Fandom: Fringe.
Disclaimer: nada me pertenece y todo esto lo hago sin ánimo de lucro blabla.
Pairing: Peter y Olivia.
Spoilers: no hay.
Comentarios: drabble realizado para uno de los retos de la comunidad de Fringe en español del LJ. Siento no recordar de quiénes eran los retos.
El reto era: "Veamos, a mí me gustaría una conversación entre Peter/Olivia, al atardecer y que la conversación no sea trascendental ni profunda, simplemente una charla, donde quieran decirse mucho el uno al otro, y sin embargo no se digan nada."
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NatY
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AMANECER
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Por fin habían resuelto el caso. Les había costado casi una semana encontrar al malo de esta película, pero lo habían conseguido a base de esfuerzo, dedicación y, cómo no, un par de ideas locas de Walter. Con todo zanjado, optó por dejar a su padre hablando con Ástrid y salió al campus a sentarse. Eran las 6 de la mañana y estaba a punto de amanecer, pero no quería irse hasta que Olivia llegase de detener al criminal de la semana. Le había dicho que iba de camino. Esperaba que no tardase demasiado. Walter era incapaz de dormir si entraba luz por la ventana.
Tardó poco en tumbarse en la hierba.
Tardó poco en cerrar los ojos.
Tardó mucho en sentirla a su lado.
Sonrió, consciente de su forma de medir el tiempo.
Cuando abrió los ojos, ella estaba en la misma posición que él, pero a su izquierda. También tenía los ojos cerrados.
-Es una pena que los cierres teniendo delante este paisaje –comentó sonriendo.
-¿Lo dices por ti? –respondió ella, siguiéndole el juego y aguantando la risa.
-No lo había pensado de esa manera, pero ahora que lo dices… -dejó caer, apoyándose en su codo para así mirarla más cómodamente.
Liv giró la cabeza y abrió los ojos con una sonrisa suave reflejada en ellos. Su cara seguía estando seria, pero empezaba a aprender a leer sus ojos.
-¿Todo bien? –le preguntó, ambos sabedores de que hablaba del caso.
-Sí. Fue fácil y sólo nos costó 10 minutos y un par de amenazas que confesase –soltó, como si estuviese hablando de lo que le apetecía desayunar.
Ambos giraron la vista hasta el cielo y no dijeron nada durante un rato. Al final, Peter se cansó de mirar al amanecer y… La miró a ella. Al principio ella actuó como si no se diera cuenta. Luego, como si no le molestase. El desenlace fue una mirada curiosa de "qué estás haciendo".
-Nada. Mirarte.
-¿Con el paisaje que tienes delante? –lo imitó, señalando al cielo y sonriendo.
-Sí –respondió él, sensato y sincero como era.
Liv puso cara de no esperarse aquella respuesta, pero se recompuso rápidamente y volvió a mirar como el sol empezaba a salir. Y mientras él, siguió a lo suyo.
-Creo que será mejor que nos vayamos –alegó Olivia después de un par de minutos.
-Tienes razón –afirmó Peter, poniéndose de pie y estirando la mano para ayudarla a levantarse. –¿Nos vemos mañana? –le preguntó cuando ya estaban a la misma altura.
-Más bien hoy –respondió ella, con una ligera sonrisa en la cara.
-Vuelves a tener razón –confesó, haciéndose el cansado y consiguiendo que así sonriese un poco más.
Él empezó a caminar hacia el laboratorio a buscar a Walter y ella se dirigió a su coche. Cuando no se habían alejado más de 10 pasos el uno del otro, oyó a Olivia hablar.
-Un placer.
-¿El qué? –consultó.
-Mirar al amanecer –reveló mirándolo fijamente, para un segundo después girarse e irse por donde había venido.
-Un verdadero placer –dijo Peter al aire.
