Amane:
Tomoko sabia perfectamente lo difícil que era despertar a su hermana, si no era por que de verdad estaba dormida se hacia la dormida. Y en esas dos opciones era una verdadera pesadilla
-¡Gemmei!- le llamo Tomoko a la joven sirvienta que tenían en la casa de sus padres-¿Iras a despertar a mi hermana?- pregunto llegando junto a la chica que estaba ya a la mitad de las escaleras en dirección de la habitación de Amane, la gemela de Tomoko.
-Así es Señorita Tomoko- la joven respondió con el respeto que le debía a Tomoko, quien era, la hija mayor de los señores de la casa.
-Déjame a mi- le ordeno a Gemmei-Iré yo a despertar a Amane tu ve a hacer lo que… tengas que hacer- sonrió y antes de que aquella adolescente respondiera Tomoko ya había terminado de subir las escaleras y ya estaba dirigiéndose a los aposentos de su hermana.
Era totalmente automático, sabia el recorrido de memoria y cada ves que estaba allí lo hacia como si nunca se hubiera marchado, como si nunca se hubiera casado y mudado a otra ciudad, al llegar a esa puerta marrón tallada con una escena típica de su ciudad y una ves estuvo frente a ella la abrió de forma estrepitosa dirigiéndose de inmediato a la ventana corriendo las cortinas para que la luz de la mañana entrara e iluminara la habitación.
Un leve gemido se dejo oír desde la cama y los primeros movimientos de Amane desde que Tomoko entro se dejaron ver
-Amane- le llamo Tomoko acercándose a su cama-Despierta, ya es de día-la suavidad de la voz de Tomoko le sorprendía a ella misma pero no sabia cuanto mas duraría esa suavidad-Amane- le volvió a llamar esta ves con la vos un poco mas elevada suspiro y echo a la basura esa suavidad y dulzura-¡Amane!- grito y la chica se despertó de repente.
-¡¿Qué!- pregunto sentándose bruscamente en la cama y mirando hacia todas las direcciones, deteniéndose en su hermana en la segunda vuelta-¿Tomoko? ¿Qué haces aquí? ¿Y Gemmei? ¿Le paso algo?- todas esas preguntas salieron casi al mismo tiempo, Tomoko no sabia que hacer primero si reírse o responder a las interrogantes de Amane
-No, no paso nada con Gemmei- contestó- Solamente me ofrecí a venir a despertarte y le ordene que siguiera con sus quehaceres y yo haría esto- Tomoko se sentó en la cama junto a Amane quien le miraba aun asustada-Compadezco a la pobre si tiene que enfrentarse a esto cada día- bromeo y se quedo callada esperando las quejas de su hermana pequeña
-¿¡Como que compadeces a Gemmei?- exclamo/pregunto algo irritada por aquella frase-¡No soy una pesadilla!- Amane estaba molesta y mientras se movía para salir de la cama seguía hablando-Y si tu le compadeces a ella yo compadezco a Gai que te debe aguantar todos los días- Amane sonrió mientras miraba desde el otro costado de la cama a Tomoko
-No, no, no se te ocurra compararme contigo- Tomoko se levanto de su asiento y se fue hasta donde estaba su hermana-Yo nunca fui problemática como lo has sido tu toda tu vida- aclaro esa parte de su vida.
En total en la Residencia Hasegawa eran 4 ahora, ya que Tomoko se había mudado con su esposo. Sus padres y su hermano además de la propia Amane habitaban la casa… por el momento.
-¿Problemática?- ya enojadas ambas hermanas comenzaron a discutir sobre quien era allí la que mas problemas causaba a sus padres-¿Debo recordarte las veces que te has escapado de la casa para hacer de las tuyas hermana?- Amane puso sus brazos en jarra
-Claro como su tu fueras una santa- Tomoko comenzó a descargarse-Tu- pero antes de que pudiera siquiera decir lo que había hecho su hermana antes alguien llamo a la puerta
-¿Chicas esta todo bien?- su madre interrumpió la pelea de las hermanas
-Si madre solo charlábamos- Tomoko sonrío a su madre y fue hacia ella-Amane estaba por vestirse y bajar justo en este momento- Tomoko miro a su hermana antes de salir con su madre de la habitación.
Mientras bajaban las escaleras Tomoko no hablaba-¿Sucede algo?- su madre le miro dulcemente y le regalo una de esas sonrisas que su hija tanto amaba
-Nada solamente estoy preocupada desde que me contaste lo del compromiso de Amane con ese mujeriego tengo miedo que ella salga lastimada- Tomoko miro al suelo y suspiro- Se muy bien como es ese idiota Gai me lo cuenta todo y no quiero que mi hermana salga lastimada y haga una locura-suspiro nuevamente
-Quédate tranquila estoy segura que esos dos son el uno para el otro- su madre sonaba segura, y eso le hizo recordar cuando le dijo lo de su propio compromiso con Gai. Al principio ella pensaba que era una estupidez y sus dos hermanos trataron de calmarla lo mejor posible sin lograr mucho pero allí fue donde su madre entro en acción, ella se sentó con Tomoko a hablar sobre el tema y luego de una extensa charla logro que su hija aceptara el hecho de que ahora debía seguir con las etapas de su vida y eso era bueno aunque le doliera.
-Entonces lo único malo aquí es que se han llevado mal desde el principio- ambas mujeres se quedaron calladas y se miraron a la ves
-Cierto que lastima pero pasara- su madre minimizaba cada problema y pensaba en positivo
-Puedes sentarte y ponerte cómoda entonces por que eso tomara rato- Tomoko volvió a contestarle atrayendo a la realidad a su mama esto no era fácil -¿El muchacho lo sabe?- pregunto
-La verdad no lo se solo tu padre sabe lo que pasa con el asunto-afirmo ella, June así se llamaba la señora que había traído al mundo 3 hijos en total y todos de una sola ves.
Su conversación siguió adelante sin darse cuenta que parte de ella había sido escuchada por Amane.