-Papá! Papá!-gritaba la niña de cinco años entre la multitud reunida para recibir a las tropas de reconocimiento-Papá! Papi!-Continuaba gritando con la esperanza de que se volteara.
La pequeña no entendía exactamente las cosas que los adultos les gritaban a las tropas, no parecían cosas muy bonitas, pero no le importaba. Ella solo quería ver a su padre. Olvido por completo que su madre le había prohibido alejarse de ella. A pesar de los gritos de su madre para que volviera, la niña continúo. Corrió y pasó entre las piernas de los adultos para poder estar en la primera fila y estar más de cerca y tener mejor vista de los soldados. Al llegar, noto que su padre se había adelantado. Corrió por la orilla de las filas, mas de una vez le habían prohibido meterse en el camino. Pero si no lo hacía no podría verlo.
-Papi…-dijo con un leve hilito de voz.
Completamente cansada, la niña paro de correr viendo pasar al resto de las tropas. Su padre desapareció de su vista y sus ojos comenzaron de derramar esas lágrimas que había estado conteniendo. Comenzó a sollozar, en silencio, caminando a paso lento sobre la multitud para volver con su madre.
Pero cuando estaba por irse sintió como algo la tomaba por detrás. Veía como sus piecitos se separaban del suelo mientras que parecían que volaban, notando que iban muy rápido. Subió un poquito su vista para ver a una mujer de pelo castaño con coleta y lentes que sonreír mirando al frente.
Noto como aquella mujer saltaba de su caballo gritando con diversión, cayendo sentada frente a otro caballo donde pudo distinguir perfectamente a la persona que estaba en este.
-Papá!-sonrió y abrazo por detrás.
El Sargento detuvo su caballo, lo que izo que todos los demás soldados también pararan de andar. Rivaille Suspiro encorvo un poco su espalda para verla y ella rápidamente se paso para su frente y poder abrazarlo de frente.
Irvin sonrió al igual que Hanji y todos los presentes que conocían el estricto y serio carácter que tenía el hombre se sorprendieron al ver que ahora era abrazado por una niña con una gran sonrisa en el rostro.
-Oye pequeño, la próxima vez se mas considerado y no ignores a tu hija-le dice Hanji divertida mirándolo.
Eren, Mikasa, Armin, Jean, Conny y Christa, que eran los más cercanos que estaban a los superiores, se sorprendieron al escuchar a la científica. Observaron a la niña curiosos, parecía una niña dulce y tierna, nada que ver a su Sargento. Irvin reía al ver a su amigo en una escena tan empalagosamente tierna.
La mayoría de las tropas se retiraron a sus respectivos cuarteles, mientras que Eren y los demás se quedaron con Levi y Hanji mientras que Irvin buscaba a la madre de la niña.
-Izumi!-Escucharon a una mujer de cabello rojizo y ojos verdes acercarse al lado de Irvin. La niña se acurruco en el cuerpo de su padre- No quiero irme con mamá-le menciono a su padre con puchero.
Esa es la esposa del Sargento? Es hermosa! No es más alta que él? En donde se consigue una mujer así? Yo quiero una! El Sargento es un jalan!
Eran los comentarios de los recién graduados que se daban entre ellos, que fueron callados por la mirada asesina de Levi.
-No quiero separarme de Papá!-dijo la niña aferrándose más a su padre.
-Izumi-suspiro la chica-Vamos a casa-dijo la mujer pelirroja desviando la miraba para evitar ver los ojos o la cara de Rivaille -No quiero!-la niña lo abrazo fuertemente-Quiero ir con papá!
Todos notaron las caras de desolación que tenían ambos padres, agachando un poco la cabeza apenados por ellos. Levi se levanto con la niña en brazos y se la entrego a su madre-papi?-dijo la niña confundido comenzando a lagrimear un poco. Levi se despidió dándole un beso en la frente sin decirle nada. Apenas volteo un poco para ver el rostro de la mujer del cual vio caer lagrimas de sus ojos recorrer su mejilla.
Volteo con la cabeza gacha mientras su capa se deslizaba por el viento. Ambos adultos caminaron por direcciones contrarias evitando sus miradas.
-P-porque no puedo ir con papá? Yo quiero estar con él! Yo quiero a mi papá! No quiero estar contigo quiero ir con él! Porqué no se queda con nosotras? Porque mamá? Quiero ir con papá! Quiero ir con mi papá!-Gritaba desesperada la niña, queriendo zafarse del agarre de su madre que la sostenía con fuerza mientras ocultaba sus lagrimas detrás de la cabecita de su hija.
-Sargento…-dijo Eren viéndolo pasar en frente suyo subiéndose a su respectivo caballo y comenzar la marcha.
-Déjala así mocoso, ya debe acostumbrarse-dice dado vuelta, dándole la señal a su caballo para marcharse.
La niña aumento su tono de voz al ver como se iban, ignorando las miradas angustiantes de todos los presentes, que comprendían a la perfección la situación intentando continuar con sus deberes sin dejar que la situación los afectase.
-Oye Levi, el próximo mes vendrás a visitarlas-le prometió Irvin mientras lo miraba con algo de pena.
Él solo continuó su marcha, intentando olvidar el llanto que había provocado en su mujer y en su hija por su culpa… por su maldito deber como soldado de la humanidad.
Que les pareció? Bueno, esto lo hice para pasar un día de aburrimiento, veré que se me ocurre para continuar, si alguien tiene una sugerencia póngala en los comentarios, TODO AYUDA!
Espero les haya gustado!
Ciao!
