Disclaimer: Los personajes aquí nombrados y todo el potterverso pertenecen a la única e inigualable J.K Rowling.
Esta historia participa en el reto La maldición del de abajo, del foro La Noble y Ancestral Casa de los Black. Esta basado en el prompt de Artemisa Braver, que es: 'algo que tenga que ver con Rose/JamesSirius, preferentemente ambientado en el cuento 'La Bella y la Bestia'.
Cómo una de esas incontables veces que toda la familia se reunían, Rose se apartó de todos sus primos y se fue a sentar al gran patio trasero que tenía la casa de sus abuelos paternos. Los otros niños siempre se dividían en pequeños grupitos, los mayores jugaban al Quiddicth, algunos jugaban con los juguetes que traían y casi siempre la pequeña Rose se sentaba un poco alejada del ruido y leía alguno de los muchos libros que le compraba su madre.
Ese día hacía un calor agobiante, y la mayoría de los primos se había cansado de jugar al Quiddicth, así que deambulaban de un lado a otro y los más pequeños se habían ido a dormir una siesta dentro de la casa.
James Sirius era siempre de los que jugaban al Quiddicth o hacía bromas con Fred II. Pero ese día, Fred estaba tan cansado que se había ido a acostar al sofá.
James se aburría, y decidió ir a buscar a su prima Rose. Rose y James se llevaban bien pero no estaban demasiado tiempo juntos porque sus intereses no coincidían demasiado: Rose era tranquila, silenciosa y amaba los libros, en cambio James se metía en líos todo el tiempo y nunca se quedaba quieto.
Por esto último, a Rose le sorprendió cuando el chico le apartó un poco el libro y se acostó en su regazo.
-¡Cuéntame que estás leyendo, Rosie! –exigió.
La niña suspiró.-Es un libro muggle, que me ha comprado mi mamá. Trata de un príncipe que es hechizado por una bruja, que lo convierte en una bestia. La única manera que tiene él de volver a ser el apuesto príncipe es qué una persona lo quiera tal y cómo es. Se llama 'La bella y la bestia.'- contó, con ojos soñadores.
-¿Y quién lo querría si es una bestia?- preguntó el niño.
-El interior de una persona es mucho más importante que el exterior, James.-contestó Rose.
El pequeño se quedó pensando por un momento, mientras inconcientemente se despeinaba un poco el pelo.
-Tu exterior es muy bonito, pero tu interior es mucho mejor: ¡eres la mejor prima del mundo!- anunció James.
La cara de Rose estaba casi tan roja como su pelo.-Vale, gracias.
James Sirius se levantó de un salto, le dio un pequeño beso en la mejilla a su prima y corrió a encontrarse con Fred II que salía por la puerta trasera de la casa.
Rose cerró el libro y se quedo dormida bajo el árbol donde se encontraba sentada. Tuvo un extraño sueño donde ella era Bella y su primo James Sirius era el hermoso príncipe. Cuando se levantó estaba bastante confundida, pero aun así sonreía.
