Hey, primero que nada quiero hacer una aclaración: ESTA HISTORIA NO ES MÍA, ni los personajes involucrados en ella. La historia es de la autoría de Chrmdpoet, quien amablemente me ha dado su permiso para traducirla y publicarla. Y los personajes pertenecen a Adam Horowitz y Edward Kitsis (pero eso lo sabemos todos). En fin, esta historia me ha parecido una de las más dulces que he tenido el privilegio de leer y por ello la traduzco.

Bueno, ya no les quito más tiempo, espero que la disfruten. :)


La Princesa y La Prisionera

Capítulo uno: Cuentos de la Reina

"¿Puedo tener una historia, Madre?" Preguntó la joven princesa en voz baja mirando a su madre de piel clara a través de grandes ojos color esmeralda. Snow White miró amorosamente a su perfecta hija. Emma era su orgullo y la alegría de su espíritu, un alma aventurera así como su padre, Charming, y un corazón deseoso tan lleno de luz y amor, al igual que el propio corazón de Snow. La rubia princesa era como una mezcla perfecta entre su madre y su padre, e incluso siendo una niña, era muy madura y educada para su edad. La amada princesa del Reino Encantado era tan conocida como sus propios padres y querida fuertemente por la guardia real, los sirvientes reales y cada súbdito fiel y leal en el reino. Era verdaderamente una joya preciosa.

"Por supuesto, mi amor," respondió Snow dulcemente mientras pasaba suavemente la mano por los rizos dorados de su princesa, los cuales recorrían las almohadas de su pequeña cama, hecha a la medida y especialmente para la joven. "¿Qué te gustaría escuchar esta noche?"

La rubia arrugó adorablemente la nariz y se mordió el labio inferior mientras mentalmente reflexionaba sobre las opciones sin fin de posibles cuentos de cuna. Por mucho que le gustaba aprender nuevas historias cuando su madre o su padre se las ofrecían, cuando le daban la opción, casi siempre elegía las que ya había oído; por lo que se conformó con uno de sus temas favoritos, un tema con el que extrañamente su madre siempre parecía adolorida y apasionada, por lo que dicho tema se había convertido fácilmente en el favorito de la niña.

"¡Cuéntame un cuento de la Reina Malvada!" Chilló Emma emocionada desde abajo de las sábanas mientras su madre seguía acariciando su cabello con dulzura. La expresión de Snow se contorsionó con incomodidad muy brevemente antes de asentarse en una pequeña sonrisa de aceptación. Emma casi siempre escogía el tema de la Reina Malvada, famosa por sus cuentos para dormir, y aunque a Snow le dolía hablar de las antiguas fechorías de su madrastra, ella también sospechaba que a Emma le encantaban estas historias debido específicamente a la proximidad que tenia Snow con ellas. Muchas de las historias de Snow sobre la Reina Malvada la incluían a ella misma, y tratando de adivinar cómo podrían ser estas historias, le encantaba la forma en la que los ojos de Emma siempre se iluminaban al oírlas. No se le podía negar nada a una mirada brillante como esa. Por lo tanto, simplemente asintió y comenzó una historia familiar, lo que permitió que los recuerdos regresasen a ella y la llevaran de nuevo a una época, que ahora parecía toda una vida atrás, cerrando los ojos al recordar la imagen de sí misma como una niña pequeña, pidiendo ayuda desde el lomo de un caballo asustado y en estampida.

"Y entonces ella te salvó. ¿No, Madre? ¡La Reina Malvada te salvó del caballo salvaje!" Emma se adelantó a la historia, proporcionando la siguiente fase de con entusiasmo. Esta siempre había sido una de sus historias favoritas, la historia de cómo la joven Regina había salvado la vida de su madre hace muchos años.

"Sí, amor. Ella me salvó, pero eso fue antes de que se convirtiera en la Reina Malvada, Emma. Entonces, ella era simplemente Regina, una joven encantadora llena de amor, de luz y de esperanza," le respondió Snow, suspirando ante la mención de la mujer que una vez fue su ex madrastra, y que había estado en su corazón. Sacudió la cabeza para ahuyentar los recuerdos y volvió a acariciar los hermosos rizos dorados de su hija. Sabía que Emma iba a querer hablar más antes de caer finalmente dormida, así que mentalmente se preparó para la tormenta de comentarios y preguntas de su curiosa hija, que comenzaron casi tan pronto como sus propias palabras habían salido de su boca.

