Disclaimer: todos los personajes son propiedad intelectual de Stephenie Meyer
Prólogo
Solo sé que no sé nada.
Que verdadera me parecía esa frase, incluso más aplicada a mi extraña existencia. De mí, con seguridad, solo sabía dos cosas: uno me llamaba Isabella Swan, y dos era un vampiro. El proceso mediante el cual me convertí en lo que soy ahora, y quien era antes es algo que escapa completamente de mi conocimiento. Vivo, bueno en realidad existo, realizo la misma rutina día tras día, año tras año, una rutina que siempre se repite y lo seguirá haciendo, porque si de algo estoy segura es de que soy inmortal, lo comprobé por mi propia experiencia, mi reflejo sigue siendo el mismo desde hace 30 años, no varía, no cambia. Estoy sola y muchas veces me siento vacía, quisiera desesperadamente poder conocer algo de mi pasado, quién era, a quién quería, qué me gustaba. Pero desafortunadamente no había forma de hacerlo, solo me restaba seguir con mi solitaria existencia, sintiendo continuamente ese vacío que no sabía cómo llenar, condenada a vivir en la ignorancia, condenada a vivir en soledad.