscuros, no pude evitar sentirme cohibida por la pasión que denotaban.
"Nessie…", pronunció con dulzura, "yo no puedo estudiar allí".
¿Por qué?, exigí liberándome de su mano.
"Porque", vaciló, "No puedo dejar sólo a Billy y los chicos, tú sabes que ya no está para andar detrás de ellos cómo antes y ya estoy muy viejo para fingir que es la primera vez que voy a una escuela secundaria".
Lo miré fijamente, sabía que estaba mintiendo.
"No te creo", le espeté, "hace unos minutos me dijiste que vendrías conmigo adonde sea y ahora me vienes con esto, ¿Qué se supone que piense?".
"No, es que…", dijo debatiéndose, "de acuerdo, existe más de una razón".
"Entonces dila", repuse, "Debe ser por tu ciego odio hacia los chupasangres" dije furiosa con el término que había elegido".
"No es eso, lo que ocurre es que…" seguía indeciso y se me estaba acabando la paciencia.
¿Qué no quieres estar conmigo? ¿Qué te parece que si te vienes a la Academia estarías dándole alas a algo que nunca va ser? ¿Qué yo ya no te importo y solo estás conmigo para no alejarte de Bella?.