"No siempre fue mala," dijo Emma en voz baja, más para sí misma que su madre, "porque el mal no nace, se hace, ¿verdad, Mamá?" La princesa miró a su madre con ojos esperanzados. Snow sonrió dulcemente ante eso. Al igual que ella, Emma siempre tuvo la esperanza de que Regina fuera buena y que tal vez un día, podría volver a serlo.

"Eso es cierto, cariño. Son nuestras decisiones las que nos hacen lo que somos, y por desgracia, Regina tomó muchas decisiones terribles, pero no, mi amor, no siempre fue mala. Ella una vez fue tan buena como tú o como yo"

"Creo que me hubiera gustado conocerla, Madre, cuando ella era buena."

"Yo también lo creo, querida. Creo que la hubieses querido mucho." Snow reprimió unas lágrimas al escuchar el amor puro en la voz de su hija mientras hablaba de la Regina que, ahora, sólo Snow White recordaba tan vívidamente. Para todos los demás, ella siempre fue la Reina Malvada, nada más que un título malo y una historia terrible. Emma, sin embargo, como su madre, era una optimista, una verdadera creyente en el bien de las personas, no importa cuán perdidos pudieran llegar a estar.

"¿Cómo la amaste tú?" Susurró Emma, su voz cada vez más débil y ronca por el cansancio.

"Sí, Emma. Yo la quise mucho," susurró Snow de nuevo a su hija, finalmente, permitió que las lágrimas que colgaban sobre sus párpados cayeran silenciosamente por sus mejillas, brillando intensamente con el resplandor parpadeante de la chimenea justo al otro lado de la cama de Emma. Emma sonrió y asintió con la cabeza, levantando su pequeña mano para limpiar las lágrimas de su madre. Ella había visto a su madre llorar muchas veces al hablar de la Reina Malvada y cada vez, la princesa se limitaba a secar las lágrimas de su pelinegra madre o sostener tiernamente su mano.

"Creo que ella te quería, también, Madre. Incluso después de hacer cosas malas, creo que siempre te quiso, también." Snow dejó escapar un sollozo desigual ante eso, sonriendo alegremente a través de sus lágrimas, y se inclinó hacia adelante para presionar y dulce beso en la frente de su hermosa niña.

"Gracias, Emma," susurró Snow, siempre se sorprendía de lo madura y perceptiva que su hija podía llegar a ser. "Duerme, cariño." Apretó otro rápido beso en la frente de Emma antes de levantarse y cruzar la puerta. Justo cuando estaba a punto de salir, oyó la voz tranquila de su hija susurrarle desde su pila de mantas.

"Ella no puede venir aquí, ¿verdad, mamá? La Reina Malvada." La voz de Emma tembló ligeramente, con miedo evidente, pero en su mayoría sólo se percibía el eco de su curiosidad. Snow sonrió mientras se apoyaba contra la puerta y negó con la cabeza.

"No, Emma. La Reina Malvada fue capturada hace mucho tiempo, y nunca podrá escapar. Estás a salvo, mi amor." Con eso, le envió un beso a su hija y tiró de la puerta para que se cerrara tras ella, cruzando la sala rápidamente para entrar en su dormitorio, donde su amado, el Rey James, la esperaba.


Emma se quedó despierta sólo un momento más, sus últimos pensamientos fueron sobre la Reina Malvada y dónde podría estar, capturada y detenida en algún lugar del que nunca podría escapar. La joven princesa rubia se preguntó si la reina se sentía sola, si tenía miedo, si alguna vez volvería ser buena, como lo fue una vez.

Lo que la princesa no sabía, ya que su madre nunca se lo había dicho, era que la Reina Caída, Regina, era prisionera en su propio castillo, atrapada dentro de una celda especialmente diseñada en los calabozos, muy por debajo del piso del castillo, bajo los mismos pies de Emma, donde había permanecido durante los últimos siete años.


Sé que notaron que deje los nombres de Blancanieves y Encanto en inglés, eso no ha sido un error, me gustan más así. Pero si a ustedes les molesta o algo, díganmelo y yo lo corregiré, al igual que corregiré cualquier error que ustedes señalen en la traducción. Y les recuerdo, está historia no es mía, pero aun así me gustaría saber sus opiniones y quien sabe, si recibo varios comentarios, posiblemente actualicé el próximo capitulo está noche. See ya!